03.04.2014 Views

El Drama de Alcohol: Santos que Beben

“Y acercándose Elías a todo el pueblo, dijo: ¿Hasta cuándo claudicaréis vosotros entre dos pensamientos? Si Jehová es Dios, seguidle; y si Baal, id en pos de él. Y el pueblo no respondió palabra.” 1 Reyes 18:21.

“Y acercándose Elías a todo el pueblo, dijo: ¿Hasta cuándo claudicaréis
vosotros entre dos pensamientos? Si Jehová es Dios, seguidle; y si Baal,
id en pos de él. Y el pueblo no respondió palabra.” 1 Reyes 18:21.

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

PORTADA<br />

Eso ofen<strong>de</strong> a todo joven convertido<br />

a quien Dios ha convencido<br />

<strong>de</strong> hábitos pasados <strong>de</strong> bebida.<br />

Y la Biblia dice: “Y cualquiera<br />

<strong>que</strong> haga tropezar a alguno <strong>de</strong> estos<br />

pe<strong>que</strong>ños <strong>que</strong> creen en mí, mejor le<br />

fuera <strong>que</strong> se le colgase al cuello una<br />

piedra <strong>de</strong> molino <strong>de</strong> asno, y <strong>que</strong> se le<br />

hundiese en lo profundo <strong>de</strong>l mar. ¡Ay<br />

<strong>de</strong>l mundo por los tropiezos! por<strong>que</strong><br />

es necesario <strong>que</strong> vengan tropiezos,<br />

pero ¡ay <strong>de</strong> a<strong>que</strong>l hombre por quien<br />

viene el tropiezo!” (Mateo 18:6-7).<br />

Me niego a <strong>de</strong>jarme vencer<br />

por las crecientes presiones<br />

<strong>de</strong> mundanalidad ¡disfrazada<br />

<strong>de</strong> libertad espiritual! ¿Qué<br />

nos ha pasado, santos <strong>de</strong> Dios<br />

cuando nos po<strong>de</strong>mos sentar<br />

libremente sin repren<strong>de</strong>r la rápidamente<br />

podrida moral en la<br />

casa <strong>de</strong> Dios?<br />

Yo creo en la gracia libre, pero<br />

no en el libertinaje. Yo creo en la<br />

impuesta rectitud <strong>de</strong> Cristo, por<br />

fe. Pero también creo <strong>que</strong> la santidad<br />

<strong>de</strong> Dios exige <strong>que</strong> nosotros<br />

“no to<strong>que</strong>mos lo inmundo.”<br />

También creo <strong>que</strong> los ministros<br />

<strong>que</strong> fuman no están<br />

siendo honestos con Dios. Estos<br />

“profetas <strong>que</strong> resoplan”<br />

se niegan a practicar lo <strong>que</strong><br />

predican. Y los ministros <strong>que</strong><br />

beben son un reproche al nombre<br />

y po<strong>de</strong>r <strong>de</strong> Dios.<br />

No es un esfuerzo con<strong>de</strong>nar<br />

a los verda<strong>de</strong>ros ministros <strong>de</strong>l<br />

Evangelio. Pero, nosotros como<br />

ministros y padres, ¿cómo po<strong>de</strong>mos<br />

pedirles a nuestros hijos<br />

<strong>que</strong> <strong>de</strong>jen las drogas y el alcohol,<br />

si nosotros no limpiamos<br />

nuestras propias vidas?<br />

A veces, solo por un momento<br />

fugaz, pienso en mí<br />

mismo, “A lo mejor yo soy el<br />

equivocado. A lo mejor estos<br />

nuevos cristianos <strong>que</strong> ‘rockean’,<br />

fuman, beben y quienes<br />

vuelven a sus lugares favoritos<br />

a cantar, a entretenerse y a actuar<br />

–a lo mejor ellos han visto<br />

g<br />

marzo 2014 11

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!