EDICIÓN DOMINICAL EDICIÓN DOMINICAL - Prensa Libre

28
PRENSA LIBRE : Guatemala, 27 de junio de 2010
DOMINICAL
POR BRENDA MARTÍNEZ
Los más ricos se enfrentan a un dilema sobre su riqueza:
donar a obras de caridad o derrochar en caprichos triviales.
En el mundo existen
alrededor de
6.5 millones de
millonarios. Para
algunos, ser rico
y famoso es sinónimo
de extravagante y caprichoso,
pero otros, que llevan
vida modestayson enemigos
del despilfarro, prefieren
acumular riquezas para devolverlas
a la sociedad.
Los dos hombres más ricos
del mundo, el mexicano
Carlos Slim yelestadounidense
Bill Gates, anunciaron
la semana última su primer
proyecto filantrópico conjunto,
en el que invertirán
US$150 millones para mejorar
lasalud de la población
más pobre de Mesoamérica
en los próximos cinco años.
Gates, fundador de Microsoft
y con una fortuna de
US$53 mil millones, de
acuerdo con la revista Forbes,
y el inversionistaeindustrial
estadounidense Warren Buffett,
de 79 años, cuyo patrimonio
se calcula en US$47
mil millones y del cual el 99
por ciento irá a la filantropía
durante su vida o cuando
muera, anunciaron que quieren
convencer aotros magnates
del mundo para que donen
la mitad de su dinero en
obras de caridad.
Gates es el primer filántropo
del mundo que dona alrededor
de US$3 mil millones
al año, a través de su
Fundación Bill y Melinda Gates,
a obras de beneficencia
en todo el mundo, especialmente
en investigación para
la salud.
Slim, de 70 años y magnate
mexicano de las telecomunicaciones
en América
Latina, con un patrimonio de
US$53 mil 500 millones, ya
se ha adelantado aese compromiso
y prometió esteaño
incrementar las donaciones
de las fundaciones de sus
empresas en US$10 mil millones,
comparados con los
US$4 mil millones actuales,
para invertirlos en educación
y salud. “La pobreza se
resuelve con educación y
empleos”, manifiesta.
Derroche extravagante
Pero en otros casos, cuando
el dinero llega en forma
masiva las personas se transforman
y desarrollan un talento
especial para gastarlo en
las cosas más inverosímiles.
Yno se trata de caprichos
mundanos, sino de auténticas
extravagancias: un minisubmarino,
una mansión para las
mascotas, viajes espaciales,
etcétera.
El amor que profesa la famosa
heredera de la cadena
de hoteles Paris Hilton por
los animales la hizo pagar una
cifra nada desdeñable por
una tumba para su cabra, muy
cercana a la de Marylin Monroe.
Mariah Carey sigue su
misma línea, al pedir agua mineral
en abundancia para bañarse
con su perrito.
David Duffield, dueño de
una empresa de computación
de Sillicon Valley, gastó US$7
millones en una casa de lujo
para sus animales.
Michael Jackson contaba
con una más que curiosa —y
cara— afición: coleccionaba
momias egipcias.
Para algunos megamillonarios,
los viajes a los destinos
más exóticos del mundo
no son suficientes. El magnate
estadounidense Dennis Tito
pagó US$20 millones para
viajar al espacio en el 2001.
Los árabes de los ricos países
petroleros del golfo Pérsico
gastan más de US$12 mil
millones anualmente en sus
vacaciones al extranjero.
Roman Abramovich, magnate
ruso del acero y el petróleo,
también es un tipo de caprichos
caros. Aficionado al
futbol, no dudó en comprarse
su equipo preferido por completo,
el británico Chelsea,
por US$217 millones. También
cuenta con un velero de
200 metros de eslora, el mayor
del mundo, ycarga siempre
¤3 millones encima, por
si le dan ganas de comprarse
algo al paso.
Figuras mundiales del espectáculo
reciben cantidades
inimaginables por amenizar
las fiestas privadas de los
magnates rusos. El cantante
británico George Michael se
embolsó, por una actuación
de menos de una hora, US$3
millones, la mayor que un artista
haya recibido por un
evento privado.
En el estudio El Cielo es el
Límite, sobre la vida de millonarios,
se habla de un broker
de Wall Street que se gastó
cerca de US$60 mil para instalar
un cuadrilátero de boxeo
en su apartamento de
Manhattan.
Pero también están los tacaños.
En la cúspide de los
más avaros figura J. Paul Getty,una
de las primeras personas
en superar los US$1 mil
millones y que llegó a instalar
teléfonos de monedas en su
casa, para que las visitas se
pagaran sus llamadas.
INFORMACIÓN DE AGENCIAS
Y SITIOS DE INTERNET
Fotoarte Prensa Libre: MYNOR ÁLVAREZ