Profesión Dental - COEM

asesoría jurídica
Preguntas frecuentes de nuestros
colegiados al servicio de Asesoría Jurídica
Trabajador autónomo
económico dependiente
P.- ¿Qué diferencia hay entre un trabajador autónomo y un
trabajador autónomo económico dependiente?
R.- El Trabajador Autónomo Económicamente Dependiente
(TRADE) es aquel que percibe el 75% de sus honorarios de
un solo cliente. En el trabajador autónomo no se da esa circunstancia.
Cuándo hay que darse de
alta como autónomo
P.- Trabajo en una clínica tres veces por semana y me dicen
que tengo que darme de alta en autónomos o como autónomo
económico dependiente, ¿es cierto?
R.- La clase de relación que tenga con la clínica puede
ser:
1. Vd sólo aporta su trabajo, está integrado en la organización,
no aporta pacientes, sino que ve los de la clínica, y
no asume ningún riesgo derivado de la actividad o de la
propia clíinica. En este caso la relación muy probablemente
sea laboral y por tanto necesitada de un contrato
de este tipo (tiempo total o parcial), con su cotización
correspondiente.
2. Sólo cabrá una relación como autónomo en el caso contrario.
O como Autónomo Económicamente Dependiente,
si Vd. percibe de la clínica el 75% de sus honorarios totales.
Indemnización
P.- Llevo trabajando en una clínica casi tres años como
autónomo y ahora me dicen que ya no vaya más. No he firmado
ningún contrato. ¿Tengo algún derecho a algo?
R.- Tendrá Vd. derecho a indemnización, además de saldo
y finiquito y cotizaciones correspondientes, si durante los tres
años ha estado en la situación descrita en el punto 1 de la
pregunta anterior. En el caso de estar en el supuesto del
punto 2, en principio no procedería.
Iuris Consortium
Abogados SLP
SOBRE LA SENTENCIA Nº 451/2012, DE 18 DE JULIO DEL
TRIBUNAL SUPREMO EN RELACIÓN CON EL OBJETO
SOCIAL DE LAS SOCIEDADES PROFESIONALES
Recientemente el Tribunal Supremo ha dictado una Sentencia
que resuelve un recurso de casación en el que, desoyendo
el criterio de la Dirección general de los Registros y
del Notariado, entiende admisible en derecho el criterio
de la calificación negativa del Registrador Mercantil respecto
a una escritura de constitución de sociedad profesional.
Los hechos resultan del otorgamiento de una escritura de
una sociedad profesional, en cuyo artículo 2 (objeto social)
es establecida la compraventa de acciones y participaciones,
pero se recogía también como actividad los servicios
de asesoramiento técnico, financiero, contable, fiscal, laboral,
jurídico e industrial, quedando excluidas del objeto social
aquellas actividades que por ley tienen una regulación especial.
El Registrador Mercantil excluyó de inscripción precisamente
las actividades claramente profesionales (asesoramiento técnico,
financiero, contable, fiscal, laboral y jurídico) por entender
que son actividades que requieren título oficial y sujetas
a colegiación, y por tanto actividades propias de las sociedades
profesionales sujetas a la Ley de Marzo de 2007.
Ante el recurso del Notario, la Dirección General de los Registros
y del Notariado, con fecha 21 de Diciembre de 2007,
estima el recurso del Notario y revoca la calificación negativa
del Registrador.
En el recurso ante el Tribunal Supremo se cuestiona si es inscribible
o no una cláusula de los estatutos de una sociedad
– en este caso de responsabilidad limitada- según la cual la
sociedad tendrá por objeto, entre otras actividades que se
detallan, las de gestión administrativa, y los servicios de asesoramiento
contable, fiscal y jurídico, máxime si cuando en
el propio objeto social se excluyen aquellas actividades que
por ley tienen una regulación especial. Es decir que si una
sociedad con ese objeto debería ser una sociedad Limitada
Profesional o no, sujeta por tanto a la ley Especial
El Tribunal Supremo entiende que se trata de que las sociedades
sean lo que parecen y parezcan lo que son, pues ninguna
forma mejor hay de garantizar el imperio de la ley y los
derechos de los socios y de los terceros que contraten con
la sociedad. Y en este sentido entiende que la sujeción a la
Ley de Sociedades Profesionales de dicha sociedad es procedente
y ajustada a derecho, dando razón a la calificación
del Registrador Mercantil, y no a la Dirección General de los
Registros y del Notariado.
Ver sentencia.
Emilio Lizarraga Bonelli
noviembre 2012