Memoria 1973 - Unión Argentina de Rugby

1º CAMPEONATO ARGENTINO DE CLUBES 82
CAMPEONATOS 84
INFORME DE TESORERÍA 111
INFORME DE LOS REVISORES
HONORARIOS DE CUENTAS 126
M E M O R I A
PRESIDENCIA
Señores Delegados de los Clubes Afiliados y de las Uniones del Interior:
Finalizado el período entre el 1° de noviembre de 1972 y el 31 de octubre de 1973, ponemos a
vuestra conside¬ración la Memoria y Balance correspondiente.
Un hecho que jamás había vivido el rugby, condicionó que accediéramos a ocupar la conducción de
la U.A.R. con toda la responsabilidad y dedicación que ello implica.
La palabra "intervención" traduce introducción por la fuerza y si ello puede ser necesario en algunas
circuns¬tancias, en el deporte puro y limpio no se concibe.
Esa fue la respuesta del rugby argentino y es así que hoy nos sentimos honrados al ejercer la
presidencia del Consejo por expreso mandato de nuestros pares.
Ha sido un año muy duro y lleno de problemas, que se fueron solucionando gracias a la colaboración
de toda la gente que continúa en nuestra casa aportando trabajo, consejos y gran sentido solidario,
que es uno de los pi¬lares de nuestra inmunidad.
No obstante todos los inconvenientes, nuestro rugby cumplió a nivel nacional e internacional,
brillantes actua¬ciones que no hacen más que reafirmar el concepto ga¬nado a través de años, por
su capacidad de juego y gran¬deza de espíritu.
Todos conocemos el episodio Inglaterra y cuantos des¬velos significó el que la temporada
internacional se cum¬plimentara. Esto fue logrado gracias a la magnífica dispo¬sición que
demostraron las autoridades de la Federación Rumana de Rugby, cuando en escasos veinticinco
días de¬cidieron aceptar la invitación que en forma personal les efectuó la U.A.R. Ese gesto debe ser
recordado por todos los que nos sucedan, pues no sé cuántos hubieran aceptado viajar en esas
circunstancias, con todo el riesgo que implica competir sin la preparación adecuada.
Dijimos en oportunidad de la cena de despedida:
"Sr. Embajador de la República Socialista de Rumania.
"Sr. Presidente de la Delegación Rumana de Rugby.
"Señoras, señores:
"El rugby argentino vive una fiesta deportiva, que tie¬ne hoy una significación muy especial.
"Por primera vez en la historia de nuestro deporte se hace una apertura hacia países no
tradicionales, teniendo como resultado esta magnífica experiencia que ha roto la rutina y será el
punto de partida hacia la comunicación con muchos pueblos que, como el rumano, nos permitirán
aprender y enseñar, conocer y hacer conocer formas de vida, tomar conciencia no ya a través de
terceros, sino en forma personal y fraterna, de sus inquietudes y contribuir a difundir, a mostrar, a
hacer gustar el rugby, al mayor número de personas a las que podamos llegar, desterran¬do para
siempre esa imagen que han querido crear alre¬dedor de nuestro juego, como exclusivo para
minorías.
"Si estamos convencidos de que el rugby forma hom¬bres, les crea una personalidad positiva, es
una forma de vida: ¡cómo no vamos a desear que el mayor número de individuos pueda practicarlo!
"La única condición es que respeten las reglas de juego: honestidad, caballerosidad, desinterés,
deseos de competir, competir para ganar, saber ganar, estar prepa¬rados psíquicamente para perder
y. . . dar, dar mucho al practicarlo; y al abandonar su práctica dar más, tratando de transmitir a
quienes recién comienzan todo esto que he enumerado, que es en esencia algo que todos hemos