EL RELOJ DEL CENTRO CIVICO - Bariloche
EL RELOJ DEL CENTRO CIVICO - Bariloche
EL RELOJ DEL CENTRO CIVICO - Bariloche
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
BARILOCHE<br />
MUNICIPALIDAD DE S AN CARLOS DE BARILOCHE<br />
PROVINCIA DE RIO NEGRO<br />
<strong>EL</strong> R<strong>EL</strong>OJ D<strong>EL</strong> <strong>CENTRO</strong> <strong>CIVICO</strong><br />
En la Torre del Centro Cívico se encuentra una verdadera obra de arte enlazada a la<br />
tecnología, que es un interesante atractivo para residentes y turistas.<br />
Como muchas otras ciudades del mundo, <strong>Bariloche</strong> tiene su reloj en la plaza principal<br />
de la ciudad, que anuncia el paso del tiempo con el sonar de su campana, marcando<br />
todas las horas y medias horas.<br />
Este reloj fue instalado en los años 1940/41 por el Sr. Gino Libano. Su maquinaria<br />
conserva partes originales de origen alemán y danés. Posee una campana fundida en<br />
bronce que lleva impresa la marca Cronos.<br />
La marca de la máquina es Weule (alemana), aunque pudo haber sido fabricada en<br />
Dinamarca. Ello es posible, puesto que este país estaba invadido por Alemania; o bien,<br />
haya partido desde algún puerto dinamarqués, por haber estado en stock en Cronos<br />
para otro destino, ya que su mecanismo, se estima, corresponde a unos 15 años antes<br />
respecto a la tecnología de la década del ´40.<br />
Todos los días del año y con precisión, a las 12 y a las 18 horas, cuatro esculturas<br />
talladas en madera aparecen sucesivamente en la ventana que está por debajo del<br />
reloj para que puedan ser vistas desde la plaza, acompañando a las campanadas. Son<br />
figuras que simbolizan distintas etapas de la historia local. La posición erguida y los<br />
detalles expresivos muestran a cada una de ellas con una sólida postura,<br />
enfrentándose al viento patagónico.<br />
La primera figura en verse representa al Indio, original habitante de la región. La<br />
segunda es un Sacerdote, que llegó para evangelizar a los primeros. La tercera es un<br />
Militar, integrante de la Campaña del Desierto, la cuarta escultura es un Labrador,<br />
representando a los que se instalaron para trabajar y hacer crecer sus hijos en estas<br />
tierras.<br />
Las esculturas fueron realizadas por el artista español Casals, a quien se les encargó el<br />
trabajo, en Buenos Aires.<br />
Cerrando y como protegiendo la danza de los personajes, el escudo de San Carlos de<br />
<strong>Bariloche</strong> aparece fijo el resto de las horas.<br />
Jorge Stanoievitch y el Reloj del Centro Cívico<br />
Luego de varios años de funcionamiento, el reloj permaneció inactivo largo tiempo<br />
hasta que un vecino de la ciudad solicitó que le permitieran hacerse cargo del conjunto<br />
y logró reiniciar su marcha.<br />
Este memorable personaje, era un inmigrante francés, nacido en 1924, aunque de<br />
apellido balcánico: Stanoievitch. Proveniente de una familia ligada a la realeza Servia,<br />
pronto comprendió que el eje de su vida sería otro muy distinto, basado en el esfuerzo<br />
y la dedicación.
BARILOCHE<br />
MUNICIPALIDAD DE S AN CARLOS DE BARILOCHE<br />
PROVINCIA DE RIO NEGRO<br />
Luego de transitar diversas vicisitudes que le depararía la Europa en guerra, tales<br />
como empuñar las armas en temprana edad, la muerte de su hermano, su paso por<br />
campos de concentración, logró escapar a Suiza, donde obtuvo el título de arquitecto<br />
en solo tres años.<br />
Visitó <strong>Bariloche</strong> en 1948, radicándose primero en Buenos Aires y más tarde<br />
definitivamente en nuestra ciudad en 1976, con su esposa y compañera de toda la<br />
vida.<br />
Artesano innato, en su taller trataba de reparar todo lo que se le ponía por delante.<br />
Con su calidez y generosidad, compartía sus atrayentes experiencias de vida con<br />
quienes tuvieron la suerte de escucharlo.<br />
En el año 1985, es contratado por la Municipalidad para el exacto mantenimiento y<br />
control del reloj.<br />
La ausencia de piezas no significaba un escollo en la tarea, ya que si era necesario las<br />
reparaba o las fabricaba en su taller. Así descubrió el por qué del atraso y/o adelanto<br />
del reloj y para ello inventó un sistema de calefacción mediante lámparas de 200 ws.<br />
que él mismo proveía.<br />
Durante años, Don Stanoievitch subía todas las tardes los cinco pisos del edificio<br />
municipal, cuidaba que todo estuviera en orden y esperaba que fueran a visitarlo los<br />
alumnos de los colegios, proyecto por él propuesto. Se realizaban aproximadamente<br />
25 visitas mensuales de distintos colegios de nuestra ciudad y de concurrentes en<br />
general, llevándose a cabo las mismas dentro del año lectivo.<br />
Los turnos se daban cada 45 minutos, así los chicos tenían tiempo suficiente para subir<br />
hasta la torre con tranquilidad, puesto que a la hora en punto, salían las figuras y<br />
tocaban las campanas.<br />
Lo anecdótico es que, luego de darles la charla técnica del reloj y explicarles el<br />
significado de cada una de las figuras que aparecían; los hacia bajar al Centro Cívico,<br />
sentarse y una vez acomodados, los niños tenían que gritar “JORGE”, como señal que<br />
le indicaba que estaban todos listos, y entonces nuevamente hacia salir las figuras.<br />
Esta operación se realizaba dos veces, ante la fascinación de los inquietos<br />
espectadores.<br />
Falleció un día de junio, a los 79 años, tras dedicar casi 20 años de su vida al<br />
mantenimiento del significativo reloj de la plaza Expedicionarios del Desierto.<br />
Es su memoria, el Reloj del Centro Cívico lleva su nombre y apellido rindiendo así<br />
homenaje a este vecino, por la gran dedicación a su trabajo y por el cariño con el que<br />
puso en marcha aquella maquinaria que desde entonces, frente al lago Nahuel Huapi,<br />
anuncia el paso de las horas con el sonar de su campana.<br />
Compilación: Secretaría de Turismo Municipal<br />
Fuente:<br />
Ord. Mun. Nº 1444-CM-04<br />
Tomo I: Patrimonio Arquitectónico y Urbano de <strong>Bariloche</strong> – COMPPHAU