Los valores éticos necesarios para el desarrollo. BID ... - Futuros

Entrevistas Clave
Entrevistas Clave es una sección de la Iniciativa Interamericana de Capital Social, Ética y Desarrollo del
Banco Interamericano de Desarrollo, que contiene diálogos sobre los grandes temas de la agenda de
capital social, ética y desarrollo de nuestro tiempo con autoridades internacionalmente reconocidas en estos
campos. Estas entrevistas son realizadas y producidas por el equipo de trabajo de la Iniciativa.
Los Valores Éticos Necesarios para el Desarrollo
En el transcurso de esta entrevista el Padre Luis Ugalde, presidente de AUSJAL, plantea diferentes temas
relacionados a los valores éticos necesarios para el proceso de desarrollo en la región y nos entrega su
perspectiva sobre el rol activo que deben tener las universidades en este proceso.
Por Daniel Zider
El Padre Luis Ugalde es sacerdote de la Compañía de
Jesús y licenciado en Filosofía y Letras, Teología y
Sociología con Maestría y Doctorado en Historia. En la
actualidad, Luis Ugalde es el presidente de la
Asociación de Universidades Jesuíticas de América
Latina, AUSJAL.
A continuación la entrevista al Padre Luis Ugalde,
realizada en Washington, DC en Julio de 2004.
La Introducción de los Valores Éticos en la Economía Globalizada
Personalmente creo que, junto con la globalización, ha tomado fuerza el debate que hubo al final
del siglo XIX en los países europeos entre una economía dejada a la dinámica del mercado y a
un equilibrio entre mercado y un estado muy presente, no solo en la vida nacional, sino también
en la economía. Por ejemplo, a mediados del siglo XIX no existía ningún tipo de regulación
salarial, sindicatos, reducción de la jornada, salarios mínimos o vacaciones, es decir, toda
fijación laboral con respecto a lo productivo viene después de una terrible experiencia en Europa
de lo que el mercado dejado a sí mismo puede hacer. Esta situación conlleva a las sociedades a
la búsqueda de un mejor equilibrio donde el mercado debe someterse a unas leyes
fundamentales y a un estado que busca el bien común de la sociedad. Estas normas aparecieron
como denominador común en el siglo XX. Hoy día, a pesar de que el modelo neoliberal está
marcando nuevas leyes, existen normas e instituciones que generan prácticas aceptadas, las
cuales no dejan al individuo desprotegido ante la dinámica del mercado. En ocasiones, un
liberalismo mal entendido llegó a pensar que, por ejemplo, en Rusia, una vez derrumbado el
sistema Soviético, el mercado iba a encontrar la solución institucionalizada adecuada.
La ley y el estado siempre parten de una convicción de que la economía necesita la ética.
Además de la ética individual es necesaria la ética colectiva, la cual debe establecer ciertas
reglas de juego y reglas cuya justificación es la ética. También existen otros ejemplos
interesantes, un caso es el de la Unión Europea. La Unión Europea no es simplemente un
conjunto de mercados, sino que es un propósito político de una unidad mayor, que es la unidad
nacional. Por este motivo, la política económica de la Unión Europea es lograr un desarrollo
económico con criterios de nivelación.
Documento incluido dentro de la Biblioteca Digital de la Iniciativa Interamericana de Capital
Social, Ética y Desarrollo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) - www.iadb.org/etica

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Cuando me refiero al paralelo entre el siglo XIX y el presente siglo XXI es que hay que ir hacia
unas reglas de juego más estrictas de las que tenemos actualmente. Estas leyes deben apuntar
hacia una autoridad internacional más representativa y equitativa. El otro gran problema, a mi
modo de ver, es el tema del empleo. Este problema es de una enorme complejidad y frente una
concepción absolutamente liberal, yo creo que las sociedades miran y hacen políticas sectoriales
para generar empleo, cosa que a nivel mundial es absolutamente necesario. La gran tragedia en
muchos de nuestros países, que son menos competitivos, es que si no se tiene en cuenta el
tema del empleo, ciertas dinámicas de la globalización van a ir eliminando nuestros empleos y
generando problemas políticos inviables. Uno puede decir que esta posición va en contra de los
grandes principios, pero esto no es cierto. El ejemplo está en que los países desarrollados
subsidian la agricultura y no dejan que esto se regule bajo las normas del mercado. Los países
desarrollados se esfuerzan por proteger los focos débiles de su economía para mantener la
estabilidad política de sus sociedades.
Es evidente que si el mundo quiere encontrar un equilibrio, la dinámica de la globalización
impuesta en buena parte por las grandes transnacionales necesita unas consideraciones éticas
que busquen el bien común del país como objetivo principal y también crear instituciones que
velen por el bien común de la humanidad.
La Acción Universitaria y el Desarrollo Social en
América Latina
En América Latina hubo épocas más “ingenuas” que la
actual, por ejemplo, en los años sesenta creíamos que para
desarrollar nuestros países era solamente necesario
desarrollar las universidades y crear profesionales que
desarrollen el país. Esto no se da de esta manera
específicamente, nosotros hemos multiplicado en gran
manera el número de egresados universitarios y
profesionales pero no podemos decir, en el siglo XXI, que
nuestras sociedades sean mas justas, mas gobernables, mas
equitativas que en los años sesenta. Lo que debemos
“El voluntariado a
veces puede dar una
enseñanza más
importante que un
semestre entero de
diferentes
disciplinas
académicas
relacionadas a la
solidaridad”
preguntarnos nuevamente es que universidad para que sociedad, la universidad no se debe a sí
misma, sino que se debe a la sociedad. En definitiva el último examen de la universidad se da en
la sociedad y por otro lado, la sociedad hace un gasto inmenso para formar la universidad
dejando otros puntos de lado, porque tiene en cuenta que la universidad es muy importante para
crear una buena sociedad.
La primera gran necesidad existente en la universidad latinoamericana es rescatar el sentido de
lo público. Lo público no es solamente del estado, sino que es de cada ciudadano. El rescate del
sentido de lo público en las universidades es realmente de una importancia muy grande. Esto
hay que proponérselo explícitamente, no hay que suponer que la gente tiene conciencia del
sentido de lo público. En una sociedad individualista eso le toca a los funcionarios o a los
partidos, pero en mi opinión, el cuidado del bien público debe contar con el apoyo de todo
ciudadano. La universidad debe incluir a todos los sectores sociales y actuar como un nexo
social entre las diferentes clases sociales, las cuales se ven separadas por la dinámica existente
en América Latina. La universidad debe potenciar intelectualmente a las clases marginales, que
necesitan del aporte de la universidad para poder crear un ámbito social de convivencia.
Documento incluido dentro de la Biblioteca Digital de la Iniciativa Interamericana de Capital
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La Relación entre Voluntariado y Universidad
En mi opinión, el voluntariado es fundamental. En primer lugar es imprescindible para la persona
humana en una sociedad donde pareciera que solamente damos lo que es obligatorio dar. El
descubrimiento de la gratuidad, que es una cualidad humana esencial, aparece en gran forma en
el voluntariado. El voluntariado es una expresión humana que demuestra las ganas de dar del
ser humano.
El voluntariado no tiene edad, pero en la juventud este despierta las mejores de las cualidades,
que son la iniciativa, la creatividad, libertad bien enfocada. Hoy en día, muchas empresas de
negocios valoran profundamente que los jóvenes hayan sido promotores voluntarios, debido a
que esto denota sensibilidad, responsabilidad, creatividad, etc. Yo recuerdo que hace unos años,
en el año internacional del voluntario, en Venezuela me pidieron que hablara sobre este tema y
yo trate de demostrar la relación entre voluntariado, humanidad y ciudadanía. En esta
presentación expuse al voluntariado como desarrollo de humanidad, como elemento para la
ciudadanía, y el rol que este juega en la creación de la sociedad nacional.
El voluntariado se manifiesta en muchos aspectos. Cuando hay una emergencia, miles de
jóvenes se ven movilizados en ayuda de los demás y es en ese instante cuando se ve la
fortaleza de una sociedad y su capacidad de ayuda mutua. En América Latina, en donde la
sociedad se encuentra dividida tan profundamente, el voluntariado es fu ndamental para poder
crear puentes entre diferentes sectores sociales. Es el voluntariado el que une a diferentes
sectores sociales en acción conjunta.
La Solidaridad en el Siglo XXI
La solidaridad tiene varios aspectos de encuentro mutuo, en definitiva la solidaridad es la
antropología que subyace a una cultura. Una antropología muy individualista no da base para la
solidaridad y tampoco para la gratuidad. Por este motivo, para la solidaridad, tenemos que
buscar antropologías de base para pasar del yo, al nosotros. Lo principal de la condición humana
demuestra que sin el nosotros no existe el yo, no existe en términos biológicos y en el sentido
social es fundamental el nosotros.
La experiencia de la solidaridad debería ser transmitida en todo ámbito universitario. Nosotros en
la universidad promovemos todo tipo de actividad relacionada con el voluntariado y aspectos de
solidaridad social. El voluntariado a veces puede dar una enseñanza más importante que un
semestre entero de diferentes disciplinas académicas relacionadas a la solidaridad. En mi
opinión es muy importante fomentar el trabajo voluntario en la universidad. No estoy pensando
en una solidaridad tipo limosna, que es dar por compasión lo que nos sobra, entregar ropa vieja
o cosas que están solamente relacionadas a lo material. Es necesario fomentar la solidaridad
que afirma al otro y le da lo que necesita realmente. Para lograr esto, es necesario buscar
formas en las que haya una verdadera transferencia de conocimiento de cualidades
organizativas y fortalecimiento.
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