<strong>el</strong> hambre tieSISTEMA DETRANSPARENCIAY BUEN GOBIERNODE ACCIÓN CONTRAEL HAMBRETRANSPARENCIAY BUEN GOBIERNOUn año más, la transparencia ha sidouno de los baluartes de la organizacióNMEMORIA 20<strong>10</strong>04 ACCIÓN CONTRA EL HAMBRESISTEMAS DE CONTROLEXTERNOSCALIFICACIONES INTERNACIONALES- EU/ECHO Preferred partner- USAID International partnerCALIFICACIONES NACIONALES- AECID (Agencia Española de Cooperaciónal Desarrollo)CERTIFICACIOaNES- SGE 21 FORÉTICAAUDITORÍAS EXTERNAS- Auditoría contable y financieraErnst & Young- 67 Auditorías de proyectosCÓDIGOS DE CONDUCTA- Asociación Española de Fundraising- Código Cruz Roja Internacional- Coordinadora de ONGDMIEMBRO DE- People in Aid (RRHH)- Voice (UE)- Junta de Gobierno Coordinadora ONGD- Junta de Gobierno Asociación Española deFundraisingNORMAS NACIONALESE INTERNACIONALESNORMAS PROPIAS DELA ORGANIZACIÓN- CARTA DE PRINCIPIOSDE ACF- POLÍTICA DE INTERVENCIÓN- CÓDIGO DE CONDUCTASISTEMAS DE CONTROLINTERNOSPATRONATOCOMITÉ DE ÉTICACOMITÉ DE NOMBRAMIENTOCOMITÉ DE RIESGOCOMITÉ DE AUDITORÍADEPARTAMENTO DE AUDITORÍAINTERNA- Auditorías directas de los proyectos- Auditoría en la sedeAuditoríasEn 20<strong>10</strong> nos hemos sometido a 67 auditorías,tanto en la sede como en los países en los quetrabajamos. Además de las auditorías financieras,nos sometemos a auditorías organizativas.La empresa que auditó este año nuestrascuentas, Ernst & Young, es de reconocido prestigiointernacional. Además, <strong>Acción</strong> contra <strong>el</strong><strong>Hambre</strong> es una de las pocas organizacionesque cuenta con un auditor interno permanenteque reporta directamente al Patronato d<strong>el</strong>a Fundación. Nuestro máximo órgano de gobiernoes <strong>el</strong> Patronato, presidido por José LuisLeal, a quien rendimos cuentas continuamentede nuestro trabajo.RégimenlegalComo Fundación, <strong>Acción</strong> contra <strong>el</strong> <strong>Hambre</strong>r<strong>esp</strong>onder anualmente ante su organismo deregulación: <strong>el</strong> protectorado. En nuestro casose trata d<strong>el</strong> Ministerio de Asuntos Sociales.Nuestro máximo órgano de gobierno es <strong>el</strong> patronato,presidido por D.José Luis Leal, al querendimos anualmente cuentas de nuestro trabajo.Los miembros d<strong>el</strong> patronato no recibenrenumeración alguna por su labor, lo que garantizasu independencia.Publicación de cuentas: Nuestras cuentasanuales, convenientemente auditadas, sonpublicadas en la <strong>memoria</strong> anual que se envía atodos nuestros socios y que puede descargarseen cualquier momento en nuestra páginaweb.Mecanismosde contabilidadNuestro máximo r<strong>esp</strong>onsable en los países, <strong>el</strong>Jefe de Misión, no gestiona directamente losfondos. Lo hace un r<strong>esp</strong>onsable distinto, <strong>el</strong>administrador, quien no puede, sin embargo,ordenar ningún gasto que no sea aprobado por<strong>el</strong> jefe de misión. Además de cumplir la normativacontable, hemos desarrollado internamenteun sistema de Contabilidad Analíticaque permite explicar en cada momento cómoy para qué se gasta cada una de las ayudasrecibidas individualmente.Institucionesque nos avalanContamos, entre otros, con la calificación deinstituciones como la Agencia Española deCooperación Internacional para <strong>el</strong> Desarrollo(AECID), la Oficina de Ayuda Humanitaria d<strong>el</strong>a Comisión Europea (ECHO), la CoordinadoraEspañola de ONG para <strong>el</strong> Desarrollo (CONGDE),la Red Internacional <strong>Acción</strong> contra <strong>el</strong> hambre(ACF International) y FORETICA ( con la normade gestión ética SGE-21).Códigosde conductaTrabajamos en <strong>el</strong> marco d<strong>el</strong> Código de Conductade la Coordinadora, los códigos éticos yde buenas prácticas de la Asociación Españolade Fundraising y <strong>el</strong> Código de conducta de laCruz Roja Internacional.Comitéde éticaEl Comité Ético de <strong>Acción</strong> contra <strong>el</strong> <strong>Hambre</strong>está integrado por profesionales de la organizacióny externos a la misma. Tiene comoobjetivo asesorar y orientar a los trabajadoresde la organización en la aplicación prácticade nuestro código de conducta (deontología);revisar y proponer mejoras al Comité de Dirección;analizar los riesgos más probables (ysus soluciones más efectivas) y promocionar ladeontología en la organización.
ne soluciónBALANCE 2O1OD<strong>esp</strong>ués de habersuperado los mil millonesde personas,las cifras d<strong>el</strong> hambreretrocedieronen 20<strong>10</strong>, por primeravez en 15 años.Debemos alegrarnospor <strong>el</strong> dato, perocon muchísima caut<strong>el</strong>a:925 millonesde hambrientos siguensufriendo. Noexiste ninguna explicación racional para justificarque la sexta parte de la humanidad sevaya a la cama con <strong>el</strong> estómago vacío. Las tresúltimas cosechas han sido las más importantesde la Historia. Este año <strong>el</strong> planeta ha producidoun 50% más de las calorías necesarias paraalimentar a su población, según la FAO.Emergencias(visibles y silenciosas)El año comenzaba con las estremecedoras imágenesde un país en ruinas. Las t<strong>el</strong>evisiones detodo <strong>el</strong> mundo retransmitían en directo <strong>el</strong> sufrimientoprovocado por uno de los sismos másdañinos de los últimos años. Todos, mejor opeor, nos volcamos con Haití. La intervenciónha sido y sigue siendo compleja. No puede reconstruirsea golpe de talonario un país que yaestaba entre los más inestables y desestructuradosd<strong>el</strong> mundo. Aunque los retos siguensiendo enormes, desde <strong>Acción</strong> contra <strong>el</strong> <strong>Hambre</strong>pudimos aliviar <strong>el</strong> sufrimiento de 275.000haitianos. Nuestro profundo conocimiento d<strong>el</strong>país (estábamos presentes desde 1985) nos diouna posición privilegiada para hacerlo. La otracara de la moneda la conforman <strong>el</strong> resto decrisis invisibles, <strong>esp</strong>ecialmente africanas, quehan quedado aún más eclipsadas, si cabe, porlas grandes emergencias de Haití y Pakistán.Contexto de seguridadde nuestras intervencionesEn <strong>el</strong> último año hemos tenido que evacuara nuestros equipos repetidas veces de puntosconflictivos, suspendiendo temporalmente <strong>el</strong>apoyo a las poblaciones más vulnerables. Especialmentepreocupante son las situacionesen <strong>el</strong> Sah<strong>el</strong> (donde mafias y grupos terroristasse han aliado para hacer d<strong>el</strong> cooperante unode sus blancos), Colombia (donde <strong>el</strong> rearmede paramilitares desmovilizados ha deterioradoaún más la seguridad en las ciudades)y América Latina en general (donde la d<strong>el</strong>incuencia,<strong>el</strong> narcotráfico y <strong>el</strong> crimen organizadohacen cada vez más pequeño <strong>el</strong> ámbito d<strong>el</strong>a ayuda humanitaria). Poco ayuda la tendenciacreciente de las potencias occidentales ahacer una gestión “humanitaria y social” d<strong>el</strong>os conflictos (véase Irak y Afganistán), en laque lo civil empequeñece a lo militar, una decuyas últimas consecuencias es la confusiónentre lo humanitario y lo militar. En <strong>Acción</strong>contra <strong>el</strong> <strong>Hambre</strong> estamos dispuestos a coordinarlas intervenciones humanitarias con lasintervenciones de los Ejércitos, pero seguimoscreyendo importante diferenciar bien ambosmandatos, precisamente para no reducir aúnmás <strong>el</strong> ya mermado <strong>esp</strong>acio humanitario.Crisis(la <strong>esp</strong>añola y la mundial)La palabra crisis marcará como un s<strong>el</strong>lo <strong>el</strong>año 20<strong>10</strong>. Sin necesidad de entrar en <strong>el</strong> mundode las finanzas, los niv<strong>el</strong>es de desempleoy endeudamiento familiar de los hogares <strong>esp</strong>añolesdan buena cuenta d<strong>el</strong> alcance de lasituación. La solidaridad no ha sido <strong>el</strong> primertachón en la lista de prioridades de las familias<strong>esp</strong>añolas, pero las empresas y la cooperacióndescentralizada han recortado drásticamentesus partidas de cooperación en 20<strong>10</strong>.Los presupuestos generales de 2011 no presentanmejores augurios para la Ayuda Oficialal Desarrollo. La crisis nos obliga, a quienestenemos, a dar menos. Pero ¿a qué otras cosasobliga a quienes lidian cada día por encontrar<strong>el</strong> alimento? Las salidas de la población másvulnerable ante la subida imparable d<strong>el</strong> preciode los alimentos son muchas veces des<strong>esp</strong>eradas:endeudamiento insostenible, descapitalizacióny reducción d<strong>el</strong> número de racionesdiarias de alimentos o de la calidad de losmismos. En las situaciones más extremas s<strong>el</strong>legan hacer verdaderas apuestas por la vida,primando al varón sobre la mujer o al fuertesobre <strong>el</strong> anciano, débil o enfermo. La crisis,qué duda cabe, ha recrudecido la inhumanidadd<strong>el</strong> hambre.Y todo esto pasa mientras aumenta la certezade que, hoy por hoy, <strong>el</strong> planeta sigue siendocapaz de alimentar a todos. De que por fintenemos <strong>el</strong> conocimiento y los medios paratratar la desnutrición. De que la nuestra es laprimera generación que puede acabar con <strong>el</strong>hambre. Es desde estas certidumbres desd<strong>el</strong>as que vamos a seguir trabajando en 2011.Olivier LonguéDirector general<strong>Acción</strong> contra <strong>el</strong> <strong>Hambre</strong>MEMORIA 20<strong>10</strong>05 ACCIÓN CONTRA EL HAMBRE