(fotos inéditas) - diasiete.com

donde se indica el lugar al que corresponden,así como la escena de la película de la que seríanantecedente. Otro detalle que destaca la curadoraes que en muchas ocasiones un mismo escenarioservía de inspiración para varias películas, como elcaso de algunas locaciones de Acapulco en dondese filmaron tanto Los ambiciosos (1959) como El ríoy la muerte (1954). A veces estos detalles no eran tanclaros por el paso del tiempo entre una cinta y otra,pero las fotografías de Buñuel ayudan a confirmarestas pistas: “Por ejemplo, la calle donde vive el viejode El río y la muerte es igual que la que aparece en laescena en la que Nazarín pide limosna: una calle deJonacatepec, Morelos, vista desde otro encuadre y,aunque seis años separan ambos rodajes, el aspectosigue siendo muy semejante”, escribe Cervera en lapresentación de la muestra.Otros lugares donde le gustaba trabajar a Buñuelera el Bosque de Chapultepec, donde filmóEnsayo de un crimen y Robinson Crusoe (ambasde 1955), entre otras. El director también tenía susrefugios favoritos para escribir sus guiones, comoel balneario de San José Purúa, en Michoacán, yel hotel Las Hamacas, en Acapulco. Las letras eransu obsesión, en 1982, un año antes de su muertepublicó sus memorias bajo el nombre de Mi últimosuspiro, donde decía que a él en realidad lo que lehubiera gustado es llegar a ser un gran escritor.Luis Buñuel filmó en México desde 1947, unaño después de su llegada, hasta 1965, 20 películas.Entre otras que recuerda la muestra se encuentranEl ángel exterminador (1962), que filmó despuésdel éxito de Viridiana (1961), así como Abismos depasión (1953), La joven (1960) y Nazarín (1959). Dehecho, esta última era una de las películas por lasque estaba más orgulloso. Buñuel decía que la cienciano le interesaba. “Ignora el sueño, el azar, la risa,el sentimiento y la contradicción, cosas que me sonpreciosas”, sin embargo, después de observar sus estrategiaspara filmar no podemos negar que habíaalgo de precisión científica en el proceso. •