Comunidades Campesinas: en defensa de sus recursos ... - Cepes

inmovilización, clausura o suspensión por la infracciones que serán determinadas por DecretoSupremo». No sabemos más de lo que se piensa encargar a la ANA, pues hasta allí llega elcontenido de la Primera Disposición Complementaria Final, por lo que debemos también eneste caso esperar a la aprobación del correspondiente ROF para conocer el diseño final deesta entidad.La pregunta evidente es ¿cuál será el destino de la Intendencia de Recursos Hídricos deINRENA? El escueto texto del Decreto Legislativo comentado no dice nada al respecto. Esde suponer que esta dependencia de INRENA será la base de la nueva Autoridad Nacionalde Aguas, pero ello es una especulación.Asimismo, cabe preguntarse por los órganos relacionados a la gestión del agua que seencuentran adscritos a otros ministerios y que cumplen funciones relacionadas a la gestióndel agua. En ese sentido, debemos recordar que en el proyecto de Ley de Aguas se planteabaque el Consejo Nacional del Agua se formaría a partir de la fusión de la Intendencia deRecursos Hídricos – INRENA, del PSI del Ministerio de Agricultura, PRONAMACHS delMinisterio de Agricultura, INADE, los órganos de línea del Ministerio de Salud, el órgano delínea del SENAMHI, los Administradores Técnicos de Distrito de Riego de cada DirecciónRegional Agraria y las Autoridades Autónomas de Cuenca Hidrográfica existentes.El proyecto de ley de aguas del Congreso y el Ministerio del AmbienteLa abrupta creación de la ANA deja en un incómodo papel a la Comisión Agraria del Congreso,la cual tiene en su poder desde el año pasado un proyecto de Ley Orgánica del Agua, que conalgunos bemoles, constituyó el producto más avanzado de un proceso que se inició en el año2001 para la elaboración de una nueva ley de aguas. El punto más alto de ese proceso fue elesfuerzo de más de un año de la Comisión Nacional de Aguas, que presentó en mayo de 2005un proyecto de ley, el cual se entregó a la Comisión Agraria, la cual no cumplió con dictaminarlo.Retomado en el año 2006, el proyecto elaborado por un grupo de trabajo de la ComisiónAgraria, bajo la conducción del congresista Róger Nájar, no ha logrado hasta el momento laaprobación del respectivo dictamen.Luego de la inquietud generada al conocerse que el Gobierno venía preparando un proyectode Ley del Sistema Nacional de Gestión del Agua (Ley SIGA), el cual solo contemplaba losaspectos administrativos y no dejaba espacio para la participación de las organizaciones deusuarios de agua, en marzo pasado el Presidente del Consejo de Ministros anunció que sehabía decidido que se archive dicho proyecto en forma definitiva.Por último, el debate en torno a los proyectos de creación del Ministerio del Ambiente haestado también salpicado por las dudas respecto a las facultades del nuevo Ministerio enmaterias de agua. La última versión conocida no contempla facultades en materia de gestióndel agua, lo que sin duda debilita las posibilidades de constituirse en un real organismo quecontribuya a la gestión integrada de los recursos hídricos. Ello, además cuando en el país losconflictos sociales más intensos han tenido como uno de sus elementos el uso y lacontaminación del agua, conflictos que enfrentan a las poblaciones rurales con las empresasmineras y petrolíferas, fundamentalmente.En ese panorama, la actitud del Congreso debería ser retomar el debate del proyecto de LeyOrgánica del Agua y discutir respecto de si se mantiene o se modifica la ANA o si por el25