SECCION ESPECIAL REVISION HISTORICA DE LA ANATOMIA ...

186ACTA MEDICA DOMINICANA SEPTIEMBRE-OCTUBRE 1989se efectuó en 1572, debido a una epidemia que se presentóen la nave de Drake, cuando mueren 10 hombres en tresdías y luego treinta más, entre éstos un hermano de estepersonaje. Esto decide a Drake solicitar a un médico de sudotación, no mencionado, efectuar la necropsia de sudeudo, encontrándose, cito: "hígado aumentado de volumeny el corazón como si hubiera sido salcochado, pensándoseque era fiebre amarilla". En 1574, en la ciudad deMéxico, se hace la primera necropsia en ese país, realizándolaManuel López de Hinojosa y Hernández. Se trataba deun caso de fiebre tifoidea.Consideramos de interés como base de nuestras investigaciones,establecer un bosquejo histórico acerca del ejerciciode la medicina dominicana, particularmente de la cirugía,arte médico muy correlacionado con la Anatomía Patológica,comprendiendo desde la época de nuestra colonizaciónhasta nuestra era contemporánea.De acuerdo a los investigadores que estudiaban lascrónicas relacionadas con el tipo de vida y acontecimientosque se producían en los albores de nuestra civilización,se establece que en el sigloXVI eran muy pocos los médicosque ejercían en el país, mencionándose los aportes quehacían los médicos cirujanos del ejército español, entreellos mencionándoseAlonzo,Diego,Benavidesy Pedrazaentre otros. Al marcharse del país dejan detrás de ellosnumerosos practicantes que estaban en el país y que seautoproclamaban cirujanos. Se puede decir que en el primertercio del siglo XVII persistía la carencia de médicos conlicencia para ejercer. De esta etapa histórica hasta la épocade la independencia, los médicos generales hacían cirugíamenor. Desde el año de 1759 hasta el advenimiento delsiglo XIX, se consigna que no había cirujanos en el país.Durante la ocupación haitiana, de 1822 a 1844, se fuerondel país todos los médicos que ejercían en Santo Domingo,quedándose tan sólo los doctores Bernal y Díaz, que semarcharon dos años después del inicio de este penosoperíodo. En los primeros años de la República es notoriala falta de médicos, no habiendo galenosen Santo Domingoen el año de 1858, al punto que mueren prácticamente sinasistencia el Arzobispo Portes y el Dr. Gaspar Hernández.Deseo en esta etapa de nuestra historia, abrir unparéntesis para consignar un hecho trascendental en lahistoria de la medicina universal, y es el hecho de que enFrancia, en el año de 1857, Rene Theophile HyacintheLaennec establece en el mundo médico que las enfermedadesse debían mayormente a órganos enfermos, iniciándosela medicina anatomo-cl ínica. A continuación, en Alemania,Rudolf Virchow realiza los primeros estudios de AnatomíaPatológica, siendo por consiguiente considerado el padrede esta rama de la medicina, asimismo iniciando estudiossistemáticos de paleopatología.Continuando con nuestro bosquejo histórico de lamedicina dominicana, tenemos que de 1869 a 1874 segradúan los primeros licenciados en medicina y cirugía,en el seminario conciliar donde estuvo radicado el InstitutoProfesional. Entre los primeros graduados se menciona adoctores Félix, Rousseau, Martínez, Villeta, Espaillat,Miniño, Mella, Pepén, Báez y Guerrero. A pesar de esteimportante acontecimiento, la cantidad de médicos erainsignificante en el país; así continuaron las cosas hastaque en el año de 1888 el Dr. Francisco Henríquez yCarvajalviajaa París, donde se forma como cirujano.Posteriormente, ya sea entrenándose en París o formándoseen el país, empiezan a ejercer una serie de cirujanosnotables, y algunos clínicos que hacían esporádicamentecirugía. En el añg de 1904 regresan de París losdoctores Ramón Báez y José Dolores Alfonseca; en 1905el Dr. Celio Struch; en 1906 el Dr. Rodolfo Coiscou; en1907 el Dr. Luis M. Morillo King; en 1910 los doctoresRamón de Lara, Antonio Elmudesi'y Francisco MoscosoPuello; en 1911 el Dr. Vicente Grisolía; en 1912 el Dr.Luis E. Aybar; en 1914 el Dr. Arturo Grullón; en 1915el Dr. Darío Contreras y en los años que siguieron de inmediatolos doctores Octavio Pozo, Abel González Quezada,Rafael Vásquez y Mr.Carl Theodore Georg.En época correspondiente a la generación de médicosque nos antecedió, mencionaré al Dr. Félix Benzo que iniciasu práctica en 1928, y al Dr..Alejandro Capellán, ambosnotables cirujanos y profesores universitarios, y al Dr.Antonio Zaiter, entre otros. Deseo hacer a continuaciónun señalamiento especial del Dr. Félix María Goico Evangelista,quien después de haber estudiado totalmente lacarrera médica en Santo Domingo, parte a París dondereinicia los estudios médicosy posteriormentese entrenaen cirugía retornando al país en 1935. En el Dr. Goico seaunan grandes conocimientos de medicina y cirugía, grandestreza quirúrgica y gran capacidad para la enseñanza,siendo en ese renglón uno de los profesores más distinguidosque ha tenido este país. A mi humilde juicio el Dr.Goico es el padre de la cirugía moderna en la RepúblicaDominicana.Obvia señalar que todos estos ilustres cirujanos, y otrosque quizás hemos involuntariamente dejado de mencionar,ejercieron tomando importantes d~cisionescon sus pacientes,en base a sus conocimientos clínicos y a la apreciaciónmacroscópica durante el acto quirúrgico, al estar desposeídos~talmente de la ayuda de un patóJogo.Sin embargo, seva géstando poco a poco en el ambiente el interés por laAnatomía Patológica, basado sobre todo en los contactosque tenían estos cirujanos con los patólogos cuando iban aentrenarse en el extranjero, comprendiendo la importantee indispensable ayuda que estos especialistas aportaban ala cirugía.En época anterior a la aparición del primer patólogo

188 ACTA MEDICA DOMINICANA SEPTIEMBRE-OCTUBRE 1983Así las cosas, surge en el mundo médico dominicanoun estudiante de medicina que trabajaba como laboratoristacon el bachiller Amadeo Báez, graduándose de médico enSanto Domingo en 1932. Me refiero al Dr. Mario RaveloBarré, sin dudas algunas el primer patólogo dominicanocon preparación científica completa en esa especialidad.Sus inicios se sitúan por el año de 1935, cuando es nombradomonitor de Anatomía Patológica en la Universidadde Santo Domingo. En este trabajo de enseñanza se vaapasionando por la especialidad y se va haciendo patólogopoco a poco, siendo eminentemente autodidacta. Empezóentonces a tener correspondencia con ese gran maestro dela patología mundial como lo fuera Pierre Masson, quiencomprendiendo su esfuerzo y aun sin conocerle, lo estimulabaconstantemente a continuar su labor. El estudiabaen esa época algunos casos que operaban en el HospitalPadre Billini. Para ese entonces el Instituto Domínico-Alemán, que hacía grandes aportes culturales y científicosal país, decidió traer a un patólogo alemán, cuyo nombrese pierde con el transcurrir del tiempo, quien al llegar alpaís entra en contacto con el Dr. Ravelo Barré. Al cabode un tiempo el Instituto Domínico-Alemán le ofrece unabeca a nuestro personaje para ir a estudiar patología enAlemania, pero estalló en 1939 la segunda guerra mundialfrustrando las aspiraciones del joven galeno. En 1941 elDr. Ravelo Barré recibe una beca para estudiar en USA,en el prestigioso Hospital John Hopkins en Baltimore,donde pasa un año trabajando con el Dr. Rich. Luego va aPuerto Rico donde labora en San Juan con Enrique Kopichen el área de la Patología Tropical. Finalmente viaja aMontreal, Canada, estudiando con su legendario amigo elprofesor Pierre Masson. El Dr. Ravelo Barre fue profesorde la Universidadde Santo Domingo de Anatomía Patoló'gica, siendo el primer patólogo de carrera en enseñaresa disciplina, y esto desde sus primeros contactos conel Instituto Domínico-Alemán. A continuación en 1966pasa a la UNPHUcuando es fundada donde laboró con suhijo Dr. Mario Ravelo Marchena, el Dr. Logroño Batlley el que les relata. Fallece en esta ciudad en diciembre de1982.Para los que Jlegamos a tener el privilegiode su amistad,como fue mi caso a pesar de la diferencia de edad,encontramos en él un hombre fuera de lo común, polifacético,poseedor de gran cultura, musicólogo, intérpretemusical, experto en vinos, gastrónomo y gourmet, unhombre sobresaliente en su medio. Perfeccionista comoninguno, nunca gozó del aprecio de los mediocres, pues eraexigente en el trabajo y en todo lo que emprendía. Extraordinariotécnico, elaboraba todas las coloraciones a suantojo, formando técnicosdominicanos,como hoy recor.damos al Sr. Rómulo. Era igualmente un eminente fotógrafoprofesional en el campo de la Patología. Trabajó porlargos años en el Laboratorio Nacional y en el Instituto deOncología, donde demostraba que su trabajo era tambiénsu hobbie. La carencia de suministro en los sitios que laborabalo obligaban a hacer magiacon los pocos reactivos queconseguía, como lo era redestilar sus alcoholes para utilizarlosnuevamente, entre otras cosas. Tal como él merefiriera en persona, sus años inicialesen el ejercicio de laPatología en Santo Domingo fueron difíciles, enfrentándosea médicos que no valoraban la especialidad,creyéndola de poca utilidad y no utilizándola. Lo mismosucedía con la Citología que había sido lanzada desde 1941por Georg N. Papanicolaou, pero los médicos dominicanostampoco valorizabanesa técnica.El Dr. Ravelo Barré fue el fundador de la AsociaciónDominicana de Patólogos, siendo su primer presidente en1964, y siéndoloen tres o cuatro períodos más.Durantetoda su vida fue quien más respaldó nuestra Asociación,moral,científicay económicamente. 'En 1946 llega a Santo Domingo el Dr. Enrique W.Lithgow Ceara, patólogo que se había entrenado en USA,particularmente en el Mount Siani de New York, quienhabituado a vivir por largos años en un país democrático,manifestó públicamente su desacuerdo con la tiranía deTrujillo, por lo cual fue vilmente asesinado en 1949. Suactuación profesional tan corta en nuestro país, en épocaen que la especialidad daba sus primeros pasos, condicionaque su competencia como patólogo no dejara huellas ennuestra especialidad. De modo reivindicativo se le da sunombre, después del tiranicidio, al Hospital Militar Dr.Marion, donde había fundado el servicio de AnatomíaPatológica, hasta que éste se muda y reorganiza siendoconocido actualmente como Hospital Central de las FuerzasArmadasy la PolicíaNacional.En el año de 1948 se gradúade médicoel Dr. FélixDíaz Martínez, quien muy interesado en la Anatoml'aPatológica se une al Dr. Ravelo Bané, trabajando con éstedurante largos años en el Instituto del Cáncer y en laUniversidad de Santo Domingo, hasta hacerse patólogo.Deseoso de perfeccionarse más en el extranjero, vio frustrarsesus aspiraciones debido a que la tiranía de Trujilloasí se lo impidió. No obstante continuó trabajando contesón desarrollándose como patólogo en nuestro país, hastapasaral HospitalWilliamMorgan,hoy Dr. Luis E. Aybar,donde funda el Departamento de Anatomía Patológica en1953, trabajando allí hasta 1957. Luegoes nombrado patólogoenel HospitalPadre Billini de 1957 a 1966 y en elHospitalMilitar,FAD, Dr. Ramónde Larade 1961a 1963.El Dr. Díaz Martíneztrabajaigualmente,comoya dijimosanteriormente, en la Universidad de Santo Domingo,creandodos obraspara la enseñanzade la Historíay de laEmbriología.En el año de 1951 se inaugura en Santo Domingoel

Vol. 11, No. 5 REVISION HISTORICA OE LA ANATOMIA PATOLOGICA EN R.D., KOURIE RODRIGUEZ y COL. 189Hospital Dr. Salvador B. Gautier, para atender los pacientesaseguradospor el Instituto Dominicano de Seguros Sociales.Las autoridades de esa institución y frente a la casi ausenciade patólogos en el país contratan al patólogo peruano Dr.Ruperto Ravens, quien empieza a trabajar en el Departamentode Patología en 1953, permaneciendo en el paíshasta noviembre de 1957 cuando parte a USA, acosadopor presiones en el régimen de Trujillo y que detallaremosen el capítulo dedicado a la Medicina Legal. Dicho patólogoera seguidor de la escuela de Del Río Hortega yPollack, siendo proclive al uso de los cortes por congelacióncon tinciones por técnicas de plata, como uso rutinario paratodos los tejidos, lo que resultaba muy discutible. Su trabajoes competente interesándose sobre todo en la Neuropatologíaque era su fuerte. Varios jóvenes médicos y estudiantesde medicina se entrenan en su Laboratorio, citándoseentre los primeros los doctores Alfau Cambiaso, LópezTaveras, Miguel Garrido, y entre los estudiantes al que lesrelata. El Dr. Ravens se marcha del país sin dejar una estelaimportante, pero sobresale notablemente en USA trabajandopara la NASA en investigaciones neuropatológicas enlos primeros monos que fueron enviados al espacio exterior.De los jóvenes médicos que iniciaron sus estudios deAnatomía Patológica en el Hospital Dr. Salvador B. Gautier,debo señalar al Dr. Rafael Alfau Cambiaso, que desde suestadía con el Dr. Ravens en 1953, parte para la ciudad deMéxico en 1957 donde realiza estudios de AnaOomíaPatológicaen el servicio del Dr. Isaac Costero, afín al Institutode Cardiología dirigido por el maestro Chávezy simultáneamenteen la Universidad Autónoma de México. Regresa alpaís después de 6 años, trabajando como patólogo en elHospital Dr. Luis Aybar, Hospital Padre Billini, siendodocente en la UASD y en la UCE. Realiza trabajos de patologíacardiovascular los cuales han sido objeto de publicacionesy presentaciones científicas.Otro joven médico entrenado en ese mismo servicioesel Dr. Francis López Taveras, que desde el año 1953 trabajacon el Dr. Ravens, empezando a diagnosticar desde 1957,siendo nombrado jefe de ese servicio en 1959, partiendopara Saint Louis Misuri en USA, donde se dedicó a laNeuropatología, quizás influenciado por el Dr. Ravens.Actualmente labora en Danboury. El Dr. López se destacaba,aparte de sus conocimientos de Patología, por su marcadadestreza en los trabajos técnicos, al punto de sacarfinos cortes, en cortes de congelación de una punciónhepática. Era de trato afable y de una gran inventiva.En el año de 1957 regresa al país después de cinco añosde estudios en USA, de Anatomía Patológica, Citologíay Laboratorio Clínico el Dr. Miguel A. Logroño Batlle,quien estudiara en el Mount Siani de New York, en elNew Britain General Hospital de Connecticut y en MountSinai de Miami. El Dr. Logroño es el tercer patólogo diplomadoen llegar al país. Rehabilita por completo elLaboratorio de Anatomía Patológica del Hospital Dr.Salvador B. Gautier, haciendo que las autoridades delInstituto Dominicano de Seguros Socialescomprara equipopara efectuar el trabajo por la inclusión a la parafina, y deese modo substituye la técnica de congelación y plata delDr. Ravens. Establece a base de un gran esfuerzo unaorganización completa de archivos de placas e informeshistopatológicos, tesoro científico vigente. Finalmenteentrena a jóvenes estudiantes y médicos en AnatomíaPatológica, que luego se perfeccionarían en el extranjerocomo lo fueron los doctoresKourie,Lora, Bergesy Peña.Después de largos años de ejercicio de patología en el país,parte nuevamente al Hospital Mount Sinai de New Yorken el año de 1969, donde realiza durante tres meses entrenamientointensivo de Hepatopatología, convirtiéndose enuna autoridad en la materia.El Dr. Logroño BatJle da igualmente servicios en elHospitalCentralde las FuerzasArmadasy PolicíaNacional.Fue profesor de Patología en la Universidad de SantoDomingo en medicina y veterinaria, siendo profesor funda.dor de la UNPHU en 1966, impartiendo docencia en lacátedra de Anatomía Patológica desde 1970. En esta univer.sidad ha impartido igualmente cátedras de Técnica enAnatom ía Patológica a la Escuela de Bioanálisis. Fue presidentede la Asociación Dominicana de Patología en unaoportunidad.En el año de 1959 llega al país el Dr. Mario EmilioRavelo Marchena, después de haberse entrenado comoanatomopatólogo en el BeJJevueMedical Center y en laUniversidad de New York, desde 1955 a 1959. El Dr. RaveloMarchena ha sido jefe del Departamento de AnatomíaPatológica del Hospital Dr. Robert Reid Cabral, prácticamentedesde su arribo al país. Fue profesor de Patologíaen la USD-UASDen lasfacultadesde Odontologíay Medicina.En el año de 1966 es uno de los fundadores de laUNPHU, habiendo sido el primer director de esa escuelade medicina. Fue coordinador de la cátedra de AnatomíaPatológica en dicha escuela hasta finales de 1982. Actual.mente es también jefe del Departamento de Patología delInstituto de Oncología Milagrosde la Caridad, sucediendoen ese cargo a su padre, Dr. Ravelo Barré, después de sumuerte en 1982. El Dr. Ravelo Marchena es uno de lospatólogos dominicanos de más sólida formación en elpaís, habiéndose destacado notablemente en PatologíaPediátrica,Nefropatologíay Cancerología.Con la presencia del Dr. Ravelo Marchena en el paísse cierra el primer capítulo de este recuento histórico deAnatomía Patológica en Santo Domingo, sin duda algunauno de los más importantes.Iniciamos un segundo capítulo, mencionando los pató.logos que ¡legaron al país en la década comprendiQá de

190 ACTA MEDICA DOMINICANA SEPTIEMBRE-OCTUBRE 19891960 a 1969, omitiendo al Dr. Rafael Alfau Cambiaso, dequien hicimos una semblanza al relacionarJo con el Dr.Ravens y el nacimiento del Laboratorio de AnatomíaPatológicadel Hospital Dr. Salvador B. Gautier.Cinco patólogos más llegan a la República Dominicanaen esta década, después de haberse entrenado en AnatomíaPatológicaen el extranjero.Primeramente llega al país en 1961 la Dra. VictoriaSánchez de Peralta, quien hiciera su postgrado en New YorkCity Hospital en 1956 y en City Hospital at Elmhurst de1957 a 1959, igualmente en New York. Luego prosigue suentrenamiento en San Juan City Hospital de la EscueladeMedicina de la Universidad de Puerto Rico de 1959 a1961.La Dra. Sánchez de Peralta ejerce en Santiago y ha sidoconsiderada por todos como la "gran dama" de la Patologíadominicana, por su completa formación, su seriedadprofesionaly su gran capacidad de trabajo. Fue coordinadorade la cátedra de Anatomía Patológica en la UASD, por loque tenía que viajar constantemente de Santiago a lacapital, realizando un esfuerzo digno de encomio. Actualmentees profesora de Patología en la UCAMAIMA.Ha sidode los patólogos que más apoyo le ha dado a la AsociaciónDominicana de Patólogos, pese a tener el inconveniente devivir lejos de la capital. La Dra. Peralta siempre ha hechoconsiderables esfuerzos por mantenerse actualizada, habiendoorganizado varios simposiums científicos en la segundaciudad del país.En el año de 1963 llega al país el Dr. José A. MartínezMuñiz, quien se entrenara en Patología en USA de 1956 a1963, en el Maimonides Hospital de Brooklyn, así comoen el George Washington University Hospital, ambos enNew York.El Dr. Martínez Muñiz es nombrado a su llegada alpaís como jefe del Serviciode Patología del Hospital Rodolfode la Cruz, trabajando aIJí por corto tiempo. Luegopasaa la Maternidad Nuestra Señora de la Altagracia como jefedel Servicio de Patología, trabajando en ese centro durante17 años.El Dr. Martínez Muñiz, patólogo de sólida formación,ha descollado notablemente en el campo de la Ginecología-Obstetricia, siendo a mi juicio el patólogo de mayor experienciaen esta importante rama de la Anatomía Patológica.Ha sido autor de numerosos trabajos científicos y conferencias.Igualmente en 1963 regresa al país después de haberefectuado durante tres años entrenamiento de AnatomíaPatológica en el Forham Hospitalde New York el Dr. PedroJorge Blanco. Este patólogo ha estado muy arraigado en laciudad de Santiago por lo que hemos tenido poco contactocon él. Ejerceactualmente en dicha ciudad.A finales de 1964 llega al país el autor de estas recopilacioneshistóricas, Dr. Michel Georges Kourié Follé. Yahice mención de mis iniciosen el Laboratorio de AnatomíaPatológica en el Hospital Dr. Salvador B. Gautier de 1955 a1958, época en que era estudiante de medicina, primeramentecon el Dr. Ravens y luego con los doctores LópezTaveras y Logroño BatlJe. En 1959, al graduarme de médico,fui nombrado como MédicoAuxiliar del citado departamento,empezando a diagnosticar en julio de 1961, dondeproseguía entrenándome hasta 1962 cuando partí a París,después de haber entrenado y trabajado durante 7 años.En Parísen los añosde 1962,1963Y1964realizo estudiosde Anatomía Patológica general en la Facultad de Medicinay entrenamiento en Patología especializada en el Hospitalde la Salpetriere (Osteología, Neuropatología, Citopatologíay Citología Hormonal, en el Hospital Saint Louis(Dermatopatología) y el Hospital Beaujon (PatologíaGastrointestinal y Hepatopatología), regresando a finales de1964. retornando al Hospital Gautier donde aún permanezco.En 1965 fui nombrado Jefe de Patología en elHospital Militar, FAD, Dr. Ramón'de Lara. En 1966 fuinombrado Patólogo en el Instituto de Dermatología dondelaboré durante 10 años.Profesor de Anatomía Patológica en la Escuela deMedicina de la UNPHU desde 1970, siendo coordinadordesde 1982. Tres veces Presidente de la Asociación Dominicanade Patólogos, en los años 1967, 1978 e interinamenteen 1982. En el año de 1979, en calidad de Presidente dela ADP, colaboro con el Dr. .Guaroa Lora en la preparacióndel XII Congreso de Anatomía Patológica de la SociedadLatinoamericana de Patología, que tuvo lugar en SantoDomingo.En el año de 1969 llegaal país procedente de Colombiae! Dr. Pedro Segundo Berges Ramos, quien hizo estudiosde Anatomía Patológica en los años de 1968 y 1969 enBogotá, en la Universidad Nacional y en el Instituto deCancerología, en Medellín en la Universidad de Antioquíay en Calien la Universidaddel Valle.Previamente el Dr. Bergés había realizado entrenamientoen el Hospital Dr. Salvador B. Gautier desde el añode 1961 a 1969. A su regreso de Colombia trabajan nuevamenteen el Hospital Gautier hasta 1984 cuando se pensionaoIgualmente fue nombrado patólogo en el Hospital Dr.Darío Contreras, donde trabaja marcadamente en PatologíaOsea. Fue Profesor de Anatomía Patológica en laUASD.Con el Dr. Berges concluye este segundo capítulo,iniciándose un tercer capítulo en la época comprendidaentre 1970 y 1979, cuando regresan al país 10 patólogos.Primeramente regresa al país en 1970 la Dra. ZoraidaElena García de Chanlatte, después de haberse entrenado de1968 a 1970 en Wilminton, Delaware, y en la Universidadde Puerto Rico con Raúl Marcial Rojas. La Dra. Garcíade Chanlatte se ha dedicado en pleno a la enseñanza de laHistología desde hace años en las Escuelas de Medicina dela UNPHUy de la UASD.

Vol. 11, No. 5 REVISION HISTORICA DE LA ANATOMIA PATOLOGICA EN R.D., KOURIE RODRIGUEZ y COL. 191En el ailOde 1971 llega al país el Dr. Guaroa ErnestoLora Vicente, quien durante varios años se entrenara en elDepartamento de Anatom ía Patológica del Hospital Dr.Salvador B. Gautier, trabajando con los doctores Logroñoy Kourie. En los años de 1970 y 1971 se entrena en Colombia,primeramente en Bogotá en el Instituto de Cancerología,y luegoen Medellín en el Hospital San Vicente de Paul,y finalmente en Cali en la Universidad del Valle. El DrLora ha ejercido la Patología en el Hospital Salvador B.Gautier y en el Hospital Dr. Moscoso Puello. Fue Profesorde Patología en la UASD de 1966 a 1988, habiendo sidocoordinador por muchos años. Igualmente es Profesor dePatología en UNIBE yen INTEC hasta 1980. El Dr. Lorafue electo vicepresidente de la Sociedad Latinoamericanade Patología de 1975 a 1977 y presidente de 1977 a 1979,organizando el XII Congreso de esta agrupación en SantoDomingo en 1979. El Dr. Lora fue en una ocasión presidentede la Asociación Dominicana de Patólogos y en variasoportunidades directivo de la Asociación Médica Dominicana,habiendo sido un luchador incansable de nuestrogremio médico.En el año de 1973 regresa al país el Dr. Rafael GonzálezGautreaux, después de haberse entrenado y posteriormentelaborado en Anatomía Patológica y MedicinaNuclear en Danbury, Connecticut, de 1958 a 1973. El Dr.González es Jefe del Laboratorio Nacional de la SESPAS"Dr. Defilló". En 1981 organizacon la ayuda del Dr. Saritala primera residencia de Anatomía Patológica Dominicana,iniciándose la enseñanza en 1982. Fue director del Institutode Estudios Biomédicosde la UNPHUhasta 1979.Ese mismo año regresa al país el Dr. Luis A. JiménezRojas, después de haberse entrenado durante 4 años enAnatomía Patológica en Danbury, Connecticut. El Dr.Jiménez siempre ha ejercido en la ciudad de La Vega, particularmenteen el Centro MédicoPadre Fantino.En el año de 1974 llega al país el Dr. Leocadio PeñaDíaz, quien se entrenara en Colombia de 1972 a 1974.El Dr. Peña había recibido previamente entrenamientoen el Departamento de Anatomía Patológica del HospitalDr. Salvador B. Gautier desde 1968 a 1972. El Dr. Peñaestudió en la Universidad de Antioquía de Medellín. A suregreso es nombrado Jefe de Patología del Hospital Dr.Jacinto Mañón de San Cristóbal y labora igualmente parala Maternidad Nuestra Señora de la Altagracia. Es profesorde Patología de la UASD, habiendo sido coordinador poraños. Actualmente es presidente de la Asociación Dominicanade Patólogos.En 1975 regresa al país el Dr. Rafael C. Alba Fernández,quien se entrenara en Patología en la UniversidadAutónoma de México de 1965 a 1972 y en la UniversidadPeruana Cayetano Heredia de 1972 a 1975. Ingresa alEjército en 1976, siendo jefe del serviciode Laboratorio deAnatomía Patológica del Hospital Central de las FuerzasArmadas y la Policía Nacional. Profesor de AnatomíaPatológicaen INTECde 1980 a 1981. Director del InstitutoBiomédicoUNPHU1980-1982.En el año de 1976 regresa al país el Dr. Vertilio CornielleSegura, quien se entrenara en la UniversidadComplutensede Madrid de 1973 a 1976. El Dr. Cornielle es actualmenteasimilado-patólogo del Hospital Central de lasFuerzas Armadas y la Policía Nacional. Es director delLaboratorio Nacional de Patología Forense. Ha sido profesorde la residencia de Anatomía Patológica desde su creaciónen 1982.Ese mismo año regresa al país la Dra. Carmen PastorAnnia, quien se entrenara en el Hospital del Instituto Mexicanode Seguros Sociales de 1971 a 1973, y luego en elHospital 20 de noviembre dellSSSTE y el Hospital Infantilde México. La Dra. Pastor es jefe del servicio de Patologíade la Maternidad del Instituto Dominicano de SeguroSocial. Es docente de Histología en la UASD, así como dePatología General y Bucal en UNIBE.y en la UniversidadOdontológica Dominicana.En el año de 1977 regresa al país el Dr. Rafael R.Barranco, quien se entrenara en Patología de 1973 a 1977en el Hospital Metodista de New York. El Dr. Barrancoejerce como Patólogo en el Hospital Dr. Arístides FialloCabral, del Instituto Dominicano de Seguro Social en LaRomana.En 1978 regresa al país el Dr. Estelio ArveJoTejada,quien hizo estudios de Anatomía Patológica de 1975 a1978 en México,en el Centro Médicode la Raza dellnstitutoMexicano de Seguros Sociales y en la UniversidadAutónomade México. El Dr. ArveJoes jefe de Patología en loshospitales José María Cabral y Báez y Presidente EstrellaUreña, de Santiago. Es coordinador de la residencia deAnatomía Patológica que se realiza en el primero de estoshospitales y es profesor de Patología en la UCAMAIMA.En el año de 1979 regresaa Santo Domingoel Dr. Josédel Carmen Medina, quien se entrenara en PatoJogía de1976 a 1979 en el Hospital Central de JasFuerzas ArmadasVenezolanas Dr. Carlos ArveJo, en la ciudad de Caracas.El Dr. Medina es encargado del servicio de AnatomíaPatológica del Hospital Militar, FAD, Dr. Ramón de Lara ypatólogo del Hospital Dr. Luis E. Aybar. Es coordinadorde la cátedra de Histología y profesor de Anatomía Patológicaen la Escuela de Medicina de la UNPHU. Actualmentees además jefe del Servicio Médico y Sanidad Aéreade la Fuerza Aérea Dominicana.Con el Dr. Medina se cierra este tercer capítulo denuestras investigacioneshistóricas.El cuarto y último capítulo de la Historia de la AnatomíaPatológicaDominicanacomprende de 1980 a lafecha actual, y se caracteriza por la llegada o por Ja formaciónlocal de 31 patóJogos en total, influenciado por lapresencia de la residencia dominicana de patología, de la

192 ACTA MEDICA DOMINICANA SEPTIEMBRE-OCTUBRE 19B9cual ya hemos hecho mención.En el año de 1980 llegan dos patólogos al país. Primeramenteel Dr. Octavio de León Vega, quien efectuó estudiosde Anatomía Patológica de 1977 a 1980 en la ciudadde México. Estuvo dos años en el Instituto Nacional deCardiología y un año en el Instituto Nacional de la Nutrición.El Dr. De León fue patólogo del Hospital Dr. MoscosoPuello y actualmente jefe del servicio de Anatomía Patológicadel Hospital Padre Billini.Es docente de su especialidaden la UASDyen INTEC.Igualmente llega en el año 1980 el Dr. Félix EnriqueDíaz González, quien se entrenara de 1976 a 1980 enMadrid, en el Hospital Clínico de Madrid y en la UniversidadComplutense. El Dr. Díaz González es patólogo delHospital Dr. Salvador B. Gautier y es profesor-coordinadorde Patología en la UASD. Fue presidente de la AsociaciónDominicana de Patólogos en una oportunidad.En el año de 1981 llegan al país dos patólogos. Primeramenteel Dr. Laureado Ortega Mármol, quien se entrenaraen Patología de 1978 a 1981 en el Centro Ramón y Cajalde Madrid. El Dr. Ortega trabaja en el Instituto Oncológicode la UCE en San Pedro de Macorís y en el Hospital Dr.Carl Georg. Es docente de Patología en la UASD y en laUCE.Ese mismo año regresa al país el Dr. Sergio SaritaValdez, quien se entrenara en Patología de 1968 a 1973 enel Cook Country Hospital de Chicago, obteniendo en 1974el diploma del Board de Patología. Luego pasa a PuertoRico de 1975 a finales de 1976 donde recibiera entrenamientode Patología Forense con Raúl Marcial Rojas.Retorna a Chicago en 1976 trabajando como PatólogoAsociado del Saint Elizabeth Hospital.El Dr. Sarita es nombrado en el Instituto de PatologíaForense en 1988. Es docente de Anatomía Patológica enUNIREHMOS y en UTESA, enseñando Anatomía Forenseen la Universidad Mundial. Fue uno de los organizadoresy profesor de la Residencia Dominicana de Patología de1982 a 1988.En el año de 1982 retornan a Santo Domingodos pató.logos. Primeramente la Dra. WilmaCabral Ramírez, quiense entrenara en La Habana, Cuba, de 1978 a 1982. La Dra.Cabral es jefe del serviciode Patología del Centro Materno-Infantil de Los Mina. Es docente de Patología e Histologíaen la UASD.Ese mismo año regresa al país el Dr. Francisco MorrosDraiby,quien se entrenarade 1978 a 1982en el HospitalClínico de San Carlos en Madrid. El Dr. Morroses patólogodel Laboratorio Nacional de la SESPAS Dr. Defilló y profesorde Histología en la UASD.En el año de 1983 arriban al país tres patólogos. Primeramenteel Dr. Luis Rodríguez Troncoso, quien hizo entrenamientoen Patelogía de 1981 a 1983 en la FundaciónJiménez Díaz en Madrid, España. El Dr. Rodríguez ocupacargos de patólogo en el Hospital Padre Billini y en elInstituto de Oncología Milagrosde la Caridad.A continuación llega al país el Dr. Iván Brugal Velásquez,quien se entrenara en Cuba de 1979 a 1983 en AnatomíaPatológica. El Dr. Brugal es patólogo ayudante delInstituto Nacional de Medicina Forense. Es profesor dePatología en la UASD en Medicina y Odontología y profesorde MedicinaLegalen UTESA.Finalmente llega en ese año de 1983 el Dr. RafaelBolívar García, quien estudiara Anatomía Patológica yPatología Forense en Medellín, Colombia. El Dr. Garcíaes médico legistaen el Departamento de Justicia, ejerciendoigualmente como anatomopatólogo en calidad de médicoayudante en el Hospital José María Cabral y Báez.En el año de 1984 llegan al país dos patólogos. Primeramenteel Dr. Vicente Manuel De Sanctis Alsina, quien seentrenara de 1977 a 1981 en el

Vol.11,NO.5 REVISION HISTORICA DE LA ANATOMIA PATOLOGICA EN R.D., KOURIE RODRIGUEZ y COL. 193en UNIBEy en UNIREHMOS.En el año de 1986 surgen en el país 4 patólogos. Elprimero es el Dr. Jaime Esteva Troncoso, quien se entrenarade 1981 a 1986 en Saint BarnabasMedicalCenteren New Jersey, USA. El Dr. Esteva se dedica a la prácticaprivada. Obtuvo en 1985 el Board de Patología.A continuación se gradúa la Dra. Betty Lora, quieniniciara su residencia de Patología en 1982 en México enel Instituto Nacional de la Nutrición y en 1983 en elInstituto Mexicano de Seguro Social. De' 1984 a 1986completó sus estudios en la Residencia Dominicana dePatología. La Dra. Lora es patólogo de la Maternidad NuestraSeñora de la Altagracia.A seguidas haremos mención de la Dra. MargaritaAlcántara, producto de la 1ra. promoción de la ResidenciaDominicana de Patología, entrenándose de 1982 a 1986.La Dra. Alcántara es patólogo de la Maternidad NuestraSeñora de la Altagracia. Es docente de Patología en UNIRE-MHOSy UTESA.Finalmente, de esa 1ra. promoción surge la Dra. JosefinaPérez, quien estudia igualmente Patología durante 4años. La Dra. Pérez es patólogo del Laboratorio Nacionalde la SESPASDr. Defilló.Igualmente se forman en esta 1ra. promoción las doctorasMaritza Rodríguez y Mercy Corporán, de quienes notenemos informaciones.De la 2da. promoción de la Residencia DominicanadePatología en 1987 surge el Dr. Rafael Valdez Peña, quiense entrena de 1983 a 1987. El Dr. Valdez es patólogo delHospital Dr. Luis E. Aybar.De esta misma promoción surge el Dr. HipóJito Pimentel,entrenándose igualmente de 1983 a 1987. El Dr. Pimenteles patólogo del Hospital Dr. Moscoso Puello.De la misma promoción se gradúan las doctoras RaquelPauJino y Veneraida Peña, de quienes no pude obtenerinformación.De la 3ra. promoción de 1984 a 1988 surge el Dr.Silvestre Fernández, quien actualmente es pasante depostgrado de Patología MNSA. Es docente de Patología dela UCE.Igualmente deseo hacer mención de los doctores JulioCésar Duarte, Rosa Herminia González, Eufemio PérezRodríguez, Argelia Aybar Muñoz y Tomás Cordero Bello,quienes también fueron fruto de esta 3ra. promoción, dequienes no pude obtener mayor información.En resumen tenemos que los patólogos dominicanosfueron egresadosde los siguientes países:República Dominicana: 14 (2 formados en hospitalesy 12 de la Residencia)Estados Unidos: 13México: 8España: 7Colombia: 4Cuba: 3Puerto Rico: 1Venezuela: 1Francia: 1Total: 52 patólogos.A título informativo debo mencionar que forman partede estos profesionales de la Patología el Dr. MallolBurgos,odontólogo-patólogo, entrenado en la ciudad de México, yel Dr. Moquete, quien ejerce en San Pedro de Macorís,quien sufriera un severo accidente que lo mantiene completamenteincapacitado.PATOLOGOSDOMINICANOSQUE EJERCENEN EL EXTRANJ ERODe este grupo contamos con los siguientes patólogos:Ejerciendo en los Estados Unidos:Francisco ElmudesiPorcellaDr. Fidelio JiménezLuis JoudainLuis Alvarez BogaertFrancis López TaverasNilo HerreraBolívarAlbaine KhouryHernández Guante (E.P.D.)Ramón KranwinkelSoto PegueroVirgilioValdezMaría CastilloMaritza MeléndezRosa ArteroBorisAbreuFélix GermánBolívar KunhardtDr. CuelloDr. CeballosSergio Bencosme.De éstos hice ya mención del Dr. López Taveras. Trabajarondurante un tiempo variable en Santo Domingo losdoctores Hernández Guante, Rosa Artero y Boris Abreu.este último director del Instituto de Estudios BiomédicosUNPHU de 1979-1980. Debo hacer mención especial delDr. Sergio Bencosme, ilustre patólogo dominicano quienhizo toda su carrera médica en USA, siendo consideradouno de los pioneros de la microscopía electrónica en esepaís. Autor de un sinnúmero de trabajos científicos, fuenombrado Miembro Honorario de la Asociación Dominicanade Patólogos a finales de la década del 60. Despuésde muchos años de labor meritoria viene a radicarse ensu país natal, fundando el Instituto de Estudios BiomédicosUNPHU con su Departamento de MicroJcopía Electrónica,y Juego participa de la docencia en la UCAMAIMAenSantiago, donde reside actualmente. El Dr. Bencosme es

194 ACTA MEDICA DOMINICANA SEPTIEMBRE-OCTUBRE 1989uno de los patólogos dominicanos que másadquirió renombreen USA.Entre los patólogos dominicanos que ejercen en PuertoRico tenemos:MiguelGarrido Ruiz (E.P.D.)Dinorah TorresFidel FríasRosa HaiffeYocasta BrugalKalen Amézquita de TrujilloMarino SorvilleTeresa SterlingDr. SangEntre éstos ejercieron un tiempo en Santo Domingo losdoctores Miguel A. Garrido Ruiz y Dinorah Torres. Elprimero trabajó en sus inicios 4 mesescon el Dr. Ravensenla fundación del Departamento de Anatomía PatológicadelHospital Gautier, en 1953, partiendo luego a Puerto Ricodonde continuó su entrenamiento. Vuelve al país trabajandoen el Hospital Dr. Luis E. Aybar de 1963 a 1967, enel Hospital Padre Billini de 1967 a 1984. Fue docente dePatología en la UCE, trabajando para ese entonces en elHospital del Central Romana. Muere en Bayamón, PuertoRico.Finalmente, ejerciendo en Europa, el Dr. RicardoMartínez Cabruja, en el Hospital de la Cruz Roja en Madrid.ASOCIACION DOMINICANA DE PATOLOGOSEn el año de 1958 se reúnen en un sitio no precisadoen Santo Domingo los doctores Mario RaveloBarré,MiguelA. Logroño Batlle, Félix Díaz Martínez y Francis LópezTaveras, y deciden fundar esta agrupación, con la finalidadde tener intercambios científicos. Esta agrupación formadapor tan sólo 4 patólogos no podía subsistir sobre una basesólida; sin embargo, fue el nacimiento de nuestra actualsociedad.Posteriormente, a finales del año 1964, se reúnen enel local de la AMD, situado en la avenida Independenciafrente al parque de ese mismo nombre, los doctores MarioRavelo Barré, Miguel A. Logroño BatlJe, Rafael AlfauCambiaso, Félix Díaz Martínez, Mario E. RaveloMarchena,Pedro Jorge Blanco, José A. Martínez Muñiz y Michel G.Kourie Follé, y refundan, por decirlo así, la AsociaciónDominicana de Patólogos, fundamentándose unos estatutosen base a los estatutos vigentes de esa época de la AsociaciónMexicana de Patólogos, aportados por el Dr. AlfauCambiaso. Fue electo como primer presidente el Dr. MarioRavelo Barré por sus merecimientos y por ser el pionero dela especialidad en República Dominicana. Posteriormentees elegido 3 veces más. El que les habla, Dr. MichelKourieFollé. fue electo en 3 ocasiones, afiliando nuestra Asociacióna la AMDen 1979, en época de su segunda presidencia.Han sido presidentes de nuestra agrupación durante unperíodo los siguientespatólogos:Dr. MiguelA. Logroño BatlleDr. Guaroa E. Lora VicenteDr. Félix E. Díaz GonzálezDr. Vicente de Sanctis AlsinaDr. Leocadio Peña Díaz, actual presidente.MEDICINALEGAL:Esta importante rama de la Anatomía Patológica fuesin lugar a dudas, y durante largo tiempo, el némesis detodos los patólogos dominicanos, que en un 100 porcientono tenían entrenamiento en esa disciplina, particularmenteen Ja época comprendida entre los ~Itimos años de la erade TrujiJJo,hasta el advenimiento de los primeros especialistascon entrenamiento adecuado en esta rama de la Patología.Pese a que en 1882 Monseñor Meriño introduce en losestudios universitarios la enseñanza de Medicina Legal yToxicología, en el país no existían legistas debidamenteentrenados.Enseñaron Medicina Legal teórica a través del tiempoFernando DefiJJó,José Dolores Alfonseca, Arístides FiaJJoCabral, Fabio Mota, entre otros. Fungieron como médicosJegistasen generacionesanteriores, sin haberse especializadoen esta rama médica los doctores José Román, ArturoDamirón, Juan Santoní, César CampiJJoy Rafael Moquete,entre otros.Durante la era de TrujiJJo,época de cuchillo y horca,se obligaba a los patólogos a realizar necropsias médicoforensesen cadáveres de personas que habían sido asesinadasde un modo u otro por los esbirros de Trujillo, con lafinalidad de crear una imagende honestidad que encubrieraesos crímenes, pese al alegato de los patólogos, con todahonestidad y responsabilidad, de ser ignorantes en la materia,viéndose forzados a realizar esas investigaciones sinademás tener respaldo técnico adecuado y un buen laboratoriode toxicología. La mayoría de las veces no JJegabanaconclusiones definitivas y si lograban alcanzarlasse tergiversabanal gusto del régimen, pagando las consecuencias elpatólogo que había sido involucrado. El Dr. Ravelo Barréfue en varias oportunidades forzado a participar en estasautopsias y quizás por suerte, por su renombre, o por sugran habilidad, no tuvo contratiempos de importancia. Elperuano Dr. Ravens, desde el Hospital Dr. Salvador BGautier, también fue involucrado, y en la última necropsiade esa naturaleza realizada en 1957, al no querer incurriren falsedades, acosado por el régimen y por su seguridad,se vio precisado a salir rápidamente del país. Al Dr.

.11,No.5 REVISION HISTORICA DE LA ANATOMIA PATO LOGICA EN R.D., KOURIE RODRIGUEZ y COL.195Logroño Batlle lo obligaron a realizar la necropsia de TeófiloGuerrero del Rosario, periodista, entre muchas otras,quien había sido ahorcado por el temido servicio de inteligencia.Al rendir este patólogo un resultado ajustado a laverdad, las autoridades de ese entonces pidieron segmentosde vísceras, las cuales fueron llevadasal Laboratorio Nacional,donde se encontró estricnina, la cual obviamente habíasido sobreañadida a las vísceras para poder establecer queel citado periodista se había suicidado con esa substanciatóxica. A continuación el Dr. Logroño fue cancelado de sucargo en el Hospital Gautier en fecha 22 de marzo de 1959,pudiendo regresar a su puesto dos años después, ya muertoTrujillo, por gestiones realizadas por los doctores José H.Ornes y Nicolás Pichardo, atendiendo a sugerencias mías.El Dr. López Taveras y yo mismo, cuando iniciaba misentrenamientos de Anatomía Patológica, también estuvimosinvolucrados, sufriendo interrogatorios y desconsideraciones,aunque saliendo ilesos con mucha suerte. Prácticamentetodos los patólogos que ejercieron en esta época tuvieronestas dificultades con las autopsias médico-legales.Resulta de interés señalar que durante la Era de Trujillollegó a este país un médico español llamado Rafael Criado,"todólogo", que ejerció como patólogo, quienes algunosalegan que era utilizado por Trujillo para certificar comomuerte natural los asesinatos políticos que se cometíanen esa época. Posteriormente parte a Puerto Rico, dondede una manera turbia consigue la reválida y ser nombradocomo forense. El Departamento de Justicia de ese paíslo investigó por haber salido a relucir su falta de preparaciónen la materia y su posible actitud dolosa en casosimportantes de asesinatos, de acuerdo a publicación aparecidael 15 de marzo de 1987 en el periódico puertorriqueñoEl Mundo, en su complemento dominical. Igualmente enesas investigacionesse vinculaba a MarinoSorville,de nacionalidaddominicana.Despuésde ajusticiado Trujillo, continuaron las presionespara la ejecución de autopsias médico-Iegales,sufriendolos patólogos muchos inconvenientes, pero obviamente sinel peligro que existía en la Era de Trujillo.Para el año de 1962, la Asociación Dominicana dePatólogos publica en la prensa un documento muy responsabledonde emplazaba públicamente a las autoridadesgubernamentales de turno a crear un instituto forense,que se encargara de investigar todas las muertes sospechosas,y no solamente las de carácter político. Para facilitarla creación del instituto brindaba su asesoramiento paracontratar varios médicos legistas extranjeros, preferentementede habla española, para que vinieran al país a resolverlos problemas médico-legales durante un tiempo prudente,al tiempo de crearse una residencia con la finalidad depreparar verdaderos médicos forenses dominicanos. Almismo tiempo se sugería becar un número apreciable demédicos dominicanos, recién graduados, con buen curriculumvitae, para que fueran a prepararse debidamente enel extranjero. De haber sido acogida nuestras sugerenciasen ese entonces, en 6 o 7 años hubiéramos resuelto elproblema y se hubieran sentado las bases para el ejercicio deuna medicina forense correcta evitándose todos los problemasque fueron surgiendo a través de los años venideros.Sin embargo aramos en el desierto, y ninguna de las autori.dades gubernamentales que se fueron sucediendo a travésde los años se hicieron eco de nuestras sugerencias, pesea las reiteradas publicaciones que hicimos constantementeen ese sentido por más de 26 años, cuyas copias aúnreposan en los archivos de nuestra agrupación.Sólo cuando se cometían crímenes políticos o cuandosurgían calamidades nacionales como lo fueron los numerososcampesinos muertos hace unos años por el uso de uninsecticida llamado Parathion, entonces se elevaba el clamorpúblico en pro de las soluciones médico-legales correctas ynuevamente los patólogos éramos objeto de escarnio ycríticas, al ti/damos de irresponsables al no querer hacereste tipo de experticios, ignorando completamente que losentrenamientos realizados por nosotros se apartabandiametralmente de esta disciplina.Así las cosas continuaron hasta el arribo al país de doshermanos médicos, los doctores Diloné, quienes habíanrealizado un corto entrenamiento de Patología Forenseen México. Dichos médicos trataron infructuosamente dedesarrollar la medicina legal en el país, y a pesar de haberrealizado un trabajo aceptable, fueron objetos de presionesy desconsideraciones, por lo que desencantados optaronpor marcharse hacia Puerto Rico, al no resistir el medioambiente.Años después arriba al país el Dr. Bolívar.García, dequien ya hemos hablado, quien había realizado entrenamientode Anatomía Patológica y Medicina Forense delMedellín, Colombia. Esta feliz oportunidad tampocofue aprovechada a xu máximo.Finalmente la participación de los doctores Sarita,Salomón y Brugal en Medicina Forense se convierte en eldetonante para estimular a las autoridades a realizar elInstituto de Medicina Legal, hoy ya un logro, dirigido porel Dr. Cornielle, que sintetiza todas nuestras esperanzasaletargadas por más de un cuarto de siglo.No deseo concluir estas revisiones históricas, ahorapatrimonio de todos los patólogos jóvenes que se estánintegrando a la práctica de la Anatomía Patológica enRepública Dominicana, para exhortarlos a emular las actuacionespositivas que aportaron los patólogos que los precedieroncronológicamente en el tiempo, para que en ellos seforme una conciencia profesional enmarcada en el respeto,la capacitación y la honestidad, en beneficio de una patriamejor en el día de mañana.

196 ACTA MEDICA DOMINICANA SEPTIEMBRE-OCTUBRE 1989BIBLIOGRAFIACONSULTADAHistoria de la Medicina. Dr. Rafael Miranda. 1960.Apuntes para la Historia de la Medicina de la Isla de Santo Domingo.Dr. F.E. Moscoso Puello. Publicados por la UCE en San Pedrode Macorís (6 tomos). 1983.Acta Médica Dominicana. Vol.l O, No. 1. Enero-febrero 1988.Periódico El Mundo, de Puerto Rico. Complemento dominical. 15de marzo de 1987.SECCION EXTRA-MEDAMERICAPRECOLOMBINADr. Pablo lñiguezNo es posible conocer con certeza los orígenes de lasgrandes civilizaciones que crecieron a este lado del Atlánticomucho antes del Descubnmiento.Cada día es más sorprendente lo que aprendemosacerca de los Incas, los Mayas y las civilizaciones preaztecasy a la vez se hace más penoso reconocer lo muchoque ignoramos al respecto. Todas esas culturas merecenextensos capítulos.La extraordinaria organización del imperio de los Incassin disponer de un idioma escrito; la formidable estructurapiramidal de su sistema político y socioeconómico quedesearían imitar muchos gobiernos totalitarios de nuestrosdías; su agricultura que enriqueció y transformó loshábitos alimenticios de la humanidad hasta nuestros días(para respaldar esta afirmación bastaría con mencionarel consumo actual de las papas); la importancia. de laquina y susderivados en la farmacopea, son sólo fragmentosde sus grandes contribuciones a la actual civilización occidental.La medicina pre-colombina tenía características propiasen las diferentes regiones de América, pero su aspectoempírico-mágico y religioso constituía un denominador~sarioseñalar la riqueza extraordinaria denuestra flora d~unda!1 especímenes cuyos efectosestímu'antd, alucinatorios, hipnóticos, calmantes, etc.,ofrecían grandes posibilidades para la preparación nosólo de remedios sino de brevajes tóxicos. Todo eso erabien conocido por los nativos que practicaban el arte decurar y al mismo tiempo la magia y el ocultismo. En algunoslugares, esos personajes reciben todavía el nombre de"shamanes".Junto al uso científico de los alcaloides medicinalesextraídos de diferentes especies botánicas, la utilizaciónde la cocaína junto a otras substanciasestimulantes y alucinógenasha llegado a nuestros días con las consecuenciaslamentables que todos conocemos.La capacidad de los médicos de la América pre-colombinay la eficacia de sus remedios, se hace evidente cuandoen una ocasión el mismo Hernán Cortés se opone al envíode médicos españoles a México, porque "la destreza y losconocimientos de los médicos aztecas los hacía innecesarios."Desde el punto de vista científico y filosófico, nopueden pasar desapercibidos los conocimientos alcanzadospor los mayas en aritmética, geometría y astronomía, nila .rganización de conceptos religiosos y cosmogónicosque aparecen en el "Chilam Balam" y "Popol Vuh".Por su parte, la riqueza de la civilización azteca es elmejor exponente de los altos logros culturales precolombinos.