12.07.2015 Views

la-revolucion-de-los-cuidados

la-revolucion-de-los-cuidados

la-revolucion-de-los-cuidados

SHOW MORE
SHOW LESS
  • No tags were found...

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

Llevaba tantos años estudiando con Grace que no me organizabani con mi madre, ni con mi padre, ni conmigo. Y <strong>los</strong>lunes, si acaso nos daba tiempo <strong>de</strong> algo... Y <strong>los</strong> viernes eranviernes...—Vamos, acaba <strong>de</strong> estudiar hoy y el domingo das un repasito.—Pero Grace, no voy a hacer dos veces <strong>la</strong>s mismas cosas...—repetía yo con lógica ap<strong>la</strong>stante.—C<strong>la</strong>ro que sí, ¿por qué no?—Vale, y luego jugamos al tres en raya.—Mejor al parchís —contestaba casi siempre Grace paraquien el parchís era pan comido.—Pero <strong>de</strong>spués tenemos que salir —<strong>de</strong>cía yo <strong>de</strong>seando quellegara el momento <strong>de</strong>l paseo.Y es que <strong>los</strong> viernes yoacompañaba a Grace al locutorio,a l<strong>la</strong>mar a sus hijas Fanyy Margolit.El<strong>la</strong>s esperaban <strong>la</strong> l<strong>la</strong>mada<strong>de</strong> su madre. Le contaban quétal <strong>la</strong> semana, que básicamenteera qué tal el colegio. Estabac<strong>la</strong>ro que, para Grace, esteera un asunto <strong>de</strong> máxima importancia.48

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!