Priego de Córdoba - periodicoadarve.com

Mujerescoartadas delibertadR.A.M.Existe un porcentaje importante de mujeresque no padecen malos tratos físicos, pero sípsicológicos, que son muy difíciles de demostrar.Este tipo de malos tratos tiene muchasvariantes, una de las que creo másimportante es la falta de libertad en su propiacasa . Carecen de ella incluso para poderbuscar trabajo, porque sus represores no selo permiten. Tampoco disponen del suficientedinero para poder solucionar los problemaseconómicos de su casa. Este tipo dehombres se lo dan con cuentagotas y leexigen que no falte de nada, sobre todo loque ellos necesitan.Mientras que ellas con una peseta hacenfiligranas, ell os, a vivir a tope que son dosdías, y con dinero para todo lo que se lespresente (juergas, caprichos, etc.), gastándoseel dinero que a su familia les hace faltapara poder cubrir las primeras necesidadesde «los hijos e hijas que tanto quieren».Estos individuos suelen ir de «chulitos»por la vida, y además, no solo engañan a suscompañeras, sino a todas las mujeres que seencuentran en su camino. Estos tipos noquieren a nadie, só lo se quieren a ellos.Mientras tanto, su «esclava» en su casa,po rqu e si tenían pocos defectos, tambiénson celosos. Cree el ladrón que todos son desu condición.Mi experiencia como persona vinculadaen mi actividad profesional a las mujeres,me ha hecho conocer a muchas mujeres queviven este ca lvario y que les cuesta muchosa lir de las «garras» de estos personajespues con sus amenazas dejan a sus víctimassin capacidad para poder reaccionar, por loque suelen vivir en cautividad toda su vida.Ellas se sienten cu lpables y creen que a sushijos e hijas los van a perjudicar si rompen la«fami li a». Algotambién im portante en algunoscasos es el rechazo de la propia familiay de la sociedad, pues mucha gente les dice«no son malos pues no te pegan y ademásquieren mucho a tus hijos». Ellos se encargande que los defuera piensen lo que a ellosles interesa.La libertad está ausente en estas mujeres,en un país donde el resto de los ciudadanosvivimos disfrutando de la libertad. Posiblementeestos carce leros, en las barras de losbares defiendan la libertad, cuando ellosmantienen encerradas a sus propias compañeras.Por estas y otras injusticias que algunoshombres están cometiendo, debemos mostrarnuestro rechazo ante este tipo de individuosy apoyar a estas mujeres tan necesitadasde ayuda, para que puedan salir de esasituación.Los medios de comunicación son un vehículomuy importante para co ncie nciar a lasociedad, y deben seguir denunciando permanentementeestas situaciones.Por muchos programas y leyes que sehagan desde los distintos gobiernos, no serásuficiente sin la concienciación ciudadana.10Predicciones para el año 2000PABLO G6MEZ ARTELLCuando llegue el 2000 -está a la vueltade la esquina- un año más se nos habráido de las manos, lector amable. Elanterior - por estas fechas- usted y yotambién teníamos un año menos. Ahora-sin apenas darnos cuenta- sumamosuno más en nuestro haber. Pasa laniñez, la adolescencia, la juventud ... ycuando llegas a la madurez ocurre conlos años como con la riqueza de algunossujetos; que se acumulan con laavaricia propia del ávaro ...Estamos -como se sabe- a punto definalizar el segundo milenio. En brevesfechas todos los calendariosgregorianos o perpétuos (salvo el lunar,de los mahometanos), comenzarána desgranar ese misterioso rosariode 365 cuentas que conforman el añoastronómico (tiempo que transcurreentre dos pasos consecutivos de la tierrapor el mismo punto de la órbitaalrededor del Sol; o sea, 365 días, seishoras, trece minutos y cincuenta y seissegundos). Y lo haremos -sin dudaconla misma rutina de aquellos otrosque le precedieron si no fuera por laparticularidad que ofrece de cerrar unnuevo milenio, cuando él termine.Es triste a no poder más - se diga loque se diga- cumplir años, sobretodo aciertas alturas de la vida, cuando setienen muchos acumulados y la naturalezaestá agotada y sin fuerzas ...«Cada Año Nuevo que pasa / llega aherirnos a los dos/; que blanquear tuscabe ll os/ me ennegrece el corazón».Así se expresaba un venerable ancianodirigiéndose a su amada esposa que,durante cincuenta años, había sido sufiel, inseparable y abnegada co mpañera,mientras se calentaban al fuego sagradode una rústica chimenea, la nochehelada de fin de año. Y es que eltiempo que mata, nunca muere yseguirápor siempre - llegada la hora- dandoa los hombres su «palmadita» particularen el hombro.Sí, cada vez que un año muere nosentristece el espíritu, fustigado, tal vez,por la quemazón que supone la intranquilidadde la conciencia, si nos tomamosla molestia de hacer nuestro examenparticulare íntimo. Decimos: «AñoNuevo, vida nueva» . Es el momento dearreglar conciencias, corregir errores,del borrón y cuenta nueva, de los buenospropósitos ... Pero, iay!, sabemosque eso no será así, que los buenospropósitos no son más que un tópico,un refugio en el que el hombre se guarececua l puerto seguro de su falsedad.Aquí pudiera encajar, perfectamente elcontenido satírico de la letri lla de aquella copla que dice: «Te vaya decir en uncantar / La rueda de la existencia /:Pecar, hacer penitencia / y luego vueltaa empezar».Pasan las horas, los días,los meses ylos años y sólo nos queda la memoria.Pero la memoria no es una virtud, sinoun don gratuito de Dios ... «E l tiempocuando pasa - deja de serlo- y se convierteen co nfuso recuerdo ... »- decía elpoeta inspirado y profundo.¿ Qué nos deparará el año 20007 Nadielo sabe y lo que es yo no me vayadevanar los sesos por averiguarlo. Demomento ya se han hecho mil predicciones.No faltan agoreros, aguafiestas,que, hoy más que nunca, pululan porahí. No sé cómo llamarles; si brujos,magos, adivinos, astrólogos de pacotilla,oscurantistas, quiromantes, y unlargo etcétera de cara duras e impostores.A algunos los hemos visto en algunacadena de televisión ataviados conlargas túnicas doradas y un sin fin deco lgantes, amuletos y plumas que, rían ­se ustedes del más ancestral hechicerode la selva amazónica. Predicen para el2000 una barbaridad de calamidades:Guerras fraticidas, epidemias sin cuento,sequías prolongadas, subida notabledel nivel del mar, con anegacionesdebastadoras, entrada en erupción denuevos volcanes - hoy apagados- yotros cataclismos geológicos y, cómono, el fin del mundo con la aniquilacióndel hombre sobre el planeta que habitamos.Usted no se asuste, no contenga larespiración ni entre en desánimo. Elmundo se acaba cada día en aquel quemuere, y vivir- como dijo el fi lósofo- es«morir un poco cada día», y dejémonosde «pamplinas». Ahora bien -esto esterápia que a todos nos conviene- elprocurar no morirse de aburrimiento.Aprendamos de aquella empresa Norteamericanadedicada a los negociosrelacionados con el ocio que, para atraerclientela -sabedores de que el resultadode la venta está en el acierto de unaeficaz propaganda- adoptó este Slogan:«Abúrrase Usted, y será enterradorápidamente» . La verdad es que ll evabantoda la razón del mundo, iqué caramba!No desaprovechemos la ocasión. Apartir de mañana mismo, de jarana y accjuerguean) que te crió. i ¡A vivir, queson dos días!! .. . O quizás menos.ADARVE / N° 565-566 - 15 de Diciembre 1999 - I de Enero 2000