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Autobiografía de Duelos.
1.- La pérdida de mi perro: tenía un perrito al cual no lo dejábamos salir a la calle casi nunca, un
día dejamos la puerta abierta y el salió corriendo hacia la avenida de mi fraccionamiento, yo lo
seguí y lo regrese a mi casa, al día siguiente paso lo mismo y lo deje que se fuera y unos 10
minutos después fui a buscarlo pero no lo encontré por ninguna parte, de regreso a mi casa vi a un
perrito en un rincón de una casa y me acerque a él, resulto ser mi perro pero estaba mal, lo
levante y no podía mover sus patas traseras, lo lleve a mi casa y en el camino una señora me dijo
que si era mi perro, yo respondí que sí y ella me comento que una persona lo había atropellado
unos minutos atrás pero solo lo aplasto de la parte trasera y ella lo puso en ese rincón de la casa,
le di las gracias y lo lleve a mi casa, después de saber eso sentí coraje por la persona que lo
atropello y a la ves tristeza por mi perro, lo lleve al veterinario y me dijo que tenía deshecha su
columna, me comento que el perro estaba muy mal y estaba sufriendo demasiado, que lo mejor
que podía hacer era dormirlo o esperar al día siguiente y llevarlo a otro lugar para que lo operaran,
pero que no era seguro que el perro sobreviviera, entonces yo preferí salir del cuarto y mi mama
decidió dormirlo, al día siguiente desperté muy desanimado ya que ese perro era muy juguetón y
cada mañana me despertaba, mi duelo duro aproximadamente un mes, debido a que yo quise
demasiado a ese perro de nombre “Tritón”.