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INTRODUCCIÓN Así sucedió todo

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<strong>INTRODUCCIÓN</strong><br />

<strong>Así</strong> <strong>sucedió</strong> <strong>todo</strong><br />

¿Cómo empezó este proyecto?<br />

Con una idea y mucha emoción.<br />

Esa idea es la que impregna <strong>todo</strong><br />

lo que hacemos en piggo: Mejorar<br />

la vida financiera de las personas.<br />

Pero esta vez queríamos hacer algo<br />

tan único como cada una de las<br />

personas que usan piggo, como tú<br />

que nos estás leyendo ahora, como<br />

los que nos escriben y los que nos<br />

cuentan sus historias.<br />

Entonces se nos ocurrió: ¡Qué tal si<br />

hacemos un libro de Yoga y finanzas<br />

personales! Al mencionarlo, <strong>todo</strong><br />

tomó sentido.<br />

Y quiénes mejor que Sonia Sánchez-<br />

Escuer y Alejandro Maldonado para<br />

contarte esta increíble historia.<br />

Hoy te compartimos el resultado<br />

de meses de trabajo, miles de<br />

mensajes, diversión y pasión, los<br />

cuales están contenidos en este<br />

ebook en el que se reúnen dos<br />

mundos que parecen muy lejanos<br />

pero que al juntarlos nos pueden<br />

enseñar mucho.


Tener una relación sana con tu<br />

dinero, así como practicar Yoga:<br />

transforman tu vida.<br />

Yoga Financiero es entenderse<br />

a uno mismo y aplicar <strong>todo</strong> este<br />

conocimiento en el uso del dinero,<br />

porque <strong>todo</strong> ese saber te ayuda<br />

a encontrar el balance que tanto<br />

necesitamos entre la vida y la lana.<br />

YOGA<br />

FINANCIERO<br />

Una de las frases que Alejandro<br />

nos repite <strong>todo</strong> el tiempo es: “¡Fíjate<br />

cómo reaccionas y verás de qué<br />

careces!”.<br />

Nos podemos quejar infinidad de<br />

veces de las cosas que nos hacen<br />

falta, pero eso es sólo un reflejo de<br />

la decisiones que no nos atrevemos<br />

a tomar por miedo; porque nosotros<br />

ponemos las barreras o porque<br />

pensamos que no es para <strong>todo</strong>s.<br />

Para bien o para mal, <strong>todo</strong> lo que<br />

somos: nuestra mente, nuestras<br />

emociones, nuestro cuerpo, nuestra<br />

cartera, nuestros gastos, nuestras<br />

deudas… afectan inevitablemente<br />

cada una de las decisiones que<br />

tomaremos ahora y mañana.<br />

Quizá esta relación no parece tan<br />

clara a simple vista, pero si miramos<br />

con más atención encontraremos<br />

algo verdaderamente sorprendente:<br />

¡Qué <strong>todo</strong> lo que somos está<br />

conectado!


Lo que hacemos, lo que no hacemos,<br />

lo que posponemos, las ideas que nos<br />

atrapan y las que nos liberan.<br />

Y más que nada, las cosas que tenemos<br />

que hacer y preferimos posponer.<br />

Aunque <strong>todo</strong> está conectado, lamentablemente<br />

andamos por la vida:<br />

• Muy desconectados<br />

• Desintegrados<br />

• Sin equilibrio en nuestros días, pensando<br />

que <strong>todo</strong> es trabajo, trabajo y<br />

más trabajo<br />

• Gastando <strong>todo</strong> y luego volviendo a<br />

gastar un poco más<br />

Es por eso que integrar ideas de Yoga<br />

a nuestra vida financiera toma <strong>todo</strong><br />

el sentido.<br />

Nos enseña que la flexibilidad y la<br />

fuerza se complementan; que la acción<br />

y la relajación son un gran equipo. Y si<br />

no tienes ambos no avanzarás mucho.<br />

La cosa no termina ahí. Te ayuda a<br />

confrontar tus emociones y a entenderlas<br />

para tomar mejores decisiones,<br />

no sólo de dinero también en<br />

la vida.<br />

Te permite descubrir las fortalezas<br />

que no sabías que tenías y hasta vencer<br />

aquellos bloqueos que te detienen<br />

para lograr cosas extraordinarias.<br />

¡Sí, <strong>todo</strong> está conectado! Y por eso,<br />

es momento de sanar la conexión entre<br />

nuestra mente, nuestro cuerpo y<br />

nuestra cartera.


PRIMERA PARTE<br />

SIETE CONCEPTOS<br />

QUE CAMBIARÁN<br />

TU VIDA Y LA<br />

FORMA EN QUE VES<br />

EL DINERO<br />

Primer concepto:<br />

Estamos acostumbrados<br />

a descuidarnos<br />

¿Por qué estamos acostumbrados a<br />

descuidarnos? ¿Por qué preferimos<br />

posponer nuestro ahorro para mañana?<br />

¿Por qué compramos hoy y pagamos<br />

después, aunque nos salga<br />

más caro? o ¿Por qué nuestras finanzas<br />

nos preocupan hasta que son un<br />

problema?<br />

¡Porque es más fácil!<br />

El ser humano está diseñado para seguir<br />

el camino de la menor resistencia.<br />

Pero esto no es el único factor. La<br />

cantidad de compromisos sociales,<br />

nuestra adictiva relación con los teléfonos,<br />

nuestros amigos y responsabilidades<br />

cada vez más grandes, juegan<br />

también un papel decisivo para que<br />

NUNCA encontremos tiempo de leer<br />

sobre finanzas o hacer esa rutina de<br />

Yoga de 15 minutos que leímos en alguna<br />

revista.<br />

Esto no significa que los seres humanos<br />

seamos unos flojos sin remedio<br />

o que simplemente se nos vaya el<br />

avión de tantas cosas qué hacer.


Sí, es cierto, nuestro primer impulso<br />

es quedarnos en el sofá antes que<br />

saltar al tapete de yoga o posponer<br />

indefinidamente cosas tan importantes<br />

como hacer un presupuesto o<br />

depositar en tu piggo.<br />

No hacer nada es más sencillo que<br />

hacer algo, lo sabemos más allá de<br />

la cuenta. Pese a <strong>todo</strong>, cuidar nuestra<br />

salud, nuestro cuerpo, nuestras<br />

finanzas, nuestras relaciones, requiere<br />

acción e instinto.<br />

El mejor momento<br />

que nunca llega<br />

Seguro te ha pasado que… Llenas<br />

tu agenda con lo urgente y siempre<br />

postergas lo importante para “un<br />

mejor momento”, el cual, 99% de<br />

las veces, no llega.<br />

Una de las ideas básicas en Yoga es<br />

que el mejor momento para lo que<br />

realmente importa es AHORA.<br />

Seguro ya lo has oído antes, pero<br />

¿Qué te ha detenido para aplicarlo?<br />

¿El “mejor lo hago mañana”? ¿Tu ritmo<br />

de vida? o quizá ambos.<br />

Nuestra naturaleza de buscar siempre<br />

el menor esfuerzo y el estar<br />

siempre “ocupados” se mezclan en<br />

un círculo vicioso, del cual -a vecesno<br />

podemos escapar.<br />

Aunque siempre hay salidas.<br />

Primero que nada, tienes que darte<br />

cuenta que tu cuerpo y tu mente<br />

siempre lucharán por la inacción.<br />

El secreto es saber qué es lo que<br />

quieres lograr, es decir, plantear una<br />

meta de ahorro, de vida, de compra,<br />

de viaje, de carrera, etcétera.


A ese principio hay que agregarle<br />

un “¿Para qué?”. Esta simple pregunta<br />

-que sólo tú puedes contestar- al<br />

final hará toda la diferencia porque<br />

te dará un poderoso motivador para<br />

realizar algo.<br />

“Si ya tienes un ‘para qué’<br />

¡Sólo hazlo! ¡No lo pienses!”<br />

Tu primer gran paso lo darás, cuando<br />

te convenzas de <strong>todo</strong> lo bueno<br />

que esta decisión traerá para para<br />

ti.<br />

El segundo paso es más sencillo,<br />

sólo necesitas arrancar ¡El chiste es<br />

empezar y romper la inercia!:<br />

• Guarda 10 pesos a diario en un<br />

frasco durante <strong>todo</strong> un año<br />

• Lee 5 páginas de un libro<br />

• Descarga una aplicación<br />

de ahorro<br />

• Termina una página de tu tesis,<br />

novela, cómic o libro de Yoga<br />

• Mira una clase del curso en línea<br />

que siempre pospones<br />

Es más fácil convencer a tu mente<br />

con estos pequeños, pero fructíferos<br />

esfuerzos, que intentando hacer<br />

<strong>todo</strong> de golpe, así que hazlo no<br />

matter what.<br />

“Hazlo no matter what”<br />

Pronto notarás que estos pequeños<br />

avances te llevarán “sin mucho esfuerzo”<br />

a completar acciones que te<br />

darán salud, bienestar y abundancia,<br />

porque sin salud y sin dinero no<br />

llegas a ninguna parte.<br />

“Sin salud y sin dinero no<br />

llegas a ninguna parte”


Segundo concepto:<br />

Prisioneros de nuestras<br />

propias limitaciones<br />

¿Qué es lo que nos limita? ¡Nosotros<br />

mismos! No hay de otra. Aunque nos<br />

duela.<br />

Empezando por esas ideas que <strong>todo</strong>s<br />

dicen y que aceptamos como verdades,<br />

las cuales de pronto se meten<br />

en nuestra cabeza para levantar barrotes<br />

que son difíciles de romper.<br />

Concepciones como: “No se puede<br />

ahorrar”, “Mejor me lo gasto hoy”,<br />

“Hay que vivir, no te esfuerces más<br />

de la cuenta” o “Compra hoy y paga<br />

mañana” se arraigan tanto que pensamos<br />

que jamás podremos cambiar<br />

nada.<br />

“Deja de fijarte en lo que<br />

hace la vecina”<br />

Al mirar y preocuparte por lo que hacen<br />

los demás, inconscientemente estás repitiendo<br />

un patrón de comportamiento:<br />

Si ellos compran un auto, tú también; si<br />

ellos usan una tarjeta de crédito dorada<br />

hasta límites inimaginables, tú también…<br />

¿Realmente necesitas eso?<br />

La verdad es que no tienes que hacerlo.<br />

<strong>Así</strong> que “deja de fijarte en lo que hace<br />

la vecina” y preocúpate por resolver tu<br />

situación actual, encontrar el balance y<br />

sentirte bien con tu vida y tu dinero.<br />

Aprender a escucharse es una herramienta<br />

de cambio y de control para<br />

nuestras finanzas que no estamos acostumbrados<br />

a usar.<br />

Cada uno de nosotros tenemos el potencial<br />

para resolver nuestros problemas.<br />

Si no ahorras, hazlo; si tienes deudas,<br />

resuélvelas; si no sabes cómo, aprende.<br />

Las finanzas personales sanas rompen<br />

con las autolimitaciones. Te hacen sentir<br />

poderoso. Sentir que tienes el control<br />

sobre tu dinero y no viceversa. Que<br />

vas hacia alguna parte y que no eres<br />

una vela en el Atlántico. Que el dinero<br />

no es el fin, sino el medio para hacer lo<br />

que se te antoje.<br />

<strong>Así</strong> que haz una pausa y ten esa plática<br />

con tu cartera.<br />

“El dinero no es el fin,<br />

sino el medio para hacer<br />

lo que se te antoje”


Tercer concepto: El alto costo<br />

de la prisa<br />

Yoga nos enseña una importante lección:<br />

Si te exiges más de la cuenta, si no tienes<br />

paciencia, si no te escuchas, acabas sufriendo.<br />

Y no sólo eso, también nos enseña que<br />

<strong>todo</strong> lleva un proceso y un tiempo que<br />

al final te entrega un interés compuesto<br />

para la vida.<br />

Esta idea es vital para nuestras finanzas<br />

porque la naturaleza desesperada con la<br />

que vivimos nos hace desear resultados<br />

rápidos que sólo nos alejan de conseguir<br />

una relación sana con nuestro dinero.<br />

“La prisa es un signo de que la<br />

situación te está controlando y<br />

no al revés”<br />

Poco a poco es el mejor camino. Recuerda<br />

que la prisa está en tu cabeza.<br />

La prisa es generada por expectativas<br />

que nos inventamos. El problema es que<br />

son expectativas que nada tienen que ver<br />

con la realidad.<br />

La prisa es un signo de que la situación te<br />

está controlando y no al revés.<br />

O ¿Por qué sales corriendo <strong>todo</strong>s los días<br />

de tu casa haciéndole parada al primer<br />

taxi que pase?<br />

“Todo lleva un proceso y un<br />

tiempo que al final te entrega un<br />

interés compuesto para la vida”<br />

O ¿Por qué te truenas los dedos rogando<br />

que caiga la quincena para pagar el mínimo<br />

de la tarjeta?<br />

Estamos acostumbrados a preferir las recompensas<br />

inmediatas, tanto que la emoción<br />

nos gana y posponemos metas mayores<br />

y con mejores beneficios para<br />

nosotros.<br />

Al empezar a ahorrar vivimos esto. Y es que<br />

perdemos de vista que la meta no es acumular<br />

dinero sino alcanzar una FUERTE<br />

libertad financiera.<br />

<strong>Así</strong> que haz una pausa y pregúntate:<br />

¿Por qué tienes tanta prisa?<br />

¿Qué pasaría si le bajas tantito?<br />

¿Qué pasaría si disfrutas un poco más?<br />

¿Qué pasaría si te tomas un poquito más<br />

de tiempo?<br />

Analiza tus respuestas. Respira. Haz conexión<br />

con tus ‘para qués’. Descubre las causas<br />

y ¡transfórmalas en razones para persistir!


Cuarto concepto:<br />

El valor del largo plazo<br />

Sonia nos cuenta esta historia, mientras<br />

se pierde unos segundos mirando por la<br />

ventana:<br />

Estaba en la fila para sacar mi pasaporte.<br />

En dos días viajaría a otro continente<br />

para mi luna de miel.<br />

Adelante de mí se encontraba un señor<br />

que me hizo plática. Se sorprendió de la<br />

premura con la que estaba haciendo mi<br />

trámite.<br />

“Es un viaje largo e importante” me dijo.<br />

Confieso que yo misma estaba sorprendida<br />

por haberlo dejado casi hasta el final…<br />

De pronto, nos enfrascamos en una conversación<br />

sobre el matrimonio, el largo<br />

plazo y la idea de no divorciarse pronto.<br />

Todavía me arrepiento de no haberle pedido<br />

su nombre porque me dio uno de los<br />

mejores consejos que he recibido:<br />

“No puedes pretender<br />

embarcarte en un proyecto<br />

valioso por solo unos días. Los<br />

resultados extraordinarios no se<br />

obtienen en una semana”<br />

¡Cuánta verdad! Pero nos gustan las cosas<br />

de “hoy para hoy” y nos embriagan los<br />

resultados instantáneos.<br />

¿A poco no?… Ahorramos unas semanas<br />

y ya queremos rendimientos o tener el<br />

hábito o peor aún… ¡Gastarlo!<br />

El dinero lo necesitaremos siempre, así<br />

que más vale establecer un plan que<br />

abarque desde un mes hasta muchos<br />

años. Ahí la “gran barrera”.<br />

¿Cómo desarrollar una visión de largo<br />

plazo?<br />

1. Lo primero es reconocer que el viaje<br />

en el que estamos es para muchos días.<br />

No es una escapada de fin de semana.<br />

2. Ten claras algunas metas del camino<br />

y define los pasos para llegar a ellas.<br />

3. Concéntrate en el camino y no en la<br />

meta. Eso hacen los grandes atletas, los<br />

millonarios, los empresarios exitosos y las<br />

personas que realizan grandes hazañas.<br />

No pierdas de vista que las pequeñas acciones<br />

que tomamos <strong>todo</strong>s los días son las que<br />

determinan nuestro éxito y nuestra relación<br />

con él.<br />

“El dinero lo<br />

necesitaremos siempre,<br />

así que más nos vale<br />

establecer un plan que<br />

abarque desde un mes<br />

hasta muchos años”


Quinto concepto: Nuestras emociones<br />

son nuestro reflejo<br />

Nuestro corazón le gana a la mente y al raciocinio, por lo menos<br />

muchas más veces de las que estamos dispuestos a aceptar.<br />

En las finanzas personales sólo el 20% de nuestras decisiones<br />

están basadas en números. ¿El otro 80%? ¡Son emociones!<br />

Las emociones determinan nuestras acciones ¿No me crees?<br />

Revisa tus estados de cuenta, tu clóset, tu casa…<br />

Si hay más zapatos, viajes y compras que ahorros e inversiones,<br />

no tendrás duda de lo que te digo.<br />

Esto no es malo, aunque se nos ha enseñado que las emociones<br />

son “las brujas del cuento”. Somos seres emocionales, es natural<br />

y no podemos dejar de serlo, pero al tener control sobre<br />

nuestras emociones, las decisiones que tomemos empezarán a<br />

dejar más beneficios que remordimientos.<br />

“Todo lo que hagamos va a tener un resultado y<br />

hay que estar conscientes de si nos va a gustar o<br />

no”<br />

Porque si hay algo cierto, es que <strong>todo</strong> lo que hagamos va a<br />

tener un resultado y hay que estar conscientes de si nos va a<br />

gustar o no.<br />

Para tomar control, necesitamos estar conscientes de ellas.<br />

Verlas y reconocerlas. Necesitamos aprender a identificarlas<br />

antes de que, disfrazadas de razón, nos hagan cometer locuras<br />

como comprar esa televisión gigante a crédito, porque ya<br />

viene El Mundial; o esa bolsa verde limón que no combina con<br />

nada, únicamente porque “te hace falta” ese color.


El problema es que una vez que nos asalta una emoción,<br />

nuestra mente inmediatamente empieza a construir una<br />

lista interminable de justificaciones “perfectas”.<br />

Por ejemplo, si sientes el deseo imperioso de comprar el<br />

celular más nuevo, aunque apenas lleves unos meses con<br />

el tuyo, tu lista será algo como:<br />

• “El celular que tengo no es el más nuevo”<br />

• “Voy a ser el primero en tenerlo en toda… la cuadra”<br />

• “No es tan smart como el de mis amigos”<br />

• “Le faltan más emojis”<br />

• “Seré la envidia de la oficina”<br />

No es nada raro que nos inventemos toda esta serie de<br />

patrañas para estar convencidísimos de que es una extraordinaria<br />

decisión y terminar comprándolo a 54 meses<br />

con o sin intereses, ahí cada quien sabe.<br />

La razón principal por la que escondemos, o hacemos<br />

menos las emociones, es el miedo a saber por qué las<br />

estás experimentando. Claro, porque es una confrontación<br />

contigo mismo. Pero ignorarlas no va a hacer que<br />

se vayan.<br />

La mejor manera para que las emociones no te metan la<br />

arrastrada de tu vida es “tomándolas por los cuernos”.<br />

La única manera de hacerlo es viéndolas venir, reconociéndolas,<br />

aceptándolas, transformándolas y quitándote<br />

si sabes que ahí vienen.<br />

“La mejor manera para que las emociones<br />

no te metan la arrastrada de tu vida, es<br />

‘tomándolas por los cuernos’”


Empieza por analizar cómo es tu respiración.<br />

Al observar la forma en que lo haces, descubrirás<br />

cómo has estado tomándote la vida<br />

y sólo entonces identificarás cuáles son las<br />

emociones que más te afectan.<br />

Con este entendimiento sabrás cuál es la que<br />

te domina para gastar, no cuidar el dinero,<br />

quedarte en el mismo trabajo por años, comprar<br />

cosas que no necesitas, no emprender…<br />

No buscar que tu vida sea mejor.<br />

¿Qué emoción te domina? ¿Qué emoción<br />

afecta tus decisiones de dinero? Es un buen<br />

momento para responderlo ¿No crees?<br />

Está comprobado que respirar profundamente<br />

(exhalar e inhalar) durante unos pocos<br />

minutos neutraliza la adrenalina en el cuerpo.<br />

Respirar aleja la basura mental y te libera de<br />

desperdiciar toda tu energía.<br />

Una vez que tu mente está concentrada en el<br />

momento, puedes ver con claridad cómo te<br />

sientes.<br />

Con la práctica conocerás con más claridad<br />

qué emociones experimentas en diferentes<br />

momentos y podrás tomar mejores decisiones<br />

para tu bienestar y tu mayor disfrute.


Sexto concepto:<br />

Constancia y disciplina<br />

<strong>Así</strong> como la visión de largo plazo es vital para<br />

los proyectos que consideramos valiosos en<br />

nuestra vida y nuestro dinero, la constancia<br />

y la disciplina son la única vía para lograrlos.<br />

Pero ¡No le saques! Aunque ambas palabras<br />

requieren esfuerzo, la manera en cómo te<br />

reditúan no tiene comparación alguna.<br />

“Con el tiempo y al ver a los demás<br />

dirás: ¡Qué bueno que no me rajé!”<br />

Empieza por hacerle caso a la manda más,<br />

que es la disciplina. Atrévete a quitarle el poder<br />

a las emociones que no te sirven y mejor<br />

otórgaselo a lo que sí te va a dejar algo relevante<br />

para tu vida.<br />

“Gasto porque no me siento bien, pero me descuido<br />

<strong>todo</strong> el tiempo”, “gasto porque estoy<br />

cansado, pero nunca duermo”, “gasto porque<br />

me siento solo, pero no dejo FB ni un segundo<br />

para ir a visitar a mis amigos”, “gasto porque<br />

es más fácil que ahorrar, pero ni siquiera lo<br />

intento”.<br />

Deja que la disciplina entre en tu día a día…<br />

Sólo déjate llevar… No hay tiempo para<br />

cuestionarla, mejor ayúdala levantando los<br />

cimientos para que la constancia sea tu otra<br />

compañera de viaje.<br />

Ahorra 100, 200, 300, 400 pesos…<br />

cada quincena no te preguntes por<br />

qué ¡Sólo hazlo! Sigue y sigue… Si<br />

empiezas a dudar, sacúdete esas<br />

emociones y deja que la disciplina<br />

tome el mando.<br />

Con el tiempo y al ver a los demás<br />

dirás:<br />

¡Qué bueno que no me raje!<br />

¡Qué bueno que empecé a ahorrar!<br />

¡Qué bueno que invertí en piggo!<br />

¡Qué bueno que puse en orden mis<br />

finanzas! porque ahora estoy tranquilo<br />

y disfrutando.


Séptimo concepto:<br />

Nunca es tarde<br />

Ahorrar, invertir y usar inteligentemente nuestro<br />

dinero son cosas que a la larga nos van a<br />

redituar algo muy grande.<br />

Sin embargo, el mundo se ha dedicado a decirte<br />

que al hacerlo estás dejando de gozar la<br />

vida. Nada más falso que eso.<br />

Lo que hagas en tu presente impacta en tu<br />

hoy y en tu futuro. Y lo mejor es que empiezas<br />

a disfrutarlo casi de inmediato, a sentir cómo<br />

te transforma. Porque no sólo estás haciendo<br />

algo que sabes perfectamente que es bueno<br />

para ti, sino algo que trasciende en tu historia.<br />

Y sobre <strong>todo</strong> métete en la cabeza que ¡Nunca<br />

es tarde para empezar!... a ahorrar, hacer<br />

Yoga o invertir.<br />

“La vida empieza realmente cuando<br />

sabes que puedes hacer lo que<br />

quieras”<br />

<strong>Así</strong> que desafíate a ti mismo y ¡Hazlo! Simplemente<br />

hazlo y regálate una vida mejor.


SEGUNDA PARTE<br />

SEIS POSTURAS<br />

PARA LIBERAR<br />

TU CARTERA Y TU<br />

MENTE<br />

Después de toda la teoría viene la<br />

práctica, ¿Qué es? Una rutina para<br />

cambiar tus finanzas y tu mente.<br />

Antes de empezar, considera<br />

cada una de las reflexiones que a<br />

continuación te damos.<br />

Las siguientes posturas te ayudan<br />

a entenderte más y comprender<br />

mejor cómo te relacionas con tu<br />

dinero.<br />

Es clave que te concentres en el<br />

proceso y las sensaciones que<br />

experimentas. ¡Ahora sólo hazlo y<br />

disfruta el viaje!


“No hay nadie más ‘jijo’ ante lo que<br />

hacemos o dejamos de hacer que<br />

nosotros mismos”<br />

Primera postura: Venciendo<br />

tu parte destructiva con<br />

Tadasana<br />

Primera postura<br />

Tadasana<br />

Ver video<br />

Hay una parte dentro de nosotros que lejos de<br />

ayudarnos a construir, está participando en<br />

nuestra destrucción.<br />

“Nosotros podemos ser nuestro peor enemigo”<br />

es una frase que seguro has oído por aquí<br />

o por allá. ¿Es cierta? Un poco. No hay nadie<br />

más “jijo” ante lo que hacemos o dejamos de<br />

hacer que nosotros mismos.<br />

Todos tenemos hábitos constructivos y destructivos.<br />

Los constructivos nos hacen avanzar,<br />

los destructivos no nos llevan a ninguna<br />

parte, bueno sí… a la fregada.<br />

No ahorrar, gastar para impresionar a los<br />

demás, abusar de los meses sin intereses,<br />

desentenderse del despilfarro que hacemos<br />

<strong>todo</strong>s los días, aplazar cosas como hacer<br />

ejercicio, comer mejor, empezar a ahorrar e<br />

invertir… En fin, la lista puede ser muy larga y<br />

patética.<br />

Pero no te desanimes, con un poco de esfuerzo<br />

podemos cambiarlo, sólo necesitamos emplear<br />

nuestra energía para conseguir eso que<br />

realmente queremos y que no lograremos<br />

echados en el sofá o lamentándonos.


“Una postura va más allá de cómo acomodamos<br />

nuestro cuerpo en un espacio. Tiene que ver con la<br />

forma en que nos plantamos ante la vida y cómo<br />

reaccionamos ante ella”<br />

Revisa tu postura<br />

La postura en la que te encuentras ahorita ¿Te<br />

ayuda a que <strong>todo</strong> funcione cómo debe funcionar?<br />

Antes de responder, piensa no sólo en tu estado<br />

físico, también en tu situación financiera,<br />

laboral, personal o ante cualquier circunstancia<br />

a la que te enfrentas en este momento.<br />

Una postura va más allá de cómo acomodamos<br />

nuestro cuerpo en un espacio. Tiene que<br />

ver con la forma en que nos plantamos ante la<br />

vida y cómo reaccionamos ante ella.<br />

¿Cómo te paras ante tus metas?<br />

¿Cómo te paras ante tu libertad financiera?<br />

¿Cómo te paras ante tus deudas?<br />

¿Cómo te paras ante el “no me alcanza”?<br />

¿Cómo te paras ante el “no puedo ahorrar”?<br />

¿Cómo te paras ante “hoy no, mejor<br />

mañana”?<br />

<strong>Así</strong> que levántate de tu silla, de la cama o de<br />

donde sea que estés y revisa cómo lo haces.<br />

Si tú mismo te estás comprimiendo comienza<br />

a darte espacio y a ser consciente de ti.


PASO 2<br />

Ahora activamos poco a poco los cuádriceps<br />

alargando las piernas. Nuestra pelvis debe<br />

estar sutilmente abierta y el coxis muy ligeramente<br />

hacia adentro.<br />

Empezamos a sentir cómo la energía va alineando<br />

nuestra columna. La respiración sigue<br />

siendo profunda. En especial, las exhalaciones.<br />

Éstas son pausadas y sin prisa.<br />

PASO 1<br />

Lo primero que vamos a hacer es sacar <strong>todo</strong><br />

el aire por la nariz. Ahora inhalamos profundamente<br />

y nos paramos derechos. Tus pies<br />

pueden ir separados -a la altura de la cadera-<br />

o juntos -al centro-. Lo importante es que<br />

no se hundan los arcos de los pies y que empieces<br />

a sentir la energía que viene de la tierra<br />

hacia arriba.<br />

Levantamos las costillas y a través de un<br />

pequeño alargamiento sentimos cómo parece<br />

que la pelvis flota. Los hombros continúan relajados<br />

y lo más lejos posible de las orejas.<br />

Visualizamos un hilo que jala nuestra cabeza<br />

desde la parte de arriba y estira agradablemente<br />

toda la estructura.<br />

Colocamos las palmas juntas al centro del<br />

pecho. Sentimos cómo pasa la energía de una<br />

mano a otra, estableciendo una fuerte conexión<br />

entre nosotros y ella.


PASO 3<br />

El siguiente paso es sacar <strong>todo</strong> el aire y al inhalar<br />

llevamos las palmas juntas hacia<br />

arriba estirándonos lo más posible, sin tensar,<br />

creando espacio y cuidando no levantar los<br />

hombros.<br />

Poco a poco, separamos las manos y los brazos<br />

se van a ir extendiendo hacia los lados,<br />

dándole movimiento a nuestro espacio vital<br />

y expandiendo la energía que nos circunda,<br />

algunos lo llaman El Campo Áureo, yo lo<br />

llamo Ejército molecular.<br />

PASO 4<br />

Lo importante es sentir que estamos ampliando<br />

nuestro rango de movimiento, que la<br />

energía despierta y entra por todas partes.<br />

Al regresar volvemos a colocar las manos juntas<br />

al centro del pecho y fortalecemos esa<br />

conexión entre nosotros y la fuerza tremenda<br />

de la energía.


Segunda postura: En busca de equilibrio<br />

con Vrkasasana<br />

El equilibrio es una de las cosas que más trabajo nos cuesta<br />

encontrar en la vida. Vivimos en los extremos.<br />

Cuando gastamos, lo hacemos como si no hubiera un mañana.<br />

Luego tenemos deudas tan viejas que ya les pusimos nombre y<br />

tan grandes que ya necesitan su propio departamento.<br />

Cuando buscamos salir de ellas, hacemos un plan extremo<br />

también: cero gasto, <strong>todo</strong> a pagar deudas y ¡Claro, no aguantamos<br />

mucho tiempo, así que abandonamos!<br />

Segunda postura<br />

Vrkasasana<br />

Ver video<br />

Y <strong>todo</strong> porque nos vamos acostumbrando, tanto a los extremos<br />

que ya no recordamos cómo regresar al centro.<br />

De hecho nacimos equilibrados. Aunque es lo más natural, estamos<br />

tan alejados de eso, que encontrar equilibrio parece un<br />

reto inmenso.<br />

Para ello tenemos que tomar decisiones, empezando por las<br />

pequeñas y después enfocándonos en las grandes.<br />

“Y no olvides que el equilibrio es ni muy muy,<br />

ni tan tan”<br />

Atiende a tu gasto diario y entiéndelo. Descubre hacia dónde<br />

va <strong>todo</strong> el dinero que generas y haz los ajustes necesarios para<br />

que no andes por la vida tambaleante.<br />

Construye bases sólidas que garanticen tu futuro financiero.<br />

Invertir es un buen inicio. Poco a poco verás cómo vas encontrando<br />

los pesos y contrapesos que te ayudarán a crecer no<br />

sólo como persona sino también tu cuenta de piggo.<br />

Y no olvides que el equilibrio es ni muy muy, ni tan tan. ¡El dinero<br />

también es para disfrutarse!


PASO 2<br />

Nuestro siguiente paso es levantar<br />

el pie derecho y colocarlo en el interior<br />

de la pierna izquierda, ya sea a<br />

la altura de la pantorrilla, la rodilla o<br />

la entrepierna.<br />

PASO 1<br />

Para empezar con Vrksasana tenemos que<br />

pararnos derechos con los pies juntos y exhalar<br />

profundo por la nariz. Inclina tu cuerpo<br />

poco a poco hacia el lado izquierdo, sin contener<br />

en ningún momento la respiración. Ésta<br />

siempre debe ser fluida, profunda y pausada.


PASO 3<br />

Llevamos las palmas juntas al centro<br />

del pecho reafirmando que el equilibrio<br />

está en nuestras manos.<br />

PASO 4<br />

Elevamos las palmas juntas hacia el<br />

cielo, concentrados en la sensación<br />

de balance. La postura debe practicarse<br />

y disfrutarse un mínimo de 30<br />

segundos de cada lado para sentir<br />

en verdad los efectos. Vrkasasana<br />

fortalece las piernas, la columna<br />

y el sentido del equilibrio. Ayuda<br />

a que no vivamos “ni muy muy, ni<br />

tan tan” y a tener equilibrio en los<br />

nervios para que, en las inclinadas<br />

o declinadas que luego nos pone la<br />

vida, no nos vayamos de boca.


Tercera postura: Flexibilidad<br />

con Matsyasana<br />

Los imprevistos son nuestros eternos acompañantes.<br />

Las crisis son cíclicas, siempre<br />

hay una a la vuelta de la esquina después<br />

de la temporada de bonanza.<br />

Eso nos obliga a ser flexibles, así estaremos<br />

mejor preparados para enfrentar los cambios.<br />

Tercera postura<br />

Matsyasana<br />

Ver video<br />

Si has visto la imagen de una zona costera<br />

en pleno huracán recordarás cómo se mueven<br />

las palmeras. Dependiendo de la fuerza<br />

del viento, a veces sus copas llegan a tocar<br />

el piso ante el fuerte vaivén.<br />

Pero rara vez sabrás de una palmera que<br />

fue arrancada de su raíz. Siempre sobreviven,<br />

casi intactas a las tormentas más<br />

fuertes. Eso es ser flexible en serio. Eso es<br />

sobrevivir una crisis y no bromas.<br />

Nuestra sobrevivencia depende de ello.<br />

La flexibilidad nos permite adecuarnos al<br />

cambio y responder mejor al presente y al<br />

futuro. Y no es sólo una cuestión de dinero,<br />

es parte de la vida: adaptarse a un nuevo<br />

trabajo, vecindario, a un presupuesto<br />

menor, etc.<br />

Deja la rigidez y empieza a perseguir la<br />

flexibilidad.


PASO 1<br />

Sobre un mat de yoga o un tapete en el que no<br />

nos derrapemos, nos acostamos boca arriba.<br />

Una vez acostados, sacamos <strong>todo</strong> el aire y al inhalar<br />

colocamos nuestras manos debajo de los<br />

glúteos con las palmas mirando hacia abajo, de<br />

modo que quedemos con <strong>todo</strong> el cuerpo recto,<br />

las piernas juntas y la cadera sobre las manos.<br />

Cuando exhalemos vamos a acercar los codos y<br />

los antebrazos lo más posible al torso.<br />

PASO 2<br />

Inhalando levantamos el abdomen, el pecho,<br />

<strong>todo</strong> el torso, creando <strong>todo</strong> un puente desde el<br />

coxis hasta la coronilla de la cabeza.<br />

Las piernas siguen sobre el piso, la pelvis sobre<br />

las manos y con toda la columna en el aire creamos<br />

un arco agradable que permite que el pecho<br />

se expanda hasta el cielo.


PASO 3<br />

Al realizar esta postura notamos cómo se extiende<br />

la tráquea y el cuello se alarga profundamente.<br />

La cabeza reposa suave en el piso, mientras<br />

respiramos mínimo 5 veces muy hondo, disfrutamos<br />

de la flexibilidad que nos otorga. Es muy<br />

estimulante sentir cómo se fortalece la espalda<br />

levantando al máximo el tórax.<br />

No olvides que es fundamental sacar muy despacio<br />

el aire por la nariz.<br />

Cuarta postura<br />

Sasangasana<br />

Ver video


Cuarta Postura: No<br />

desesperes con Sasangasana<br />

Es muy fácil desesperarnos cuando una situación sale<br />

de nuestro control. Es muy fácil que se nos vaya la mano<br />

con la tarjeta de crédito y luego necesitamos otra para<br />

cubrir los gastos de la anterior.<br />

Es entonces que nos metemos en un problemón digno<br />

de una serie de televisión con 20 temporadas.<br />

Esto pasa porque no conocemos nuestros límites.<br />

Saber cuánto puedes gastar, es un límite que tenemos<br />

que saber mejor que nuestro número de Whats. Sólo así<br />

puedes cuidar de no pasarte de la raya.<br />

PASO 1<br />

De rodillas, nos sentamos sobre los talones.<br />

Tomamos aire y sujetamos nuestros talones.<br />

Lo mismo pasa con cuánto puedes ahorrar, porque si te<br />

pasas, tal vez acabes creyendo que no es posible. O por<br />

el contrario, que te claves tanto, que acabes obsesionado<br />

con guardar cada peso y nunca disfrutarlo.<br />

Sasangasana nos enseña a aguantar, pero no sólo<br />

porque sí. Más bien, para no rendirnos ante las vicisitudes<br />

que se interponen en las decisiones que hemos<br />

tomado.<br />

Con esta claridad es más fácil resistir a las tentaciones<br />

de compras superfluas que sólo nos alejan de nuestra<br />

estabilidad financiera y de finanzas sanas y fuertes.


PASO 3<br />

PASO 2<br />

Poco a poco colocamos la frente lo más pegado<br />

posible a las rodillas, al tiempo que exhalamos<br />

lentamente.<br />

Apoyamos la coronilla en el piso mientras elevamos<br />

los glúteos como si fuéramos a dar una pirueta.<br />

Continuamos respirando profundo sintiendo<br />

cómo se alarga toda la columna apuntando con<br />

ella hacia adelante y hacia arriba.<br />

Toda la postura es un ejercicio de acercamiento a<br />

nuestro límite, respirar con él sin perder la paciencia<br />

y relajadamente trascender ese tope con sensibilidad<br />

y prudencia avanzando un milímetro más.


“No podrás hacer ciertas cosas hasta<br />

que comiences a hacer otras”<br />

Quinta postura: Viendo lo que no quieres<br />

ver con Adho Mukha Svanasana<br />

Quinta postura<br />

Adho Mukha<br />

Svanasana<br />

Todos tenemos una parte que no nos gusta ver. Esto es normal,<br />

cuando las cosas nos parecen ajenas las intentamos combatir u<br />

olvidar.<br />

Tanto que a veces ya no nos damos cuenta.<br />

A algunos nos encanta procrastinar; otros somos indecisos; otros<br />

más, temerosos ante las decisiones que nos traerán a la larga<br />

grandes beneficios.<br />

Y lo peor de <strong>todo</strong> es que no sólo lo sabemos, los que nos quieren<br />

nos lo dicen una y otra vez, hasta el cansancio. A veces lo sentimos<br />

como un ataque, aunque sabemos que es por nuestro bien.<br />

Pero como en <strong>todo</strong>, en la vida llega el momento de ser honestos<br />

con nosotros mismos y preguntarnos: ¿A dónde voy?<br />

Las finanzas personales son un camino. Los pocos o muchos que<br />

se atreven a tomarlo nunca lo dejan.<br />

Ver video<br />

Intégralas en tu vida y, por favor, empieza a fijarte metas financieras<br />

de acuerdo al momento que estás viviendo y sobre <strong>todo</strong> a<br />

largo plazo. El tiempo se pasa volando.<br />

Algo importante y que debes tener en el radar es: No podrás hacer<br />

ciertas cosas hasta que comiences a hacer otras.<br />

Con eso nos referimos, a poner los pies en la tierra y aclarar: Mis<br />

finanzas están así y adaptarse a ellas, al tiempo que buscamos<br />

cómo mejorarlas.


PASO 2<br />

Tomamos aire y colocamos ambas manos una<br />

medida adelante de donde estaban. Separamos<br />

bien los dedos de las manos, exhalamos profundo<br />

y mientras inhalamos levantamos las dos rodillas<br />

del piso, estirando poco a poco las piernas jalando<br />

la cadera hacia atrás y llevando agradablemente<br />

el pecho hacia adentro. Con la práctica frecuente<br />

podremos acercar los talones al piso y extender<br />

completamente toda la estructura.<br />

PASO 1<br />

En el piso nos acomodamos con las rodillas debajo<br />

de la cadera y las muñecas debajo de los hombros


PASO 3<br />

Hay que levantar la cadera lo más atrás y arriba posible como<br />

si alguien nos estuviera jalando de la cintura.<br />

La postura se hace con mucha atención a las sensaciones, estira<br />

toda la parte de atrás del cuerpo, desde los talones hasta la<br />

cabeza, hay que estirar muy bien los codos y de ser posible<br />

también las rodillas.<br />

Si se tienen problemas de espalda crónicos, lo conveniente es<br />

flexionar ligeramente las rodillas, esto va a beneficiar mucho a<br />

la parte baja de la espalda, la postura se efectúa por lo menos<br />

durante 5 respiraciones profundas, regresamos a la posición<br />

inicial, cerramos los ojos y observamos desde adentro los efectos.<br />

Fortalece TODO, muñecas, columna, cintura, piernas, pantorrillas,<br />

es un vigorizante natural, despierta la circulación de<br />

forma potente.<br />

Última postura<br />

Sirsasana<br />

Ver video


Postura 6: Sirsasana para darle<br />

la vuelta a la cosas<br />

Todas las posturas anteriores fueron una preparación<br />

gradual para llegar a esta. No es recomendable<br />

hacerla sin haber calentado previamente<br />

con las otras, recordemos que la preparación es<br />

física y mental.<br />

Todos queremos tener la mente abierta pero la realidad es que la<br />

mayoría de las veces estamos muy cerrados. Cerrados a nuevos<br />

puntos de vista, sabores, ideas, lugares, personas.<br />

Nos gusta lo familiar y nos incomoda lo extraño. Lo malo es que<br />

esta cerrazón también influye en nuestra capacidad de resolver<br />

problemas y encontrar soluciones.<br />

Los problemas de dinero son de las cosas que más nos abruman<br />

y preocupan.<br />

PASO 1<br />

Hincados en el piso, visualizamos un triángulo en<br />

la tierra de unos 30 centímetros en cada lado. Colocamos<br />

las manos en los dos vértices de abajo,<br />

con los dedos bien separados, éstos deben apuntar<br />

hacia adelante, no hacia afuera, en las clases<br />

este es un error muy común.<br />

Es en donde más trabajo nos cuesta ver soluciones, a veces hasta<br />

pedir ayuda. Al ejercitar nuestra capacidad de cambiar de punto<br />

de vista y de abrirnos, aumentaremos nuestra habilidad para<br />

ver, deducir y resolver cualquier situación aún relacionada con el<br />

dinero.<br />

Realizar un parado de cabeza implica esfuerzo, nadie dijo que<br />

darle la vuelta a las cosas era fácil. Si no lo hacemos, llegaremos<br />

siempre a las mismas respuestas y nunca encontraremos las<br />

soluciones que necesitamos.<br />

<strong>Así</strong> que invierte tu energía y ¡Atrévete a darle la vuelta a las cosas!<br />

Si esta es la primera vez que vamos a hacerlo es importante<br />

ir muy despacio, sin prisa, escuchando las indicaciones y,<br />

principalmente, atendiendo lo que dice el cuerpo. El objetivo<br />

no es sólo pararse de cabeza, sino ir sintiendo cómo va aumentando<br />

la confianza en nosotros mismos, porque a través<br />

de la respiración y la atención profunda vamos conociéndonos<br />

más.


PASO 3<br />

Apoyamos los dedos de los pies en el piso. Confirmamos que nuestros<br />

codos estén alineados arriba de las muñecas y lentamente levantamos<br />

las rodillas del piso hasta estirarlas por completo, tomamos aire y poco<br />

a poco damos un par de pasitos cortos hacia nuestra cara.<br />

En cada paso que damos con ambos pies, nos alineamos, revisamos la<br />

respiración, y estiramos las rodillas llevando la cadera hacia arriba y<br />

sutilmente hacia atrás.<br />

PASO 2<br />

Si notas que la respiración se entrecorta. Es una señal que te está mandando<br />

el cuerpo para regresar, reacomodar la respiración y volver a iniciar.<br />

Tomamos aire y al exhalar llevamos la coronilla al<br />

vértice de arriba del triángulo que hemos formado<br />

con nuestra cabeza y las dos manos. Si donde está<br />

la cabeza no alcanzas a ver completamente tusmanos,<br />

no estás formando un buen triángulo.


PASO 5<br />

PASO 4<br />

Cuando la cadera esté notablemente arriba y el<br />

cuello estable y sin contraerse, respiramos profundo<br />

y subimos una rodilla a un brazo y paulatinamente<br />

la otra. Es fundamental poner atención a<br />

cada paso, ninguno es más importante que respirar<br />

profundo.<br />

No pierdas de vista que cuando dejamos de respirar<br />

profundo ya no estamos haciendo yoga. Al<br />

cultivar la confianza notaremos que nos sentimos<br />

listos para dar el siguiente paso que es sacar completamente<br />

el aire, sentir firme el abdomen y desprender<br />

las rodillas de los brazos para comenzar<br />

a flotar.


PASO 6<br />

La pelvis, una vez que flota, debe mantenerse estática. Debemos estar<br />

siempre sensibles y conscientes de nuestra respiración y nuestros movimientos<br />

para que no nos sorprendan. Al llevar las dos piernas estiradas<br />

hasta arriba conviene calar con los talones al cielo y clavarnos en el<br />

deleite de ver las cosas desde una nueva perspectiva.<br />

<strong>Así</strong> como entramos con calma, regresamos con calma, terminamos hincados<br />

con la frente en el piso dando lugar a que la sangre regrese<br />

gradualmente.<br />

El secreto está en la constancia.<br />

NAMASTE.<br />

Conoce<br />

a los autores


Sonia<br />

Sánchez-Escuer<br />

Alejandro<br />

Maldonado<br />

Sonia Sánchez-Escuer es autora, conferencista y<br />

especialista en finanzas personales. Comenzó a escribir<br />

del tema cuando descubrió que hacía falta un<br />

espacio donde se hablara sobre el dinero de manera<br />

divertida, relajada y personal.<br />

Desde 2014 es vocera de piggo, donde desarrolla<br />

contenido sobre ahorro, inversión y la actitud mental<br />

para ganar en ambos.<br />

Ha publicado dos libros con Editorial Planeta: Diario<br />

de una Oveja Financiera y Apuntes de una Oveja<br />

Freelancera.<br />

Fundó en 2008 el sitio Blogylana.com y es productora<br />

de uno de los podcast en español más reconocidos<br />

de finanzas y negocios: Lana&Podcast.<br />

Alejandro Maldonado inició sus estudios de Yoga en<br />

Nueva York hace más de veinte años.<br />

En su viaje de más de dos décadas, ha conocido<br />

maestros, tradiciones y culturas, que lo han ayudado<br />

a crear un estilo propio y único dentro de su disiciplina.<br />

Es reconocido por ser un Yogui alivianado, le gusta<br />

el tema del tercer ojo pero no se lo pinta.<br />

Su nombre sigue siendo Alejandro Maldonado y<br />

nunca se ha sentido inclinado a cambiárselo por<br />

uno que suene más espiritual.<br />

Cree profundamente que “No hay nada mas saludable<br />

que ser feliz”, claramente se le relaciona con<br />

la salud, el ejercicio, el entrenamiento mental y ante<br />

<strong>todo</strong> por mostrar de una manera accesible lo factible<br />

que es estar bien.


Te Invitamos a ver<br />

nuestro curso<br />

Esperamos que hayas disfrutado este ebook,<br />

consulta nuestro catálogo completo en blog.piggo.mx/topic/eBooks_piggo<br />

También puedes dejarnos tus comentarios en Facebook<br />

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