LEONES de SABANA AÑO 5, N° 75 NOVIEMBRE 2016

Los padres se quejan que en los centros educativos sean privados o del gobierno,
no los educan y que por ello en las escuelas se gesta lo que es nefasto,
por lo cuál, ellas son nefastas, porque nos hemos olvidado de dar a nuestros
hijos, la educación moral, inculcarles los principios éticos, de convivencia, de
desarrollo etc., pero nosotros no aceptamos ese viaje retrospectivo hacia nosotros
mismos para ver y analizar nuestros aciertos, errores y fracasos, parte
obscura que no queremos enfrentar y mucho menos aceptar el decir, me equivoque,
lo siento…que sería fácil decirlo, si visualizaramos que el no hacerlo
refuerza en nuestros hijos el culpar a terceros de todo lo que nos ocurre, parte
de la naturaleza del ser humano…en donde el trabajo principal es el razonar y
dominar a nuestra temperamental naturaleza, esa es la gran diferencia.
¡Soñar no cuesta nada!
Actualmente estamos en una guerra sin
fronteras gracias a la mercadotecnia, y
qué decir de los enormes problemas médicos
a nivel internacional, con los niños
diabéticos, con obesidad e hipertensos
gracias a la ingestión de bebidas altamente
azucaradas; desde la cuna los
consumen porque es más barata y fácil
de preparar que una formula láctea, claro
acompañada de su respectiva comida
chatarra; quiero comentarles que actualmente
con un muy conocido refresco de
cola, se ha demostrado que es más aditivo
que la cocaína, no lo digo yo, si no las
personas calificadas en esta rama del
conocimiento. Y un ejemplo triste y lamentable,
que la bolsa de valores en
Walt Street, haya cerrado recientemente
con números rojos en el ramo que corresponde
a la producción láctea en
U.S.A y ustedes dirán en que me afecta?,
Nos afecta y mucho porque estudios de
años lograron incrementar la productividad
de las vacas lecheras, al grado de
convertirlas en máquinas de producción
de 40 litros o más diarios de leche.
Se alcanzó la meta y ahora resulta, que
ese incremento es exceso de producción
al no haber la suficiente demanda y lo
peor, que el producto no se da a los Bancos
de Alimento,
porque tampoco hay demanda, al preferirse
los refrescos, se va a las pichanchas
o al drenaje no importando
que cientos de humanos la necesiten,
aunque no se den cuenta de ello.
Conducta en pleno siglo 21, que significa
la auto destrucción. Sin embargo,
creemos que estamos a tiempo
para rectificar, pues el hombre es el
único ser que sabiendo las consecuencias
de sus actitudes, sabe que
actualmente se está inmolando, no
importale que su final, nuestro final,
sea regresar a la barbarie; qué más
puedo decirles, solo les pido seamos
más analíticos, podemos y debemos
nuestra naturaleza humana tendiente
a la destrucción.
Ha veces pongo en tela de juicio el
enunciado CONSTRUIR, no DES-
TRUIR, porque estamos empecinados
en DESTRUIR para CONSTRUIR?, parteaguas
para proyectar un futuro mejor,
ya no pensemos en nosotros, pensemos
en las generaciones venideras
que cuando partamos nos recuerden
como forjadores de un mundo mejor…
¡Soñar no cuesta nada!…..
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