Revista q

Limbo
Entrevista
reaccionar. Esa ocasión nos dejó endrogados y nosotros no vivíamos de eso, entonces
con otro tipo de ingresos lo mantuvimos, lo que otros se vieron obligados a vender.
E. ¿Qué valores consideras esenciales para la persona que se dedica al
café?
LE. Aquí hay dos valores muy importantes: ayuda mutua y respeto. Si tú haces esto,
funcionan muy bien las cosas, ¿por qué? porque aquí nunca vas a encontrar un cafetal
que cultiven sólo café; vas a encontrar el café con otros cultivos porque el principio de
la reciprocidad para nosotros es muy importante, en donde la diversidad es el
privilegio.
E. A todo esto, ¿cómo aprendiste sobre el café?
LE. Yo del café nada más sabía que se le ponía azúcar y galletas de animalito y nada
más. Yo no conocía el café, yo lo conocí aquí, la primera vez que vine, en el 1976,
con mi esposa. Todo ha sido sobre prueba y error.
E. ¿Aquí se da una producción del café soluble?
LE. No, el soluble solamente lo hacen las grandes empresas, la Nestle, Liconsa, otras.
El café en realidad ha sido dominado por empresas; lo que provoca la gran crisis del
café en los años noventa. La inestabilidad del costo del café se mantuvo cerca de doce
años, lo que provocó que muchos cafetaleros tuvieran que abandonar los cultivos y
generaran grandes deudas. En el caso de México coincide con la crisis del 94, fue un
desastre; baja la producción y pasamos de 300 mil productores en los años 70 y 80, a
menos de 90 mil. Todavía no resurge del todo.
E. Es un gran ejemplo de que hay que saber reaccionar ante eventos
externos, ¿de alguna manera avanzan junto con la tecnología, la
vanguardia?