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Abeja sorprendida<br />
Limbo<br />
Reportaje<br />
ladraba amarrada al poste.<br />
Debido a su agresividad le pusieron un tranquilizante que la dejó completamente<br />
noqueada. Así, transportaron a Miel y a sus pequeños perritos al estado de Puebla.<br />
La crueldad de la comunidad era tal, que pareciera que sólo la mantuvieran viva<br />
aventándole algunos trozos de alimento para verla morir más lentamente. Al<br />
revisarla presentaba desnutrición, laceraciones en el cuello causadas por la cuerda<br />
con la que estaba amarrada, algunos golpes en todo el cuerpo, infección en uno de<br />
sus ojos y obviamente estaba cundida de pulgas. Sus criaturas estaban bien, sólo<br />
tenían pulgas y presentaban una malformación en sus patas, tenían seis dedos, sin<br />
embargo, no era algo que se notara demasiado y no tenían ninguna afección en sus<br />
vidas. Con el tiempo Miel se recuperó, comenzó a apreciar, incluso solicitar<br />
contacto humano. Todas sus crías fueron adoptadas al poco tiempo, antes fueron<br />
esterilizados, vacunados y despulgados, condición que todos los animales de<br />
ANIFAM cumplen. Miel aún continúa en la fundación; es más sencillo que adopten<br />
a un cachorro que a un perro adulto.<br />
ABEJA Y NO PICA MUERDE<br />
También existen historias como la de Abeja, de personas que no pueden cuidar más<br />
a sus perros y los llevan a instituciones que puedan ofrecerles hogar en lo que son<br />
adoptadas por otras familias. Abeja tiene cinco años, es una perrita salchicha un<br />
poco rellenita, ella llegó hace un tiempo, debido a que fue perra doméstica toda su<br />
vida es muy cariñosa y educada. Su dueño es maestro y le ofrecieron un empleo<br />
mejor pagado en otro estado,<br />
teniendo conciencia que su trabajo<br />
se volvería más demandante que el<br />
anterior comenzó a temer por los<br />
cuidados de Abeja, y decidió<br />
llevarla a la institución.<br />
Abeja fue adoptada una vez, sin<br />
embargo, al año, la pareja que la<br />
adoptó se embarazo y decidió<br />
devolverla por el bien y el cuidado