LEO 20

MARÍA
DEL CARMEN
GAIBOR
BIBLIOTECARIA
Directora del Sistema Integrado
de Bibliotecas de la Universidad
Central del Ecuador
Para la ingeniera María del Carmen Gaibor existe
un problema que surge desde el sistema escolar,
el mismo que no fomenta planes de lectura a niños
desde temprana edad, y este problema persiste
durante la época colegial. Esta falencia se ve reflejada
en la universidad, que es cuando, según la experta, los
jóvenes empiezan verdaderamente a leer y a investigar.
Gaibor considera que debería haber un plan lector en
los colegios, que permita diferenciar los tipos de lectura
-académica, crítica, científica, etc.- mediante el cual los
estudiantes sean capaces de discernir mejor entre
todo su bagaje de conocimientos. Un plan en el que
los estudiantes no se sientan obligados a leer libros a
cambio de dar un examen y obtener una calificación,
sino que permita que ellos desarrollen el gusto hacia la
lectura y sobre todo que esta sea de su entendimiento
y vaya de acuerdo a su edad.
Otro aspecto a resaltar es el rescate a las bibliotecas.
Hoy en día, se pueden obtener copias de libros a
fracciones de lo que cuestan en las librerías; copias
que una vez que sean revisadas, se convertirán en
cajas y cajas de papel desperdiciado. Las bibliotecas
fueron por mucho tiempo el lugar de concentración
y aprendizaje de los estudiantes, y este espacio se
está perdiendo gracias al aumento de los centros de
copiado y, obviamente, al desarrollo de las nuevas
tecnologías y el internet. Todas las bibliotecas del país,
gracias a las nuevas leyes, cuentan con bases de datos
de infinidad de libros digitales que están a disposición
de los lectores de manera gratuita, pero que no son
aprovechados por la comodidad que representa leer
desde casa.
Una de las medidas a tomar, según la experta, es la
reformación de los currículos, es decir, la revisión de
las materias de la malla curricular propuesta por el
Ministerio de Educación. Misma que, según Gaibor,
debería cambiar de metodología e incluir las nuevas
tecnologías, pues es innegable que los jóvenes de hoy
son nativos tecnológicos y, es a través de plataformas
electrónicas, por donde se debe tratar de aumentar su
carga de lectura.
Lo que queda claro es que no se debe mandar a leer
por leer. A las universidades están llegando jóvenes con
grandes vacíos que afectan posteriormente a su vida
académica. Se debería buscar una literatura orientada
a entender desde conceptos básicos y sus referencias
visuales, mentales y conceptuales que al ser mejoradas
darían un gran giro a la manera no sólo de aprender,
sino de entender de los estudiantes.
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