GUÍA DE EPILEPSIA

Crisis generalizadas.
‣ Crisis tónico-clónicas
generalizadas (gran mal).
El paciente algunas veces siente
la llegada de una crisis por diversos
fenómenos subjetivos (pródromo).
Durante algunas horas se siente
apático, deprimido, irritable o muy
extasiado. En más de la mitad de los
casos hay algún tipo de movimiento
segundos antes de que se pierda la
conciencia como la rotación de la
cabeza y de los ojos o de todo el
cuerpo como sacudidas intermitentes
de una extremidad. Al inicio aparece
flexión breve del tronco, abertura de
la boca y de los parpados y
desviación de los ojos hacia arriba,
los brazos s elevan y abducen, los
codos se semiflexionan y las manos
se ponen en pronación, a esto le
sigue una fase de extensión tónica
que abarca el dorso, el cuello y
después los brazos y las piernas.
‣ Crisis idiopaticas no convulsivas
(ausencia, pequeño mal).
Consisten en la interrupción
repentina de la conciencia, lo que
ocasiona que el paciente fije la
mirada y deje de hablar por unos
segundos, son notables por su
brevedad, de hecho el paciente no se
percata de ellas. Se produce breves
movimientos clónicos de los
párpados, músculos faciales, dedos
de la mano o de ambos brazos. Los
automatismos son comunes, el tono
postural puede estar disminuido o
aumentado pero no se produce caída
al suelo.
Estos pacientes durante la crisis
pueden continuar con actos
complejos como caminar, luego de 10
segundos o más el mismo retoma su
actividad.
‣ Crisis míoclónicas.
Consisten en sacudidas
musculares súbitas, breves y
arrítmicas. Con frecuencia afectan el
cuello y las extremidades superiores,
pero pueden afectar todo el cuerpo.
Estas sacudidas pueden ser leves o
graves, simétricas o asimétricas. La
duración es tan breve que no se
altera la conciencia y el paciente es
consciente de lo que le ocurre.
‣ Crisis tónicas.
Consisten en la contractura
generalizada sostenida y más o
menos simétrica, de comienzo
brusco, con duración de 10 segundos
aproximadamente. Por lo general la
conciencia esta alterada y la
semiología ictal varían según el
predominio de los grupos musculares
afectados. Frecuentemente aparecen
en la noche y ocurren varias veces al
día.
‣ Crisis atónicas.
Resultan de una brusca perdida
del tono postural con una duración de
1 a 5 segundos sin alteración de la
conciencia, sin estado postictal
apreciable. Si es severa el paciente
pude caer al suelo y si son leves se
aflojan las rodillas o se le caen
objetos de la mano al paciente.
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