Anuario CUB 2017

Anuario 2017 - Club Universitario de Buceo de Granada - Vol. I
En
aquellos lugares en que apreciemos una recesión
en la colonia de posidonia podremos entender
que hay algún problema (turbidez,
contaminantes, eutrofización o problemas de sedimentación)
y podremos actuar buscando una
solución.
Por todo lo que hemos dicho hasta
ahora podemos deducir la importancia de esta
singular planta:
1.- Cómo todas las plantas son un enorme
productor de oxígeno, absorbiendo también el
CO2 en su estructura.
2.- Fijan el sustrato mediante sus intrincadas
raíces y frenan la velocidad de las corrientes
mediante sus hojas, dificultando la erosión y conservando
las playas.
3.- Aumentan la transparencia de las
aguas, al atrapar nutrientes y sedimentos.
4.- Es la base alimenticia del ecosistema
costero mediterráneo, alimentando y sirviendo de
refugio a gran número de especies. Su presencia
aumenta por tanto la biodiversidad de una zona
5.- Es una especie biomarcadora, al ser
extremadamente sensible a cambios en la calidad/transparencia
del agua.
Es comprensible por tanto, al tener esta
extraordinaria importancia desde un punto de
vista económico y ecológico, que la administración
decidiera proteger y controlar las praderas
de posidonia. Sin embargo, no todas las praderas
de Posidonia están catalogadas y vigiladas
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por la administración, unas veces por desconocimiento
y otros por simple imposibilidad económica
o logística. Es en este contexto donde
surge el proyecto del Club Universitario de Buceo
de Granada, como un impulso de pura ciencia
ciudadana para llevar el seguimiento a una de
estas praderas no controladas, en concreto la
pradera localizada a levante de Castell de Ferro.
Practicas de Seguimiento e
Inmersiones Científicas en la
Pradera de Posidonia de
Castell de Ferro
Así pues, y con la lección debidamente
aprendida, compañeros del CUB se reunieron la
mañana del 21 de Octubre en las instalaciones
de Aquamarina, Centro de Buceo que tenemos
conveniado y que se encuentra en el pueblo de
Castell de Ferro. Tras equiparnos y asistir al pintoresco
modo de embarcación del centro, nos dirigimos
en barco hasta la zona donde íbamos a
realizar las prácticas. Julio de la Rosa, una vez
más y de forma totalmente altruista, se volcó con
nosotros, ofreciendo un profundo briefing sobre
la tarea a realizar. Incluso complementó con material
propio al del CUB para que todo el mundo
pudiera realizar estas practicas. La inmersión se
organizó en seis parejas y dos más que iban libres,
el propio Julio de la Rosa que iría de pareja
a pareja chequeando que se estaba realizando