Revista Vision Ferretrea Edic 17

empresa
Ferretería Aculeo inicia sus actividades
en agosto del año 2010, contando
en esos momentos con una precaria
infraestructura, la cual era casi nula, lo
básico de la oferta con lo que contábamos
en nuestros inicios eran: cemento,
tapas, ladrillos y clavos, y una completa
inexperiencia por parte nuestra, por
ejemplo no tenía idea de que existieran
tantos tipos de clavos, la verdad para mí
estos se clasificaban en chicos, medianos
y grandes. Esta situación era obvia
ya que me dedicaba a administrar una
discoteque que teníamos en Pintué, paralelamente
a mi carrera de ingeniero
comercial que desarrollaba en Santiago.
Todo esto se desencadeno a partir del
terremoto de ese año, donde como a
muchos, se nos cambiaron los planes,
siendo sumamente afectados ya que
nos dejó sin casa y sin negocios, solamente
quedó en pie una oficina de 9
m 2 que arrendábamos a un arquitecto,
el cual mi papá lo utilizó como refugio
post-sismo, por lo que la situación se
dio para que nos quedáramos mas
tiempo de lo que teníamos planeado en
Aculeo, y postergar nuestros planes de
asentarnos en Santiago. Caído todo,
para sobrevivir mi padre usó las patentes
de alcoholes que poseíamos de la
Disco y el pub, y se hizo de un pequeño
capital y vió la oportunidad de invertirlo
para comenzar una ferretería, antes
existió una especie de sucursal de Ferretería
Higuerillas en Pintué, es decir
había un mercado, y una oportunidad.
En ese momento que papá me planteó
su idea, recuerdo que tenía una visión
muy clara; vender el cemento a menos
de $ 4.000, cuando el valor estaba
por sobre los $ 4.500. Empezamos
comprando en ferreterías de Paine y
Buin, nuestro primer camión fue un
Fiat de 1972, que aún poseemos, y
nuestra sala de ventas era la oficina
que se salvó del terremoto que en la
noche se acondicionaba como dormitorio
para mi papá.
Ha sido difícil como se imaginarán,
aparte de nuestra inexperiencia, la
ferretería como empresa se ha visto
afectada con situaciones externas de
las que, sin embargo, se ha debido
hacer cargo. Producto de esto se han
tomado decisiones que si bien estaban
en los planes, se han debido adelantar
y nos hemos expuesto más de lo recomendable.
A veces las ganas no bastan
para superar los problemas, es la consistencia
en lo que se hace y la creencia
en un proyecto que va más allá de
vender materiales de construcción. La
inexperiencia nos jugo en contra por
ejemplo al incursionar en áreas que no
conocíamos como movimiento de tierra,
pensando que al estar relacionado
iba a ser rentable, no nos fue bien y tuvimos
que vender las máquinas.
Algo impensado al comienzo fue pertenecer
a Chilemat, por ello es que nues-
Año 6 - 2014
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