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EXTRACTO_NARCEA_05

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ABRID

MENTES,

TOCAD

CORAZONES

San Juan Bautista de La Salle

Introducción y selección de textos

Jorge A. Sierra, fsc

Narcea, S.A. de Ediciones



Abrid mentes,

tocad corazones

Índice:

¿Quién te habla? _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ pág. 6

Habéis sido llamados _ _ _ _ _ _ _ pág. 9

En presencia de Dios _ _ _ _ _ _ _ pág. 21

Abrid mentes _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ pág. 31

Tocad corazones _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ pág. 45

A modo de oración _ _ _ _ _ _ _ _ pág. 54

Nota biográfica _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ pág. 58

Citas y Bibliografía _ _ _ _ _ _ _ _ pág. 62

5


8

Catedral de Reims,

la gran iglesia

donde coronaban

a los reyes de Francia.

Allí, san Juan Bautista

de La Salle fue canónigo,

un cargo de gran prestigio

y riqueza que sin embargo

abandonó para buscar

la voluntad de Dios.


HABÉIS

SIDO LLAMADOS

9


Toda persona se pregunta, en

algún momento, cuál es el sentido

de su vida. Algunos lo buscan en

las riquezas o en el prestigio o en

los «me gusta». ¿Y si estuviera

más cerca, en el susurro de un

Dios que se hace niño?

1*

¿Cuánto tiempo

hace que Jesús

se presenta

ante vosotros

y llama a la puerta

de vuestro

corazón?

(MF 85.1)

2*

Dios

os ha dado

bienes

y talentos

para emplearlos

en su servicio

(MR 205.1)

10


3*

Reconoced

a Jesús

bajo los pobres

harapos

de los niños

que tenéis que

instruir

(MF 96.3)

4*

Vosotros sois ángeles

enviados por Dios

para prepararle el camino

y el medio de venir,

y de entrar en vuestros corazones

y en los de vuestros

alumnos

(MD 2.1)

11


17*

Traed con frecuencia

a vuestra mente

cuál es el fin

de vuestra vocación,

para ayudar

a consolidar

el Reino de Dios

en el corazón

de vuestros alumnos

(MD 67.1)

Interior de la pequeña ermita de Parmenia,

un lugar apartado del sur de Francia donde

Juan Bautista de La Salle, en las horas más duras de su vida

y con la ayuda de una humilde pastora, se dio cuenta

de que Dios nos acompaña, aunque todo parezca oscuro.

20


EN

PRESENCIA

DE DIOS

21


18*

Dios mío, os doy

gracias con todo

mi corazón por

los favores que

he recibido

de ti

(EMO 20.336)

Quien te llama

te acompaña.

Es su promesa

y Él es

un amigo fiel

y generoso…

22


19*

La presencia de

Dios te será

de gran utilidad

para ayudarte

y animarte

a realizar bien

tus acciones

(C 102.7)

20*

Rezaré

a menudo

a Dios

por ti

(C 45.11)

23


Para La Salle, un educador es

alguien que «mueve los

corazones», es decir, que educa

desde lo más profundo, desde lo

esencial, aunque a veces parezca

invisible

55*

¡Qué poderosa

es la palabra de Dios

para mover los corazones!

(MF 180.2)

56*

Podéis hacer milagros,

moviendo los corazones

de los niños que

se os han confiado

(MF 180.3)

46


57*

Poned mucho mayor

esmero en la educación

de los niños de los que Dios

os ha encargado

que el que pondríais

con los hijos

de un rey

(MF 133.2)

58*

Cuanta más ternura

sintáis por los niños

que os están confiados,

tanto más producirá Dios

en ellos admirables

efectos

(MF 134.2)

47


A MODO DE ORACIÓN

El voto heroico

El 21 de noviembre de 1691 fue un momento crucial

en la historia de La Salle y los primeros lasalianos.

Cuando parecía que todo se tambaleaba, Juan

Bautista, junto a dos Hermanos, emitió un

compromiso ante Dios por el que se comprometían

del todo con las escuelas, aunque se quedasen los

tres solos y tuvieran que vivir de solo pan.

Esta fórmula de votos, «heroica» en su expresión y

paralela al compromiso que siguen haciendo los

lasalianos, quedó en secreto y no fue conocida hasta

nueve años después de la muerte de Juan Bautista.

Para entonces, el grupo de tres era ya mucho más

numeroso: una verdadera comunidad unida

«asociada para el servicio educativo de los pobres».

54


Santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo,

postrados con profundo respeto ante vuestra

infinita y adorable Majestad, nos consagramos

enteramente a ti, para procurar con todas

nuestras fuerzas y con todos nuestros

cuidados el establecimiento de la Sociedad de

las Escuelas Cristianas, del modo que nos

parezca más agradable a ti y más ventajoso

para dicha Sociedad.

Y a este fin, yo, Juan Bautista de La Salle,

sacerdote; yo, Nicolás Vuyart, y yo, Gabriel

Drolin, desde ahora y para siempre, y hasta el

último que sobreviva, o hasta la completa

consumación del establecimiento de dicha

Sociedad, hacemos voto de asociación y de

unión, para procurar y mantener dicho

establecimiento, sin podernos marchar, incluso

si no quedáramos más que nosotros tres en

dicha Sociedad, y aunque nos viéramos

obligados a pedir limosna y a vivir de solo pan.

En vista de lo cual, prometemos hacer

unánimemente y de común acuerdo todo lo

que creamos, en conciencia y sin ninguna

consideración humana, que es de mayor bien

para dicha Sociedad. Hecho el veintiuno de

noviembre, día de la Presentación de la

Santísima Virgen, de 1691. En fe de lo cual

hemos firmado.

55


A MODO DE ORACIÓN

El método de oración de La Salle

Cuenta el mismo de La Salle que su primer objetivo

al «encargarse de la dirección de los maestros» fue

hacer de ellos «hombres interiores», que vivieran su

vocación desde el «aplicar el alma a Dios» y por eso

compuso un método de oración mental que podemos

resumir en:

1*

Toma consciencia de que Dios está contigo.

«Acordémonos de que estamos en la Santa

Presencia de Dios» (GE 1.1):

a. En nosotros mismos.

b. En los más vulnerables, en los olvidados.

c. En la Iglesia: allí donde nos encontramos

reunidos en su Nombre.

Responde con fe, humildad

y agradecimiento.

56


2*

Escoge un pasaje del Evangelio como tema

de tu oración (EMO 15.293). Céntrate en la

persona de Jesús: su vida, sus acciones,

sus enseñanzas.

a. Expresa el deseo de ser como Él.

b. Pide el regalo de poder seguirle.

c. Da gracias por haber recibido tanta ayuda

por su parte.

3*

No te quedes en la oración sin más:

elige un compromiso para hoy, algo sencillo

pero eficaz, quizás pequeño, pero necesario

(EMO 20.337).

a. Agradece a Dios la posibilidad de

contribuir a su obra.

b. Ofrece tu labor diaria, cotidiana y

escondida, en favor de los demás.

c. Pide la protección de María, como

madre de su Hijo.

57


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