Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
Ghost.
Simmons, Michael Monroe?
Aquellos tipos que no sólo
hacían el mejor rock posible,
sino que además aportaban
altas dosis de imagen, fantasía,
digamos un celofán personal
que te hacía sentir la música de
otro modo. Y claro, nos dicen
que el rock se está muriendo.
No es cierto, simplemente
nos hemos centrado ya de
un modo demasiado inocuo
en tratar de comparar el
nuevo rock con todo lo que ya
estaba inventado. ¿Realmente
podemos creernos que queda
algo por hacer? Al fi nal, es
todo lo mismo. Guitarra, bajo,
batería…Tú puedes montar
una banda de música de
raíces, de blues, de metal,
lo que sea. Tratas de sonar
de una manera genuina,
rezas para que no se te cuele
ningún plagio viajando por
el tren del subconsciente…y
nada. Comienzas a buscar
bolos, y las salas están
copadas por bandas tributo.
¿Es o no es así? ¿Acaso
no estoy hablando de algo
que todos hemos comentado
alguna vez con los amigos?
En el anterior RBM, el capo
Javi cerraba la entrevista
que nos hizo a los miembros
del staff de Metal N´Rock
haciéndonos la gran pregunta:
¿Hay excitación en el momento
musical actual? La respuesta
claramente era un rotundo no.
Por mil razones que muchas
veces se nos escapan (aunque
pretendamos resumirlas con
lo de que internet ha matado
a la música), no vivimos
precisamente los mejores días
para nuestra música favorita.
Yo decía: los que siguen
llenando estadios son los
clásicos. No hay relevo visible.
¿No? Bueno, maticemos.
cierto halo de voluptuosidad,
imagen, envoltorio. El siglo
XXI está siendo demasiado
prolífi co en bandas formadas
por personajes legañosos,
tipos que parecen afrontar
una sesión de fotos como
recién salidos de una noche
de resaca. ¿Pero es que nadie
tomó en su día apuntes de los
maestros Alice Cooper, Gene
Somos humanos. A veces
nos dejamos llevar por las
apariencias. Recuerdo comprar
discos de Yes por las portadas
(¡!). Los iconos rockeros de
los ochenta, aquellos Maiden,
Judas, Leppard, con sus
mega escenarios, eran en
buena parte, imagen. Y ahora
que cuarenta años después
podemos ver sus camisetas
en el Bershka, ¿no sería buen
43
Si nos quedamos en lo
estrictamente musical,
hay por ahí dando vueltas
decenas, centenares de
bandas interesantes. Pero
es que, para muchos, lo
estrictamente musical no es
lo defi nitivo. A ello, muchas
veces, hay que dotarlo de