Mujeres Profesionales y Trabajos Flexibles - Consultora Concilia
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Radiografía a mujeres profesionales que aspiran a<br />
trabajos flexibles<br />
Estudio realizado por las investigadoras María Paz Lagos y Daniela Ortega de la Universidad del<br />
Desarrollo y BC&B, Head Hunter especializada en jornadas parciales. El objetivo fue conocer el<br />
perfil personal y laboral de mujeres que optan por trabajas flexibles.<br />
El Centro de Familia, Trabajo y Políticas Públicas de la Facultad de Gobierno de la Universidad del<br />
Desarrollo desarrolló una investigación de carácter exploratorio en conjunto con la Head Hunter<br />
de nicho, BC&B, que buscó determinar el perfil de mujeres profesionales contratadas a jornada<br />
parcial frente a quienes son contratadas en jornadas completas. Para ello, se desarrolló una<br />
encuesta a mujeres pertenecientes a la red de BC&B (integrada por mujeres interesadas en buscar<br />
trabajo en jornadas flexibles) y que contemplaba a mujeres entre 21 y 60 años, de nivel<br />
educacional medio-alto, diferentes estados civiles y con distinta experiencia laboral.<br />
La muestra está compuesta por 107 mujeres pertenecientes a la base de datos de BC&B. La<br />
encuesta fue respondida durante los meses de Octubre y Noviembre de 2009, fue aplicada de<br />
forma auto-administrada y vía internet. Todas las encuestadas contaban con experiencia laboral<br />
previa. Del total, un porcentaje menor se encontraba sin trabajo y el mayor porcentaje se<br />
encontraba trabajando en diferentes tipos de jornada.<br />
<strong>Mujeres</strong>, trabajo y jornada laboral<br />
Actualmente, el debate acerca de la incorporación de la mujer al mercado del trabajo y las<br />
jornadas de trabajos a las que ellas ingresan es completamente segmentado. Por una parte,<br />
mientras cientos de mujeres se ven empujadas a trabajos de jornada parcial, flexibles y, en la<br />
mayoría de los casos, precarios, otro grupo de mujeres, generalmente, profesionales, se sienten<br />
atraídas e incentivadas a trabajar en jornadas parciales como un mecanismo que genera la<br />
posibilidad de conciliar la vida familiar y la vida laboral.<br />
Las diferencias entre ambas realidades del trabajo femenino son indiscutibles. Autores<br />
argumentan que en este escenario coexisten dos sectores laborales; uno de ellos atrae de<br />
preferencia mano de obra de baja calificación, con escasas alternativas de trabajo y con muy bajos<br />
sueldos, y el otro es, generalmente, más global, cuyos trabajadores(as) destacan por poseer altos<br />
niveles de calificación, conocimientos y capacidades de innovación.<br />
1
En este estudio se profundizará en este último grupo de mujeres y las diferencias entre los tipos<br />
de jornada que ellas desarrollan.<br />
Actualmente, se observa un aumento de las jornadas parciales, sobre todo, en las economías de<br />
países en desarrollo, lo cual obedece a la incorporación femenina a la fuerza laboral, sobre todo de<br />
mujeres casadas y/o que son madres. La argumentación más fuerte para que exista esta relación<br />
entre el tipo de jornada y género es que las mujeres, especialmente, madres, necesitan conciliar<br />
su vida laboral y familiar, hipótesis inicial que se pretendió probar en esta investigación.<br />
Al mismo tiempo, hay consenso en la literatura que si bien el acceso a trabajo parcial es un<br />
aspiración para muchas mujeres profesionales, sería mal pagado (situación que se acentúa en el<br />
otro grupo de mujeres antes mencionado), lo cual se convirtió es una segunda hipótesis de este<br />
estudio. Esta hipótesis consistía en la existencia de la idea que para poder compatibilizar trabajo y<br />
familia muchas mujeres optarían por trabajos más flexibles, lo que iría produciendo una<br />
segregación del trabajo por sexo donde se paga un costo no sólo porque el ingreso es más bajo,<br />
sino que las posibilidades de capacitación, beneficios y promoción disminuyen.<br />
Por otra parte, se piensa que si las condiciones del trabajo full time fueran más flexibles, como por<br />
ejemplo, con mayor libertad de tiempo y espacio, tal vez no estaría el anhelo de trabajar parttime.<br />
La tercera hipótesis a probar se refirió al tamaño de las empresas en que trabajan las mujeres de<br />
jornada parcial.<br />
Glass and Camarigg (1992), a comienzos de la década del 90 ya sostenían que las empresas<br />
pequeñas contrataban más mujeres y que hacían más compatible trabajo y familia.<br />
Probablemente la explicación estaría en que la relación interpersonal y la informalidad de las<br />
empresas pequeñas permiten atender mejor las necesidades familiares, esta idea también es<br />
considerada en este estudio como una hipótesis. Lo que sostienen es que incluso en las empresas<br />
donde las políticas familiares son más progresistas, los empleados dicen que las concesiones<br />
familiares se negocian individualmente con la jefatura directa. Paralelamente, Kingston (1990)<br />
sostenía que los empleadores de pequeñas empresas le permitían a las mujeres retornar en<br />
jornadas part-time cuando han tenido a sus hijos. De alguna manera se cree que hay un espíritu<br />
más paternalista en las empresas pequeñas que favorece la conciliación. Por el contrario, en la<br />
investigación de Glass y Camarigg se señala que las mujeres madres que trabajan en empresas<br />
grandes, entendidas con más de 100 empleados tienen las menores posibilidades de conciliar<br />
familia y trabajo.<br />
2
1. Radiografía de las mujeres profesionales que aspiran a<br />
trabajos flexibles<br />
1. El 93.7% de las mujeres que actualmente se<br />
encuentra buscando trabajo se inclinan<br />
preferentemente por un trabajo más flexible.<br />
Paralelamente, el 90.2% de las encuestadas<br />
considera que es baja la oferta de trabajo de<br />
parcial.<br />
2. Se observa que a medida que<br />
aumenta el tamaño de la empresa,<br />
aumenta también el porcentaje de<br />
mujeres que se desempeña en jornada<br />
completa, mientras que las mujeres<br />
que trabajan jornada parcial lo hacen<br />
preferentemente en empresas<br />
pequeñas. Esto es en el caso de esta<br />
muestra y no necesariamente se<br />
extrapola a la población general.<br />
3. Las mujeres que se emplean en<br />
puestos gerenciales o de jefatura<br />
media trabajan preferentemente<br />
en jornada completa, mientras,<br />
que quienes lo hacen en jornadas<br />
parciales lo hacen preferentemente<br />
en jefatura media, como<br />
profesionales sin jefatura y como<br />
gerente o ejecutivo, pero en un<br />
porcentaje menor.<br />
4. A medida que aumenta el<br />
ingreso de la pareja o<br />
cónyuge, las mujeres tienden<br />
a optar de preferencia por<br />
jornadas parciales. En<br />
consecuencia, si la mujer está<br />
soltera su trabajo es<br />
predominantemente de<br />
jornada completa.<br />
7.<br />
El 75% de las encuestadas (sin<br />
diferenciar por tipo de jornada)<br />
considera que la jornada parcial<br />
les permite a las personas<br />
trabajar y tener tiempo para<br />
dedicarle a su familia. Casi la<br />
mitad de ellas piensa que la<br />
jornada parcial permite<br />
conciliar, pero a costa de una<br />
muy baja remuneración.<br />
6. El 65,9% de las mujeres<br />
que trabajan jornada<br />
completa tiene menos de 2<br />
hijos, versus el 52% de<br />
mujeres que tiene más de<br />
tres hijos que trabaja<br />
jornada parcial.<br />
5. Los motivos que llevan a<br />
las mujeres a trabajar<br />
jornada parcial se<br />
relacionan,<br />
mayoritariamente, en el<br />
tiempo disponible que<br />
permite obtener el trabajo<br />
en esta modalidad.<br />
3
2. Situación Laboral<br />
Del total de las mujeres encuestadas el 80% se encontraba realizando algún trabajo<br />
remunerado y sólo un 20% se encontraba sin trabajo., todas habían realizado algún trabajo<br />
remunerado con anterioridad.<br />
Del 80% de mujeres que trabajan, el 65% lo hace en jornada completa y el 35% en jornada<br />
parcial y de quienes trabajan jornada parcial, la mayor parte de ellas lo hace en la modalidad<br />
media jornada (Ver gráfica 1).<br />
Gráfica 1: Tipos de jornada desarrollada por las encuestadas que trabajan jornada parcial<br />
17%<br />
22%<br />
17%<br />
44%<br />
Media Jornada Tres cuartos de jornada<br />
Por hora Proyecto u objetivo<br />
Fuente: Encuesta UDD-BC&B 2009<br />
Con respecto al sector en que trabajan, la mayor parte de las encuestadas manifestó<br />
trabajar en el sector privado (53%), seguido por un 15% que trabaja en el sector público, un 13%<br />
que trabaja como profesional independiente y un 9% que trabaja en una empresa social de tipo<br />
ONG’s o Fundación. Un porcentaje muy inferior de mujeres (10%) declaró trabajar en una empresa<br />
familiar u otros.<br />
Sus ingresos se encuentran mayoritariamente en el rango de $680.001 y $1.200.000<br />
mensuales con un 47.8% de mujeres seguido por un porcentaje mucho menor (22.4%) que recibe<br />
un ingreso mensual que va de los $400.001 a los $680.000. Estos niveles de ingresos son menores<br />
a los recibidos por las parejas o cónyuges de las mujeres que declararon estar casadas o en pareja.<br />
A medida que aumenta el ingreso del marido, aumentan las mujeres que trabajan jornada parcial.<br />
4
Tabla 1: Tipo de jornada por ingreso de la pareja<br />
Entre $400.001 y<br />
$680.000<br />
mensuales<br />
Entre $680.001 y<br />
$1.200.000<br />
mensuales<br />
Entre $1.200.001<br />
y $2.500.000<br />
mensuales<br />
Más de<br />
$2.500.001<br />
mensuales<br />
Total<br />
Completa 9.5% 14.3% 42.9% 33.3% 100%<br />
Parcial .0% 8.3% 25.0% 66.7% 100%<br />
Fuente: Encuesta UDD-BC&B 2009<br />
Al mismo tiempo como se observa en la tabla 2 si la mujer está soltera su trabajo es<br />
predominantemente de jornada completa. La explicación a esta situación se relaciona con las<br />
necesidades que enfrentan las mujeres según el estado civil, por ejemplo, es de esperar que una<br />
mujer casada enfrente la necesidad de trabajar medio tiempo porque de este modo, puede<br />
compatibilizar con su rol familiar.<br />
Tabla 2: Tipo de jornada por estado civil<br />
Completa Parcial<br />
Soltero(a) 27.3% 21.7%<br />
Casado(a) 47.7% 52.2%<br />
En Pareja 6.8% 4.3%<br />
Viudo(a) 2.3% .0%<br />
Separado(a)- Divorciado(a) 15.9% 21.7%<br />
Total 100% 100%<br />
Fuente: Encuesta UDD-BC&B 2009<br />
No obstante, pese a esta situación el 37% de las mujeres declaró que con sus ingresos<br />
familiares tenía algunas dificultades económicas. El resto de las mujeres se manifestó<br />
relativamente optimista rescatando un 29% que dice vivir cómoda y holgadamente con los<br />
ingresos recibidos.<br />
Otra información relevante para describir la situación laboral de las mujeres hace referencia<br />
al tamaño de la empresa en donde son empleadas. El 52% de las encuestadas trabaja en empresas<br />
grandes de más de 100 trabajadores y el 48% de las mujeres restantes trabaja en empresas<br />
medianas (de 11 a 100 trabajadores) y pequeñas (menores a 10 trabajadores). Cabe destacar, que<br />
5
este 48% se divide de forma equitativa entre los dos tipos de empresa; 24% cada una. Con esta<br />
situación como antecedente, resulta relevante desagregar este dato por tipo de jornada.<br />
Por otro lado, el mayor porcentaje de mujeres encuestadas se desempeña en puestos<br />
profesionales o de jefatura media (40%), seguido por el 26.2% que lo hace en puestos gerenciales<br />
o ejecutivos y un 15.4% que lo hace como profesional sin jefatura. Esta distribución se condice con<br />
los altos niveles educativos presentados por las encuestadas, con el perfil de mujeres con las que<br />
trabaja BC&B.<br />
2.1 Diferencias entre mujeres que trabajan jornada parcial v/s completa<br />
Se observa que a medida que aumenta el tamaño de la empresa (Ver tabla 3), aumenta<br />
también el porcentaje de mujeres que se desempeña en jornada completa, mientras que las<br />
mujeres que trabajan jornada parcial lo hace preferentemente en empresas pequeñas; el 47,8%<br />
de las encuestadas que trabajaban en jornadas parciales lo hacía en instituciones con menos de 10<br />
trabajadores, mientras que el 65,1% de las que se encontraban trabajando a jornada completa lo<br />
hacían en empresas con más de 100 trabajadores. Hipotéticamente, se plantea que a medida que<br />
crece la empresa, ésta tiende a hacerse menos flexible. Al contrario, las empresas pequeñas hacen<br />
probablemente más fácil la posibilidad de lograr acuerdos individuales respecto a la jornada. Esto<br />
abre un desafío para las grandes empresas en términos de la oferta de jornadas flexibles como un<br />
mecanismo para captar y retener talento femenino, pero crecientemente también podemos<br />
afirmar que es un atractivo para las nuevas generaciones de profesionales independiente del sexo.<br />
Tabla 3: Tipo de jornada laboral por tamaño de la empresa<br />
Menor de 10<br />
trabajadores(as)<br />
De 11 a 100<br />
trabajadores(as)<br />
Más de 100<br />
trabajadores(as)<br />
Jornada Completa 11.6% 23.3% 65.1% 100%<br />
Jornada Parcial 47.8% 26.1% 26.1% 100%<br />
Fuente: Encuesta UDD-BC&B 2009<br />
Se reflejan diferencias entre los puestos que ocupan las mujeres por tipo de jornada; por<br />
ejemplo, las mujeres que se emplean en puestos gerenciales o de jefatura media trabajan<br />
preferentemente a jornada completa mientras, que quienes lo hacen en jornadas parciales lo<br />
hacen preferentemente en jefatura media, como profesionales sin jefatura y como gerente o<br />
ejecutivo, pero en un porcentaje menor. (Ver tabla 4).<br />
Total<br />
6
Tabla 4: Tipo de jornada laboral por puesto en que se desempeña<br />
Gerencial o<br />
ejecutivo<br />
Profesional,<br />
jefatura media<br />
Profesional o<br />
trabajador(a)<br />
sin jefatura<br />
Administrativo<br />
Jornada Completa 28.6% 42.9% 9.5% 4.8% 14.3% 100%<br />
Jornada Parcial 21.7% 34.8% 26.1% 4.3% 13.0% 100%<br />
Fuente: Encuesta UDD-BC&B 2009<br />
Desde la perspectiva de los ingresos que reciben las mujeres que trabajan jornada parcial<br />
en relación a quienes trabajan jornada completa, se comprueba que (por razones esperadas) son<br />
las mujeres contratadas a jornada completa quienes reciben mayores ingresos mensuales. Por<br />
ejemplo, el sueldo de una mujer que trabaja jornada completa se concentra mayoritariamente<br />
entre los $680.001 y los $2.500.000, el sueldo de una mujer contratada a jornada parcial se<br />
encuentra entre los $400.001 y el $1.200.000. Cabe mencionar que si bien se conserva la<br />
tendencia, hay un porcentaje de mujeres contratadas a jornada parcial que logra recibir los<br />
mismos ingresos que las mujeres contratadas a jornada completa, lo cual refleja un quiebre en las<br />
nociones más comunes sobre los niveles de ingresos recibidos por quienes optan por jornadas<br />
parciales. Esto no es más que el reflejo de un cambio en las modalidades consideradas clásicas en<br />
el mercado laboral. Si antiguamente se entendía el trabajo como un trabajo lineal a tiempo<br />
completo, hoy muchos profesionales ingresan al mercado laboral en jornadas parciales,<br />
contratados por objetivos, en tipologías free lance y accediendo a ingresos similares a quienes<br />
trabajan jornada completa.<br />
Por otro lado, podemos mencionar que el 63% de las encuestadas se encuentra conforme<br />
con su trabajo actual, mientras que el 37% opina lo contrario.<br />
Por último, de las mujeres que se encuentran sin trabajo, el 100% de ellas ha tenido algún<br />
trabajo remunerado con anterioridad, al 100% de ellas le gustaría volver a trabajar, llevan en<br />
promedio 4 meses sin trabajo y están en esta situación básicamente por necesidades de la<br />
empresa y por necesidades de sus hijos; 55% y 45% respectivamente. Adicionalmente, el 93.7% de<br />
ellas se encuentra actualmente buscando trabajo y de preferencia desean tener un trabajo más<br />
flexible (Ver gráfica 2)<br />
Otro<br />
7<br />
Total
Gráfica 2: Preferencia de tipo de trabajo en encuestadas que estaban en búsqueda de algún<br />
trabajo<br />
21.4<br />
42.9<br />
14.3<br />
21.4<br />
Muy parecido o igual al que hacía antes<br />
De cualquier tipo, no me importaría iniciar una nueva empresa<br />
Me gustaría que fuese un trabajo más flexible<br />
Otro tipo<br />
Fuente: Encuesta aplicada en BC&B. UDD. 2009<br />
Más allá de las diferencias en la situación laboral de las mujeres por tipo de jornada, lo<br />
cierto es que en la práctica las mujeres que ingresan al mercado laboral, por lo general, lo hacen a<br />
jornada completa- aún cuando muchas desean trabajar menos tiempo- por diversos motivos.<br />
3. Motivaciones para el trabajo flexible<br />
Los motivos que llevan a las mujeres a trabajar jornada parcial se relacionan,<br />
mayoritariamente, con el tiempo disponible que permite el trabajar en esta modalidad. Para<br />
hacerlo más gráfico, el 62% de las mujeres que trabaja jornada parcial indicó que el principal<br />
motivo por el cual trabajaba de esa forma es que la jornada parcial resulta ser una modalidad que<br />
se ajusta con sus demás obligaciones, principalmente las familiares (tener más tiempo para estar<br />
con familia y/o amigos), mientras que el 27% indicó que trabajaba así porque no encontró una<br />
jornada completa o porque el trabajo así lo requería (aspectos de la oferta). También se destaca<br />
un 11% que indicó otros motivos. Ligado a lo anterior, podemos señalar que el tipo de jornada va<br />
directamente relacionado con el número de hijos. Es así como a medida que aumenta la cantidad<br />
de hijos, aumentan las mujeres que trabajan jornada parcial.<br />
8
3.1 Número de hijos por tipo de jornada<br />
Como se observa en la tabla 5, a medida que las mujeres tienen más hijos, aumenta las<br />
probabilidades que se desempeñen en jornadas de tipo parcial.<br />
Tabla 5: Número de hijos por tipo de jornada<br />
Nº Hijos 0 1 2 3 4 5 6 Total<br />
Completa 31.8% 20.5% 13.6% 25.0% 4.5% 2.3% 2.3% 100%<br />
Parcial 21.7% .0% 26.1% 30.4% 13.0% 4.3% 4.3% 100%<br />
Fuente: Encuesta aplicada en BC&B. UDD. 2009<br />
3.2. Opinión sobre la jornada parcial<br />
Se les preguntó a las encuestadas que se encontraban trabajando en jornada completa, si habían<br />
buscado trabajo jornada parcial y el 45% contestó que sí. Adicionalmente, el 90.2% declaró que la<br />
oferta de la jornada parcial es baja y sólo el 9.8% contestó que era mediana.<br />
Más allá de las diferencias existentes entre los tipos de jornada, la opinión que las encuestadas<br />
manifiestan acerca de la jornada parcial es diversa. El 75% de las encuestadas considera que la<br />
jornada parcial les permite a las personas trabajar y tener tiempo para dedicarle a su familia, pero<br />
casi la mitad de ellas considera que es a costa de una baja remuneración.<br />
Gráfica 3: Opinión de las encuestadas acerca de la jornada parcial<br />
Opinión de los trabajos jornada parcial<br />
3%<br />
36%<br />
10%<br />
12%<br />
39%<br />
Fuente: Encuesta aplicada en BC&B. UDD. 2009<br />
Les permite a las personas poder<br />
trabajar en dos lugares a la vez<br />
Les permite a las personas trabajar y<br />
tener tiempo para dedicarle a su familia<br />
Les permite a las personas trabajar y<br />
tener tiempo para dedicarle a sus<br />
familias aunque a costa de una muy<br />
baja remuneración<br />
Es una forma de trabajo que se está<br />
usando mucho pero no es una<br />
alternativa atractiva para mi<br />
Es una forma de fomentar el trabajo por<br />
objetivos<br />
9
3.3. Satisfacción con el trabajo<br />
Otro acercamiento a las opiniones de las mujeres en torno a este tipo de trabajo, se relaciona con<br />
la conformidad que manifiestan las mujeres con sus trabajos. Se destaca que más allá de las<br />
diferencias entre los tipos de jornada, las mujeres no se sienten conformes con sus trabajos,<br />
aunque esta disconformidad se acentúa aún más en las mujeres que trabajan jornada completa.<br />
Debemos mencionar que se trata de una base de datos de mujeres que buscan un cambio de<br />
jornada.<br />
Por ejemplo, un 66,7% de las mujeres que trabaja jornada completa y un 56% de las que trabajan<br />
jornada parcial manifestaron sentirse conforme con sus empleos, el resto se manifestó<br />
disconforme. Que esta disconformidad sea compartida en mujeres con ambos tipos de jornada es<br />
un aspecto convergente y tiene que ver con la muestra que comprende a mujeres que están en<br />
una base de datos de búsqueda de empleo, aunque actualmente estén trabajando.<br />
Tabla 6: Conformidad con el trabajo según tipo de jornada<br />
¿Está Conforme con su<br />
trabajo?<br />
Si No<br />
Jornada Completa 66.7% 33.3%<br />
Jornada Parcial 56.5% 43.5%<br />
Fuente: Encuesta aplicada en BC&B. UDD. 2009<br />
Como era de esperar, si se desagrega esta tendencia por tipo de jornada, son las mujeres<br />
que trabajan a jornada completa quienes manifiestan preferentemente sentir falta de tiempo. Un<br />
68,3% de las mujeres que trabajan a tiempo completo concuerdan con la falta de tiempo versus un<br />
36,8% de las que trabaja a tiempo parcial.<br />
A este porcentaje de mujeres que manifestaron sentir falta de tiempo (68,3% de las<br />
mujeres que trabajan a tiempo completo y 36,8% de las que trabaja a tiempo parcial), se les<br />
preguntó cuales eran las principales consecuencias generadas a partir de la falta de tiempo. Cerca<br />
del 50% de las mujeres considera que la falta de tiempo se refleja en la escasez de momentos para<br />
realizar actividades recreativas y personales (si se desagrega esta información por tipo de jornada<br />
un 57.1% de las que trabajan en jornadas completa y un 50% de mujeres en jornada parcial<br />
coincidieron en esta situación). Frente a esto, en las mujeres encuestadas y que se consideran<br />
faltas de tiempo, la escasez de tiempo para actividades personales es el problema más común.<br />
En las mujeres que trabajan jornada completa que manifestaron sentirse falta de tiempo destaca<br />
como consecuencia el deterioro de la salud mental y el deterioro de la relación con los amigos<br />
10
como los problemas más frecuente, mientras que en las mujeres que trabajan a jornada parcial<br />
destaca el 33,3% que opinó que la falta de tiempo generaba un deterioro en la relación con su<br />
cónyuge, pareja o esposo y un 16.7% en el deterioro con sus hijos. Llama la atención el nivel de<br />
conflictos familiares que enfrentan las mujeres de jornadas parciales. Es probable que hijos y<br />
marido no perciban la demanda laboral de la mujer de jornada parcial y la multiplicidad de roles le<br />
genere más tensión que la mujer que trabaja todo el día donde probablemente tiene más<br />
funciones delegadas en terceros. Por otra parte, se puede inferir que dado que se trata de una<br />
muestra de mujeres que están buscando trabajo o disconformes con su trabajo actual,<br />
experimenten al mismo tiempo más conflictos personales.<br />
Tabla 7: Principales problemas de la falta de tiempo según tipo jornada laboral<br />
Completa Parcial<br />
El deterioro de la relación con mis hijos(as). 4.8% 16.7%<br />
El deterioro de mi relación con mi cónyuge/pareja o esposo. 4.8% 33.3%<br />
El deterioro de la relación con mis familiares cercanos. 4.8% 0%<br />
El deterioro de la relación con mis amigos(as). 9.5% 0%<br />
El deterioro de mi salud mental. 19.0% 0%<br />
Falta de tiempo para realizar actividades recreativas y personales. 57.1% 50%<br />
Total 100% 100%<br />
Fuente: Encuesta aplicada en BC&B. UDD. 2009<br />
Conclusiones<br />
Según los datos recogidos en esta investigación, el trabajo flexible es una aspiración para<br />
las mujeres profesionales. La principal motivación para trabajar en una jornada parcial es poder<br />
compatibilizar su rol laboral con el familiar. Sin embargo y pese a las facilidades que les puede<br />
otorgar este tipo de trabajo, las mujeres encuestadas perciben poca oferta de trabajo de media<br />
jornada y que la opción por este tipo de jornada implica pagar un costo en desarrollo profesional y<br />
obtener una baja remuneración.<br />
En términos generales, se piensa que si las condiciones del trabajo jornada completa<br />
fueran más flexibles, como por ejemplo, con mayor libertad de tiempo y espacio (teletrabajo), tal<br />
vez no estaría el anhelo de trabajar part-time. Por ejemplo, cuando se les preguntó a las<br />
encuestadas por las condiciones que debía tener un trabajo que conciliara la vida laboral y<br />
profesional, el mayor porcentaje de mujeres manifestó que debía ser flexible en términos horarios<br />
11
y que se midiera por objetivos. En la misma línea, vemos que un porcentaje de las mujeres que<br />
trabajan jornadas parciales perciben los mismos ingresos que las de jornada completa, lo que<br />
podría estar marcando un cambio de tendencia en la forma cómo medir el trabajo.<br />
Vemos en el caso de este estudio, que las mujeres de trabajos parciales trabajan<br />
preferentemente en empresas de tamaño medio o pequeño. Las mujeres que trabajan en<br />
empresas pequeñas logran mayor conciliación, probablemente porque logran acuerdos<br />
individuales con sus jefes y no porque prime una cultura organizacional pro-conciliación. En ese<br />
sentido, investigaciones más cualitativas dan cuenta que la actitud de las jefaturas directas es<br />
clave para lograr la conciliación.<br />
Sin embargo, no tenemos antecedentes para extrapolar esta conclusión al resto de la población<br />
de mujeres económicamente activas, pero estudios internacionales como el de Glass and<br />
Camarigg sostienen que las empresas pequeñas suelen contratar más mujeres y que hacen más<br />
compatible trabajo y familia. Probablemente la explicación estaría en que la relación interpersonal<br />
y la adaptabilidad de las empresas pequeñas permiten atender mejor las necesidades familiares.<br />
Lo que sostienen es que incluso en las empresas donde las políticas familiares son más<br />
progresistas, los empleados dicen que las concesiones familiares se negocian individualmente con<br />
la jefatura directa.<br />
En términos de política pública y dado que en Chile la participación laboral femenina sigue siendo<br />
baja, el incentivo a las distintas formas de trabajo flexible es un desafío por delante. Este desafío<br />
es principalmente relevante para garantizar la continuidad laboral de la mujer independiente de<br />
sus ciclos vitales. Con una mayor oferta de jornadas parciales se evita que la mujer entre y salga<br />
del mercado lo que evitar pérdidas en beneficios sociales y training laboral.<br />
12
Anexo 1<br />
Perfil de las encuestadas<br />
Para poder extrapolar la información, es necesario conocer ¿cómo son las mujeres<br />
encuestadas?, para ello se ha elaborado el siguiente perfil que intenta describir a las mujeres, el<br />
entorno familiar y la situación laboral de cada una de ellas.<br />
Es necesario mencionar que este perfil está elaborado con la información considerada como<br />
común tanto para las encuestadas que se encontraban en ese momento trabajando (en cualquier<br />
tipo de jornada) o sin trabajo.<br />
Información Personal<br />
En la tabla 1 podemos apreciar la distribución porcentual por edad, estado civil y nivel<br />
educacional de las encuestadas.<br />
Tabla 1: Edad, estado civil y nivel educacional de las encuestadas<br />
Tramo de edad<br />
Estado civil<br />
Nivel educacional<br />
Fuente: Encuesta aplicada en BC&B. UDD. 2009<br />
21 a 30 años 23.6%<br />
31 a 40 años 41.5%<br />
41 a 50 años 27.0%<br />
51 a 60 años 7.9%<br />
Soltera 20%<br />
Casada 56%<br />
En pareja 6%<br />
Viuda 1%<br />
Separada /Divorciada 17%<br />
Educación Técnico- Profesional 2%<br />
Centro de Formación Técnica 4%<br />
Título Universitario 79%<br />
Magíster 14%<br />
Doctorado 1%<br />
13
Tal como observamos, la mayor parte de las encuestadas se encuentra en el rango de<br />
edad de los 31 a los 40 años con un porcentaje importante, también, de mujeres entre los 41 y 50<br />
años. Son en mayoritariamente casadas (56%) y solteras (20%) y en su gran mayoría tienen<br />
estudios universitarios, es decir, estamos hablando de mujeres profesionales que superan los<br />
niveles educacionales obligatorios en nuestro país.<br />
Por otro lado, del total de las encuestadas el 28.9% no tiene hijos y el 71.1% si tiene. De<br />
este porcentaje, la mayor parte de las mujeres tiene entre 2 hijos (26.6%) y 3 (33.2%).<br />
Paralelamente, de quienes son madres la mayor parte de ellas tiene hijos entre los 6 y 18 años o<br />
menores de 6 años.<br />
Finalmente, podemos decir que en términos generales se trata de mujeres entre los 31 y<br />
40 años, casadas, con estudios universitarios, madres y con hijos (mayoritariamente) entre los 6 y<br />
17 años de edad.<br />
Entorno Familiar<br />
Parte del entorno familiar de las encuestadas ya ha sido descrito con anterioridad. En el<br />
apartado anterior se explicó que un porcentaje importante de ellas declaró estar casada y con<br />
hijos, ahora, se describirán aspectos relacionados a su entorno familiar tales como; nivel de<br />
ingresos de la pareja o cónyuge, sector en el que trabaja su pareja o cónyuge, personas que viven<br />
en su hogar, etc.<br />
Del porcentaje de mujeres que declararon estar casadas o en pareja, el 53% de sus parejas<br />
o cónyuges trabaja en el sector privado, seguido por quienes trabajan como profesional<br />
independiente con un 53% y 21% respectivamente. Y sus niveles de ingresos son relativamente<br />
altos pues el 39.3% declaró que sus parejas o esposos reciben un ingreso mensual que va del<br />
$1.200.000 a $2.500.000 y el 32.1% manifestó que sus parejas recibían ingresos sobre los<br />
$2.500.000. (Ver gráfica 1).<br />
Gráfica 1: Nivel de ingresos de la pareja o cónyuge<br />
45.0<br />
40.0<br />
35.0<br />
30.0<br />
25.0<br />
20.0<br />
15.0<br />
10.0<br />
5.0<br />
.0<br />
1.8 1.8<br />
Menos de<br />
$230.000<br />
mensuales<br />
Entre<br />
$230.001 y<br />
$400.000<br />
mensuales<br />
Fuente: Encuesta aplicada en BC&B. UDD. 2009<br />
8.9<br />
Entre<br />
$400.001 y<br />
$680.000<br />
mensuales<br />
16.1<br />
Entre<br />
$680.001 y<br />
$1.200.000<br />
mensuales<br />
39.3<br />
Entre<br />
$1.200.001 y<br />
$2.500.000<br />
mensuales<br />
32.1<br />
Más de<br />
$2.500.001<br />
mensuales<br />
14
Por otro lado, el 91% de ellas declaró que en su hogar en ese momento, no vivían<br />
personas mayores o adultos que necesitasen de su ayuda cotidianamente.<br />
Sus hogares están compuestos, en promedio, por 4 personas (Ver gráfica 2). Esto se<br />
correlaciona con los datos acerca del estado civil de las mujeres y la cantidad promedio de hijos.<br />
No obstante, no hay que perder de vista que esta información incluye a todas las mujeres<br />
independientes de su condición de madres, por lo que incluye, a mujeres solteras y sin hijos que<br />
declaran estar viviendo con otras personas. Estas otras personas podrían ser sus padres,<br />
hermanos, familiares o amigos.<br />
Gráfica 2: Número de personas que viven habitualmente en sus hogares<br />
37%<br />
3%<br />
19%<br />
41%<br />
1-2 personas 3-4 personas<br />
5-6 personas 7-8 personas<br />
Fuente: Encuesta aplicada en BC&B. UDD. 2009<br />
Ahora bien, una variable es la cantidad de personas que viven habitualmente en sus<br />
hogares y otra variable es el número de personas que viviendo con ellas recibe ingresos de forma<br />
mensual. Para poder determinar este número, se le preguntó a cada encuestada por el número de<br />
personas que recibían ingresos en su hogar. Se puede decir que en los hogares de las encuestadas,<br />
en promedio 2 personas reciben ingresos y para ser exactos el 35.7% declaró que sólo una persona<br />
recibía ingresos, un 50% que dos personas, un 8.3% que 3 personas y un 6% que 4 personas.<br />
No hay que olvidar que para poder interpretar estos datos hay que tomar en<br />
consideración que estos porcentajes incluyen a todas las mujeres ya sea que trabajen o no, sean<br />
casadas o no, sean madres o no. Por lo que el 35.7% de mujeres que declaró que sólo recibía una<br />
persona ingresos en su hogar, no quiere decir que sean las mujeres quienes mantienen el hogar.<br />
En algunos casos puede que sí, pero también puede ser el caso de mujeres que vivan con sus<br />
parejas o con sus padres que sea su pareja o uno de sus padres quien trabaje y ella se encuentre<br />
15
sin trabajo. De este modo, los porcentajes presentados no permiten inferir que en algunos casos<br />
sean sólo las mujeres quienes reciben en el ingreso en el hogar o que ellas estén consideradas en<br />
él.<br />
Para subsanar esta carencia, se profundizará en el siguiente apartado la situación laboral<br />
de las mujeres y los niveles de ingresos recibidos por ellas, además, del desarrollo de una<br />
descripción general de la situación laboral de las encuestadas.<br />
Situación Laboral<br />
Uno de los apartados principales de la encuesta correspondía a la situación laboral de las<br />
mujeres.<br />
Del total de las mujeres encuestadas el 80% se encontraba realizando algún trabajo<br />
remunerado y sólo un 20% se encontraba sin trabajo. Cabe mencionar que de este 20% de<br />
mujeres, todas habían realizado algún trabajo remunerado con anterioridad.<br />
Del 80% de mujeres que trabajan, el 65% lo hacía en jornada completa y el 35% en jornada<br />
parcial y de quienes trabajan jornada parcial, la mayor parte de ellas lo hace en la modalidad<br />
media jornada (Ver gráfica 3).<br />
Gráfica 3: Tipos de jornada desarrollada por las encuestadas que trabajan jornada parcial<br />
17%<br />
22%<br />
17%<br />
44%<br />
Media Jornada Tres cuartos de jornada<br />
Por hora Proyecto u objetivo<br />
Fuente: Encuesta aplicada en BC&B. UDD. 2009<br />
Con respecto al sector en que trabajan, la mayor parte de las encuestadas manifestó<br />
trabajar en el sector privado (53%), seguido por un 15% que trabaja en el sector público, un 13%<br />
que trabaja como profesional independiente y un 9% que trabaja en una empresa social de tipo<br />
16
ONG’s o Fundación. Un porcentaje muy inferior de mujeres declaró trabajar en una empresa<br />
familiar u otros.<br />
Sus ingresos se encuentran mayoritariamente en el rango de $680.001 y $1.200.000<br />
mensuales con un 47.8% de mujeres seguido por un porcentaje mucho menor (22.4%) que recibe<br />
un ingreso mensual que va de los $400.001 a los $680.000. Estos niveles de ingresos son mucho<br />
menores que los recibidos por las parejas o cónyuges de las mujeres que declararon estar casadas<br />
o en pareja.<br />
No obstante, pese a esta situación el 37% de las mujeres declaró que con sus ingresos<br />
familiares tenía algunas dificultades económicas. El resto de las mujeres se manifestó<br />
relativamente optimista rescatando un 29% que dice vivir cómoda y holgadamente con los<br />
ingresos recibidos.<br />
Otra información relevante para describir la situación laboral de las mujeres hace referencia<br />
al tamaño de la empresa en donde son empleadas. El 52% de las encuestadas trabaja en empresas<br />
grandes de más de 100 trabajadores y el 48% de las mujeres restantes trabaja en empresas<br />
medianas (de 11 a 100 trabajadores) y pequeñas (menores a 10 trabajadores). Cabe destacar, que<br />
este 48% se divide de forma equitativa entre los dos tipos de empresa; 24% cada una. Con esta<br />
situación como antecedente, resulta relevante desagregar este dato por tipo de jornada (Ver tabla<br />
2).<br />
Tabla 2: Tipo de jornada laboral por tamaño de la empresa<br />
Menor de 10<br />
trabajadores(as)<br />
De 11 a 100<br />
trabajadores(as)<br />
Más de 100<br />
trabajadores(as)<br />
Jornada Completa 11.6% 23.3% 65.1%<br />
Jornada Parcial 47.8% 26.1% 26.1%<br />
Fuente: Encuesta aplicada en BC&B. UDD. 2009<br />
En la tabla 2 podemos apreciar cómo se revierte la tendencia antes descrita si se analiza la<br />
información por tipo de jornada laboral que desarrollan las mujeres. Se observa que a medida que<br />
aumenta el tamaño de la empresa, aumenta también el número de porcentaje de mujeres que se<br />
desempeña a jornada completa, mientras que las mujeres que trabajan jornada parcial lo hacen<br />
preferentemente en empresas pequeñas.<br />
Por otro lado, el mayor porcentaje de mujeres encuestadas se desempeña en puestos<br />
profesionales o de jefatura media (40%), seguido por el 26.2% que lo hace en puestos gerenciales<br />
o ejecutivos y un 15.4% que lo hace como profesional sin jefatura. Esta distribución se condice con<br />
los altos niveles educativos presentados por las encuestadas pero por sobre todo con el perfil de<br />
mujeres pertenecientes a BC&C.<br />
17
Volviendo a hacer el ejercicio anterior, si se analiza el tipo de puesto de trabajo por el tipo<br />
de jornada se observan pequeñas diferencias (ver tabla 3).<br />
Tabla 3: Tipo de jornada laboral por puesto en que se desempeña<br />
Gerencial o<br />
ejecutivo<br />
Profesional,<br />
jefatura<br />
media<br />
Profesional o<br />
trabajador(a)<br />
sin jefatura<br />
Administrativo Otro<br />
Jornada Completa 28.6% 42.9% 9.5% 4.8% 14.3%<br />
Jornada Parcial 21.7% 34.8% 26.1% 4.3% 13.0%<br />
Fuente: Encuesta aplicada en BC&B. UDD. 2009<br />
Esta tabla demuestra que las mujeres que se emplean en puestos gerenciales o de jefatura<br />
media trabajan preferentemente a jornada completa, mientras, que quienes lo hacen en jornadas<br />
parciales lo hacen preferentemente en jefatura media, como profesionales sin jefatura y como<br />
gerente o ejecutivo pero con un porcentaje menor.<br />
Finalmente, podemos mencionar que el 63% de las encuestadas se encuentra conforme con<br />
su trabajo actual, mientras que un 37% opina lo contrario.<br />
Por último, de las mujeres que se encuentran sin trabajo, el 100% de ellas ha tenido algún<br />
trabajo remunerado con anterioridad, al 100% de ellas les gustaría volver a trabajar, llevan en<br />
promedio 4 meses sin trabajo y están en esta situación básicamente por necesidades de la<br />
empresa y por necesidades de sus hijos; 55% y 45% respectivamente. Adicionalmente, el 93.7% de<br />
ellas se encuentra actualmente buscando trabajo y de preferencia desean tener un trabajo más<br />
flexible (Ver gráfica 4)<br />
Gráfica 4: Preferencia de tipo de trabajo en encuestadas que estaban en búsqueda de algún<br />
trabajo<br />
21.4<br />
42.9<br />
14.3<br />
21.4<br />
Muy parecido o igual al que hacía antes<br />
De cualquier tipo, no me importaría iniciar una nueva empresa<br />
Me gustaría que fuese un trabajo más flexible<br />
Otro tipo<br />
Fuente: Encuesta aplicada en BC&B. UDD. 2009<br />
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Con respecto al tipo de jornada que tenían, el 62.5% de ellas tenía un trabajo jornada<br />
completa y un 37.5% jornada parcial. De este 37.5%, el 40% lo hacía en medias jornada, el 40% en<br />
tres cuartos de jornada y un 20% por proyecto u objetivo.<br />
Respecto al área en que se encontraba su ex trabajo, el 81.25% se desempeñaba en el sector<br />
privado, el 12.5% en el sector público y el 6.25% en el sector empresarial. Y se mantiene la<br />
tendencia observada a en las mujeres que trabajan pues el mayor porcentaje de ellas lo hacía en<br />
empresas grandes.<br />
En relación a los ingresos, se observa que los porcentaje de mujeres por tramo de ingresos<br />
es más estable que las observadas en las mujeres que se encontraban actualmente trabajando: el<br />
13.3% ganaba menos de $230.000, el 20% entre $230.001 y $400.000 mensuales, el 13.3% entre<br />
&400.001 y %680.000 mensuales, el 33.3% entre $680.001 y $1.200.000 y el 20% entre $1.200.001<br />
y $2.500.000.<br />
Finalmente, la mayor parte de ellas trabajaba en puestos de trabajo medios sin jefatura,<br />
seguido con jefatura media y gerencial.<br />
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