13 - Parroquia de San Andrés Apostol
13 - Parroquia de San Andrés Apostol
13 - Parroquia de San Andrés Apostol
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
12<br />
La Parròquia <strong>de</strong> S. Andreu Apóstol, Comunitat Viva<br />
Carta a Vicente Colomer<br />
<strong>de</strong>s<strong>de</strong> el recuerdo cariñoso y la admiración<br />
Querido amigo Vicente:<br />
Estoy triste y contrariado porque te has ido<br />
y no he podido <strong>de</strong>spedirme <strong>de</strong> ti. Te vi al principio<br />
<strong>de</strong> tu enfermedad pero <strong>de</strong>spués ya no quise añadir<br />
más fatiga a la que te proporcionó tu cruel enfermedad.<br />
Durante estos días he vuelto la mirada atrás y<br />
he recordado cómo las gran<strong>de</strong>s etapas <strong>de</strong> nuestras<br />
vidas han estado fundamentadas sobre una sólida<br />
amistad y aprecio y, aunque sirviendo a la Iglesia en<br />
distintos sitios, hemos seguido muy relacionados y<br />
unidos por personas y lugares<br />
comunes.<br />
Y en<br />
cada una <strong>de</strong> las<br />
gran<strong>de</strong>s etapas<br />
<strong>de</strong> tu vida nos<br />
has ofrecido calladamente<br />
un<br />
cúmulo <strong>de</strong> virtu<strong>de</strong>s,<br />
cualida<strong>de</strong>s y<br />
buen hacer.<br />
Nos conocimos<br />
en el lejano<br />
septiembre <strong>de</strong> 1956<br />
cuando entramos juntos al<br />
Seminario. Por el or<strong>de</strong>n alfabético que guardábamos<br />
siempre estábamos cerca el uno <strong>de</strong>l otro y pronto nos<br />
hicimos buenos amigos porque, a<strong>de</strong>más <strong>de</strong> la cercanía<br />
alfabética, tú eras muy bondadoso y sencillo y llamabas<br />
a la amistad.<br />
Unos éramos más amigos <strong>de</strong> ti que otros, pero<br />
nunca te vi distanciado y menos enemistado con nin-<br />
L’Alcúdia Cristiana. Desembre 2003<br />
guno <strong>de</strong> nosotros. Con lo fácil que es hablar <strong>de</strong> los<br />
<strong>de</strong>más... y sin embargo nunca te escuché ningún<br />
comentario negativo <strong>de</strong> nadie. ¿Cómo te las arreglabas?<br />
La pru<strong>de</strong>ncia era tu gran virtud.<br />
Entramos en la juventud siendo cada día más<br />
amigos y pu<strong>de</strong> comprobar que no sólo no perdías<br />
ninguna <strong>de</strong> tus virtu<strong>de</strong>s, en esa etapa tan difícil <strong>de</strong> la<br />
vida, sino que apareció en ti un sentido profundo <strong>de</strong>l<br />
humor. Tus comentarios eran certeros, con sensibilidad<br />
y finura, algunas veces socarrones, pero siempre respetuosos<br />
y sin aci<strong>de</strong>z.<br />
Sí que has <strong>de</strong><br />
reconocer que, dominado<br />
por los impulsos<br />
juveniles,<br />
fuiste atrevido con<br />
la velocidad. ¿Te<br />
acuerdas? Te<br />
a<strong>de</strong>lantaste a casi<br />
todos nosotros y<br />
te sacaste muy<br />
pronto el permiso<br />
<strong>de</strong> conducir.Conseguiste<br />
una<br />
moto y sufriste un<br />
acci<strong>de</strong>nte fuerte. Nos tuviste muy preocupados<br />
algunas semanas pero todo se solucionó, aunque te<br />
quedaron algunas señales.<br />
Cuando acabamos los estudios <strong>de</strong>l seminario<br />
nos dispersaron por la diócesis y tú viniste <strong>de</strong> diácono<br />
junto a mi pueblo, a Villargordo <strong>de</strong>l Cabriel y allí<br />
continuamos nuestra amistad. Entonces empezaron a<br />
experimentar los feligreses <strong>de</strong> Villargordo tu calidad<br />
humana, tu entrega, tu sencillez y tu cercanía.