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La Jabar del Nómada - núm. 29 - marzo 2011
Traducción
Camellos,amigos míos, ¿de qué carabosse (1)
sois los ahijados?
Pues no sois en absoluto bellos
con este cuello sin fin y esta alta joroba
donde pastan los cuervos
Dichosos en vuestro pelo los abundantes parásitos.
Vuestro bramido no tiene nada de armonioso
y cuando rumiáis, vuestro aliento emponzoña
el olfato menos delicado
Para vosotros el hombre es un amo insensible y cruel.
Es el que hace sangrar vuestro lomo bajo un baste.
El que os desgarra la nariz con un r'zem, la boca
con una cuerda de sbat
Tenéis hambre y sed, pero él jamás piensa en ello
estáis cansados, pero esto no le preocupa
y los golpes del debús son vuestra recompensa
cuando dáis un paso en falso.
Un solo grito es el responsable,
que a veces se os escapa, y cínico o grosero
el hombre os insulta y recogiendo arena
os la arroja al fondo del gaznate.
Marcháis dóciles, pisando con prudencia
la arena de la duna o los guijarros de la planicie
a llevar a la Sección los víveres de Intendencia
el alambre o el ourag.
Antes de amanecer ya vuestra lastimosa fila
camina resignada y, cuando el sol se pone,
¡Ay! todavía se perfila su sombra
sobre el incandescente horizonte.
Así, durante meses, durante años, sin descanso, sin tregua
lleváis vuestros fardos bajo el mordiente sol,
como si supieseis que vuestro mal sueño
no acabará más que con la muerte.
Pues vuestro destino no es otro que morir en la faena.
Cada uno cuando os toque caeréis agotados
y como jalones, espaciandose en la llanura
quedarán vuestros pobres cuerpos martirizados.
Mis amigos los camellos
Sáhara
¿Consideráis, buenos camellos cuya alma es un misterio,
lo que vuestro destino tendría de impropio
si no hubieseis sido creados para vivir sobre la tierra?
¿Pensáis en ello mientras rumiáis?
Vuestros anchos ollares hendidos, vuestro belfo en continuo rumiar
os dota de un rostro inmutable, petrificado.
En una expresión de estupidez tal
que cualquiera quedaría desanimado
Pero en vuestra mirada tenéis algo
de profundo, de ensoñación, de dulzor, de ternura.
Y parecéis comprendernos un poco cuando
se os habla mientras se os acaricia.
Sí, vosotros reflexionáis sin que nadie se aperciba
y, si consentís en sufrir tantos males,
es porque a vuestra muerte, Dios os acoge
en el paraíso de los camellos.
Allí podréis correr en un buen lugar de pastos,
sin trabas ni correas, en plena libertad,
y aprovecharos del agua, de la hierba y de la sombra
durante toda la eternidad.
Podréis revolcaros en los barrancos profundos,
comer el esfar, el ensil y el djad hasta hartaros.
y abarracar al caer el sol con las barrigas llenas
sobre dunas de fina arena.
¿ Quién sabe incluso, quién sabe si, grotescos comparsas
no encontraréis hombres, condenados
a sacar el delus, para daros de beber
en los adornados abrevaderos?
Pero, vosotros sois mejores que nosotros y vuestra casta
conservando en el más allá su generosidad
será la primera en pedir el perdón
de aquéllos que os atormentaron.
Yo he comprendido todo esto, porque os quiero
a vosotros los más pacientes de todos los animales,
¡Oh! Bondadosos, que lleváis la bondad al extremo
mis buenos amigos los camellos.
(*)”Un camarada oficial francés, meharista en Argelia, Tchad, Djibouti y Mauritania”
Traductor:Juan Gual Fournier. Nómada
(1) Carabosse: Así como en España se suele mencionar a la bruja Pirulí para asustar a los niños, en
Francia se nombra a la sorcièr Carabosse con el mismo fin.
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