XII Certamen Literario Escolar 2012. Poesía. - Ayto Torrejon de Ardoz
XII Certamen Literario Escolar 2012. Poesía. - Ayto Torrejon de Ardoz
XII Certamen Literario Escolar 2012. Poesía. - Ayto Torrejon de Ardoz
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
-Qué envidia, muñequita. esperando pacientemente mi visita. nada te sujeta,<br />
nada te ata. Sólo te preocupas <strong>de</strong> la luna y su sonata. ni siquiera la Muerte te gobierna.<br />
Pues tú y sólo tú eres eterna.<br />
La niña abrazó a su muñeca. La muñeca le correspondió con un abrazo gélido e<br />
inhumano. Un río <strong>de</strong> lágrimas brotaba ahora tras los párpados <strong>de</strong> la niña, pero ella fingía<br />
no darse cuenta.<br />
Una <strong>de</strong> esas perlas <strong>de</strong> agua se precipitó contra el rostro <strong>de</strong> la muñeca. La niña alzó<br />
en vilo a la muñeca hasta la altura <strong>de</strong> su cabeza con una mano mientras le limpiaba con<br />
un pañuelo la lágrima recién caída.<br />
–Muñequita, no tienes que llorar. Ahora juntas por siempre vamos a estar. Unidas<br />
<strong>de</strong> la mano, al amparo <strong>de</strong> las tinieblas. caminando sin miedo entre las brumas y las nieblas.<br />
Guiadas por las estrellas, <strong>de</strong> la noche seremos las doncellas.<br />
La niña acomodó a la muñeca en su regazo y la estrechó entre sus brazos con fuerza.<br />
Tenía miedo. Miedo a la soledad, miedo a la oscuridad. Miedo al vacío que se cernía<br />
sobre ella. Pero se sobreponía a él. Aun conservaba su muñeca favorita.<br />
<strong>de</strong>trás <strong>de</strong> la niña, una dama blanca se alzaba impasible. negro su velo, blanca<br />
su cara. La luz <strong>de</strong> luna parecía esquivar su presencia, <strong>de</strong> manera que un aura sombría<br />
aparecía a su alre<strong>de</strong>dor. La dama Muerte se acercó silenciosamente a la niña. La niña<br />
tiritaba <strong>de</strong> puro terror. La Muerte bajó su mano y acarició el pómulo <strong>de</strong> la niña. ella<br />
abandonó entonces todo miedo y se le serenaron los latidos, en tanto que la dama frígida<br />
se llevaba su aliento con un tierno beso.<br />
La dama Muerte contempló por largo rato a la niña durmiente y serena. Hacía<br />
mucho que ella ya no sentía nada, pero pensó que <strong>de</strong> ser aún humana, consi<strong>de</strong>raría la<br />
escena cuanto menos bella.<br />
el sol comenzó a <strong>de</strong>spertar en el horizonte. La Muerte permaneció en la quietud<br />
un momento más antes <strong>de</strong> <strong>de</strong>svanecerse en el aire como si nunca hubiera existido. en la<br />
habitación, las <strong>de</strong>cenas <strong>de</strong> muñecas persistían en la misma posición que el día anterior.<br />
en medío, una nueva muñeca acunaba en su regazo a otra.<br />
134<br />
colegio Alba<br />
/ / /