Isla Negra 6/254 Casa de poesía y literaturas - Le chasseur abstrait
Isla Negra 6/254 Casa de poesía y literaturas - Le chasseur abstrait
Isla Negra 6/254 Casa de poesía y literaturas - Le chasseur abstrait
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
José Campus<br />
San Juan, Argentina – 1930 - 2009<br />
1<br />
Fue ayer.<br />
No. No fue ayer.<br />
Quizá fue hace mucho tiempo. Lo cierto es que era niño.<br />
¿Era niño?<br />
Sí, tal vez era niño.<br />
Estaba en el campo.<br />
Era la noche <strong>de</strong>l... No importa qué noche era.<br />
Esa noche abrí la ventana.<br />
Nunca lo hice antes.<br />
Miré.<br />
A lo lejos, los perros querían comerse la luna.<br />
No lograban aburrirse.<br />
Entre los ladridos vi una sombra.<br />
Era azul y se movía.<br />
No me importaron los perros.<br />
Aquello se agrandaba. Llegó al marco <strong>de</strong> la ventana.<br />
Cuando quise apresarla, echó a correr.<br />
La seguí.<br />
Después vi el sol.<br />
había corrido toda una noche.<br />
Al llegar a la ciudad, se <strong>de</strong>tuvo.<br />
Era un gato. Un gato azul.<br />
Caminamos juntos.<br />
Pasábamos los autos y los árboles.<br />
Nos metíamos en todas las casas.<br />
Pudo <strong>de</strong>tenerme el agrio grito prendido en el humo <strong>de</strong> cada chimenea,o el canto salado que se filtra por los poros <strong>de</strong>l<br />
cansancio.<br />
Mi gato azul, maullando <strong>de</strong> modo in<strong>de</strong>scifrable pero armonioso al oído me empujaba.<br />
Por las esquinas nos cruzaba algún camión, Cristo,<br />
los bomberos...<br />
y así no podíamos seguir.<br />
Entonces le dije:<br />
-¿Compremos esta casa?<br />
-¿Cuánto vale esta casa?<br />
...Y nos instalamos en la casa.<br />
Era una pieza gran<strong>de</strong> con una ventana no tan gran<strong>de</strong>.<br />
La abrí.<br />
Había otra ventana.<br />
Luego otra,<br />
y otra<br />
y otra.<br />
Fui abriéndolas a todas.<br />
De pronto mi gato me arañó.<br />
La sangre asomó negra <strong>de</strong> dolor.<br />
No le hice caso.<br />
Mi gato fue hasta la puerta. Quedó como esperando que le abrieran.<br />
El timbre sujetó mi intento.<br />
Era un mensajero.<br />
Un telegrama.<br />
Mi gato aprovechó la puerta abierta.<br />
Quise alcanzarlo, pero alguien dijo:<br />
-Firme aquí.<br />
En el telegrama cabía una sóla palabra<br />
2<br />
Entonces,<br />
el buen relojero puso en marcha todos los relojes y se retiró a <strong>de</strong>scansar.<br />
En el principio la marcha era acor<strong>de</strong>.<br />
10