LAS VERDADES DEL ESPIRITISMO copia
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Las Verdades del Espiritismo<br />
contestado: y antes de ser conocido y practicado el Espiritismo<br />
en la Tierra, ¿Cómo abrían los ojos a la luz, los ciegos de<br />
entendimiento? Cuando no había médiums a quien molestar y<br />
entretener, (porque éstos no habían adquirido el menor desarrollo)<br />
¿Qué hacía Dios con aquellos desventurados? ¿Los dejaba<br />
sumergidos en las tinieblas? Esto no parece posible; porque las<br />
leyes Divinas son de toda eternidad, y a Él no se le ocurrirá hoy,<br />
lo que no pensó ayer, por consiguiente, los espíritus en el<br />
Espacio siempre habrán tenido guías y protectores que les<br />
habrán enseñado el camino del arrepentimiento y los medios<br />
más oportunos para salir del caos del dolor; y además, ¿Qué<br />
papel representa en el Universo la humanidad terrena? ¿Qué<br />
virtudes atesoran los habitantes del planeta Tierra? ¿Qué grados<br />
de progreso les hace marcar en la historia de los siglos, los<br />
hechos más culminantes de su vida? Triste y vergonzoso es<br />
confesarlo, pero en todos los tiempos se ha sostenido una lucha<br />
titánica y fratricida, el fuerte dominando al débil, y éste<br />
empleando la astucia y todas las malas artes para vengarse de su<br />
opresor; no ha habido redentor en la Tierra que no haya sido<br />
crucificado, no ha habido sabio que no haya sido objeto de<br />
ludibrio para sus semejantes en el cuerpo, mas no en la<br />
inteligencia.<br />
Todos los grandes inventos han sido bautizados con las<br />
amargas lágrimas de su inventor. Toda religión, todo principio<br />
de moral ha sido maleado y explotado por la ambición<br />
insaciable del hombre. Todos los imperios más poderosos han<br />
levantado su solio sobre montañas de cadáveres. Los políticos<br />
eminentes, los que sostienen en sus tronos a los Césares, no son<br />
otra cosa que mercaderes de coronas. En la Tierra hasta el amor<br />
es un cambio de egoísmo. Y estos espíritus que viven en<br />
continua turbación, en uno de los mundos de peores condiciones<br />
que pueblan los espacios, son los encargados, son los elegidos<br />
para dar luz a los que ya no tienen la camisa de fuerza de nuestra<br />
grosera envoltura. ¿Hemos de instruir a los que están más libres<br />
que nosotros?<br />
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