Con tantos días como tiene el año y tantas fechas señaladas, pocas personas recuerdan lo que se celebra a comienzos del mes de febrero. Cuando la sociedad se regía por criterios religiosos, el calendario estaba lleno de santos y santas que hacían pasar los días y los meses, además de dar nombre a muchas personas. Desde hace un tiempo, el mundo se rige por otros criterios, y rememora los acontecimientos que han tenido repercusión a nivel internacional, como el 11 S, o a nivel nacional como el 11 M; desgraciadamente, en recuerdo de los terribles atentados. El almanaque se va completando para hacernos recordar que también se celebran otras fechas para tener en cuenta como el día internacional contra el SIDA, la lepra, la jornada para la Tolerancia ... incluso el día mundial contra la corrupción, que debería ser durante todo el año. El 6 de febrero es el día internacional contra la mutilación genital femenina, también llamada ablación. Consiste en la eliminación de tejido de cualquier parte de los genitales femeninos. Esta costumbre de origen incierto se practica, en algunos casos, como rito de iniciación y paso a la vida adulta, o bien, por motivos culturales o religiosos, principalmente en África y Oriente Medio, también en algunas regiones de Asia, América y Australia, pero, debido a los movimientos migratorios también se está dando en Europa. Otra de las causas por la que se practica es para que las mujeres, no sientan placer sexual, y poder llegar vírgenes al Revista Pasionario/142 6 de Febrero matrimonio, también para evitar su supuesta promiscuidad. Si nos hicieran lo mismo a los hombres, posiblemente se hubiera acabado este tipo de amputaciones. ¡Menudos somos cuando nos tocan los principios! Además de esta forma de ablación existen otros tipos como la clitoridectomía, circuncisión y la infibulación. La ablación se realiza con medios muy rudimentarios y en unas pésimas condiciones higiénicas. Prefiero no entrar en detalles sobre la manera en que se lleva a cabo, porque a mí, personalmente, se me revuelven las tripas del cuerpo y del alma ante este tipo de atrocidades, que no creo que se justifiquen por ningún motivo cultural o religioso. ¿Puede haber un dios que quiera ver sufrir a sus hijos e hijas para sentirse complacido? Pues apliquémoslo a menor escala. Las consecuencias de esta práctica son la pérdida, casi total de la sensibilidad, así como un trauma psicológico difícil de superar. Muchas mujeres mueren desangradas o se les infectan los órganos dañados, tienen una mala cicatrización, se les forman abscesos o padecen coitos dolorosos. Casi todo va cambiando. Será que el santoral se ha trasformado para hacernos descubrir a esos nuevos santos y santas anónimos que sufren y mueren, víctimas de la enfermedad, y la barbarie humana. Será que el mundo no es tan secular ni antirreligioso como dicen algunos , sino que Dios nos habla con un lenguaje que podamos entender todos y no solo unos pocos. ✒ Juan Carlos Prieto T. jukaprieto@hotmail.com
Peregrinos de Benidorm, en Santa Gema, el día dos de febrero. Los acompaña el párroco, y las religiosas de la Fraternidad “Arca de María. Peregrinos de Alcón y Jódar (Jaén). Visitaron a Santa Gema el dos de marzo de 2012.