- Page 1 and 2:
JULIO VERNE CUENTOS COMPLETOS
- Page 3 and 4:
El destino de Juan Morenas El humbu
- Page 5 and 6:
Finalmente, los guardines del timó
- Page 7 and 8:
espíritu de discordia, Martínez,
- Page 9 and 10:
-Puedes estar tranquilo, José. Har
- Page 11 and 12:
que concernía a la antigua suprema
- Page 13 and 14:
-A ciento cuarenta grados treinta y
- Page 15 and 16:
ta la escota del foque mayor! En es
- Page 17 and 18:
tripulación. No era suficiente hab
- Page 19 and 20:
Constancia y los oficiales, con exc
- Page 21 and 22:
estaba defendida por una batería d
- Page 23 and 24:
México para obtener del general Gu
- Page 25 and 26:
porfíricas de las que la industria
- Page 27 and 28:
-Nuestros caballos no están herrad
- Page 29 and 30:
caballos proceden de las haciendas
- Page 31 and 32:
Martínez y José se protegieron, p
- Page 33 and 34:
descanso, reemprendieron su ruta di
- Page 35 and 36:
las singladuras entre piñas y bana
- Page 37 and 38:
-¡Vámonos! Los viajeros bordearon
- Page 39 and 40:
calabacines en dulce, garbanzos y e
- Page 41 and 42:
después de la conquista se mezclan
- Page 43 and 44:
favorita! Estoque, verdugo, puna, c
- Page 45 and 46:
manojos de paja de la muestra de la
- Page 47 and 48:
De pronto, un enorme pájaro noctur
- Page 49 and 50:
Los dos españoles echaron a andar
- Page 51 and 52:
una parte de esta montaña de cinco
- Page 53 and 54:
-México a la izquierda y Puebla a
- Page 55 and 56:
-No temo a la tempestad del cielo,
- Page 57 and 58:
A pocos pasos, sobre el torrente mi
- Page 59 and 60:
Un drama en los aires En el mes de
- Page 61 and 62:
pasados habían amainado. Ningún s
- Page 63 and 64:
mis compañeros por nuevos sacos de
- Page 65 and 66:
metros de altura por encima de la c
- Page 67 and 68:
también es algo prima de la teorí
- Page 69 and 70:
-¿Quiere disminuir el mérito de l
- Page 71 and 72:
descendieron al otro lado de la bar
- Page 73 and 74:
-Señor - continuó él -, desde el
- Page 75 and 76:
motores destinados a superar la res
- Page 77 and 78:
compañero -. ¿Qué hay más hermo
- Page 79 and 80:
dado cuenta. Podía temer, sin emba
- Page 81 and 82:
lugar, unos estarán bailando, otro
- Page 83 and 84:
general mismo, Coutelle se elevaba
- Page 85 and 86:
-Le he permitido abrir la válvula
- Page 87 and 88:
“- Estamos subiendo - dijo el doc
- Page 89 and 90:
-¡Con buen viento iríamos lejos!
- Page 91 and 92:
Yo no pude responder más que estas
- Page 93 and 94:
el desconocido cortó la cuerda alg
- Page 95 and 96:
infortunada. Yo llegaba a la calle
- Page 97 and 98:
de largos esfuerzos consiguió saca
- Page 99 and 100:
sangró en abundancia. Los desventu
- Page 101 and 102:
las alturas del cielo estrellado se
- Page 103 and 104:
Era la cuerda del ancla que, barrie
- Page 105 and 106:
circulaban alrededor de los grupos
- Page 107 and 108:
por el conspirador Lafuente. André
- Page 109 and 110:
en cuyos libros de cuentas se inscr
- Page 111 and 112:
- Es el Zambo, un loco. El Zambo co
- Page 113 and 114:
personas piadosas, quiso detenerse;
- Page 115 and 116:
desocupados en las tardes de verano
- Page 117 and 118:
visitado por los bebedores de aguar
- Page 119 and 120:
usted a saludar a un clérigo? ¿Es
- Page 121 and 122:
hombre era altivo y no había solic
- Page 123 and 124:
acercado a tierra, hacia la embocad
- Page 125 and 126:
La sombra blanca desapareció como
- Page 127 and 128:
volvían a abrirse hasta las cuatro
- Page 129 and 130:
- Andrés Certa - exclamó el judí
- Page 131 and 132:
que parecía inexplicable era que h
- Page 133 and 134:
Además, nos hemos apostado en las
- Page 135 and 136:
suave luz en el aposento, y la vent
- Page 137 and 138:
huido, burlando la persecución de
- Page 139 and 140:
Cualquier otro que no hubiera sido
- Page 141 and 142:
Poco después, se extinguió la luz
- Page 143 and 144:
sin que nadie sospeche que te encue
- Page 145 and 146:
anterior. Su semblante estaba ilumi
- Page 147 and 148:
treinta mil duros que necesito, le
- Page 149 and 150:
Los baños de mar de Chorrillos se
- Page 151 and 152:
Creía que su corazón había muert
- Page 153 and 154:
mismo tiempo a los indios y a los e
- Page 155 and 156:
que su próximo matrimonio era el o
- Page 157 and 158:
los mestizos, que jamás descendía
- Page 159 and 160:
Después de examinar uno por uno a
- Page 161 and 162:
- ¿Acaso hay algo que nos detenga?
- Page 163 and 164:
gargantas de San Cristóbal y de lo
- Page 165 and 166:
- Si Martín Paz traicionara a sus
- Page 167 and 168:
mientras yo vigilo en la ciudad. Ve
- Page 169 and 170:
Andrés Certa, completamente restab
- Page 171 and 172:
Pero sucedió que, Martín Paz, des
- Page 173 and 174:
- ¿A usted qué le importa? - resp
- Page 175 and 176:
- Tomemos una canoa y salgamos al m
- Page 177 and 178:
y los pasajeros se refugiaron en la
- Page 179 and 180:
sintió que las escamas viscosas de
- Page 181 and 182:
hecho de no llevar en el brazo la s
- Page 183 and 184:
Mientras tanto, Sara, profundamente
- Page 185 and 186:
Sara levantó la cabeza, y Martín
- Page 187 and 188:
iesgo; pero, comprendiendo lo que e
- Page 189 and 190:
Martín Paz guardó silencio, pero
- Page 191 and 192:
numerosas las libaciones de estos l
- Page 193 and 194:
singularmente pensativo. De vez en
- Page 195 and 196:
los contendientes llegaron a pelear
- Page 197 and 198:
elevaban al cielo en ciertos barrio
- Page 199 and 200:
De repente, Manangani, cubierto de
- Page 201 and 202:
Después, se arrojó en brazos del
- Page 203 and 204:
las gargantas de la cordillera, don
- Page 205 and 206:
tierra que revelaban la presión de
- Page 207 and 208:
- Pero tenemos que atravesar ese r
- Page 209 and 210:
grandes gritos de alegría; pero la
- Page 211 and 212:
través de los campos incultos, bla
- Page 213 and 214:
sumergirse con Sara en el torbellin
- Page 215 and 216:
escasa extensión de la isla había
- Page 217 and 218:
econocían en voz alta su superiori
- Page 219 and 220:
-¿Sabe, mi querida señorita - dij
- Page 221 and 222:
entero se condensaba en esta vieja
- Page 223 and 224:
-Tal vez, Gérande. -Cuéntenos eso
- Page 225 and 226:
madre, por la santificación de la
- Page 227 and 228:
sonidos de queja. Trató de volver
- Page 229 and 230:
Gérande, con los pies clavados en
- Page 231 and 232:
elojes que él había montado con t
- Page 233 and 234:
-Sin embargo, maese Zacarías - con
- Page 235 and 236:
-Dime con toda franqueza - continu
- Page 237 and 238:
fija, ni convoyes que partieran en
- Page 239 and 240:
mía, porque yo he copiado la combi
- Page 241 and 242:
la fuerza perdida por sus oscilacio
- Page 243 and 244:
La pobre Gérande habría visto apa
- Page 245 and 246:
temían menos. Seguían recordando
- Page 247 and 248:
familia del relojero. Fue, pues, co
- Page 249 and 250:
la manera de las agujas de una esfe
- Page 251 and 252:
-Sin embargo sigue con nosotros, pa
- Page 253 and 254:
-¡Ah!, ¿es usted el que regula el
- Page 255 and 256:
-¡No demasiado, no demasiado! - re
- Page 257 and 258:
El viejo relojero parecía entonces
- Page 259 and 260:
primero los diferentes relojes de l
- Page 261 and 262:
- Este reloj se atrasa sin que yo c
- Page 263 and 264:
paneles de roble finamente esculpid
- Page 265 and 266:
vieja Escolástica no pudo contener
- Page 267 and 268:
frotamientos, ¡el reloj le estall
- Page 269 and 270:
Gérande miraba a su padre, y abund
- Page 271 and 272:
Pero al punto maese Zacarías se le
- Page 273 and 274:
-¿Dónde puede estar? - se pregunt
- Page 275 and 276:
encantadores. Caminaban impulsados
- Page 277 and 278:
-El orgullo - dijo el ermitaño a s
- Page 279 and 280:
-¡Sí... como mi gloria! ¡Pero es
- Page 281 and 282:
pies. Aquellos vastos amontonamient
- Page 283 and 284:
maestra sin par representaba una vi
- Page 285 and 286:
Maese Zacarías ya no estaba allí.
- Page 287 and 288:
precipitarme en la nada. ¡Ay, hija
- Page 289 and 290:
-¡Toma la llave de este reloj! - r
- Page 291 and 292:
lasfemia: El hombre debe ser esclav
- Page 294 and 295:
Una invernada entre los hielos Cap
- Page 296 and 297:
amonestaciones ya fueron hechas por
- Page 298 and 299:
Al volver al hogar, Juan Cornbutte
- Page 300 and 301:
transformaba delante de Dios sus ru
- Page 302 and 303:
-¿Por qué no iza su pabellón? -
- Page 304 and 305:
André Vasling había dirigido el r
- Page 306 and 307:
numerosos amigos del viejo marino f
- Page 308 and 309:
lanzada esta nueva esperanza a su c
- Page 310 and 311:
saladas, de galletas, de barriles d
- Page 312 and 313:
embarcar han desaparecido y puede u
- Page 314 and 315:
La tripulación estaba completa. An
- Page 316 and 317:
cuando una pequeña mano se apoyó
- Page 318 and 319:
junio. El estado de la mar era buen
- Page 320 and 321:
esa terrible enfermedad que diezma
- Page 322 and 323:
Hacia el 23 de julio, un reflejo el
- Page 324 and 325:
abril, que el deshielo no había co
- Page 326 and 327:
La joven audaz entró al punto en u
- Page 328 and 329:
-¡Vamos, muchachos! - grito el cap
- Page 330 and 331:
una luz blancuzca, sin movimiento e
- Page 332 and 333:
timonel, preparó sus ropas de invi
- Page 334 and 335:
pelo, liso y negro, les caía sobre
- Page 336 and 337:
completo y por la mañana se preocu
- Page 338 and 339:
la tripulación reunida tardó casi
- Page 340 and 341:
oeste, era la única que podía ofr
- Page 342 and 343:
-Palabra que no nos faltarán piele
- Page 344 and 345:
Por lo tanto, el brick no tenía po
- Page 346 and 347:
causa del ruido no venía de los al
- Page 348 and 349:
-¡Mi pobre navío! - exclamo -. ¡
- Page 350 and 351:
estaba; las velas fueron cuidadosam
- Page 352 and 353:
terminados. André Vasling no se ha
- Page 354 and 355:
no dejar sitio en el corazón para
- Page 356 and 357:
separa, Groenlandia del Spitzberg,
- Page 358 and 359:
de foca. Juan Cornbutte y André Va
- Page 360 and 361:
se asustaba al verla, en medio de a
- Page 362 and 363:
aquel hielo resistente. Por eso, Ju
- Page 364 and 365:
un montículo, se descendía más a
- Page 366 and 367:
importaba que la obra resultara bas
- Page 368 and 369:
irritarse contra la debilidad y la
- Page 370 and 371:
-¡Y no sé si escaparemos de ésta
- Page 372 and 373:
situación. Además, era preciso da
- Page 374 and 375:
ello un dolor insostenible, y el ai
- Page 376 and 377:
introdujo, una tras otra, en las cu
- Page 378 and 379:
viento en este punto. Tal vez habr
- Page 380 and 381:
En aquel momento la joven, a los re
- Page 382 and 383:
Hemos sido arrastrados hacia el nor
- Page 384 and 385:
Pero en lugar de obedecer, Penellan
- Page 386 and 387:
estos fríos tan grandes, el sonido
- Page 388 and 389:
André Vasling miraba con inquietud
- Page 390 and 391:
sesenta leguas de aquí. Llegaremos
- Page 392 and 393:
actuado con el objetivo de asegurar
- Page 394 and 395:
los que guiaron a la tropa hacia el
- Page 396 and 397:
almacén de nieve construido sobre
- Page 398 and 399:
se puso de parte de ellos y André
- Page 400 and 401:
daba un calor insuficiente, y cuand
- Page 402 and 403:
-Tomemos las hachas - dijo Luis Cor
- Page 404 and 405:
sentía tal dolor que tenía que vo
- Page 406 and 407:
Los marinos se encontraban tan debi
- Page 408 and 409:
aprovechar la poca fuerza que les q
- Page 410 and 411:
emanación podía atraer a manadas
- Page 412 and 413:
Después de la marcha de Luis Cornb
- Page 414 and 415:
Pierre Nouquet recibió pronto una
- Page 416 and 417:
escalera. André Vasling fue el pri
- Page 418 and 419:
pistolas, entre sus patas sólo sos
- Page 420 and 421:
prometido, André Vasling se había
- Page 422 and 423:
-¡María! ... - dijo al abrir los
- Page 424 and 425:
sus ataduras. Aquel miserable agoni
- Page 426 and 427:
Gervique, Gradlin y Pierre Nouquet
- Page 428 and 429:
meses de luz habían comenzado. Aqu
- Page 430 and 431: hallaban en perfecto estado de cons
- Page 432 and 433: Había tardado cerca de un mes en s
- Page 434 and 435: nombre prueba hasta la saciedad que
- Page 436 and 437: aguas buques de mayor tonelaje y el
- Page 438 and 439: América; pero no se sabía nada m
- Page 440 and 441: años, el más atrevido skipper 1 d
- Page 442 and 443: aspecto comercial. El artículo má
- Page 444 and 445: -Muy bueno; pero, ¿podrás pasar?
- Page 446 and 447: El armamento del Delfín se llevaba
- Page 448 and 449: nombres de marineros que hubieran h
- Page 450 and 451: -Porque sólo a bordo del Delfín y
- Page 452 and 453: -Enseguida. Quién enrola al tío d
- Page 454 and 455: por última vez al atrevido steamer
- Page 456 and 457: entre los humos y la bruma el bosqu
- Page 458 and 459: 1. Instrumento que por medio de agu
- Page 460 and 461: Inclúyale en el cuarto de la maña
- Page 462 and 463: epitió la orden de trepar a la arb
- Page 464 and 465: El contramaestre, desapareció para
- Page 466 and 467: -¿Quién eres ? Un americano, seg
- Page 468 and 469: -Ven. Juan Stiggs siguió al capit
- Page 470 and 471: orden del general Beauregard. Yo es
- Page 472 and 473: Toda la tripulación supo bien pron
- Page 474 and 475: -No son cumplidos: los haré cuando
- Page 476 and 477: -¿De manera - exclamó Playfair, a
- Page 478 and 479: ponerse en contra de los confederad
- Page 482 and 483: que se acercaba a él con los ojos
- Page 484 and 485: Jacobo Playfair no sabía qué deci
- Page 486 and 487: espesa niebla que empezaba a la saz
- Page 488 and 489: -¡Bah! -No se encoja usted de homb
- Page 490 and 491: alas del Iroqués no me harán baja
- Page 492 and 493: El capitán iba a contestar con bas
- Page 494 and 495: otra mujer hubiera sido capaz. En m
- Page 496 and 497: -¡Cómo! - exclamó el capitán -.
- Page 498 and 499: tripulación y acarrearse las maldi
- Page 500 and 501: estaba tan bien prendido en las red
- Page 502 and 503: estaba en poder de las tropas feder
- Page 504 and 505: ganar tiempo, Playfair mandó poner
- Page 506 and 507: -¡Bah! -replicó el americano-. Es
- Page 508 and 509: ondeaba encima de aquel enorme pent
- Page 510 and 511: numerosos brazos acudieron en ayuda
- Page 512 and 513: mismo pasaría la ciudad a sangre y
- Page 514 and 515: -En fin, no tengo nada que ver en e
- Page 516 and 517: En lugar de desesperarse, como hubi
- Page 518 and 519: Capítulo VIII La evasión Jenny, s
- Page 520 and 521: -Le dirá que tiene usted un pícar
- Page 522 and 523: hombres a White Point, al extremo d
- Page 524 and 525: petición del capitán Jacobo Playf
- Page 526 and 527: este último día, la indiscreción
- Page 528 and 529: -Estoy a sus órdenes -respondió M
- Page 530 and 531:
preparados, y se lanzó hacia delan
- Page 532 and 533:
mirando a uno y a otro lado. Jacobo
- Page 534 and 535:
-Sí, querido amo -dijo-, el carcel
- Page 536 and 537:
campana de a bordo. ¡Adelante! ¡V
- Page 538 and 539:
Resonó una segunda detonación y o
- Page 540 and 541:
nocturno, que no parecía dirigido
- Page 542 and 543:
proporcionaría un feliz resultado,
- Page 544 and 545:
preciso a toda costa dejar atrás a
- Page 546 and 547:
Apenas había llegado a la superfic
- Page 548 and 549:
tío Vicente estaba orgulloso al la
- Page 550 and 551:
El doctor Ox Capítulo I De cómo e
- Page 552 and 553:
la principal industria de Quinquend
- Page 554 and 555:
1. Magistrado de la antigua republi
- Page 556 and 557:
empleo de comisario civil que grava
- Page 558 and 559:
pintarrajeados tamizaban apacibleme
- Page 560 and 561:
arruga, sus músculos poco pronunci
- Page 562 and 563:
y a la cual se había prestado la n
- Page 564 and 565:
A las seis, el consejero, que siemp
- Page 566 and 567:
-¿Todavía sigue ardiendo? -pregun
- Page 568 and 569:
-Quizá; pero nos sirve de excusa q
- Page 570 and 571:
del torreón por los españoles en
- Page 572 and 573:
-¿Qué hay, señor comisario? -pre
- Page 574 and 575:
fisiólogo de primer orden y audaz
- Page 576 and 577:
había escogido precisamente a los
- Page 578 and 579:
combustibles, ni aparatos delicados
- Page 580 and 581:
la llave de salida, no sé lo que h
- Page 582 and 583:
arañan! ¡Una población donde el
- Page 584 and 585:
edictos para que semejante escánda
- Page 586 and 587:
-¿No hay nada nuevo, señor consej
- Page 588 and 589:
creerlo, porque el burgomaestre, lo
- Page 590 and 591:
poco y estaba decidido a sostener c
- Page 592 and 593:
esponsable, no quiero incurrir en r
- Page 594 and 595:
acarrear consecuencias funestas? Y,
- Page 596 and 597:
Suzel; mas por perspicaces que sean
- Page 598 and 599:
Conviene decir aquí que Frantz era
- Page 600 and 601:
-¿Quiere usted tomar la caña, Suz
- Page 602 and 603:
-Se acerca, en efecto, Frantz -resp
- Page 604 and 605:
ojivas, rosetones flamígeros, cimb
- Page 606 and 607:
actor era muy vivaracho. Como es f
- Page 608 and 609:
extremidad de la plaza de San Ernul
- Page 610 and 611:
inmenso. El primer acto, interpreta
- Page 612 and 613:
Pero aquella noche, un observador h
- Page 614 and 615:
inconscientemente, en su cantabile,
- Page 616 and 617:
por ocho dramático hacen un seis p
- Page 618 and 619:
Se oye la campana que resuena, pero
- Page 620 and 621:
terminado a las cinco menos doce.
- Page 622 and 623:
uscaba las razones de esta singular
- Page 624 and 625:
presentaba con ciertas condiciones.
- Page 626 and 627:
vez en su casa, hallaban allí con
- Page 628 and 629:
hacen todo el gasto la cerveza y lo
- Page 630 and 631:
pasión se desarrollaban y se le vi
- Page 632 and 633:
3. Danza antigua en compás de 2 po
- Page 634 and 635:
y en igual transcurso de tiempo alc
- Page 636 and 637:
Pronto sucedió lo mismo con los an
- Page 638 and 639:
profesores mismos, que los abrumaba
- Page 640 and 641:
En cuanto a la apreciable Tataneman
- Page 642 and 643:
ocurrían ahora! La señora de van
- Page 644 and 645:
escritos con encarnizamiento, susci
- Page 646 and 647:
ecuerdo de la injuria se debilitar
- Page 648 and 649:
verdadero peligro, puesto que podí
- Page 650 and 651:
-Ciudadanos -dijo entonces el tende
- Page 652 and 653:
Capítulo XIII Donde se prueba una
- Page 654 and 655:
-Le digo, caballero, que el ejérci
- Page 656 and 657:
no se les hacía caso. En estas cir
- Page 658 and 659:
-¡Qué alto es esto! -exclamó el
- Page 660 and 661:
Tricasse, que la humanidad está m
- Page 662 and 663:
En aquel momento, las campanas arm
- Page 664 and 665:
Niklausse contestó que él iba a p
- Page 666 and 667:
Este último incidente demuestra el
- Page 668 and 669:
ayudante exactamente lo mismo que c
- Page 670 and 671:
habían sacado del museo de antigü
- Page 672 and 673:
Aquello fue una batalla. El burgoma
- Page 674 and 675:
Una cosa muy sencilla, como se supo
- Page 676 and 677:
objeto sin pensarlo de los ensueño
- Page 678 and 679:
Tal es la teoría del doctor Ox, pe
- Page 680 and 681:
Spithead, el 23 de diciembre de 178
- Page 682 and 683:
Sorprendidos primero por la oscurid
- Page 684 and 685:
que soportar sus insultantes sospec
- Page 686 and 687:
marineros. El capitán Bligh, al cu
- Page 688 and 689:
suficientemente considerable. Era n
- Page 690 and 691:
acompañarán al capitán Bligh! ¡
- Page 692 and 693:
capitán Bligh, al que probablement
- Page 694 and 695:
vigorosamente, haciendo avanzar a l
- Page 696 and 697:
sobrevivientes? Era quizás lo más
- Page 698 and 699:
pudieran rescatarlo. Además, en es
- Page 700 and 701:
tan bien como yo, cuán miserables
- Page 702 and 703:
¿Estaban estas preparadas para dar
- Page 704 and 705:
una parte de todas las cosas que ha
- Page 706 and 707:
Durante esta escala, la tripulació
- Page 708 and 709:
La narración de las torturas que h
- Page 710 and 711:
alimentarlos, y en la cual pudieran
- Page 712 and 713:
sus compañeros y con herramientas
- Page 714 and 715:
La Pandora había tomado el camino
- Page 716 and 717:
su cúspide de bosques de palmeras
- Page 718 and 719:
directamente hacía la isla Pitcair
- Page 720 and 721:
más tristes instintos que después
- Page 722 and 723:
dinero era desconocido; todas las t
- Page 724 and 725:
nuevamente las costumbres patriarca
- Page 726 and 727:
II Un filósofo guasón dijo, no re
- Page 728 and 729:
doscientas hectáreas reservadas, e
- Page 730 and 731:
El comerciante me miró y se sonri
- Page 732 and 733:
cuentos de caza. No sabía hablar d
- Page 734 and 735:
cuarto para ocho, una nube de pará
- Page 736 and 737:
horizonte. Por todas partes se oía
- Page 738 and 739:
En cuanto a caza, debo decir que ha
- Page 740 and 741:
hubiera muerto de vergüenza si me
- Page 742 and 743:
desgracia. ¡Qué gran noticia para
- Page 744 and 745:
Ni siquiera se le ocurrió pensar q
- Page 746 and 747:
En virtud de ésto no creí deber i
- Page 748 and 749:
sería más fácil que volviese car
- Page 750 and 751:
-No puede ser más que usted -me di
- Page 752 and 753:
Continué andando, pensativo, con l
- Page 754 and 755:
Me aproximé con cuidado con la esc
- Page 756 and 757:
-Sí, licencia. Debe usted saber lo
- Page 758 and 759:
Una hora después llegaba a la posa
- Page 760 and 761:
Frritt-Flacc Capítulo I ¡Frritt..
- Page 762 and 763:
Esto es Luktrop. Unas cuantas morad
- Page 764 and 765:
abre mas que para los ricos. Ademá
- Page 766 and 767:
-¿Aún ese miserable? -¡Soy su ma
- Page 768 and 769:
¡Que tiempo de Frritts y de Flaccs
- Page 770 and 771:
Jura como un cristiano, se levanta
- Page 772 and 773:
Sube, llega a la puerta de la habit
- Page 774 and 775:
funciones de relación se están su
- Page 776 and 777:
Entre conquistadores y conquistados
- Page 778 and 779:
lomo de un flaco asno. Del puesto d
- Page 780 and 781:
villas, de cuarteles. Más allá se
- Page 782 and 783:
algún día, con el progreso de la
- Page 784 and 785:
mono. Pero un excelente militar por
- Page 786 and 787:
- ¡No existe medio alguno para lle
- Page 788 and 789:
pues sabían vengarse (lo habían h
- Page 790 and 791:
un solo defensor, y los ingleses qu
- Page 792 and 793:
exhibe, sino el general Mac Kackmal
- Page 794 and 795:
opuesta? Ya que, en toda la superfi
- Page 796 and 797:
fortuna, a veces adversa, en somete
- Page 798 and 799:
de la Estrella Inmóvil, cuyo imper
- Page 800 and 801:
anticipado de unos acontecimientos
- Page 802 and 803:
esbozaba en su mente el cuadro de l
- Page 804 and 805:
aprendido a producir esa fuerza de
- Page 806 and 807:
que recubría, sin la menor interru
- Page 808 and 809:
de los animales a unos antepasados
- Page 810 and 811:
humanas. No había nada de excepcio
- Page 812 and 813:
pertenecido a seres humanos, y tamb
- Page 814 and 815:
El hombre, apenas aparece sobre la
- Page 816 and 817:
pero no sirve para tener razón con
- Page 818 and 819:
sombra de los árboles, cuyas susur
- Page 820 and 821:
Sí, se trataba de escritura, nada
- Page 822 and 823:
de mí, si es que la humanidad se h
- Page 824 and 825:
jardinero, George Raleigh, y de su
- Page 826 and 827:
Aquel fue el origen de la discusió
- Page 828 and 829:
se esperaba alcanzar las estrellas,
- Page 830 and 831:
-Pues... los babilonios, por ejempl
- Page 832 and 833:
todos haciendo converger sus compas
- Page 834 and 835:
naturaleza, sino, para el pensador,
- Page 836 and 837:
al auto a su paso y se aferraba fue
- Page 838 and 839:
quedaría más remedio que descende
- Page 840 and 841:
no había mas que el vacío, un abi
- Page 842 and 843:
alrededores más inmediatos, pero e
- Page 844 and 845:
A bordo del Virginia, 4 de junio ¿
- Page 846 and 847:
En tierra, enero o febrero Un inter
- Page 848 and 849:
Así pues, ¿habíamos sido salvado
- Page 850 and 851:
Muy pronto pudimos convencernos de
- Page 852 and 853:
¿He hallado las palabras adecuadas
- Page 854 and 855:
Pasamos por encima de Londres, cuya
- Page 856 and 857:
fuerte que pude: ¡Tierra a estribo
- Page 858 and 859:
Evidentemente, aquel mar tan ricame
- Page 860 and 861:
profundidad era de quince brazas. E
- Page 862 and 863:
comestibles. Por la noche nuestro e
- Page 864 and 865:
... que teníamos a bordo del Virgi
- Page 866 and 867:
todas iguales, es decir muy cortada
- Page 868 and 869:
tan abundante antes en la naturalez
- Page 870 and 871:
constatar como las formas se modifi
- Page 872 and 873:
Nuestro pequeño grupo de náufrago
- Page 874 and 875:
Comer, comer, esa es nuestra princi
- Page 876 and 877:
abreviar el doloroso camino de unos
- Page 878 and 879:
un imperceptible estremecimiento re
- Page 880 and 881:
también, el camino recorrido por o
- Page 882 and 883:
Un milenio de cambios por Ariel Pé
- Page 884 and 885:
En este mundo dibujado por Verne po
- Page 886 and 887:
Durante varios años la historia de
- Page 888 and 889:
sus ideas basándose en las diferen
- Page 890 and 891:
Gordon Bennett del famoso periódic
- Page 892 and 893:
Pese a todo, muchos de los estudios
- Page 894 and 895:
velocidad de 1.500 kilómetros por
- Page 896 and 897:
¡Sí! Es el día en que estos dos
- Page 898 and 899:
del día en las innumerables cabina
- Page 900 and 901:
Se encontraba, pues, un poco solo.
- Page 902 and 903:
Muy vasta, esta sala, coronada por
- Page 904 and 905:
comunicación con tal o cual línea
- Page 906 and 907:
Luego regresó con Corley: -Pero a
- Page 908 and 909:
Antes de abandonar la sala de repor
- Page 910 and 911:
¡Si no se tratase más que de lluv
- Page 912 and 913:
destruirían toda una nación en al
- Page 914 and 915:
-¡Entonces es el fin! -murmuró ab
- Page 916 and 917:
-¿Y de dónde vienes, mi querida E
- Page 918 and 919:
egreso de Francis Bennett para la a
- Page 920 and 921:
-¿Y la consecuencia de este descub
- Page 922 and 923:
cierto tiempo, se había decidido a
- Page 924 and 925:
Lo tomó con un sismógrafo, muy pa
- Page 926 and 927:
Bennett acabó su tarea en veintici
- Page 928 and 929:
Francis Bennett, seguido por el doc
- Page 930 and 931:
La familia Ratón Capítulo I Habí
- Page 932 and 933:
de un genio. Los genios buenos hac
- Page 934 and 935:
-¿Cree, pues, usted que puede ir l
- Page 936 and 937:
estaba muy bien pensado para él, p
- Page 938 and 939:
-¡Hada bondadosa -dijo Ratín-, ya
- Page 940 and 941:
Y entonces, queridos niños, se pro
- Page 942 and 943:
delicadamente una magnífica perla
- Page 944 and 945:
figuras fáciles de reconocer; una
- Page 946 and 947:
enojes, mi pobre Rata! Si bien es v
- Page 948 and 949:
Ratín, oprimiendo éste contra su
- Page 950 and 951:
poderosos que fueran los príncipes
- Page 952 and 953:
dejado de hacer muy buen papel sobr
- Page 954 and 955:
Mas he aquí que el tiempo cambia.
- Page 956 and 957:
ulevares, esas plazas, esas calles
- Page 958 and 959:
-Hela ahí -dijo Gardafur-; venid,
- Page 960 and 961:
tapando la abertura, y Ratina qued
- Page 962 and 963:
toda metamorfosis ulterior. La mete
- Page 964 and 965:
de la bella Ratina o hasta el de la
- Page 966 and 967:
Señora hada, ¿no podría desembar
- Page 968 and 969:
interpretan las obras de sus compos
- Page 970 and 971:
A la cabeza del grupo principal se
- Page 972 and 973:
Entonces, la señora Ratona, altiva
- Page 974 and 975:
-¿Quién sabe si hasta a mi propio
- Page 976 and 977:
causar celos al propio don Rata. ¡
- Page 978 and 979:
Hallábanse en lo más empeñado de
- Page 980 and 981:
cuerpo alargado como una colina; mi
- Page 982 and 983:
Como sin duda imagináis, habíase
- Page 984 and 985:
Llegaron, por fin, los viajeros al
- Page 986 and 987:
pelotón cerrado; no pueden abrigar
- Page 988 and 989:
Ante aquella milagrosa aparición,
- Page 990 and 991:
La esfinge acaba de convertirse en
- Page 992 and 993:
varias anas de largo, reemplazando
- Page 994 and 995:
tiempos; su esposa ha vuelto a conq
- Page 996 and 997:
Por entre los pliegues de su unifor
- Page 998 and 999:
mejores bodegas del Olimpo no serí
- Page 1000 and 1001:
por ventura el príncipe como el es
- Page 1002 and 1003:
permaneced tras esa puerta, y no la
- Page 1004 and 1005:
Todos han quedado mudos de estupor;
- Page 1006 and 1007:
En aquel preciso instante, se abre
- Page 1008 and 1009:
-¡Hombre! -grita la duquesa Ratona
- Page 1010 and 1011:
ecriminaciones, se contenta con rep
- Page 1012 and 1013:
era el relativo a la clase, reineta
- Page 1014 and 1015:
La señorita Betty Clére, confusa
- Page 1016 and 1017:
e sostenido, y por qué Betty Clér
- Page 1018 and 1019:
-Quisiéramos escucharla -saltó un
- Page 1020 and 1021:
Espíritu Santo, que habla todas la
- Page 1022 and 1023:
encarnada y las mejillas amoratadas
- Page 1024 and 1025:
aproximaba con sus Gloria, sus Ades
- Page 1026 and 1027:
La casa del posadero estaba situada
- Page 1028 and 1029:
¿Cómo era que no se nos había oc
- Page 1030 and 1031:
pasar mojaron sus dedos en la pila
- Page 1032 and 1033:
más importante de aquellos dos per
- Page 1034 and 1035:
uno tras otro; el flaco mirando a u
- Page 1036 and 1037:
ciudad en ciudad y de pueblo en pue
- Page 1038 and 1039:
-¿Cuál? -El registro de las voces
- Page 1040 and 1041:
la vez, que se llamaba Effarane, se
- Page 1042 and 1043:
acometía un temblor que me duraba
- Page 1044 and 1045:
-No iré, Betty. Y volvía aquel mi
- Page 1046 and 1047:
estaba perfectamente hecho. Guiller
- Page 1048 and 1049:
fondo de la garganta las cuerdas vo
- Page 1050 and 1051:
-¡Volvamos a empezar! -dijo-. Uno
- Page 1052 and 1053:
Y mi voz, procediendo por intervalo
- Page 1054 and 1055:
cura...? ¿Y usted también, maestr
- Page 1056 and 1057:
-¡Bien por los niños! -dijo-. Lle
- Page 1058 and 1059:
las cosas no resultaban a su gusto.
- Page 1060 and 1061:
Obedecí, abracé a mis padres y su
- Page 1062 and 1063:
¡Qué espanto tan tremendo me acom
- Page 1064 and 1065:
obedecen a su director de orquesta,
- Page 1066 and 1067:
illantemente iluminada. ¡Y aquella
- Page 1068 and 1069:
Yo estaba pendiente, espantado, del
- Page 1070 and 1071:
que va a desencadenarse bajo mis pi
- Page 1072 and 1073:
¿Dónde estaba...? ¿Qué había p
- Page 1074 and 1075:
más tarde, con la señorita mi bem
- Page 1076 and 1077:
-Gracias, Almirante; creo que la pe
- Page 1078 and 1079:
-¡Perfectamente! -dijo el Comisari
- Page 1080 and 1081:
una abertura suficiente para dar pa
- Page 1082 and 1083:
emolque de los buques, en el transp
- Page 1084 and 1085:
El señor Bernardón se aprovechó
- Page 1086 and 1087:
aumentasen ellos mismos la severida
- Page 1088 and 1089:
-Pero ¿dónde pueden esconder esos
- Page 1090 and 1091:
distribuyéndose en todas partes el
- Page 1092 and 1093:
a cada uno de sus extremos alrededo
- Page 1094 and 1095:
la guillotina, viuda de todos aquel
- Page 1096 and 1097:
Se apoderó de la moneda, que desap
- Page 1098 and 1099:
cinco años más joven, vivía feli
- Page 1100 and 1101:
aguardaron su madre y su hermano su
- Page 1102 and 1103:
habían ido cambiando de naturaleza
- Page 1104 and 1105:
manos del cadáver se encontró, en
- Page 1106 and 1107:
trazar aquellas cuatro palabras que
- Page 1108 and 1109:
tío Sandro, que había llegado a s
- Page 1110 and 1111:
arresto y la condena de su hermano,
- Page 1112 and 1113:
en todo caso aceptar la oferta que
- Page 1114 and 1115:
indudablemente, imposible el atrave
- Page 1116 and 1117:
pesar de sus esfuerzos, un observad
- Page 1118 and 1119:
la rada, la península de Saint Mad
- Page 1120 and 1121:
altamar ya no hay encuentros que te
- Page 1122 and 1123:
Varias antorchas corrían sobre el
- Page 1124 and 1125:
desaparecer, su cabeza rapada se ha
- Page 1126 and 1127:
libertad. Tranquilo por esta parte,
- Page 1128 and 1129:
llevaba a la espalda algunas provis
- Page 1130 and 1131:
-No es de despreciar. Eso sin conta
- Page 1132 and 1133:
Juan Morenas se puso en marcha; se
- Page 1134 and 1135:
Daban las nueve y la oscuridad era
- Page 1136 and 1137:
había entre las dos placas, y desp
- Page 1138 and 1139:
quien, al sentirse cogido por el cu
- Page 1140 and 1141:
su rostro. Quedaban los ojos, la fr
- Page 1142 and 1143:
De repente percibió el cuerpo derr
- Page 1144 and 1145:
por tierra aquel montón de infamia
- Page 1146 and 1147:
Apresuráronse a tender al notario
- Page 1148 and 1149:
frente que hacía palidecer un mist
- Page 1150 and 1151:
muelle abrasado por el sol, y sobre
- Page 1152 and 1153:
a bordo del paquebot, al que la esp
- Page 1154 and 1155:
-Cualesquiera que sean la ayuda y a
- Page 1156 and 1157:
En aquel instante, resonó el terce
- Page 1158 and 1159:
sofocado al embarcadero, cuyo puent
- Page 1160 and 1161:
-¡Cómo, sus bultos! -replicó el
- Page 1162 and 1163:
imaginación de allende el Océano.
- Page 1164 and 1165:
mil, entre los cuales había dos mi
- Page 1166 and 1167:
Llegó a figurárseme que él exhib
- Page 1168 and 1169:
-¿Por qué el primero? -repuso otr
- Page 1170 and 1171:
sacando de su bolsillo un reloj ado
- Page 1172 and 1173:
El capitán montó en una violenta
- Page 1174 and 1175:
eflexionar. Una parisiense no me ha
- Page 1176 and 1177:
comercio de Burdeos y de El Havre d
- Page 1178 and 1179:
-Lo que, sin duda, le choca -dijo M
- Page 1180 and 1181:
-Ya que esas exhibiciones y esos re
- Page 1182 and 1183:
una débil suma al precio señalado
- Page 1184 and 1185:
triunfante licitador. Innumerables
- Page 1186 and 1187:
curiosidad, o derribar la casa que
- Page 1188 and 1189:
Hopkins se ocupaba ya en reclutar o
- Page 1190 and 1191:
Baltimore. Los musical instruments,
- Page 1192 and 1193:
partido que de ella había de sacar
- Page 1194 and 1195:
Desde su aparición en la ciudad de
- Page 1196 and 1197:
-¿Y quién nos lo impide? -Cornut
- Page 1198 and 1199:
como tal, debían cambiarse las teo
- Page 1200 and 1201:
humbug, como dicen los americanos,
- Page 1202 and 1203:
Brongnart, y otros cien que han esc
- Page 1204 and 1205:
espectáculo único. Por otra parte
- Page 1206 and 1207:
agitada. Llegué, por fin, al borde
- Page 1208 and 1209:
úfalos, de bueyes, de terneros y d
- Page 1210 and 1211:
no pudo acabar más que girando sob
- Page 1212 and 1213:
me costaron para extraerlas? ¿No e
- Page 1214 and 1215:
hombre arruinado y se abrieron susc
- Page 1216 and 1217:
matrimoniales, le responde con tono
- Page 1218 and 1219:
La venta de los manuscritos a la vi
- Page 1220 and 1221:
achiller al terminar los estudios s
- Page 1222 and 1223:
palabra francesa nasal da la sensac
- Page 1224 and 1225:
zancudas, los ojos irreconciliables
- Page 1226 and 1227:
centímetros sobre del nivel del ma
- Page 1228 and 1229:
puerta, dando un ejemplo poco digno
- Page 1230 and 1231:
distinguió al devoto Eneas 4 , su
- Page 1232 and 1233:
marqués abriga sus riquezas bajo l
- Page 1234 and 1235:
-¡Activo! Es activo, e insisto sob
- Page 1236 and 1237:
alcaldía de su pueblo; pero existe
- Page 1238 and 1239:
pronombre siempre toma el lugar del
- Page 1240 and 1241:
¡Pero en estas tardes indescriptib
- Page 1242 and 1243:
Paraclet, ¿qué terribles insomnio
- Page 1244 and 1245:
devoto Naso montó su regenerador c
- Page 1246 and 1247:
¿Qué fracasos podían entonces es
- Page 1248 and 1249:
hubiera sido Titirio! ¡Háganos co
- Page 1250 and 1251:
persona de condición inferior! ¡E
- Page 1252 and 1253:
Era un cerco, en toda la extensión
- Page 1254 and 1255:
-¡Vides quantum te amem! Ya creo o
- Page 1256 and 1257:
conducta de Naso Paraclet! ¡Despu
- Page 1258 and 1259:
mano y de un asunto grande, sobre e
- Page 1260 and 1261:
El señor Pertinax se inclinó en s
- Page 1262 and 1263:
-¡Y eso que importa, señor! -Sin
- Page 1264 and 1265:
ecos, oponiéndose a los de los sú
- Page 1266 and 1267:
-¡Váyase, burgués de las leyes!
- Page 1268 and 1269:
-¡A las siete, el señor marqués
- Page 1270 and 1271:
varias atmósferas, y las infinitas
- Page 1272 and 1273:
saludaron con ella. Es que ella flo
- Page 1274 and 1275:
cuales no les faltó más que una r
- Page 1276 and 1277:
El devoto profesor tomó a su alumn
- Page 1278 and 1279:
pasiones deba fundirse con el prese
- Page 1280 and 1281:
-¿Conoce usted a Fedro 59 ? -le di
- Page 1282 and 1283:
1. Titán. Hijo de Tártaro y Gea,
- Page 1284 and 1285:
libro de consulta de numerosas gene
- Page 1286 and 1287:
21. Vayan a tocar el clarinete. Seg
- Page 1288 and 1289:
nombres partitivos y las tres forma
- Page 1290 and 1291:
50. Palabra formada por Verne. Con
- Page 1292 and 1293:
Las aventuras de un capitán españ
- Page 1294 and 1295:
funciones de satélite y provocase
- Page 1296 and 1297:
familles la historia Los forzadores
- Page 1298 and 1299:
imposible permitirme cualquier vaci
- Page 1300 and 1301:
algunas horas les haremos perder nu
- Page 1302 and 1303:
atmósfera. Eran las nueve de la no
- Page 1304 and 1305:
gigantesco pino, inclinado sobre es
- Page 1306 and 1307:
estaban por encima de la inteligenc
- Page 1308 and 1309:
- ¡Los evitaremos! - ¡Dios lo qui
- Page 1310 and 1311:
- Después hablamos -dijo San Carlo
- Page 1312 and 1313:
- En los lagos de Arastille. - ¿Es
- Page 1314 and 1315:
Los contrabandistas engancharon a s
- Page 1316 and 1317:
- No. Él ha aprendido que los cara
- Page 1318 and 1319:
inmensos, que sólo la mano de Ence
- Page 1320 and 1321:
- ¿No tienes monedas españolas? -
- Page 1322 and 1323:
naciente amanecer. Los flotantes pe
- Page 1324 and 1325:
- Entonces, capitán, ya que se ace
- Page 1326 and 1327:
y en poco tiempo llegaría a los bo
- Page 1328 and 1329:
tan ocupados que no se habían dado
- Page 1330 and 1331:
Pero, ¿existía la embarcación?
- Page 1332 and 1333:
cobre y de hecho impermeables. Si l
- Page 1334 and 1335:
El lago se iluminó de repente con
- Page 1336 and 1337:
tierra, las mercancías, los fusile
- Page 1338 and 1339:
capitán San Carlos se dispersó en
- Page 1340 and 1341:
10. Planta de hojas espinosas, que
- Page 1342 and 1343:
Un expreso del futuro -Ande con cui
- Page 1344 and 1345:
Recompuse mentalmente aquel artícu
- Page 1346 and 1347:
lugar, pasaban luego bajo el atlán
- Page 1348 and 1349:
locos, y que usted puede lograr est
- Page 1350 and 1351:
Luego de perder unos minutos en est
- Page 1352:
norteamericano, referido a los extr