11.10.2013 Views

El urgente llamado de Nuestra Señora

El urgente llamado de Nuestra Señora

El urgente llamado de Nuestra Señora

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

¿Queda alguna esperanza?<br />

No importa cuan tar<strong>de</strong> sea la hora, con tal que estos amenazados <strong>de</strong>sastres no hayan llegado<br />

aún, todavía hay esperanza <strong>de</strong> alejarlos si suficiente gente enmendara sus vidas e hiciera lo que Dios<br />

pi<strong>de</strong>. Leemos en el Antiguo Testamento (Jonás, cap. 3º) que el Dios Altísimo envió al profeta Jonás<br />

a advertir al pueblo <strong>de</strong> Nínive que en 40 días su ciudad sería <strong>de</strong>struida. Al recibir las noticias, el rey<br />

proclamó inmediatamente ayunos y abstinencia, dijo al pueblo que vistiera <strong>de</strong> sayo y cenizas, que<br />

hiciera gran penitencia y que abandonara el mal y la iniquidad <strong>de</strong> sus corazones – y lo hicieron. <strong>El</strong><br />

Dios Altísimo resultó complacido y al fin <strong>de</strong> los 40 días Nínive estaba todavía en pié. Dios había<br />

librado a la ciudad a causa <strong>de</strong> la reparación suficiente que se había hecho.<br />

También leemos en el Antiguo Testamento (Génesis, cap. 18º) que Dios hubiera librado a las<br />

con<strong>de</strong>nadas ciuda<strong>de</strong>s <strong>de</strong> Sodoma y Gomorra si se hubiera encontrado diez personas justas en ellas.<br />

Hoy el Dios Altísimo libraría a América, y hasta a todo el mundo <strong>de</strong> los castigos horribles<br />

vaticinados para nosotros si, proporcionalmente, pue<strong>de</strong>n encontrarse diez “justos” dispuestos a hacer<br />

Reparación –dispuestos a seguir el “plan <strong>de</strong> paz <strong>de</strong>l Cielo”.<br />

Victorias <strong>de</strong>l Rosario<br />

<strong>Nuestra</strong> <strong>Señora</strong> abogó e insistió para que la gente rece el Rosario diariamente. La reparación<br />

retiene la mano <strong>de</strong> Dios <strong>de</strong> golpear al mundo en castigo justo por sus muchos crímenes. <strong>El</strong> Rosario<br />

es como una espada o un arma que la Madre <strong>de</strong> Dios pue<strong>de</strong> usar para <strong>de</strong>rrotar la herejía y las fuerzas<br />

<strong>de</strong>l mal. Es sumamente po<strong>de</strong>rosa, y muchas veces ha salvado al mundo <strong>de</strong> las situaciones malas<br />

como la que enfrentamos hoy.<br />

Lepanto, 1571<br />

Hace unos pocos siglos, los turcos estaban <strong>de</strong>sbordando toda Europa y parecían estar al bor<strong>de</strong><br />

<strong>de</strong> arrasar la Cristiandad. Cuando todo parecía perdido, el Papa San Pío V organizó una Cruzada <strong>de</strong>l<br />

Rosario. <strong>El</strong> pidió a los católicos <strong>de</strong> todas partes que rezaran el Rosario para pedir a <strong>Nuestra</strong> <strong>Señora</strong><br />

que los librara <strong>de</strong>l <strong>de</strong>sastre inminente. Cuando llegó el día <strong>de</strong> la gran batalla, los soldados cristianos<br />

entraron en batalla, literalmente, con la espada en una mano y el Rosario en la otra. Así, el 7 <strong>de</strong><br />

octubre, fiesta <strong>de</strong>l Santísimo Rosario, tuvo lugar en Lepanto una <strong>de</strong> las más gran<strong>de</strong>s victorias<br />

militares en toda la historia. La pequeña flota cristiana, muy sobrepasada en número, <strong>de</strong>rrotó a la<br />

po<strong>de</strong>rosa armada turca y salvó a la Cristiandad – todo gracias al po<strong>de</strong>r <strong>de</strong>l Rosario.<br />

Hiroshima, 1945<br />

La casa parroquial <strong>de</strong> la iglesia <strong>de</strong> la Asunción <strong>de</strong> <strong>Nuestra</strong> <strong>Señora</strong> en Hiroshima quedó en pie<br />

el 6 <strong>de</strong> agosto <strong>de</strong> 1945, <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> que la bomba atómica matara a 200.000 personas en la ciudad.<br />

La iglesia al lado <strong>de</strong> la casa parroquial fue completamente <strong>de</strong>molida por la explosión atómica. Nada<br />

quedó en pie en esa calle. No quedó, en realidad, la calle misma. Todo eso también fue<br />

completamente <strong>de</strong>struido. Sólo la casa parroquial quedó en pie en medio <strong>de</strong> los escombros<br />

circundantes y cuatro sacerdotes católicos que estaban <strong>de</strong>ntro sobrevivieron a esa, la primera<br />

explosión atómica. Fue porque ellos estaban viviendo el Mensaje <strong>de</strong> <strong>Nuestra</strong> <strong>Señora</strong> <strong>de</strong> Fátima que<br />

se salvaron <strong>de</strong> una muerte cierta. 7 Verda<strong>de</strong>ramente, <strong>Nuestra</strong> <strong>Señora</strong> <strong>de</strong> Fátima y Su Rosario son más<br />

po<strong>de</strong>rosos aun que la bomba atómica.<br />

7 <strong>El</strong> Padre Hubert Schiffer, uno <strong>de</strong> esos sacerdotes, estaba en la casa parroquial que estaba sólo a ocho calles<br />

<strong>de</strong>l punto cero cuando explotó la bomba atómica. Más <strong>de</strong> doscientos expertos lo habían estudiado<br />

http://www.fatima.org/span/crusa<strong>de</strong>r/olua/pdf/olua.pdf 14

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!