Saga 06

30 minutos por días es una de las recomendaciones
de la American Heart Association
para tener un corazón sano- y también las
articulaciones de las rodillas, ya que gran
parte del peso del cuerpo es amortiguado
por el asiento. Para algunos expertos, la bicicleta
es una buena alternativa al jogging
porque con los movimientos cíclicos las articulaciones
soportan menos carga.
Caminatas, carreras, senderismo, natación
y práctica de gimnasia en un parque, por
ejemplo, son otras prácticas que permiten
eludir las cuatro paredes de un gimnasio.
Muchas de estas pueden realizarse en las
ciudades, pero también vale la pena alejarse
un poco para entrar en contacto con la
naturaleza. ¿Qué mejor lugar que Mendoza
para encontrar increíbles lugares lejos del
ruido, el smog y la tensión de las ciudades?
Las caminatas, carreras y senderismo son
ideales para las personas que buscan desestresarse
en contacto con la naturaleza.
Ver verde, espacios abiertos, cielos límpidos,
entrar en contacto con especies vegetales
y, tal vez, con algún animal, sin dudas
renueva energías aunque la actividad física
genere cansancio. Escuchar el fluir del agua
de arroyos y ríos relaja y beneficia tanto el
físico como la mente.
En la montaña y los bosques la naturaleza
hasta puede ser una buena asistente en la
actividad. U tronco caído puede servir de
banco de ejercicio para, por ejemplo, tra-
Montar en bicicleta
30 minutos por día
ayuda a mantener
sano el corazón.
bajar los bíceps y un arroyo bien delgado
puede ser tomado como obstáculo para
saltar una y otra vez de una orilla a otra
Quienes no tengan tiempo para alejarse de
la ciudad no deben desanimarse. En Mendoza
hay varios parques y plazas donde se
puede ejercitar el cuerpo con gimnasia aeróbica,
de tonificación y con estiramientos.
Aunque no sean troncos, los bancos públicos
pueden servir como apoyo para hacer
gimnasia.
La actividad al aire libre también hace que
el ejercicio sea más llevadero porque es
más fácil disfrutar de lo que se ve y, así,
además se evita la fatiga.
De buen humor
La actividad física no sólo contribuye a
mejorar la salud física de quienes la practi-
can sino también su bienestar psicológico.
Practicar deportes repercute en el humor
de las personas, su optimismo, su modo de
encarar problemas y hasta de relacionarse
con los demás.
Por el contrario, el sedentarismo extremo
puede llevar a la depresión, angustia, inseguridad,
ansiedad mal humor, estrés y hasta
tener impacto físico (como aumentar el
riesgo de enfermedades cardíacas o incre-
Revista de OSPELSYM | 11