revista completa en pdf - Revista EL BUHO
revista completa en pdf - Revista EL BUHO
revista completa en pdf - Revista EL BUHO
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
luchas, suel<strong>en</strong> t<strong>en</strong>er himnos emblemáticos, <strong>en</strong> México<br />
además, es un hecho frecu<strong>en</strong>te que se <strong>en</strong>tone el Himno<br />
Nacional al finalizar un mitin. Hoy algunos se conservan,<br />
otros se han adaptado <strong>en</strong> serio o como parodia a<br />
partir de canciones populares a las que se les cambia<br />
la letra.<br />
En una conmemoración del 1 de mayo, convocada<br />
por el Sindicato Mexicano de Electricistas (SME)<br />
<strong>en</strong> el año de 2009, se animaba a los manifestantes<br />
con una adaptación de Bule Bule, que es un rock de<br />
los años 60 y <strong>en</strong> México la popularizaron los Johnny<br />
Jets. Cambiando la letra original por una letra chusca<br />
que satirizaba y of<strong>en</strong>día al presid<strong>en</strong>te de la república<br />
Felipe Calderón.<br />
…les platicaré<br />
De un pinche bandido<br />
Que vive <strong>en</strong> Los Pinos<br />
Y todos le gritan<br />
Felipito, Felipito,<br />
Felipito, Felipito,<br />
El putito<br />
Estas parodias, como afirma Ayats son “consignas<br />
resignificadas”. Se trata, dice, de una alteración que<br />
incorpora experi<strong>en</strong>cia y valores implícitos, aunque ni<br />
se compartan del todo, ni se interpret<strong>en</strong> de manera<br />
homogénea por los participantes. Las parodias nos<br />
sumerg<strong>en</strong> <strong>completa</strong>m<strong>en</strong>te <strong>en</strong> el complejo juego de la<br />
intertextualidad. 1<br />
La música de la protesta <strong>en</strong> todas sus verti<strong>en</strong>tes<br />
forma parte de la memoria colectiva de la izquierda<br />
mexicana. Esta memoria puede <strong>en</strong>t<strong>en</strong>derse como dice<br />
Paolo Montesperelli 2 , como “la selección, interpretación<br />
y transmisión de ciertas repres<strong>en</strong>taciones del<br />
pasado a partir del punto de vista de un grupo social<br />
determinado. La memoria colectiva es siempre intrínsecam<strong>en</strong>te<br />
plural: es el resultado, nunca adquirido<br />
definitivam<strong>en</strong>te, de conflictos y compromisos <strong>en</strong>tre<br />
voluntades de distintas memorias. El lugar donde estas<br />
voluntades se <strong>en</strong>fr<strong>en</strong>tan es la esfera pública, la ar<strong>en</strong>a<br />
donde grupos diversos compit<strong>en</strong> por la hegemonía<br />
sobre los discursos plausibles y relevantes d<strong>en</strong>tro de la<br />
sociedad <strong>en</strong> su conjunto.”<br />
Si es cierto que la memoria colectiva contribuye a<br />
la cohesión y la id<strong>en</strong>tidad social, <strong>en</strong>tonces la música<br />
revolucionaria ha jugado un papel fundam<strong>en</strong>tal <strong>en</strong> la<br />
construcción de ese grupo social que podemos llamar<br />
la izquierda mexicana, la música ha sido (es) una de<br />
las expresiones más importantes de la protesta y <strong>en</strong><br />
México ha t<strong>en</strong>ido valiosos creadores e intérpretes.<br />
A partir de una peculiar repres<strong>en</strong>tación del pasado,<br />
la izquierda se ha apropiado de la música de la<br />
Revolución Mexicana, de la del Card<strong>en</strong>ismo, porque,<br />
se decía, aunque <strong>en</strong>tregó el poder a la reacción, fue un<br />
visionario y un reformador social, la de la República<br />
Española, la de la Revolución Cubana, un amplio repertorio<br />
de cánticos latinoamericanos, sin olvidar la Folk<br />
Music y sus grandes expon<strong>en</strong>tes, Pete Seeger (We shall<br />
overcome, se convirtió <strong>en</strong> el himno del movimi<strong>en</strong>to por<br />
los derechos civiles), Joan Baez y Bob Dylan, hasta que<br />
este último cometió el sacrilegio de cambiar la guitarra<br />
acústica por la eléctrica <strong>en</strong> el Newport Folk Festival<br />
de 1965 y dar un giro radical al sonido que hasta<br />
<strong>en</strong>tonces había caracterizado su trayectoria. El público<br />
asist<strong>en</strong>te, y su guía espiritual Seeger, no recibieron de<br />
bu<strong>en</strong> agrado la conversión de Dylan, y tres canciones<br />
después tuvo que abandonar el esc<strong>en</strong>ario <strong>en</strong> medio<br />
de una <strong>en</strong>orme rechifla. Unos dirán que se rindió ante<br />
la “civilización del espectáculo” 3 como ha llamado<br />
Vargas Llosa, a la cultura del gran público, la de masas,<br />
la música intrasc<strong>en</strong>d<strong>en</strong>te no comprometida con la realidad<br />
política. Sin <strong>en</strong>trar <strong>en</strong> mayor detalle, simplem<strong>en</strong>te<br />
diré que su interpretación de Like a Rolling Stone cambió<br />
la ortodoxia, por el rock distorsionado y estrid<strong>en</strong>te<br />
pero magnífico que se basta a sí mismo sin necesidad<br />
de servir a una causa externa por loable que ésta sea.<br />
De tal modo que la izquierda mexicana ha seleccionado<br />
y transmitido esta música a partir de un peculiar<br />
punto de vista y ha forjado de esa manera una id<strong>en</strong>tidad<br />
que es plural porque compr<strong>en</strong>de a muchos grupos,<br />
que aunque de izquierda, ti<strong>en</strong><strong>en</strong> intereses y valores que<br />
pued<strong>en</strong> diferir <strong>en</strong>tre sí, pero que <strong>en</strong>cu<strong>en</strong>tran un punto<br />
de unión <strong>en</strong> la música.<br />
Por último quiero referirme brevem<strong>en</strong>te a un programa<br />
radiofónico que fue pionero <strong>en</strong> la transmisión de<br />
62 El Búho