Me refiero a su nota --------, mediante la cual solicita se lleven a ...

Resumen
Clasificación
Referencia del
Documento
Sobre la posibilidad de abrir cuentas corrientes a nombre de
los fondos de inversión y de obtener créditos a cargo de los
fondo sin que estos posean personería jurídica.
Fondos de inversión financieros y sus Sociedades
Administradoras
C02/01/3871
Fecha del documento 17/09/2009
Normativa relacionada Ley Reguladora del Mercado de Valores (artículos 62)
Reglamento General de Sociedades Administradoras y
Fondos de Inversión
Frases Claves
FONDOS DE INVERSIÓN FINANCIERO; FINANCIAMIENTO
Criterio
Me refiero a su nota ‐‐‐‐‐‐‐‐, mediante la cual solicita se lleven a cabo las gestiones
pertinentes ante el Registro Público, Ministerio de Hacienda y SUGEF, a efectos de otorgar
a los fondos financieros su propia personería.
Señala en su solitud que algunos fondos financieros se han enfrentado con el problema de
que los bancos, aduciendo regulaciones de SUGEF, indican que se encuentran
imposibilitados para abrir cuentas corrientes y suministrar créditos, por cuanto el fondo
no posee personería jurídica. Por esta razón, solicita se realice el trámite respectivo para
el otorgamiento de personería jurídica, tomando como base el antecedente de los fondos
inmobiliarios que cuentan con un número de cédula jurídica.
En primer lugar, se estima pertinente aclarar la diferencia conceptual existente entre la
personería jurídica y la cédula jurídica. La personalidad jurídica o personería jurídica se
encuentra aparejada a la condición de persona jurídica, esta última entendida como
aquella entidad a las que el Derecho atribuye y reconoce capacidad para actuar como
sujetos de derecho, esto es, capacidad para adquirir y poseer bienes de todas clases, para
contraer obligaciones y ejercitar acciones judiciales. En tal sentido, debe aclararse que la
existencia de las personas jurídicas deviene de la ley que a través de la calificación
normativa les atribuye personalidad jurídica.[1]
Por otro lado, registralmente la cédula jurídica es una forma de identificación de las
personas jurídicas inscritas, ya sea en el Registro Personas Jurídicas en el Registro
Mercantil o bien ante el registro de otras instituciones. No obstante, la cédula jurídica no
constituye de ninguna manera una acreditación de la existencia o vigencia de la figura
legal a la que corresponde, ni menos aún su personería jurídica.

Como se indicó antes, la condición de persona jurídica únicamente puede ser conferida
por ley, por lo que la cédula jurídica es únicamente un elemento de identificación
registral, de forma tal que se podría afirmar que únicamente sirve para tales efectos. La
verificación de la personería jurídica no se acredita mediante la cédula jurídica, sino
mediante la certificación que se emite registralmente para tales efectos, o bien mediante
la certificación expedida por un Notario Público debidamente acreditado.
Realizada la anterior aclaración, corresponde determinar si la Ley Reguladora del Mercado
de Valores le ha conferido a los Fondos de Inversión la condición de persona jurídica.
El artículo 62 de la LRMV caracteriza los fondos de inversión en los siguientes términos:
"Artículo 62.‐ Características de los fondos de inversión
Los fondos de inversión serán patrimonios separados pertenecientes a una
pluralidad de inversionistas. Con el concurso de una entidad de custodia, serán
administrados por las sociedades administradoras reguladas en este título y se
destinarán a ser invertidos en la forma prevista en el prospecto, dentro del marco
permitido por esta ley y los reglamentos de la Superintendencia. El derecho de
propiedad del fondo deberá representarse mediante certificados de participación.
Para todo efecto legal, al ejercer los actos de disposición y administración de un
fondo de inversión se entenderá que la sociedad administradora actúa a nombre
de los inversionistas del respectivo fondo y por cuenta de ellos."
Del artículo transcrito, se desprende que el legislador no le otorgó a los fondos de
inversión personalidad jurídica, no obstante, sí le otorgó el carácter de patrimonio
separado frente a la sociedad administradora con una connotación y efectos que
sobrepasan la mera concepción tradicional de patrimonio[2] y que lo acercan al
patrimonio autónomo que brota del contrato de fideicomiso[3]. En este sentido, deben
subrayarse determinadas normas de la LRMV que reafirman la condición de patrimonio
separado del fondo frente a la sociedad administradora, tanto en materia de quiebra o
liquidación como en materia tributaria[4].
En otras palabras, aún cuando el fondo carece de personalidad jurídica, el legislador le
otorgó rasgos típicos de un patrimonio separado. Dado que los fondos carecen de
autogestión, dicha función es asumida por la sociedad administradora a través de la figura
del mandato representativo de carácter legal, en la medida en que, de conformidad con la
Ley, la sociedad administradora actúa en nombre y por cuenta del fondo y es en definitiva
al fondo al que se reputan los actos realizados por ella.

Dado lo anterior, esto es, la separación patrimonial y la imputación de derechos y
obligaciones al fondo, resulta legalmente posible la apertura de cuentas corrientes a
nombre de los fondos de inversión, así como la obtención de créditos a cargo del fondo.
Cabe aclarar, que dicha apertura, así como la solicitud del crédito, debe ser llevada a cabo
por la sociedad administradora dado su carácter de representante del fondo.
Es por ello que resulta innecesaria la solicitud de otorgar personería jurídica a los fondos,
por cuanto a pesar de que la ley no le ha otorgado personalidad jurídica, sí los ha
revestido con características propias de un patrimonio autónomo, cuyo tratamiento
podría asimilarse al tratamiento que se les otorga a los fideicomisos.
Asimismo, se aclara que los fondos de inversión inmobiliarios tampoco cuentan con
personalidad jurídica; no obstante, por la naturaleza especial de las inversiones realizadas
por dichos fondos, y debido a la necesidad de identificación registral de los bienes en el
Registro Público, se les confirió para efectos registrales un número de cédula
jurídica. Como se indicó anteriormente la cédula en ningún momento se puede constituir
como una acreditación de la existencia o vigencia de la figura legal a la que corresponde.
Por último, estima esta Superintendencia que la problemática que se está suscitando, se
debe a un desconocimiento de la naturaleza jurídica de los fondos por parte de las
instituciones bancarias. Se presume que para la apertura de cuentas y el otorgamiento de
créditos, se les está exigiendo a los fondos de inversión presentar los mismos requisitos de
identificación que a las sociedades u otras personas jurídicas, lo cual resulta incorrecto e
imposibilita la actividad de los fondos. No obstante, dicha imposibilidad gira en torno a la
una aplicación inapropiada de las políticas de identificación requeridas por la
Superintendencia General de Entidades Financieras.
En vista de lo anterior, se hace extensiva esta comunicación a la Superintendencia General
de Entidades Financieras a efectos de que aclare con sus regulados la naturaleza de los
fondos de inversión, y así evitar la problemática aducida por esa Cámara.
[1] Pérez Vargas, Víctor. "Derecho Privado". San José, Editorial Publitex, 1988, pag.35
" (…) Del mismo modo, la persona jurídica es el resultado de un substrato material, que
puede ser un conjunto de personas o de bienes organizados unitariamente según las
condiciones legales, y de la calificación normativa de tal substrato, o sea, la atribución de
personalidad jurídica.
Tal es el sentido en que debe entenderse la disposición por la cual "la existencia de las
personas civiles proviene de la ley o del convenio conforme a la ley", la cual, a través de la
calificación normativa es la fuente formal de la personalidad jurídica de las llamadas
personas civiles."

[2] Algunas de las definiciones que brinda CABANELLAS (Guillermo), sobre patrimonio son
: "El conjunto de bienes, créditos y derechos de una persona y su pasivo, deudas u
obligaciones de índole económica … 'Conjunto de los derechos y de las cargas, apreciables
en dinero, de que una misma persona puede ser titular u obligada y que constituye una
universalidad jurídica. La palabra se emplea alguna vez para designar una masa de bienes
que tiene una afectación especial; por ejemplo, una fundación' (Capitant) … "Diccionario
Enciclopédico de Derecho Usual, T. VI, Buenos Aires, Editorial Heliasta, 1989, pág. 153
[3] El Artículo 634 del Código de Comercio establece: "Pueden ser objeto de fideicomiso
toda clase de bienes o derechos que legalmente estén dentro del comercio. Los bienes
fideicomitidos constituirán un patrimonio autónomo apartado para los propósitos del
fideicomiso.
[4] El artículo 98 párrafo primero de la LRMV dispone que “en caso de quiebra o
liquidación de una sociedad administradora de fondos de inversión, los activos de cada uno
de los fondos que administra no pasarán a integrar la masa común de la universalidad, ni
podrán ser distribuidos como haber social entre los socios".
El artículo 100 de la LRMV establece un tratamiento tributario favorable para los fondos
de inversión, como entes de imputación de derechos y obligaciones independientes de las
sociedades administradoras.
El artículo 74 de la LRMV relativo a la constitución y requisitos de los fondos de inversión,
establece requisitos tales como la denominación, el objeto, la duración, así como su
inscripción en el Registro Nacional de Valores e Intermediarios.