Profesión Dental julio-agosto-septiembre 2012 - COEM

La transición
de clínicas
una oportunidad en un entorno
difícil y cambiante
Para los propietarios de clínicas las transiciones y compraventas son, sin
duda, una gran oportunidad tanto para los profesionales en los inicios de
su carrera (como acceso a la propiedad de una clínica viable), como para
aquellos que se encuentran en una fase más tardía de su ejercicio
profesional y se plantean reducir o poner fin a su actividad laboral.
En las últimas tres décadas se ha producido una verdadera
revolución de la Odontología desde el punto
de vista técnico y asistencial. El dentista español, como
profesional, ha ido evolucionando y ha conseguido,
con el esfuerzo de varias generaciones, que la Odontología
española progresara enormemente desde el
punto de vista de la calidad asistencial. Y que su nivel
técnico en el panorama internacional fuera muy elevado;
mayor, incluso, que el que le correspondería
teniendo en cuenta el nivel de desarrollo de nuestro
país. Son frecuentes las alabanzas de expertos extranjeros
hacia los profesionales españoles, en lo que a la
calidad del servicio odontológico se refiere.
En la década actual estamos asistiendo a un cambio
de paradigma en el sector. Los que conocen las reglas
del juego que han imperado hasta ahora e incluso
han tenido un éxito profesional fulgurante comprueban
con asombro que lo que antes funcionaba ha
dejado de hacerlo. Estas reglas de juego están cambiando
y seguirán haciéndolo, con el agravante de
que la velocidad de cambio es cada vez mayor.
Atraer, satisfacer y fidelizar
Mientras que hasta ahora el motor del cambio tenía
una base técnica, a partir de ahora será cada vez
más organizacional. Cualquier dentista consagrado
en ese escenario vigente en los últimos años, intenta
inculcar en los que le siguen, la excelencia técnica
como motor de desarrollo, de diferenciación y como
clave de éxito profesional. En el nuevo panorama
competitivo continuará siendo fundamental la formación
clínica o asistencial, será más necesaria que
nunca, pero no será suficiente. Ni siquiera será crítica
para alcanzar el éxito de la clínica dental. Serán las
capacidades organizativas las que determinen si una
clínica está preparada para enfrentarse con éxito al
nuevo escenario competitivo que se está gestando a
pasos cada vez más de gigante.
La diferencia fundamental frente a épocas pasadas
es que el dentista como empleado pasa de ser un
recurso escaso a uno abundante. Ya existe un exceso
de oferta de profesionales que no hará sino acrecentarse
en los próximos años. En un cuarto de siglo el
número de habitantes
por dentista se habrá
reducido a poco más
de un tercio: de unos
3.000 a unos 1.100.
Hasta ahora la mayoría
de los dentistas
eran profesionales
liberales o pequeños
empresarios; a partir
de ahora, imperará un
sistema de empleadores
y empleados.
Tanto para unos
Las
capacidades
organizativas
determinan si
una clínica
está preparada
para
enfrentarse
con éxito al
nuevo
escenario
competitivo
julio-agosto-septiembre 2012