Descargar PDF - Universidad Nacional de RÃo Cuarto
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ISSN 1515-1549
Secretaría Académica – Coordinación <strong>de</strong> Vinculación – Área <strong>de</strong> Información Académica<br />
3<br />
Editorial:<br />
A través <strong>de</strong> la colección <strong>de</strong> tres cua<strong>de</strong>rnillos, nos propusimos<br />
escribirle a los jóvenes que sueñan y se comprometen con continuar<br />
su educación, en una <strong>Universidad</strong> Pública, que incluye<br />
en sus objetivos una formación integral como profesionales y<br />
ciudadanos <strong>de</strong> pensamiento crítico y capacidad transformadora.<br />
Somos sujetos históricos en este tiempo que hoy transitamos<br />
(siglo XXI) en el mismo entramado cultural que hemos construido<br />
y que nos invita y nos <strong>de</strong>manda como colectivo social,<br />
<strong>de</strong> otras formas <strong>de</strong> “pensar el mundo”. Ello implica entre<br />
otras cosas, la construcción <strong>de</strong> nuevas estrategias, actitu<strong>de</strong>s,<br />
valores, compromisos, sentimientos y sensibilida<strong>de</strong>s que nos permitan<br />
un análisis más profundo <strong>de</strong> los problemas y conflictos<br />
<strong>de</strong>l escenario actual, así como un protagonismo mayor en la<br />
búsqueda <strong>de</strong> soluciones futuras.<br />
Deseamos que puedas ser un lector que dialogue con estos<br />
textos y discursos que dibujan y comunican sentidos, al que<br />
te invitamos a sumarte con una actitud dinámica con tus<br />
propias dudas, i<strong>de</strong>as, interpelaciones, críticas y posicionamientos.<br />
Esperamos que vayan y vuelvan por las múltiples voces que<br />
conforman estos textos, frases, mensajes, links, comentarios,<br />
imágenes, disfrutando <strong>de</strong> los relatos y dialogando con<br />
sus significados.<br />
Cua<strong>de</strong>rnillo I: La cultura <strong>de</strong> los jóvenes. ¿Cómo somos y<br />
porqué?, ¿somos lo que vemos? ¿Cómo son nuestras prácticas<br />
y estilos culturales?, ¿Qué nos preocupa?, ¿porqué<br />
actuamos <strong>de</strong> un modo “difrente”?.<br />
Cua<strong>de</strong>rnillo II: ¿Quién dijo qué es fácil? ¿Qué implica e<br />
incluye la salud sexual?. ¿Cuáles son los riesgos y razones<br />
<strong>de</strong> prevención?, ¿qué significa tener responsabilidad social?<br />
¿porqué hay discriminación en esta problemática?.<br />
Cua<strong>de</strong>rnillo III: El mundo y los escenarios posibles<br />
¿Qué conflictos sociales y ambientales nos reclaman?<br />
¿Porqué hay cosas que “huelen mal”?, ¿Qué situaciones<br />
necesitan <strong>de</strong> otras miradas y nuevos enfoques? ¿cuál es el<br />
<strong>de</strong>safío ético?<br />
Equipo <strong>de</strong> trabajo<br />
Alcira Rivarosa, Carolina Roldán, Carola Astudillo,<br />
Ana Montenegro<br />
I<strong>de</strong>a: Alcira Rivarosa<br />
Coordinación <strong>de</strong> Producción: Ana Montenegro<br />
Redacción cua<strong>de</strong>rnillo 1: César Quiroga, Cecilia<br />
Maurutto, Marcos Altamirano<br />
Diagramación y diseño: Carlos Pascual<br />
Colaboración: Secretaría <strong>de</strong> Bienestar - U.N.R.C<br />
Impresión: Dirección <strong>de</strong> Imprenta y Publicaciones<br />
U.N.R.C.<br />
Agra<strong>de</strong>cemos especialmente a “todos” quienes con<br />
buena predisposición y trabajo aportaron a la realización<br />
<strong>de</strong> estos cua<strong>de</strong>rnillos.
a, al igual que otras “calificaciones” sociales<br />
se encuentra en fase aguda <strong>de</strong> recomposición.<br />
Si bien es cierto que “la juventud no es más<br />
que una palabra” (Bourdieu, 1990), una categoría<br />
construida, no <strong>de</strong>be olvidarse que las<br />
categorías no son neutras, ni alu<strong>de</strong>n a esencias;<br />
más bien las palabras que usamos son<br />
productivas, dan cuenta <strong>de</strong> la forma en que<br />
las diversas socieda<strong>de</strong>s perciben y valoran el<br />
mundo y, con ello, a ciertos actores sociales.<br />
Lo que resulta indudable es que vivimos<br />
una época <strong>de</strong> aceleración <strong>de</strong> los procesos,<br />
lo que provoca una crisis en los sistemas<br />
para pensar y nombrar el mundo. En este<br />
marco, las concepciones acerca <strong>de</strong> la juventud<br />
no han permanecido inmutables.<br />
4Para la mayoría <strong>de</strong> quienes<br />
trabajamos en el ámbito educativo<br />
y <strong>de</strong>s<strong>de</strong> allí expresamos<br />
nuestra vocación por una<br />
sociedad mejor para todos, las<br />
preguntas por los modos en que los jóvenes<br />
viven, experimentan y dan sentido a su<br />
cotidianeidad, en un mundo tensionado<br />
por múltiples conflictos, se hacen urgentes.<br />
Más aún cuando en nuestros países, <strong>de</strong> la<br />
región latinoamericana, nos enfrentamos a<br />
la paradoja <strong>de</strong> una globalización que parece<br />
acentuar los valores locales.<br />
La construcción socio-cultural que hacemos<br />
acerca <strong>de</strong> “joven”, es <strong>de</strong>cir las formas <strong>de</strong> concebir<br />
los significados que esta palabra encie-<br />
ɶɶ<br />
vivimos una época <strong>de</strong> aceleración <strong>de</strong> los procesos,<br />
lo que provoca una crisis en los sistemas para pensar<br />
y nombrar el mundo. En este marco, las concepciones<br />
acerca <strong>de</strong> la juventud no han permanecido inmutables.
La construcción <strong>de</strong> lo juvenil<br />
5<br />
Hoy la juventud aparece<br />
como más prestigiosa<br />
que nunca. La categoría<br />
<strong>de</strong> “joven” lleva consigo<br />
i<strong>de</strong>ales y significados que,<br />
como dice la ensayista argentina Beatriz<br />
Sarlo, garantiza otro “set” <strong>de</strong> ilusiones. Así,<br />
la juventud es un territorio en el que todos<br />
quieren vivir in<strong>de</strong>finidamente; pero “los<br />
jóvenes expulsan <strong>de</strong> este territorio a los<br />
falsificadores, que no cumplen las condiciones<br />
<strong>de</strong> edad y entran en una guerra<br />
generacional banalizada por la cosmética,<br />
la eternidad quinquenal <strong>de</strong> las cirugías y <strong>de</strong><br />
las terapias new age”. (Sarlo, 1994:41)<br />
Juventud y jóvenes son dos términos altamente<br />
polisémicos y, según el modo en que<br />
se los <strong>de</strong>fina, po<strong>de</strong>mos estar pensando en<br />
sujetos y mundos que poseen muy pocas<br />
cosas en común.<br />
Una mirada bastante habitual es la que<br />
consi<strong>de</strong>ra al grupo etario entre los 14 y<br />
los 29 años. Aunque los límites pue<strong>de</strong>n<br />
ser siempre otros, este abordaje parte <strong>de</strong><br />
una <strong>de</strong>cisión relativamente arbitraria que<br />
agrupa un sector a partir <strong>de</strong> una categoría<br />
estadística.<br />
Otra forma <strong>de</strong> <strong>de</strong>finirlo es consi<strong>de</strong>rando la<br />
juventud como el periodo que media entre<br />
las pubertad y la adultez. Los jóvenes se encontrarían<br />
en un momento <strong>de</strong> espera en el<br />
que se forja el proyecto <strong>de</strong> adulto y se i<strong>de</strong>ntificarían<br />
con una especie <strong>de</strong> transición, un<br />
tiempo anterior a las responsabilida<strong>de</strong>s <strong>de</strong><br />
la vida adulta: la autonomía económica, el<br />
trabajo, la casa, una familia y finalmente
6<br />
los<br />
hijos.<br />
Comúnmente se<br />
hace referencia a un período<br />
<strong>de</strong> tiempo <strong>de</strong> preparación para la<br />
vida adulta, también al goce <strong>de</strong> cierta moratoria<br />
para estudiar o capacitarse postergando las<br />
exigencias económicas, laborales y reproductivas; probablemente<br />
estos argumentos que asisten en la búsqueda <strong>de</strong> <strong>de</strong>finir<br />
la juventud no tienen en cuenta las diferencias existentes en los distintos<br />
estratos sociales. En relación a esto po<strong>de</strong>mos preguntarnos si todos los<br />
jóvenes poseen ese tiempo <strong>de</strong> preparación para la vida adulta…<br />
La llegada <strong>de</strong> la maternidad a una edad temprana, la necesidad o<br />
la exigencia <strong>de</strong> trabajar <strong>de</strong>s<strong>de</strong> la infancia, son una realidad que<br />
<strong>de</strong>smiente esta <strong>de</strong>finición o por lo menos la limita a los sectores<br />
medios o medios altos <strong>de</strong> la sociedad.<br />
Pierre Bourdieu (1997) ha señalado que las relaciones entre<br />
la edad biológica y la edad social son muy complejas y<br />
que “hablar <strong>de</strong> los jóvenes como <strong>de</strong> una unidad social,<br />
<strong>de</strong> un grupo constituido, que posee intereses comunes,<br />
y referir estos intereses a una edad <strong>de</strong>finida biológicamente,<br />
constituye una manipulación evi<strong>de</strong>nte”<br />
Quizás el criterio más amplio, que consi<strong>de</strong>ra la<br />
edad pero no se limita a ella, es aquel que propone<br />
a la juventud como la vivencia <strong>de</strong> un<br />
proyecto <strong>de</strong> vida no realizado. Jóvenes serían<br />
entonces, quienes disponen <strong>de</strong> un exce<strong>de</strong>nte<br />
<strong>de</strong> tiempo por vivir y que en comparación<br />
con el <strong>de</strong> los adultos es más amplio y<br />
abierto.<br />
Sin dudas la ubicación en una <strong>de</strong>terminada<br />
franja etaria constituye un factor<br />
importante en la búsqueda <strong>de</strong> discriminar<br />
entre a quienes les cabe la <strong>de</strong>nominación<br />
<strong>de</strong> jóvenes y a quienes<br />
no. No obstante, este criterio no<br />
supone aceptar <strong>de</strong>finiciones a partir<br />
<strong>de</strong> una escala biológica sino<br />
situada en las características <strong>de</strong><br />
cada contexto socio histórico.<br />
Así, en nuestros días hay<br />
modos <strong>de</strong> vida que<br />
asombra-
ían a los adultos <strong>de</strong> una generación atrás:<br />
tener más <strong>de</strong> 25 años y seguir viviendo en<br />
la casa <strong>de</strong> los padres comienza a transformarse<br />
en moneda corriente.<br />
No son pocos los casos <strong>de</strong> varones o mujeres<br />
que <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> los 30 y pese a que<br />
trabajan y cuentan con condiciones económicas<br />
para in<strong>de</strong>pendizarse, optan por<br />
seguir viviendo con sus padres.<br />
Esa comodidad que les da vivir con sus<br />
padres parece ser fundamental a la hora <strong>de</strong><br />
evaluar si conviene mudarse a vivir solos<br />
o continuar cobijado en el hogar familiar.<br />
Al trabajar y<br />
seguir viviendo<br />
en la casa<br />
paterna, estos<br />
hombres y<br />
mujeres tienen<br />
una cantidad<br />
<strong>de</strong> dinero extra<br />
con el que<br />
no contarían<br />
si tuvieran que<br />
hacerse cargo <strong>de</strong> los gastos <strong>de</strong> un hogar.<br />
En este escenario somos testigos <strong>de</strong> una<br />
<strong>de</strong>socupación que amenaza aquellas certezas<br />
<strong>de</strong>positadas en la educación como<br />
garantía <strong>de</strong> mejores oportunida<strong>de</strong>s laborales<br />
y <strong>de</strong> ingresos. Para la actual generación<br />
<strong>de</strong> jóvenes la educación por sí sola no es<br />
una institución capaz <strong>de</strong> ofrecer oportunida<strong>de</strong>s<br />
equitativas y muy por el contrario,<br />
en muchos casos, se ha convertido en un<br />
producto más <strong>de</strong>l mercado que discrimina<br />
a muchos y se muestra como medio <strong>de</strong><br />
progreso social solo para unos pocos que<br />
pue<strong>de</strong>n pagarla.<br />
Estas afirmaciones nos interpelan y a la vez<br />
nos confirman la imposibilidad <strong>de</strong> pensar que<br />
los jóvenes en tanto categoría social construida<br />
no tienen<br />
ɶ ɶ Las enormes brechas sociales<br />
y los cambios productivos que<br />
impactaron intensamente sobre<br />
la esfera <strong>de</strong>l trabajo señalan a los<br />
jóvenes como uno <strong>de</strong> los sectores<br />
más vulnerables en la búsqueda<br />
<strong>de</strong> empleo.<br />
una existencia<br />
autónoma,<br />
es <strong>de</strong>cir al<br />
margen <strong>de</strong>l<br />
resto social,<br />
se encuentran<br />
inmersos<br />
en la red <strong>de</strong><br />
relaciones y <strong>de</strong><br />
interacciones<br />
sociales múltiples y complejas.<br />
7<br />
El sociólogo Mario Margulis, experto en fenómenos<br />
urbanos, apunta: “Vivimos como<br />
una prolongación <strong>de</strong> la juventud. Los jóvenes<br />
se casan tar<strong>de</strong>, tienen hijos más tar<strong>de</strong>,<br />
prolongan hasta más no po<strong>de</strong>r sus estudios.<br />
Ahora el período <strong>de</strong> formación se extendió.<br />
Antes una persona se recibía <strong>de</strong> contador<br />
a los 25 y ya estaba listo para conquistar el<br />
mundo. Hoy tiene que seguir estudiando<br />
porque un título ya no garantiza nada”.<br />
Sin necesidad <strong>de</strong> adoptar <strong>de</strong>finiciones ajustadas<br />
a alguna perspectiva teórica o bien<br />
que pueda discriminar la <strong>de</strong>nominación<br />
más a<strong>de</strong>cuada, proponemos pensar en los<br />
jóvenes <strong>de</strong>s<strong>de</strong> la pluralidad. No existe una<br />
única juventud, más bien son juventu<strong>de</strong>s las<br />
que conviven <strong>de</strong>s<strong>de</strong> las más heterogéneas<br />
trayectorias sociales. Juventu<strong>de</strong>s que provienen<br />
<strong>de</strong> disímiles organizaciones familiares<br />
y procesos <strong>de</strong> socialización, que han<br />
transitado diferentes experiencias educativas,<br />
y que se relacionan particularmente<br />
con el mundo.
8<br />
Jóvenes, expresiones<br />
y símbolos<br />
ɶ ɶ ¿Existe algún elemento cultural<br />
que atraviese a estas juventu<strong>de</strong>s que<br />
poseen experiencias, trayectorias sociales<br />
y niveles <strong>de</strong> consumo tan distintos?<br />
¿Es posible imaginar algunos<br />
consumos culturales comunes?<br />
Para contestar estas<br />
preguntas primero <strong>de</strong>beríamos diferenciar<br />
a los jóvenes <strong>de</strong> los signos<br />
juveniles. Los signos juveniles que<br />
muestra la publicidad y que se han<br />
convertido en bienes preciables y prestigiosos<br />
no son accesibles a la mayoría <strong>de</strong> los jóvenes.<br />
Determinado estilo <strong>de</strong> joven presenta los<br />
signos <strong>de</strong> la juvenilización que se han expandido<br />
a todas las esferas <strong>de</strong> la sociedad como<br />
el mo<strong>de</strong>lo <strong>de</strong>seado y adquirible mediante el<br />
consumo los elementos tecnológicos, la ropa<br />
e incluso los medios que posibilitan el<br />
propio cuerpo juvenil (dietas, gimnasia,<br />
cirugías)<br />
En una sociedad don<strong>de</strong> cada vez más<br />
el consumo <strong>de</strong>fine la i<strong>de</strong>ntidad <strong>de</strong> los<br />
sujetos y “soy lo que puedo comprar” la<br />
asociación <strong>de</strong> los jóvenes con los signos<br />
juveniles sin consi<strong>de</strong>rar la conflictividad<br />
social, el <strong>de</strong>sempleo, la pobreza, la exclusión,<br />
los ubica en un lugar sumamente<br />
vulnerable. La división <strong>de</strong> los grupos según<br />
la ropa que usan, la música que escuchan,<br />
los boliches que frecuentan nos<br />
enfrenta a una generación cuyas características<br />
económicas sociales y simbólicas<br />
los distancian y proyectan una sociedad<br />
futura cada vez más fragmentada.
La Marca <strong>de</strong>l Mercado<br />
La juventud suele ser valorada como futuro,<br />
por lo que será o <strong>de</strong>jará <strong>de</strong> ser. En<br />
este sentido Rossana Reguillo afirma que<br />
las instituciones tradicionales siguen pensando<br />
a la juventud como una categoría<br />
<strong>de</strong> tránsito, “…como una etapa <strong>de</strong><br />
preparación para lo que sí vale;<br />
la juventud como futuro,<br />
valorada por lo que será o<br />
<strong>de</strong>jará <strong>de</strong> ser. Mientras<br />
que para los jóvenes, el<br />
mundo está anclado en<br />
el presente, situación<br />
que ha sido finamente<br />
captada por el mercado”<br />
(Reguillo, 2000:<br />
28).<br />
Efectivamente, la lógica <strong>de</strong>l<br />
mercado viene a tomar y llenar cierto<br />
vaciamiento en torno a la juventud y la instituye<br />
como protagonista <strong>de</strong> la mayoría <strong>de</strong><br />
sus mitos. En esta propuesta que se expresa<br />
como un cortejo, los jóvenes encuentran<br />
bienes materiales y simbólicos que les han<br />
sido preparados especialmente.<br />
“La velocidad <strong>de</strong> circulación y por lo tanto<br />
la obsolescencia acelerada se combinan en<br />
una alegoría <strong>de</strong> juventud: en el mercado<br />
las mercancías <strong>de</strong>ben ser nuevas, <strong>de</strong>ben<br />
tener el estilo <strong>de</strong> la moda, <strong>de</strong>ben captar<br />
los cambios más insignificantes <strong>de</strong>l aire <strong>de</strong><br />
los tiempos. La renovación incesante que<br />
necesita el mercado capitalista captura el<br />
mito <strong>de</strong> novedad permanente que también<br />
impulsa a la juventud” (Sarlo, 1994:42)<br />
ɶEfectivamente,<br />
la<br />
ɶ<br />
lógica <strong>de</strong>l mercado<br />
viene a tomar y llenar<br />
cierto vaciamiento en<br />
torno a la juventud y la<br />
instituye como protagonista<br />
<strong>de</strong> la mayoría<br />
<strong>de</strong> sus mitos.<br />
El mercado necesita preconcebir y comunicar<br />
que todos somos iguales, por ello<br />
sus discursos se enuncian como universales.<br />
Sin embargo, como dos caras <strong>de</strong> una<br />
misma moneda, advertimos por una parte<br />
una promesa <strong>de</strong> po<strong>de</strong>r, libertad y reconocimiento,<br />
mientras que la contracara lleva<br />
la posibilidad latente <strong>de</strong> no accesibilidad y<br />
con ello una garantía <strong>de</strong> exclusión.<br />
…Y yo, por el asco que<br />
me da tú sociedad<br />
“Asombradas contemplábamos<br />
la discusión<br />
tan violenta <strong>de</strong> un<br />
grupo <strong>de</strong> alumnas…<br />
y aterrorizadas corrimos<br />
hacia el lugar cuando<br />
vimos que la discusión<br />
terminaba a las trompadas en<br />
la salida <strong>de</strong> la escuela” Lo comentaban<br />
dos mujeres <strong>de</strong> algo más <strong>de</strong> cuarenta<br />
años… ¿Es acaso un hecho casual? Las<br />
malas noticias al respecto parecen acumularse:<br />
Chicos <strong>de</strong> una excursión colegial que<br />
llegan al hospital tras agarrarse a golpes en<br />
el interior <strong>de</strong> un boliche. Adolescentes gravemente<br />
heridos en una “guerra” <strong>de</strong> bandas<br />
a la salida <strong>de</strong> un boliche, etc.<br />
Por un lado po<strong>de</strong>mos dar cuenta <strong>de</strong> la<br />
observación <strong>de</strong> abundantes elementos para<br />
un diagnóstico que sentencia: el nivel <strong>de</strong><br />
agresividad y violencia entre los jóvenes y<br />
hacia los adultos creció notablemente en<br />
los últimos años.<br />
Por el otro, ese mismo diagnóstico nos<br />
genera inquietu<strong>de</strong>s para la reflexión, y nos<br />
invita a romper la ten<strong>de</strong>ncia <strong>de</strong>monizante<br />
9
10<br />
hacia chicos y chicas a quienes por estos<br />
días les cabe también la condición <strong>de</strong> víctimas;<br />
probablemente esa violencia se une<br />
a la angustia y la frustración por la disminución<br />
o invisibilización <strong>de</strong> horizontes y<br />
la <strong>de</strong>scalificación social <strong>de</strong> las instituciones<br />
(como la escuela o la familia quizás) y <strong>de</strong><br />
los adultos y autorida<strong>de</strong>s que señalaban<br />
caminos, arrimaban respuestas y calmaban<br />
la inquietud propia <strong>de</strong> su edad.<br />
Si abundantemente venimos estudiando y<br />
diciendo que en la última década asistimos<br />
a una <strong>de</strong>smesurada mutación <strong>de</strong> valores<br />
y una profunda crisis <strong>de</strong> las instituciones<br />
(incluido el Estado), cómo no pensar entonces<br />
en el impacto en el mundo interno<br />
<strong>de</strong> los jóvenes.<br />
La i<strong>de</strong>ntidad no es posible sin la mirada<br />
<strong>de</strong> los ”otros”, se construye con y a partir<br />
<strong>de</strong> la mirada <strong>de</strong>l que es diferente y hoy los<br />
jóvenes suelen cargar con la expresión <strong>de</strong><br />
“clase peligrosa” por parte <strong>de</strong>l resto <strong>de</strong> la<br />
sociedad. La i<strong>de</strong>ntificación <strong>de</strong> ciertos jóvenes<br />
como <strong>de</strong>lincuentes, vagos, “villeros” o<br />
“pibes chorros” es parte <strong>de</strong> un doble juego<br />
<strong>de</strong> atribución y reelaboración <strong>de</strong> significados,<br />
cuyo único rédito para los jóvenes es<br />
el reconocimiento a cambio <strong>de</strong> una imagen
11<br />
<strong>de</strong> sí sumamente <strong>de</strong>teriorada.<br />
¿Qué i<strong>de</strong>ntidad construyen mediante la<br />
internalización <strong>de</strong> categorías limitantes y<br />
estigmatizadas? ¿Qué posibilida<strong>de</strong>s tienen<br />
<strong>de</strong> reelaborarlas para que no impliquen una<br />
negación <strong>de</strong> sí y un quiebre <strong>de</strong> su autoestima?<br />
¿Es una manera <strong>de</strong> resignación frente<br />
a la <strong>de</strong>sconfianza que genera solamente el<br />
color <strong>de</strong> su piel que no pue<strong>de</strong>n modificar?<br />
Maestros, funcionarios, adolescentes, jóvenes,<br />
adultos; responsables y víctimas <strong>de</strong> un<br />
entramado social excluyente y violento que<br />
involucra y exce<strong>de</strong> a cada uno. Proyectos a<br />
medias o que no contienen a todos, dignidad<br />
amenazada, i<strong>de</strong>ntidad fragmentada;<br />
una sensación <strong>de</strong> <strong>de</strong>sconcierto parece hablar<br />
<strong>de</strong> todos y por todos… y busca alivio.<br />
Culturas juveniles<br />
“La cultura juvenil, como cultura universal<br />
y tribal al mismo tiempo, se construye en<br />
el marco <strong>de</strong> una institución, tradicionalmente<br />
consagrada a los jóvenes, que está en<br />
crisis: la escuela, cuyo prestigio se ha <strong>de</strong>bilitado<br />
tanto por la quiebra <strong>de</strong> autorida<strong>de</strong>s<br />
tradicionales como por la conversión <strong>de</strong> los<br />
medios masivos en espacio <strong>de</strong> una abundancia<br />
simbólica que la escuela no ofrece.
12<br />
Las estrategias para <strong>de</strong>finir lo permitido y<br />
lo prohibido entraron en crisis. La permanencia<br />
que fue un rasgo constitutivo <strong>de</strong> la<br />
autoridad, está cortada por el fluir <strong>de</strong> la<br />
novedad”. (Sarlo, 1994:41)<br />
da <strong>de</strong> lo que suponga participación <strong>de</strong> los<br />
jóvenes en la toma <strong>de</strong> <strong>de</strong>cisiones.<br />
Las juventu<strong>de</strong>s contemporáneas, y <strong>de</strong>s<strong>de</strong><br />
hace algunas décadas, han sabido inventar<br />
formas organizativas propias, espacios <strong>de</strong><br />
Con evi<strong>de</strong>nte ambigüedad la sociedad<br />
adulta trata a los jóvenes. Estos son, generalmente,<br />
objeto <strong>de</strong> pasiones contradictorias,<br />
<strong>de</strong> un lado se presentan como promesa<br />
<strong>de</strong> futuro, los que han <strong>de</strong> mantener<br />
la continuidad <strong>de</strong> una civilización, pero<br />
<strong>de</strong> otro son vistos como una amenaza en<br />
la medida en que pue<strong>de</strong>n traicionar los<br />
valores <strong>de</strong> sus antecesores. De aquí que los<br />
movimientos juveniles, sobre todo sin son<br />
rebel<strong>de</strong>s, tiendan a satanizarse por la propia<br />
sociedad en que surgen. Y esa satanización,<br />
esa visión, ha permitido poner <strong>de</strong> relieve,<br />
algunas claves <strong>de</strong>l entramado cultural <strong>de</strong><br />
nuestras socieda<strong>de</strong>s. Precisamente en ese<br />
entramado tienen lugar <strong>de</strong>s<strong>de</strong> una idolatría<br />
<strong>de</strong> lo juvenil hasta una exclusión aterroriza-<br />
pertenencia y resguardo i<strong>de</strong>ntitario frente a<br />
un mundo incierto. Ciertamente es común<br />
observar, sobre todo en las gran<strong>de</strong>s ciuda<strong>de</strong>s<br />
la existencia <strong>de</strong> grupos juveniles que,<br />
aunque no poseen formas muy estructuradas,<br />
proporcionan vivencias muy intensas a<br />
sus miembros. Su carácter es muy variado y<br />
plural, pero suelen presentar algunos rasgos<br />
en común: un gusto por el disfraz, un<br />
vitalismo rebel<strong>de</strong> y una búsqueda <strong>de</strong> (auto)<br />
marginación <strong>de</strong>l grupo social más amplio.<br />
Un grupo <strong>de</strong> investigadores españoles<br />
(Pere-Oriol y otros 1996) analizan el fenómeno<br />
que han <strong>de</strong>nominado “tribus urbanas”:<br />
las pandillas, bandas o simplemente<br />
agrupaciones <strong>de</strong> jóvenes adolescentes, que
13<br />
se visten <strong>de</strong> modo parecido y llamativo,<br />
siguen hábitos comunes y se hacen visibles,<br />
sobre todo, en las gran<strong>de</strong>s ciuda<strong>de</strong>s.<br />
“(Las tribus urbanas)…se presentan como<br />
una respuesta, social y simbólica, frente a la<br />
rasgos <strong>de</strong> estilo aparecen y <strong>de</strong>saparecen; los<br />
consumos culturales diversos y siempre rápidos,<br />
la búsqueda <strong>de</strong> alternativas <strong>de</strong>safían<br />
a cualquier “<strong>de</strong>signio <strong>de</strong> la moda”. Des<strong>de</strong><br />
allí, entonces, aquella entrada al boliche<br />
apiñada <strong>de</strong> chicos y chicas que combinan<br />
excesiva racionalidad burocrática <strong>de</strong> la vida<br />
actual, al aislamiento individualista que los<br />
someten las gran<strong>de</strong>s ciuda<strong>de</strong>s y la frialdad<br />
<strong>de</strong> una sociedad extremadamente competitiva.<br />
Adolescentes y jóvenes solían ver en<br />
las tribus la posibilidad <strong>de</strong> encontrar una<br />
nueva vía <strong>de</strong> expresión, un modo <strong>de</strong> alejarse<br />
<strong>de</strong> la normalidad que no les satisface<br />
y, ante todo, la ocasión <strong>de</strong> intensificar sus<br />
vivencias personales y encontrar un núcleo<br />
gratificante <strong>de</strong> afectividad”. (Pere-Oriol<br />
1996:11)<br />
Estas i<strong>de</strong>as invitan a repensar ciertas prácticas,<br />
fundamentalmente urbanas: como<br />
graffitis, tatuajes, crestas <strong>de</strong> cabello que se<br />
alzan en las cabezas, nucas rapadas. Los<br />
sobre su cuerpo segmentos <strong>de</strong> indumentaria<br />
(reciclada, transparente u oscura,<br />
ajustada o <strong>de</strong> algunos talles más que el<br />
propio, corta o <strong>de</strong>masiado larga, más corta<br />
y mucho más ajustada al cuerpo) <strong>de</strong>berá ser<br />
leída <strong>de</strong>s<strong>de</strong> una sintaxis particular. Sus significados<br />
no se darían en el marco <strong>de</strong> <strong>de</strong> la<br />
moda, marcan una edad, la condición juvenil.<br />
“Con estos disfraces ellos cumplen con<br />
un estilo joven, la juventud se manifiesta así<br />
no como una edad, sino como una estética<br />
<strong>de</strong> la vida cotidiana” (Sarlo, 1994:38).<br />
Yo veo al futuro repetir el pasado, y el<br />
tiempo no para.<br />
“A la juventud la conmueve aquello que<br />
la política, en gran parte, excluye: ¿Cómo
14<br />
frenar la <strong>de</strong>strucción global <strong>de</strong>l medio<br />
ambiente? ¿Cómo pue<strong>de</strong> ser conjurada, superada<br />
la <strong>de</strong>socupación, la muerte <strong>de</strong> toda<br />
esperanza que amenaza, precisamente, a<br />
los hijos <strong>de</strong>l bienestar? ¿Cómo vivir y amar<br />
con el peligro <strong>de</strong>l sida? Cuestiones todas<br />
que caen por los retículos <strong>de</strong> las gran<strong>de</strong>s organizaciones<br />
políticas…Los jóvenes practican<br />
una <strong>de</strong>negación <strong>de</strong> la política altamente<br />
política”. Ulrick Beck (1999)<br />
Nuestro continente clama<br />
por transformaciones<br />
y es justo reconocer<br />
los testimonios<br />
cotidianos que<br />
evi<strong>de</strong>ncian una<br />
irrenunciable<br />
lucha por una<br />
sociedad más<br />
inclusiva y<br />
<strong>de</strong>mocrática,<br />
sin embargo<br />
estas búsquedas<br />
suelen verse<br />
frecuentemente<br />
frustradas frente a<br />
los muros <strong>de</strong>l creciente<br />
<strong>de</strong>terioro económico, la incertidumbre<br />
y la fuga <strong>de</strong>l futuro. El<br />
<strong>de</strong>bilitamiento <strong>de</strong> los mecanismos <strong>de</strong> integración<br />
tradicional (la escuela y el trabajo,<br />
centralmente) aunado a la crisis estructural<br />
y al <strong>de</strong>scrédito <strong>de</strong> las instituciones, como<br />
ya venimos argumentando, instala en el escenario<br />
una pugna en don<strong>de</strong> asoman como<br />
frecuentes ganadoras la conformidad y la<br />
<strong>de</strong>sesperanza.<br />
Es en ese contexto y frente a un <strong>de</strong>stino<br />
social que parece inevitable, don<strong>de</strong> adquieren<br />
relevancia las preguntas por las formas<br />
organizativas juveniles, por sus maneras <strong>de</strong><br />
enten<strong>de</strong>r y ubicarse en el mundo, por los diversos<br />
modos en que se asumen ciudadanos.<br />
En contraste con cierta calificación apresurada<br />
y hasta estigmatización <strong>de</strong> las conformaciones<br />
colectivas juveniles, enten<strong>de</strong>mos<br />
que los movimientos que emergen vienen<br />
a señalar los conflictos no resueltos en las<br />
socieda<strong>de</strong>s. De la misma manera<br />
ɶNuestro<br />
continente<br />
ɶ<br />
clama por transformaciones<br />
y es justo<br />
reconocer los testimonios<br />
cotidianos que evi<strong>de</strong>ncian<br />
una irrenunciable<br />
lucha por una<br />
sociedad más inclusiva<br />
y <strong>de</strong>mocrática<br />
en que los jóvenes han sido<br />
importantes protagonistas<br />
<strong>de</strong> la historia<br />
<strong>de</strong>l Siglo XX en<br />
diversos sentidos,<br />
hoy hay testimonios<br />
<strong>de</strong> sincera<br />
búsqueda<br />
por un mundo<br />
en don<strong>de</strong> quepan<br />
muchos<br />
mundos y esa<br />
vocación implica<br />
un compromiso<br />
con uno mismo,<br />
con el colectivo social<br />
y su proyección a los<br />
nuevos escenarios.<br />
“La consigna “no hay futuro” que ha operado<br />
como ban<strong>de</strong>ra interclasista entre los<br />
jóvenes (por diferentes motivos), que señalaría<br />
por tanto que todo presente es absurdo,<br />
parece estar cambiando por la <strong>de</strong> “no<br />
habrá futuro” a menos que podamos intervenir<br />
a tiempo, como coinci<strong>de</strong>n diferentes<br />
colectivos juveniles” (Reguillo, 2000:15).
15<br />
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Comunicación Humana I<br />
Análisis y Teoría <strong>de</strong> las Organizaciones<br />
Psicología Social<br />
Cecilia Maurutto: Prof. cátedra:<br />
Introduc ción a la Sociología<br />
Facultad <strong>de</strong> Ciencias Humanas
16<br />
SOMOS LO QUE VEMOS<br />
“El cine pue<strong>de</strong> ser un excelente lugar para estudiar la condición humana”<br />
David Lynch<br />
“El cine no es la representación <strong>de</strong> la realidad sino la realidad <strong>de</strong> la representación”<br />
Jean Luc Godard<br />
El cine forma parte <strong>de</strong> la existencia social. Es a través <strong>de</strong> la imagen cinematográfica<br />
don<strong>de</strong> se construye la visión <strong>de</strong>l mundo, se proyectan y construyen los<br />
sentidos <strong>de</strong> las cosas. Un discurso movilizador <strong>de</strong> circuitos emotivos que permite<br />
trasmitir significados y ejecutarlos en el mundo real <strong>de</strong> los espectadores.<br />
Este ensayo intentará<br />
ubicar al texto<br />
fílmico <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong><br />
un contexto histórico<br />
(la globalización<br />
económica y los jóvenes) y <strong>de</strong> esta<br />
manera <strong>de</strong>mostrar que las películas<br />
no son simplemente un reflejo<br />
<strong>de</strong> la realidad... son, más<br />
bien, en la expresión <strong>de</strong><br />
Jean-Luc Godard, “la<br />
realidad <strong>de</strong> un reflejo”.<br />
Son parte <strong>de</strong>l proceso<br />
<strong>de</strong> formar actitu<strong>de</strong>s,<br />
i<strong>de</strong>ntida<strong>de</strong>s, valores y<br />
creencias comunes a<br />
la cultura y la sociedad....,<br />
así como<br />
indicativos <strong>de</strong> resistencias<br />
subyacentes a<br />
los discursos i<strong>de</strong>ológicos<br />
dominantes y,<br />
fundamentalmente,<br />
a la construcción<br />
<strong>de</strong> realida<strong>de</strong>s.<br />
Al hablar <strong>de</strong>l cine como constructor,<br />
no se pue<strong>de</strong> <strong>de</strong>jar <strong>de</strong> tener en<br />
cuenta que la discusión acerca <strong>de</strong><br />
la i<strong>de</strong>ntidad o bien <strong>de</strong> las i<strong>de</strong>ntida<strong>de</strong>s<br />
pareciera ser uno <strong>de</strong> los ejes <strong>de</strong><br />
reflexión actual en estos tiempos<br />
en los que los jóvenes<br />
viven inmiscuidos<br />
en la cultura audiovisual.<br />
Es en sus<br />
relatos e imágenes,<br />
en sus sonorida<strong>de</strong>s,<br />
fragmentaciones<br />
y velocida<strong>de</strong>s que<br />
ellos encuentran su<br />
idioma y su ritmo.<br />
Alejandro Rey Ramírez<br />
1 plantea la<br />
i<strong>de</strong>a <strong>de</strong> cine como<br />
instrumento eficaz<br />
que sirve, a<strong>de</strong>más,<br />
como medio óptimo<br />
para construir<br />
cultura, formación<br />
y es genera-
17<br />
dor <strong>de</strong> i<strong>de</strong>ntida<strong>de</strong>s. “El cine existe,<br />
por lo tanto es necesario que toda<br />
cultura tenga la posibilidad <strong>de</strong><br />
expresarse a través <strong>de</strong> él”.<br />
De aquí se <strong>de</strong>spren<strong>de</strong>, adquiere importancia,<br />
la i<strong>de</strong>a <strong>de</strong>l discurso cinematográfico<br />
como una <strong>de</strong> las formas<br />
<strong>de</strong> expresión <strong>de</strong>l arte que pone en<br />
evi<strong>de</strong>ncia las particularida<strong>de</strong>s culturales<br />
<strong>de</strong> cada sociedad en la que están<br />
insertos sus realizadores. Y a esto se<br />
refieren Sánchez y Martín cuando<br />
manifiestan que “sea cual fuese la<br />
intencionalidad explícita con la que<br />
se produce una película, estará inevitablemente<br />
realizada con el “lenguaje”,<br />
“el modo <strong>de</strong> narrar”, teñido e impregnado<br />
por los códigos propios que particularizan<br />
y diferencian a esa sociedad”. Estos códigos<br />
propios, esta única y particular manera<br />
<strong>de</strong> expresarse y “contar historias”, más los<br />
temas inherentes a cada sociedad constituyen<br />
una <strong>de</strong> las formas en las que se expresa<br />
la i<strong>de</strong>ntidad” 2 .<br />
Des<strong>de</strong> la aparición <strong>de</strong> “El nacimiento <strong>de</strong><br />
una nación” (David Griffith, 1919), el cine<br />
ha contribuido a inculcar y a ser un vehículo<br />
portador <strong>de</strong> i<strong>de</strong>ntida<strong>de</strong>s. Un ejemplo<br />
<strong>de</strong> esto es la producción cinematográfica<br />
Norteamericana que domina en forma<br />
casi absoluta la exhibición <strong>de</strong> contenidos<br />
en todo el mundo y constituye para los<br />
Estados Unidos una <strong>de</strong> sus principales<br />
fuerzas económicas. Apoyada, siempre, por
18<br />
el control <strong>de</strong> las re<strong>de</strong>s <strong>de</strong> distribución y la<br />
creciente concentración vertical <strong>de</strong> las empresas.<br />
Las pantallas <strong>de</strong> cine nos acercan un<br />
mismo modo <strong>de</strong> vida, un mo<strong>de</strong>lo único y<br />
repetido; margina, hace peligrar la existencia<br />
<strong>de</strong> las producciones locales y crea, así,<br />
una i<strong>de</strong>ntidad ajena a nuestra cultura.<br />
Se pue<strong>de</strong> escribir mucho más sobre este<br />
tema, pero lo que interesa, y a lo que se<br />
quiere llegar, es la manera en que el discurso<br />
cinematográfico forma parte <strong>de</strong> la<br />
existencia social, la transmisión<br />
<strong>de</strong> los significados y sobre<br />
todo cómo es capaz <strong>de</strong><br />
ejecutarlos en la realidad.<br />
El cine cambió por<br />
completo el comportamiento<br />
cultural<br />
y perceptual<br />
<strong>de</strong> los individuos<br />
y <strong>de</strong> las socieda<strong>de</strong>s.<br />
Su <strong>de</strong>sarrollo influyó<br />
en todas las clases<br />
sociales, al hacer el mundo<br />
alcanzable, modificó las<br />
relaciones sociales y transformó<br />
la visión <strong>de</strong>l mundo, a su vez, nos presenta<br />
un flujo constante <strong>de</strong> palabras, imágenes e<br />
información relacionadas con sucesos que<br />
ocurren más allá <strong>de</strong>l entorno y vida social<br />
inmediata 3 .<br />
El cine hace que predomine una i<strong>de</strong>ntidad<br />
creada por referencias a grupos cercanos, a<br />
consensos locales, en don<strong>de</strong> se crean nuevas<br />
concepciones, contrarias a las que hasta<br />
antes <strong>de</strong> la aparición <strong>de</strong>l cine se creían<br />
verda<strong>de</strong>ras. Es <strong>de</strong>cir, se crea una multiplicación<br />
<strong>de</strong> sistemas <strong>de</strong> valores y <strong>de</strong> criterios <strong>de</strong><br />
legitimación. En otras palabras, hasta que<br />
el cine no registró una mirada totalmente<br />
ɶLas ɶ<br />
pantallas <strong>de</strong><br />
cine nos acercan un<br />
mismo modo <strong>de</strong> vida,<br />
un mo<strong>de</strong>lo único y repetido;<br />
margina, hace peligrar<br />
la existencia <strong>de</strong> las<br />
producciones locales y<br />
crea, así, una i<strong>de</strong>ntidad<br />
ajena a nuestra<br />
cultura.<br />
diferente acerca <strong>de</strong> como son los valores no<br />
se pudo tener una concepción distinta <strong>de</strong><br />
lo que es, por ejemplo, la familia, las relaciones<br />
humanas, la sociedad; entre algunas<br />
otras miradas que sólo son capaces <strong>de</strong><br />
emerger <strong>de</strong> este discurso. (3)<br />
Al formar parte <strong>de</strong> la existencia social se<br />
constituye en un agente constructor <strong>de</strong><br />
imaginarios. Lo importante es la manera<br />
en que transmite significados y cómo estos<br />
pue<strong>de</strong>n ser ejecutados en el mundo<br />
real <strong>de</strong> los espectadores. Esto<br />
replantea la i<strong>de</strong>a <strong>de</strong> i<strong>de</strong>ntidad,<br />
porque lo que la<br />
sustenta es la imagen,<br />
que conllevó, no<br />
sólo a la creación <strong>de</strong><br />
un lenguaje cinematográfico,<br />
o <strong>de</strong><br />
un estilo, o género<br />
o un estereotipo,<br />
sino que fijó los<br />
roles que cada cual<br />
<strong>de</strong>bería <strong>de</strong> interpretar<br />
tanto en la pantalla<br />
como en la vida misma. (3)<br />
Es a través <strong>de</strong> la imagen proyectada<br />
por el cine don<strong>de</strong> se construye la<br />
visión <strong>de</strong>l mundo. Es a través <strong>de</strong> los movimientos<br />
<strong>de</strong> la cámara, la elección <strong>de</strong> los<br />
planos, la disposición <strong>de</strong> los encuadres,<br />
la distancia <strong>de</strong> la cámara con respecto a<br />
la acción filmada, el tipo <strong>de</strong> montaje, el<br />
sonido... que se construye esa visión. Estos<br />
elementos intervienen en la creación <strong>de</strong> la<br />
i<strong>de</strong>ntidad con el fin <strong>de</strong> buscar diferenciarse<br />
(esa relación dialéctica entre yo y el otro)<br />
En el discurso cinematográfico la construcción<br />
<strong>de</strong> la i<strong>de</strong>ntidad se da -por ejemplo- a<br />
través <strong>de</strong> los títulos <strong>de</strong> las películas que<br />
son uno <strong>de</strong> los primeros mecanismos <strong>de</strong>
seducción, el cual sugiere y con<strong>de</strong>nsa el<br />
sentido que habrá <strong>de</strong> precisarse al concluir<br />
la misma. De alguna<br />
manera, aunque un título<br />
no garantiza el contenido,<br />
ofrece, al menos, la<br />
posibilidad <strong>de</strong> formular<br />
hipótesis <strong>de</strong> lectura que<br />
serán probadas o no por<br />
el espectador. También se<br />
pue<strong>de</strong> tomar al género, la<br />
nacionalidad, al director,<br />
el montaje o el relato...<br />
Las i<strong>de</strong>ntida<strong>de</strong>s se producen<br />
en el relato cinematográfico<br />
con un proceso<br />
muy similar a las <strong>de</strong> cualquier<br />
otra mercancía, y al<br />
igual que las mercancías<br />
son ofrecidas al consumidor. (3)<br />
La mirada partida<br />
Una vez finalizada la Segunda Guerra<br />
Mundial se produjo un fuerte recambio en<br />
el campo cinematográfico occi<strong>de</strong>ntal. De<br />
esta manera aparecen los “nuevos<br />
cines nacionales” (la<br />
Nouvelle Vague, el<br />
Free Cinema, el<br />
Nuevo Cine<br />
Alemán, el<br />
New American<br />
Cinema;<br />
entre otros).<br />
Nuevas ten<strong>de</strong>ncias<br />
que se<br />
propusieron realizar<br />
cambios en cuanto a la<br />
forma y el contenido <strong>de</strong> sus<br />
productos, y que con el tiempo produjeron<br />
efectos <strong>de</strong> índole social y cultural.<br />
En nuestro país, Mario Sofficci y Hugo <strong>de</strong>l<br />
Carril , en distintas épocas,<br />
fueron exponentes <strong>de</strong><br />
esos cambios. Se pue<strong>de</strong><br />
pensar en “La Tregua”<br />
(Sergio Renán; 1974)<br />
como una película que se<br />
animó a mostrar temáticas<br />
representativas <strong>de</strong> la<br />
vida cotidiana <strong>de</strong> nuestro<br />
país; o “La Patagonia<br />
rebel<strong>de</strong>” (Héctor Olivera;<br />
1974) ) una historia <strong>de</strong><br />
represión con intermedios<br />
<strong>de</strong> luchas sindicales<br />
y políticas. Es un cine<br />
más político que produjo<br />
efectos en un contexto<br />
<strong>de</strong>terminado.<br />
En los años ’90, el estreno <strong>de</strong> “Pizza,<br />
Birra, Faso” (Caetano- Stagnaro, 1997)<br />
fue una especie <strong>de</strong> reescritura <strong>de</strong> aquellos<br />
primeros intentos en don<strong>de</strong> el cine se constituía<br />
como creador <strong>de</strong> valores, criterios<br />
y como referente <strong>de</strong> la vida cotidiana. El<br />
retrato que Caetano y Stagnaro<br />
logran sobre un grupo <strong>de</strong><br />
jóvenes marginales,<br />
ofreció al espectador<br />
situaciones<br />
cotidianas<br />
y diálogos<br />
creíbles. Fue<br />
a través <strong>de</strong> la<br />
proyección <strong>de</strong><br />
“Pizza, Birra,<br />
Faso” que cambió<br />
la visión que se tenía<br />
“Pizza, Birra, Faso”, 1997 <strong>de</strong> los roles <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong>l grupo<br />
familiar, el <strong>de</strong>sempleo y la inci<strong>de</strong>ncia en el<br />
19
20<br />
<strong>de</strong>lito a causa <strong>de</strong> la escasez <strong>de</strong> oportunida<strong>de</strong>s<br />
laborales, entre otras temáticas relevantes.<br />
Las películas <strong>de</strong>l llamado “nuevo cine<br />
nacional” no presentan una homogeneidad<br />
estética; su fuerza nace <strong>de</strong> la diversidad.<br />
Una pluralidad <strong>de</strong> miradas que conforman<br />
una i<strong>de</strong>ntidad diferenciada <strong>de</strong> evi<strong>de</strong>nte<br />
renovación con respecto al pasado.<br />
Los nuevos directores<br />
revelan una actitud<br />
<strong>de</strong> rechazo hacía<br />
el cine realizado<br />
por la generación<br />
anterior,<br />
el cine<br />
representado<br />
por la<br />
ten<strong>de</strong>ncia<br />
<strong>de</strong>l mainstream*.<br />
Ellos<br />
comparten<br />
la historia<br />
por un país<br />
que sufrió y tienen<br />
en común el<br />
espíritu generacional,<br />
coinci<strong>de</strong>n en el modo <strong>de</strong><br />
producción, el abandono <strong>de</strong><br />
la retórica y la preocupación por la i<strong>de</strong>ntidad.<br />
Insisten por igual en un relato cruel y<br />
entusiasta sobre la Argentina posterior a la<br />
dictadura militar 4 .<br />
El tan mentado nuevo cine argentino<br />
comienza, <strong>de</strong> un lado, con el “realismo<br />
social”, con características recuperadas <strong>de</strong>l<br />
neorrealismo. Con la particularidad <strong>de</strong><br />
cineastas como Adrián Caetano, Bruno<br />
* Se <strong>de</strong>nomina mainstream a la corriente central, al pensamiento<br />
único oficial; al cine o directores <strong>de</strong> industria en los EE.UU.<br />
Foto: Pablo Trapero<br />
Stagnaro y Pablo Trapero, entre algunos<br />
otros nombres, ellos lograron instaurar<br />
una i<strong>de</strong>a <strong>de</strong>l cine como transparencia muy<br />
diferente a la <strong>de</strong> la cinematografía anterior,<br />
respecto <strong>de</strong> una realidad que -por diversos<br />
factores- <strong>de</strong>bía registrarse. “Pizza, Birra,<br />
Faso” (Caetano- Stagnaro, 1997) impacta<br />
por su carácter <strong>de</strong>scarnado <strong>de</strong> esa vida<br />
marginal que cohabita el centro<br />
urbano. Varios productos<br />
<strong>de</strong> nuestra cinematografía<br />
continuarán<br />
con esa misma<br />
línea. Jóvenes<br />
excluidos<br />
sociales,<br />
con una<br />
violencia<br />
física que<br />
los constituye,<br />
la<br />
cumbia,<br />
el alcohol<br />
y las drogas.<br />
En el realismo,<br />
esos microcosmos<br />
aparecen<br />
reducidos sólo a un<br />
ámbito, un grupo o un<br />
estrato social, casi siempre<br />
homogéneos, limitados en su horizonte<br />
(nunca se ve más allá <strong>de</strong>l fuera <strong>de</strong> cuadro)<br />
El cine argentino logra su renovación,<br />
también, con productos como “Rapado”<br />
(Rejtman, 1992) y “Picado Fino” (Sapir,<br />
1994) Algún tiempo antes <strong>de</strong>l impacto que<br />
produce el realismo social, establecen un<br />
comienzo totalmente opuesto, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> sus<br />
historias mínimas y <strong>de</strong>s<strong>de</strong> sus escrituras al<br />
cine nacional. Aunque estos productos son<br />
incompatibles, ambos largometrajes reali-
zan un giro radical en la tradición mo<strong>de</strong>rna.<br />
Estas películas trazaron, casi en silencio,<br />
uno <strong>de</strong> los supuestos caminos para un<br />
cine nacional que necesitaba renovarse. Los<br />
directores <strong>de</strong> lo que se podría <strong>de</strong>nominar<br />
el “realismo absurdo” lograron encontrar,<br />
<strong>de</strong> manera creativa, distintos tópicos para<br />
sus productos. Especialmente,<br />
es en el lenguaje don<strong>de</strong> se<br />
distancian progresivamente<br />
<strong>de</strong>l referente<br />
realista, se sabe<br />
que el realismo<br />
ɶel ɶ<br />
cine argentino<br />
logra reflexionar<br />
sobre los<br />
diferentes retratos <strong>de</strong><br />
juventud que parecen<br />
registrar su actualidad<br />
en persistencia <strong>de</strong><br />
<strong>de</strong>pen<strong>de</strong> -entre<br />
otras cosas- <strong>de</strong> los<br />
lugares comunes<br />
<strong>de</strong> la lengua para<br />
encontrar allí el<br />
sentido <strong>de</strong>l mundo<br />
representado. Ambas<br />
ten<strong>de</strong>ncias (los realistas<br />
sociales y los realistas<br />
absurdos) marcaron una diferencia<br />
con los realistas existenciales<br />
<strong>de</strong>l cine <strong>de</strong> los años sesenta -que aspiraban<br />
a dar una imagen integral <strong>de</strong> la sociedad<br />
(política universitaria, el negocio discográfico,<br />
la corrupción en distintos ámbitos <strong>de</strong><br />
la cotidianeidad...), más allá <strong>de</strong> las películas<br />
cuya mirada se centraba en los jóvenes <strong>de</strong><br />
clase media - los realizadores contemporáneos<br />
pareciesen no compartir ciertas<br />
premisas, ya sea porque las instituciones<br />
están en crisis, no existen figuras sociales o<br />
porque el presente se muestra tan abstracto<br />
que se ha vuelto imposible <strong>de</strong> construirlo<br />
en un relato cinematográfico.<br />
la i<strong>de</strong>a mo<strong>de</strong>rna<br />
<strong>de</strong>l cine.<br />
Juguetes perdidos<br />
Los jóvenes son una generación privada <strong>de</strong><br />
trabajo en una sociedad don<strong>de</strong> la i<strong>de</strong>ntidad<br />
se <strong>de</strong>fine por el trabajo que el individuo<br />
tiene. Este es un espacio <strong>de</strong> i<strong>de</strong>ntidad muy<br />
importante para la construcción <strong>de</strong> la personalidad<br />
<strong>de</strong> los sujetos, <strong>de</strong> los jóvenes en<br />
concreto, porque en él realizan la afirmación<br />
<strong>de</strong> sí mismos y la consecución <strong>de</strong> las<br />
metas a la que se aspira.<br />
Esto es claramente lo que ocurre<br />
con cada uno, o con la mayoría,<br />
<strong>de</strong> los protagonistas<br />
jóvenes <strong>de</strong> nuestro cine<br />
(y aquella filmografía<br />
que <strong>de</strong>ci<strong>de</strong> profundizar<br />
sobre la problemática<br />
juvenil), allí<br />
parece darse una notable<br />
reivindicación<br />
respecto <strong>de</strong> la formación<br />
<strong>de</strong> la i<strong>de</strong>ntidad y<br />
ello por la emergencia<br />
<strong>de</strong> un individuo que es<br />
objeto <strong>de</strong> múltiples solicitaciones.<br />
Es en este punto don<strong>de</strong> el cine argentino<br />
logra reflexionar sobre los diferentes retratos<br />
<strong>de</strong> juventud que parecen registrar su<br />
actualidad en persistencia <strong>de</strong> la i<strong>de</strong>a mo<strong>de</strong>rna<br />
<strong>de</strong>l cine. Esa mo<strong>de</strong>rnidad que llegó<br />
<strong>de</strong> la mano <strong>de</strong>l neorrealismo italiano, <strong>de</strong> la<br />
nueva ola francesa, <strong>de</strong>l cine <strong>de</strong> Bergman, y<br />
que obtiene similares conclusiones aunque<br />
ahora con otros referentes cinematográficos.<br />
“El presente” se muestra, para gran cantidad<br />
<strong>de</strong> jóvenes, como metáforas <strong>de</strong> la<br />
incertidumbre y la inseguridad en cuanto<br />
a las posibilida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> acceso no tanto a<br />
bienes tecnológicos sofisticados sino más<br />
bien a un trabajo y a una remuneración<br />
que les permita vivir más o menos dignamente<br />
5 . Es común encontrar a jóvenes, sin<br />
21
22<br />
estudios profesionales, <strong>de</strong>senvolverse en<br />
subempleos (tragafuegos, ca<strong>de</strong>tes, limpiadores<br />
<strong>de</strong> parabrisas, entre otros.), mientras<br />
que quienes logran obtener un titulo se<br />
enfrentan con trabajos sumamente saturados,<br />
en los que la oferta es mínima y la<br />
<strong>de</strong>manda exagerada. “Solo por Hoy” (Ariel<br />
Rotter, 2000), por citar un ejemplo, reunió<br />
a un heterogéneo grupo <strong>de</strong> personajes que<br />
son evi<strong>de</strong>ntemente próximos en extracto<br />
social, en ambiciones, en <strong>de</strong>seos y en frustraciones.<br />
Jóvenes que ante imágenes tan<br />
reales y notables se sienten <strong>de</strong> antemano<br />
impotentes y fracasados, se ahogan en una<br />
existencia carente <strong>de</strong> significado, necesitan<br />
buscar “formas <strong>de</strong> escape” a sus diferentes<br />
situaciones 6 . Así Rotter logra enriquecer<br />
su propuesta -que es ante todo <strong>de</strong>scriptiva-<br />
con abundancia <strong>de</strong> <strong>de</strong>talles visuales y<br />
verbales que construyen un universo creíble.<br />
La protagonista <strong>de</strong> “Un día <strong>de</strong> suerte”<br />
(Sandra Gugliotta, 2002) con sus trabajos<br />
temporarios toma como único escenario<br />
para existir al éxodo. Con esa estética particular<br />
<strong>de</strong>l cine argentino joven, esta película<br />
preten<strong>de</strong> explicar lo que está claro. Al igual<br />
que los jóvenes <strong>de</strong> “Contraluz” (Bebe Kamin,<br />
2000), una estética naturalista, drogas<br />
y noches <strong>de</strong> vagancia en la plaza. Un retrato<br />
<strong>de</strong> la miseria <strong>de</strong> un país inmerso en el<br />
<strong>de</strong>sencanto. Un panorama sin trabajo estable<br />
que influye negativamente en diferentes<br />
ámbitos <strong>de</strong> la vida <strong>de</strong>l joven, especialmente<br />
en el familiar. Un joven que -al no po<strong>de</strong>r<br />
insertarse en el mundo laboral- no alcanza<br />
una verda<strong>de</strong>ra in<strong>de</strong>pen<strong>de</strong>ncia económica<br />
y espacial, lo que trae como consecuencia<br />
una permanencia más prolongada con<br />
su familia natal y la búsqueda <strong>de</strong> nuevas<br />
alternativas <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> este núcleo. Esta situación<br />
genera conflictos relacionados con<br />
los vínculos familiares y esto repercute, <strong>de</strong><br />
alguna manera, en el proceso <strong>de</strong> construcción<br />
<strong>de</strong> su i<strong>de</strong>ntidad, más aún, si se tiene<br />
en cuenta que es parte <strong>de</strong> una sociedad que<br />
escon<strong>de</strong> los viejos y conocidos objetivos <strong>de</strong>l<br />
capitalismo: más productividad, más trabajo<br />
con menos gente, más po<strong>de</strong>r patronal<br />
al interior <strong>de</strong> los lugares <strong>de</strong> trabajos, más<br />
<strong>de</strong>bilitamiento <strong>de</strong> las organizaciones sindicales,<br />
entre otros.<br />
Fuego sagrado<br />
Los jóvenes <strong>de</strong> hoy constituyen valores y<br />
estilos <strong>de</strong> vida diferentes con respecto a las<br />
otras generaciones, y esto se <strong>de</strong>be -en gran<br />
medida- a las instituciones mediadoras o<br />
socializadoras. Es interesante hacer foco<br />
en la familia, ya que pocos aspectos <strong>de</strong> la<br />
vida contemporánea son tan controvertidos<br />
como esta institución. La familia es un<br />
microsistema social. En ella coexisten microclimas<br />
culturales, espacios multidimensionales<br />
don<strong>de</strong> se heredan valores sociales,<br />
visiones <strong>de</strong>l mundo, actitu<strong>de</strong>s y aspiraciones,<br />
mo<strong>de</strong>los <strong>de</strong> parentesco y matrimonio,<br />
objetos; el sujeto con<strong>de</strong>nsa todas las<br />
experiencias, las interioriza en su cuerpo,<br />
es lo que Bourdieu <strong>de</strong>nomina habitus. El<br />
individuo se educa, apren<strong>de</strong> a comportarse;<br />
se conforma y caracteriza como miembro<br />
<strong>de</strong> un grupo al cual pertenece. Interacciona<br />
con el grupo familiar, sobre la base <strong>de</strong><br />
un or<strong>de</strong>n y reglas para establecer límites y<br />
distinciones 7 .<br />
Aumentaron los tipos <strong>de</strong> familias: se pue<strong>de</strong><br />
encontrar fácilmente la poligamia seriada<br />
(la gente se divorcia y se vuelve a casar);<br />
familias monoparentales (matrifocales,<br />
mujer con sus hijos); familias inmigradas<br />
(están limitadas y a veces potenciadas por<br />
las exigencias <strong>de</strong> las familias que <strong>de</strong>jan en
23<br />
el lugar <strong>de</strong> origen, exigencias afectivas y<br />
económicas) 8 .<br />
Es realmente extraño encontrar en el cine<br />
actual -en cualquiera <strong>de</strong> las ten<strong>de</strong>ncias<br />
cinematográficas- registros <strong>de</strong> familias<br />
tradicionales, propias <strong>de</strong> las socieda<strong>de</strong>s<br />
pre-industriales, los personajes adolescentes<br />
pasan a un primer plano, con sus historias,<br />
sus miedos y frustraciones, y queda muy<br />
por <strong>de</strong>trás (en un universo no diegético)<br />
el núcleo familiar que en su momento<br />
funcionaba como un espacio en don<strong>de</strong><br />
se impartían valores sociales, visiones <strong>de</strong>l<br />
mundo, actitu<strong>de</strong>s y aspiraciones...<br />
Esto significa que los realizadores se preocupan<br />
por intentar enten<strong>de</strong>r el tema <strong>de</strong><br />
la i<strong>de</strong>ntidad <strong>de</strong>l joven, y esa fuerte contradicción<br />
entre la <strong>de</strong>manda <strong>de</strong> i<strong>de</strong>ales <strong>de</strong><br />
i<strong>de</strong>ntidad que sólo se pue<strong>de</strong>n ejercer “abandonando”<br />
a los padres, y la necesidad <strong>de</strong><br />
consenso afectivo y normativo entre padres<br />
e hijos al convivir en un mismo espacio.<br />
Con cámaras subjetivas, muchos primeros<br />
y primerísimos planos y un montaje<br />
rápido; Réquiem para un sueño (Darren<br />
Aronofsky, 2000) cuenta la historia <strong>de</strong> una<br />
viuda solitaria que pasa mucho tiempo<br />
frente a la televisión (mira los programas<br />
más idiotizantes <strong>de</strong>l cable estadouni<strong>de</strong>nse)<br />
y su hijo, un joven alienado por el consumo<br />
<strong>de</strong> cocaína y otras sustancias. La<br />
película <strong>de</strong> Darren Aronofsky está inspirada<br />
en la novela homónima <strong>de</strong> Hubert<br />
Selby Jr. y se inmiscuye en la temática <strong>de</strong><br />
las adicciones, las relaciones humanas y la<br />
muerte <strong>de</strong> los sueños que habla el título.<br />
Una i<strong>de</strong>a similar, más suavizada y poética,<br />
es lo que plantea Ariel Rotter en “Solo por<br />
hoy”. En cambio, Aronofsky proyecta la<br />
muerte como resultado <strong>de</strong> querer alcanzar<br />
un sueño (si se piensa en el paradigma<br />
estadouni<strong>de</strong>nse hay una referencia directa<br />
y explícita a la imposibilidad <strong>de</strong> alcanzar el<br />
sueño americano)<br />
El estado <strong>de</strong> alienación que pa<strong>de</strong>cen cada<br />
uno <strong>de</strong> los protagonistas se fortalece a tra-
24<br />
vés <strong>de</strong> las pantallas divididas, las secuencias<br />
oníricas, el montaje, la música <strong>de</strong> efecto y<br />
los planos <strong>de</strong>talles.<br />
Esa fragmentación que Aronofsky insiste<br />
en mostrar se correspon<strong>de</strong> con ese mundo<br />
<strong>de</strong> las adicciones y la secuela que éstas<br />
tienen tanto en el ámbito psicológico como<br />
físico. Muestra a personas <strong>de</strong>sequilibradas<br />
como víctimas <strong>de</strong> una sociedad. La <strong>de</strong>sintegración<br />
personal y la marginación social es<br />
un tema revisitado en el cine actual.<br />
La cámara <strong>de</strong> Anahí Berneri <strong>de</strong>ci<strong>de</strong> seguir<br />
al personaje en esa búsqueda constante <strong>de</strong>l<br />
amor y <strong>de</strong>ja en segundo plano a la familia.<br />
Homosexualidad, SIDA y sadomasoquismo<br />
son los ejes temáticos <strong>de</strong> “Un año sin<br />
amor” (Anahí Berneri, 2004), ópera prima<br />
que elige como tiempo <strong>de</strong> relato 1996.<br />
Problemáticas complejas en don<strong>de</strong>, con<br />
elegancia y sutilezas, la directora logra una<br />
“Nadar sólo” 2003<br />
sólida adaptación, <strong>de</strong> la novela autobiográfica<br />
<strong>de</strong>l escritor Pablo Pérez, sobre la búsqueda<br />
<strong>de</strong>l amor y la felicidad, agudizada,<br />
en este caso, por la cercanía <strong>de</strong> la muerte.<br />
Narrada a manera <strong>de</strong> diario íntimo, la cámara<br />
se <strong>de</strong>dica a seguir al personaje en esa<br />
búsqueda constante en don<strong>de</strong> el sadomasoquismo<br />
es sólo un elemento que sirve para<br />
contar la historia.<br />
Lugares comunes<br />
Es interesante observar, <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> la cinematografía,<br />
la existencia <strong>de</strong> lugares, espacios<br />
y momentos que sólo conocen los jóvenes<br />
y que ayudan a formar su i<strong>de</strong>ntidad.<br />
Es por eso que la relación <strong>de</strong>l joven con los<br />
lugares y no lugares resultaron una señal<br />
muy representativa <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong>l cine actual.<br />
Los “no lugares” no son ni espacios <strong>de</strong><br />
i<strong>de</strong>ntidad, ni habilitan las relaciones socia-
25<br />
les ni tienen una historia; son provisorios,<br />
efímeros, sitios <strong>de</strong> paso. En ellos <strong>de</strong>ambulan<br />
las individualida<strong>de</strong>s solitarias, “una<br />
forma muy particular y muy mo<strong>de</strong>rna <strong>de</strong><br />
soledad”. Se conjugan las figuras <strong>de</strong>l exceso<br />
posmo<strong>de</strong>rno: “superabundancia <strong>de</strong> acontecimientos,<br />
superabundancia espacial y la<br />
individuación <strong>de</strong> las referencias” 9 .<br />
“Sábado” (Juan Villegas, 2001), una<br />
película joven que pone en relación con<br />
varios personajes <strong>de</strong> veintipico abstrayéndolos<br />
<strong>de</strong>l plano <strong>de</strong> la problemática económico<br />
laboral, encuentra a los chicos en la<br />
calle, la noche, <strong>de</strong>ambulan sin saber <strong>de</strong>l<br />
todo por qué, discuten sin alzar nunca la<br />
voz y sin saber muy bien las razones. En<br />
“Mo<strong>de</strong>lo 73” (Rodrigo Moscoso,2000)<br />
tres pibes salteños dan vueltas alre<strong>de</strong>dor<br />
<strong>de</strong> un Chevy 73 que se niega a dar vueltas.<br />
“Nadar Solo” <strong>de</strong> Ezequiel Acuña (2003),<br />
y la exploración <strong>de</strong> una zona que Rejtman<br />
<strong>de</strong>scubrió con “Rapado” y que no es fácil<br />
<strong>de</strong> <strong>de</strong>finir, pero se pue<strong>de</strong> advertir que cada<br />
una <strong>de</strong> las relaciones circulan sobre algunos<br />
objetos que pasan <strong>de</strong> un personaje a otro, y<br />
que se mueven en el relato sólo porque <strong>de</strong>pen<strong>de</strong>n<br />
<strong>de</strong> ellos. La fuga que se constituye<br />
en búsqueda / escape o experiencia existencial<br />
en “Tan <strong>de</strong> repente” (Diego Lerman,<br />
2002) La calle, el viaje, como trayectoria<br />
que la diferencia <strong>de</strong> la monotonía cotidiana<br />
(road-movie). En la película <strong>de</strong> Lerman<br />
todo es posible que pase. Es en cada producto<br />
<strong>de</strong>l realismo absurdo don<strong>de</strong> queda<br />
registrado el paso <strong>de</strong>l tiempo. Los jóvenes<br />
caminan, fuman, dan vuelta, <strong>de</strong>ambulan<br />
sin algún sentido, no hacen nada... esto<br />
visto <strong>de</strong>s<strong>de</strong> una narrativa convencional parece<br />
banal, pero no lo es. Estas escenas no<br />
aportan datos sobre la historia, muestran<br />
el paso <strong>de</strong>l tiempo. El contexto (ciudad,<br />
habitación, baño, la calle, la noche) don<strong>de</strong><br />
ocurren los hechos, también son elementos<br />
que reclaman significaciones. A gran<strong>de</strong>s<br />
rasgos, se pue<strong>de</strong> observar una irrupción <strong>de</strong><br />
no-lugares. Los que antes eran lugares (lugares<br />
como posibilitadores <strong>de</strong> la formación<br />
<strong>de</strong> una i<strong>de</strong>ntidad) se han transformado en<br />
espacios <strong>de</strong> paso. Vértigo <strong>de</strong> las ciuda<strong>de</strong>s,<br />
pérdida <strong>de</strong> continuidad en los espacios,<br />
en particular los shoppings, la calle, los<br />
gran<strong>de</strong>s supermercados, aeropuertos, entre<br />
muchos más 10 .<br />
El barrio es otro <strong>de</strong> los territorios <strong>de</strong> los<br />
jóvenes, ese lugar simbólico cargado también<br />
<strong>de</strong> significaciones que se constituye<br />
como elemento fundante para el surgimiento<br />
<strong>de</strong> grupos juveniles. Es en relación<br />
con ese espacio don<strong>de</strong> aparecen algunos<br />
cambios con los constitutivos i<strong>de</strong>ntitarios<br />
<strong>de</strong> los jóvenes 11 . Los adolescentes <strong>de</strong> Raúl<br />
Perrone* viven siempre al límite, en Ituzaingó,<br />
el barrio- universo <strong>de</strong>l director que<br />
sirve como escenario para cada uno <strong>de</strong> sus<br />
productos in<strong>de</strong>pendientes. Todas sus historias<br />
suburbanas comienzan y finalizan en<br />
el barrio. Es conveniente narrar y <strong>de</strong>scribir<br />
cómo es cada barrio en el que viven los<br />
jóvenes. Cómo ellos se apropian <strong>de</strong>l espacio<br />
y por que lo hacen <strong>de</strong> una manera y no<br />
<strong>de</strong> otra: que significa vivir en el “fondo”,<br />
en las tierras más carenciadas, aquellas que<br />
se encuentran aún sin asfaltar y <strong>de</strong>trás <strong>de</strong><br />
las cuales sólo se pue<strong>de</strong> observar las vías <strong>de</strong>l<br />
tren y campos muy extensos, y que connotaciones<br />
se <strong>de</strong>rivan <strong>de</strong> vivir en las calles<br />
asfaltadas que conducen al “centro” <strong>de</strong>l ba-<br />
* Raúl Perrone -cineasta <strong>de</strong> culto en la Argentina que recién en<br />
estos últimos años ha logrado un espacio para estrenar comercialmente<br />
sus obras- <strong>de</strong> profesión dibujante estrenó en los circuitos<br />
alternativos Labios <strong>de</strong> churrasco, obra fundacional <strong>de</strong>l Nuevo Cine<br />
In<strong>de</strong>pendiente. Después vendrían Graciadió’ y 5 pal’ peso, que<br />
completarían una trilogía única no sólo por su propio peso específico,<br />
sino también por la influencia <strong>de</strong>cisiva que tuvo en lo que hoy<br />
es el cine argentino.
26<br />
rrio, en el que se encuentra la zona comercial<br />
y la plaza principal don<strong>de</strong> se realizan<br />
distintos tipos <strong>de</strong> eventos 12 . Estos elementos<br />
y su habitual economía <strong>de</strong> recursos son<br />
el microcosmos que permiten al realizador<br />
enten<strong>de</strong>r y utilizar al barrio como telón <strong>de</strong><br />
fondo.<br />
Algunos <strong>de</strong> los lugares que caracterizan a<br />
los jóvenes, y que <strong>de</strong>s<strong>de</strong> hace más <strong>de</strong> una<br />
década insiste en construir el cine nacional,<br />
son las plazas y la calle, espacios cargados<br />
<strong>de</strong> sentido que contienen en su disposición<br />
espacial posibilida<strong>de</strong>s, prohibiciones y<br />
prescripciones.<br />
Es común que los jóvenes <strong>de</strong> hoy generen<br />
una alternativa espacial propia (Plazas,<br />
esquinas, ciber-kioscos, recitales y bailantas;<br />
salas <strong>de</strong> vi<strong>de</strong>o juegos...) que los ayu<strong>de</strong><br />
a afirmar su i<strong>de</strong>ntidad. Debajo <strong>de</strong>l obelisco<br />
en “Pizza, Birra, Faso” (Caetano-Stagnaro,<br />
1997), el sexo en los cajeros automáticos<br />
en “Vagón Fumador” (Verónica Chen,<br />
2001), la sala <strong>de</strong> vi<strong>de</strong>ojuegos y “Picado<br />
Fino” (Sapir, 1994), entre muchos ejemplos<br />
más. Se los pue<strong>de</strong> ver simplemente<br />
amontonados, sentados en el frente <strong>de</strong> un<br />
local o edificio, apoyados contra los autos<br />
estacionados en la calle, o simplemente<br />
invadiendo la vereda 13 .<br />
Existen otras películas, no necesariamente<br />
argentinas, que movilizan al espectador<br />
“El odio” (Francia, 1995)
27<br />
contraposición <strong>de</strong> las gran<strong>de</strong>s urbes.<br />
Ya nadie va a escuchar tu remera<br />
Lo mismo se pue<strong>de</strong> <strong>de</strong>cir <strong>de</strong>l lenguaje que<br />
utilizan los jóvenes. Algunas palabras pue<strong>de</strong>n<br />
ser entendidas sólo por aquellos que<br />
forman parte <strong>de</strong> la cultura juvenil y cobran<br />
distintos significados según el contexto en<br />
el que las mismas sean usadas 1314 .<br />
El silencio <strong>de</strong> los jóvenes es fundamento <strong>de</strong><br />
una subjetividad, puesto que con lo que no<br />
se dice no <strong>de</strong>ja <strong>de</strong> connotarse el estado <strong>de</strong>l<br />
personaje. A<br />
esto<br />
indistinta sea su cultura. Rodada en un<br />
contrastado blanco y negro, “El odio”<br />
(Francia, 1995) es una especie <strong>de</strong> “Pizza,<br />
Birra, Faso”, pero con una estética a lo “Picado<br />
Fino” (con una variedad interesante<br />
<strong>de</strong> encuadres como los que utilizó Esteban<br />
Sapir) En la película <strong>de</strong> Mathieu Kassovitz<br />
el conflicto es el punto <strong>de</strong> inflexión entre<br />
los marginales y la policía.<br />
“El odio” tiene antece<strong>de</strong>ntes en la muerte<br />
en 1993 <strong>de</strong>l árabe Makomé, <strong>de</strong> 17 años,<br />
muerto <strong>de</strong> un disparo mientras era interrogado<br />
por la policía. Kassovitz participó en<br />
las manifestaciones <strong>de</strong> protesta y recuperó<br />
el trágico inci<strong>de</strong>nte para construir un día<br />
en la vida <strong>de</strong> tres jóvenes amigos (un<br />
joven <strong>de</strong> origen marroquí,<br />
un judío<br />
y un africano; los tres<br />
franceses) que viven en un barrio marginal<br />
<strong>de</strong> la periferia parisina, durante los importantes<br />
disturbios sociales que se dieron a<br />
comienzos <strong>de</strong> los 90.<br />
Al igual que los jóvenes <strong>de</strong> “Pizza, Birra,<br />
Faso” y “Picado Fino”, “El Odio” es un<br />
sugestivo ensayo sobre la situación social <strong>de</strong><br />
los jóvenes en las periferias <strong>de</strong> los barrios.<br />
Se estructura en fragmentos, en tiempo<br />
real, y concentra una contenida y constante<br />
violencia.<br />
“El odio” se anticipó a la ola <strong>de</strong> violencia,<br />
protagonizada por jóvenes, que se <strong>de</strong>sató<br />
en las ciuda<strong>de</strong>s <strong>de</strong> Francia, en noviembre<br />
<strong>de</strong> 2005. Ese contexto social se construye<br />
en la película, una escritura <strong>de</strong> la división<br />
centro-periferia que no <strong>de</strong>tiene sólo en<br />
una dicotomía espacial, sino que construye<br />
un conflicto social y cultural. El barrio en<br />
po<strong>de</strong>mos verlo en<br />
las conversaciones y la circulación <strong>de</strong> los<br />
personajes <strong>de</strong> “Sábado” (Juan Villegas,<br />
2001), la escasez <strong>de</strong> diálogos, la trivialidad<br />
<strong>de</strong> las palabras es parte <strong>de</strong> un trabajo literario<br />
que hace que los intercambios verbales<br />
progresen hacía una ligera inverosimilitud<br />
(“Silvia Prieto”, Rejtman) En la película<br />
<strong>de</strong> Villegas persiste la misma banalidad <strong>de</strong><br />
las conversaciones organizadas alre<strong>de</strong>dor<br />
<strong>de</strong> malentendidos, pero sobre todo <strong>de</strong>s<strong>de</strong><br />
cierta torpeza en la expresión.<br />
Los silencios <strong>de</strong>liberados <strong>de</strong> “Nadar Solo”<br />
(Ezequiel Acuña, 2003) propios <strong>de</strong> la<br />
alienación urbana; la película parece tomar<br />
relaciones <strong>de</strong>spojadas en la superficie. Los<br />
adolescentes <strong>de</strong> Acuña no se rebelan ante<br />
nada. No tienen aficiones por el alcohol, <strong>de</strong><br />
drogas, ni <strong>de</strong> sexo a diferencia <strong>de</strong> Tomás, el<br />
joven que propone “Picado fino” (Sapir,<br />
1994) “Nadar solo” constituye, <strong>de</strong> este<br />
modo, una historia casual, sostenida por las
28<br />
inferencias precarias y que da lugar a todo<br />
lo no-dicho.<br />
Si se piensa en los jóvenes <strong>de</strong> lo que llamamos<br />
el realismo social, a diferencia <strong>de</strong> la<br />
ten<strong>de</strong>ncia <strong>de</strong>l absurdo, sus palabras colaboran<br />
así en la edificación <strong>de</strong> fronteras;<br />
son los ladridos simbólicos con los que se<br />
establecen las distancias aparentemente inobjetables.<br />
(12) Ellos nos hacen participar<br />
<strong>de</strong> una experiencia única, tienen dificulta<strong>de</strong>s<br />
para comunicarse y<br />
cuando lo hacen recurren<br />
a un lenguaje grosero,<br />
torpe, es, justamente,<br />
porque viven en una<br />
sociedad en crisis, y<br />
a través <strong>de</strong> sus volunta<strong>de</strong>s<br />
se enfrentan<br />
al <strong>de</strong>sencanto<br />
general. Pero no<br />
es sólo el lenguaje<br />
uno <strong>de</strong> los principales<br />
elementos por medio<br />
<strong>de</strong> los cuales los jóvenes<br />
transparentan su i<strong>de</strong>ntidad,<br />
también lo hacen a través <strong>de</strong><br />
la forma <strong>de</strong> vestirse, <strong>de</strong> cubrir el cuerpo.<br />
Así, el cuerpo se convierte en portador <strong>de</strong><br />
infinitos mensajes pero, sobre todo, en<br />
el portador <strong>de</strong> la primera imagen; con el<br />
cuerpo uno se presenta ante la mirada <strong>de</strong><br />
otros. (14)<br />
Tsai Ming-liang, uno <strong>de</strong> los realizadores<br />
contemporáneos más <strong>de</strong>stacados <strong>de</strong>l cine<br />
Taiwanés, en sintonía con el cine argentino<br />
arriba mencionado; recupera algunas características<br />
<strong>de</strong> la cinematografía <strong>de</strong> la Nouvelle<br />
Vague, en especial <strong>de</strong> François Truffaut.<br />
Tsai trabaja siempre sobre las mismas<br />
preocupaciones y las repite en cada una <strong>de</strong><br />
sus películas. Uno <strong>de</strong> los ejes <strong>de</strong> su cine es<br />
ɶEstas<br />
películas<br />
ɶ<br />
no reflejan la realidad<br />
<strong>de</strong>l ser joven,<br />
sino que la construyen<br />
al igual que construyen<br />
actitu<strong>de</strong>s,<br />
valores y creencias<br />
comunes a la sociedad.<br />
la ausencia <strong>de</strong> una narración <strong>de</strong>finida, la escasez<br />
<strong>de</strong> diálogos que en la mayoría <strong>de</strong> los<br />
casos se apoya en la imagen, en sus planos<br />
largos (en cuanto a la duración) y fijos.<br />
Una temática reiterativa en el cine <strong>de</strong> Tsai<br />
es la incomunicabilidad cotidiana y la alienación<br />
urbana en la cual están inmersos sus<br />
jóvenes protagonistas. “El Río” (Taiwan,<br />
1997), “The Hole” (Taiwan, 1998) y “Allí<br />
que hora es?” todas están cargadas<br />
<strong>de</strong> “simbolismos” (El agua es<br />
Yo, tú, ellos<br />
uno <strong>de</strong> ellos), narradas a<br />
través <strong>de</strong> larguísimos<br />
silencios y un manejo<br />
<strong>de</strong> los tiempos<br />
que incomodan al<br />
espectador. Tsai<br />
Ming-liang en cada<br />
una <strong>de</strong> sus películas<br />
trabaja con<br />
la i<strong>de</strong>a metafórica<br />
<strong>de</strong>l progresivo acercamiento<br />
<strong>de</strong> oriente a<br />
occi<strong>de</strong>nte. Siempre <strong>de</strong>s<strong>de</strong><br />
ciertas dificulta<strong>de</strong>s en la<br />
comunicación.<br />
Todo lo que muestran películas como las<br />
anteriormente elegidas, y muchas que no<br />
se pudieron nombrar por una cuestión <strong>de</strong><br />
espacio, tiene sentido y la mayor parte <strong>de</strong><br />
las veces un segundo significado que sólo<br />
pue<strong>de</strong> surgir <strong>de</strong> la reflexión. Para Marcel<br />
Martin 15 toda imagen implica más <strong>de</strong> lo<br />
que explica, es por eso que obras como<br />
estas son interpretables en varios niveles<br />
según el grado <strong>de</strong> sensibilidad, imaginación<br />
y cultura <strong>de</strong>l espectador.<br />
Los silencios <strong>de</strong>liberados, los síntomas <strong>de</strong>
29<br />
repetición, las reiteraciones que muestran<br />
el sin sentido, las incertidumbres, el constante<br />
<strong>de</strong>ambular, el <strong>de</strong>sprecio, la falta <strong>de</strong><br />
interés y <strong>de</strong> diálogos; todo esto sumado al<br />
importante nivel <strong>de</strong> fragmentación que se<br />
pue<strong>de</strong> vislumbrar como resultado <strong>de</strong>l lenguaje<br />
audiovisual (encuadres, angulaciones,<br />
sonidos...) Todo esto construye una i<strong>de</strong>a<br />
<strong>de</strong> joven que, a pesar <strong>de</strong> cualquier extremismo,<br />
pue<strong>de</strong> generalizarse y acercarse a la<br />
realidad e idiosincrasia <strong>de</strong> la juventud que<br />
se <strong>de</strong>spren<strong>de</strong> <strong>de</strong>l cine.<br />
Se supone que la problemática relacionada<br />
con la i<strong>de</strong>ntidad juvenil tiene su origen en<br />
conflictos familiares que sumados a influencias<br />
sociales <strong>de</strong>fectuosas, frustraciones<br />
acumuladas por el sistema educativo y, fundamentalmente<br />
por el laboral, generan en<br />
los jóvenes la necesidad <strong>de</strong> buscar espacios<br />
y lugares propios (fuera <strong>de</strong>l ámbito familiar)<br />
para realizarse, sentirse in<strong>de</strong>pendientes<br />
y <strong>de</strong>sarrollar –<strong>de</strong> una vez por todas- su<br />
personalidad.<br />
Los directores reemplazan a la institución<br />
familiar por elementos urbanos que reclaman<br />
significaciones. Por ejemplo, el cine<br />
contemporáneo inundó sus pantallas con<br />
los no-lugares; esos espacios a-i<strong>de</strong>ntitarios<br />
que no habilitan las relaciones sociales, ni<br />
tienen una historia, que son provisorios,<br />
efímeros, sitios <strong>de</strong> paso. Se pue<strong>de</strong> observar<br />
una irrupción <strong>de</strong> no-lugares en la actualidad<br />
y cómo la juventud se siente en otro<br />
espacio <strong>de</strong> i<strong>de</strong>ntidad, con atributos y características<br />
bien opuestas y diferentes, con valores<br />
y estilos <strong>de</strong> vida que las generaciones<br />
adultas no comparten, en general. También<br />
es interesante el quiebre que estos cineastas<br />
realizaron en el lenguaje empleado por sus<br />
jóvenes personajes, ya que este posee las<br />
mismas características que otros elementos<br />
<strong>de</strong> la cultura juvenil. Intenta construir<br />
un universo singular que lo distancie <strong>de</strong>l<br />
“otro” (adulto u otros jóvenes) Así, las palabras<br />
colaboran en la edificación <strong>de</strong> fronteras;<br />
también la forma <strong>de</strong> vestirse. Estos<br />
elementos relacionados con aspectos básicos<br />
<strong>de</strong> la i<strong>de</strong>ntidad, construyen una estética<br />
particular que es la juventud. En este caso<br />
<strong>de</strong>terminada por diferentes ten<strong>de</strong>ncias,<br />
según la cultura <strong>de</strong>l realizador.<br />
Estos jóvenes no miran <strong>de</strong>s<strong>de</strong> afuera, por el<br />
contrario, se internan (y nos internan) <strong>de</strong>ntro<br />
<strong>de</strong> cada escena, nos hacen intervenir.<br />
Cada uno <strong>de</strong> estos personajes tiene dificulta<strong>de</strong>s<br />
para comunicarse o para enfrentar<br />
algún proyecto <strong>de</strong> vida, es, justamente,<br />
porque viven en una sociedad con una<br />
abstracta imagen <strong>de</strong>l porvenir. Transitan<br />
sin problemas historias que van <strong>de</strong>l humor<br />
más absurdo al drama más <strong>de</strong>sgarrador, y<br />
<strong>de</strong>s<strong>de</strong> estos claros extremos sacan las fuerzas<br />
necesarias para enfrentar sus conflictos.<br />
Éstos jóvenes son parte <strong>de</strong> la narrativa, y las<br />
películas mencionadas intentan recuperar<br />
aspectos que se relacionan con la incertidumbre<br />
social, con lo que pasa en cada una<br />
<strong>de</strong> las socieda<strong>de</strong>s. Es a través <strong>de</strong>l cine que<br />
se construye esa particular visión. Sombrío<br />
escenario que facilita un anclaje actual,<br />
aunque su extremismo, y sus diferentes aspectos<br />
predominen en el relato. Ante todo,<br />
se pue<strong>de</strong> percibir que son muchos jóvenes<br />
los que construyen su i<strong>de</strong>ntidad en el terreno<br />
<strong>de</strong>l <strong>de</strong>sencanto. Películas que no reflejan<br />
la realidad <strong>de</strong>l ser joven, sino que la construyen<br />
al igual que construyen actitu<strong>de</strong>s,<br />
valores y creencias comunes a la sociedad.<br />
De esta manera, el cine se convierte en un<br />
<strong>de</strong>licado lugar para observar al hombre en<br />
su vida cotidiana.
30<br />
Agua (2006) Verónica Chen (Argentina)<br />
Filmografías:<br />
ɶɶAcuña, Ezequiel (Argentina)<br />
Como un avión estrellado (2005)<br />
Nadar solo (2003)<br />
Rocío (corto - 2000)<br />
Raro (corto - 1999)<br />
Tokio (corto - 1998)<br />
ɶɶAronosky Darren (Estados Unidos)<br />
Pi (1998)<br />
Réquiem por un sueño (2000)<br />
La Fuente <strong>de</strong> la vida (2006)<br />
ɶɶBerneri, Anahí (Argentina)<br />
Encarnación (2007)<br />
Un año sin amor (2004)<br />
Mo<strong>de</strong>lo para armar (corto - 1997)<br />
ɶɶCaetano, Adrián Israel (Uruguay)<br />
Caudillo (anunciada)<br />
Mujeres elefante (telefilm - 2007)<br />
Crónica <strong>de</strong> una fuga (2006)<br />
Sangre roja, 100 años <strong>de</strong> gloria (mediometraje<br />
- 2005)<br />
18-J (2004)<br />
Después <strong>de</strong>l mar (telefilm - 2003)<br />
Un oso rojo (2002)<br />
Bolivia (2001)<br />
Historias <strong>de</strong> Argentina en Vivo (2001)<br />
La cautiva (telefilm - 2001)<br />
La expresión <strong>de</strong>l <strong>de</strong>seo (mediometraje -<br />
1998)<br />
Pizza, birra, faso (1997)<br />
No necesitamos <strong>de</strong> nadie (corto - 1996)<br />
Cuesta abajo (corto - 1995)<br />
Calafate (corto - 1994)<br />
Blanco y negro (corto - 1993)<br />
Visite Carlos Paz (corto - 1992)
31<br />
“Los siucidas” 2005<br />
ɶɶKassowitz, Mathieu (Francia)<br />
Gothika (2003)<br />
Los ríos <strong>de</strong> color púrpura (2000)<br />
El odio (1995)<br />
ɶɶChen, Verónica (Argentina)<br />
El juego <strong>de</strong>l ahorcado (en producción)<br />
Agua (2006)<br />
Vagón fumador (2000)<br />
Ezeiza (corto - 1997)<br />
Calor humano (corto - 1996)<br />
2015 (corto - 1996)<br />
Soldado (corto - 1995)<br />
Ariel Lavalle (corto - 1995)<br />
Qué felicidad (corto - 1994)<br />
Los inocentes (corto - 1994)<br />
ɶɶGugliotta, Sandra (Argentina)<br />
Tercera invasión (en producción)<br />
Las vidas posibles (2007)<br />
Un día <strong>de</strong> suerte (2002)<br />
Noches áticas (corto - 1994)<br />
ɶɶKamin, bebe (Bernardo Czemerinsky,<br />
Argentina)<br />
Maestros milongueros (2006)<br />
Contraluz (2001)<br />
Vivir mata (1991)<br />
Chechechela, una chica <strong>de</strong> barrio (1986)<br />
Los chicos <strong>de</strong> la guerra (1984)<br />
Adiós Sui Generis (1976)<br />
El búho (no estrenada comercialmente -<br />
1974)<br />
ɶɶLerman, Diego (Argentina)<br />
Mientras tanto (2006)<br />
La guerra <strong>de</strong> los gimnasios (corto - 2004)<br />
Tan <strong>de</strong> repente (2002)<br />
La prueba (corto - 1999)<br />
ɶɶMoscoso, Rodrigo (Argentina)<br />
Mo<strong>de</strong>lo 73 (2000)<br />
Leo 16 (corto - 1995)<br />
ɶɶPerrone, Raúl (Argentina)<br />
Aullido (en postproducción)
32<br />
Doce momentos <strong>de</strong> felicidad (en postproducción)<br />
La navidad <strong>de</strong> Ofelia y Galván (2007)<br />
Tar<strong>de</strong> <strong>de</strong> verano (2006)<br />
Canadá (2006)<br />
Pajaritos (2005)<br />
Ocho años <strong>de</strong>spués (2005)<br />
Nosotrosdos (2005)<br />
La mecha (2003)<br />
Late un corazón (no estrenada comercialmente<br />
- 2002)<br />
Peluca y Marisita (2001)<br />
Zapada, una comedia beat (no estrenada<br />
comercialmente - 1999)<br />
5 pal’ peso (1998)<br />
La felicidad (un día <strong>de</strong> campo) (no estrenada<br />
comercialmente - 1998)<br />
La película <strong>de</strong>l taller (mediometraje -<br />
1998)<br />
Graciadió (1997)<br />
No seas cruel (inédita - 1996)<br />
Jimidin (1995)<br />
Labios <strong>de</strong> churrasco (1994)<br />
Chamuyando (1993)<br />
Nos veremos mañana (inédita - 1993)<br />
Blus (inédita - 1993)<br />
Ángeles (1992)<br />
Suave como el terciopelo (1991)<br />
Bang-Bang (corto - 1990)<br />
Buenos Aires-Esquina (mediometraje -<br />
1990)<br />
Subterráneos (corto - 1989)<br />
ɶɶRejtman, Martín (Argentina)<br />
Copacabana (telefilm - 2006)<br />
Los guantes mágicos (2003)<br />
Silvia Prieto (1998)<br />
Rapado (1991)<br />
Sistema español (inconclusa - 1988)<br />
Doli vuelve a casa (corto - 1986)<br />
Rachel Weisz, “La fuente <strong>de</strong> la vida”<br />
(The fountain);<br />
<strong>de</strong> Darren Aronofsky<br />
ɶɶRotter, Ariel (Argentina)<br />
El otro (2007)<br />
Olvidos, locura y amor (corto - 2006)<br />
Sólo por hoy (2000)<br />
Espectros (corto - 1995)<br />
Legolás (corto - 1993)<br />
ɶɶSapir, Esteban (Argentina)<br />
La antena (2007)<br />
Picado fino (1993)<br />
ɶɶStagnaro, Bruno (Argentina)<br />
Historias <strong>de</strong> Argentina en Vivo (2001)<br />
Pizza, birra, faso (1997)<br />
Guarisove, los olvidados (corto - 1995)
Martín Rejtman<br />
ɶɶTrapero, Pablo (Argentina)<br />
Leonera (anunciada)<br />
Nacido y criado (2006)<br />
Familia rodante (2004)<br />
El bonaerense (2002)<br />
Naikor (corto - 2001)<br />
Mundo grúa (1999)<br />
Negocios (corto - 1995)<br />
Mocoso malcriado (corto - 1993)<br />
33<br />
ɶɶTsai Ming-liang (Malasia)<br />
The Wayward Cloud 2005<br />
El sabor <strong>de</strong> la sandía 2005<br />
Bienvenido a Sao Paulo 2004<br />
Good Bye, Dragon Inn 2003<br />
¿Qué hora es allá? 2001<br />
Una conversación con Dios 2001<br />
El agujero 1997<br />
El río 1997<br />
Viva el amor 1994<br />
Rebel<strong>de</strong>s <strong>de</strong>l dios neón 1989<br />
ɶɶVillegas, Juan (Argentina)<br />
Los suicidas (2005)<br />
Una tar<strong>de</strong> feliz (corto - 2002)<br />
Sábado (2001)<br />
2 en 1 auto (corto - 1998)<br />
Rutas y veredas (corto - 1995)<br />
“Historias Breves” 1995
34<br />
Bibliografía<br />
1<br />
REY RAMÍREZ, ALEJANDRO. Docente U.M.N.G.<br />
<strong>Universidad</strong> Militar Nueva Granada. República <strong>de</strong><br />
Colombia. Ministerio <strong>de</strong> Defensa <strong>Nacional</strong>. 2000. www.<br />
umng.edu.co/cultural/cine.htm - 11k –<br />
2<br />
MARTÍN, DIEGO ANGEL Y SANCHEZ, JOSÉ<br />
AGUSTÍN. www.oni.escuelas.edu.ar. Cuarta etapa:<br />
Recuperación <strong>de</strong>mocrática, cine y globalización<br />
(1983-actualidad). 1998. Este Sitio Web fue <strong>de</strong>sarrollado<br />
por un grupo <strong>de</strong> alumnos y docentes <strong>de</strong> la<br />
Escuela Técnica ORT Nº2 (Buenos Aires, Rep. Argentina),<br />
en el marco <strong>de</strong> las II Olimpíadas <strong>Nacional</strong>es en<br />
Internet organizadas por el INET (Instituto <strong>Nacional</strong><br />
<strong>de</strong> Educación Tecnológica).<br />
3<br />
MERCADER, YOLANDA. “Estrategias simbólicas <strong>de</strong>l<br />
cine: juego <strong>de</strong> reconocimiento e invención <strong>de</strong> i<strong>de</strong>ntida<strong>de</strong>s”.<br />
http://www.naya.org.ar/congreso2000/ponencias/Yolanda_Merca<strong>de</strong>r.htm.<br />
Investigación realzada por Yolanda<br />
Merca<strong>de</strong>r. <strong>Universidad</strong> Autónoma Metropolitana – Xochimilco.<br />
Ciudad <strong>de</strong> México. 2000.<br />
4<br />
OUBIÑA, DAVID. Ensayista y crítico. Se licenció en<br />
Letras en la <strong>Universidad</strong> <strong>de</strong> Buenos Aires y se ha especializado<br />
en el estudio comparado <strong>de</strong>l cine y la literatura. Es<br />
docente e investigador en la <strong>Universidad</strong> <strong>de</strong> Buenos Aires<br />
y en la <strong>Universidad</strong> <strong>de</strong>l Cine. Ha colaborado en diversas<br />
revistas especializadas como Punto <strong>de</strong> vista y El Amante<br />
(Buenos Aires), Variaciones Borges (Aarhus), Cinémas<br />
d’Amérique Latine (Toulouse) y Cinemais (Río <strong>de</strong> Janeiro).<br />
© otrocampo.com 1999-2001.<br />
7<br />
ALFARO, ANA TANIA VARGAS. “i<strong>de</strong>ntidad y<br />
sentido <strong>de</strong> pertenencia. Una mirada <strong>de</strong>s<strong>de</strong> la cotidianeidad”.<br />
Centro Prov. De Cultura Comunitaria. Ciudad<br />
<strong>de</strong> la Habana. Cuba. www.crim.unam.mx/cultura/<br />
ponencias/1cultDesa/CDIDE02.htm.1997.<br />
8<br />
ESPINOSA, TERESA SAN ROMÁN. catedrática <strong>de</strong> antropología<br />
social <strong>de</strong> la universidad autónoma <strong>de</strong> Barcelona.<br />
19 <strong>de</strong> noviembre <strong>de</strong> 2001 Resumen <strong>de</strong> la ponencia realizado<br />
por el equipo <strong>de</strong> redacción <strong>de</strong>l Ámbito María Corral. www.<br />
ua-ambit.org/jornadas2001/ponencias/ j01-teresa-sanroman.<br />
htm-.<br />
9<br />
SILVA, VÍCTOR. vimasi@hotmail.com. Lic. En la <strong>Universidad</strong><br />
<strong>de</strong> la República Oriental <strong>de</strong>l Uruguay. <strong>Universidad</strong><br />
<strong>de</strong> Sevilla . Espéculo. Revista <strong>de</strong> estudios literarios. <strong>Universidad</strong><br />
Complutense <strong>de</strong> Madrid. “La compleja construcción<br />
contemporánea <strong>de</strong> la i<strong>de</strong>ntidad: habitar ‘el entre’ “. http://<br />
www.ucm.es/info/especulo/numero18/compleja.html. 2001.<br />
El Lic. Víctor Silva retoma al autor Marc Augé en su trabajo<br />
“La compleja construcción contemporánea <strong>de</strong> la i<strong>de</strong>ntidad:<br />
habitar ‘el entre’ “<br />
10<br />
RUSSO, SEBASTIÁN. “Estética y Política. Relaciones<br />
peligrosas”. La comunidad artística en Internet. w3art.es/<br />
russo/FOROS/Foro%201.htm - 7k – 2001.<br />
11<br />
REGUILLO CRUZ, ROSSANA. Emergencias <strong>de</strong> culturas<br />
juveniles. “Estrategias <strong>de</strong>l <strong>de</strong>sencanto”. Editorial Norma .2000.<br />
12<br />
MARGULIS, MARIO. “La juventud es más que una<br />
palabra”. Ensayos sobre cultura y juventud. Editorial Biblos,<br />
1996.<br />
13<br />
MARGULIS, MARIO. “La cultura <strong>de</strong> la noche”. La vida<br />
nocturna <strong>de</strong> los jóvenes en Buenos Aires. Espasa Calpe<br />
Argentina. 1994.<br />
5<br />
MERLOS, MARISA ADRIANA. “I<strong>de</strong>ntida<strong>de</strong>s juveniles:<br />
incertidumbre en el fin <strong>de</strong>l milenio”. Este trabajo se<br />
inscribe en el Programa: “Análisis <strong>de</strong> prácticas cognitivoculturales:<br />
la escritura y la imagen”, <strong>de</strong>l PROINCOM<br />
(programa <strong>de</strong> investigaciones comunicacionales), dirigido<br />
por Donatella Castellani. 1996.<br />
6<br />
RODRÍGUEZ SÁNCHEZ, J. L. 1989. Transtorno <strong>de</strong><br />
i<strong>de</strong>ntidad, factor común en los alumnos “problema” <strong>de</strong><br />
bachillerato. Tesis Maestría. Psicología Clínica. Departamento<br />
<strong>de</strong> Psicología, Escuela <strong>de</strong> Ciencias Sociales,<br />
<strong>Universidad</strong> <strong>de</strong> las Américas-Puebla. Mayo. Derechos<br />
Reservados © 1989, <strong>Universidad</strong> <strong>de</strong> las Américas-Puebla.<br />
mailweb.udlap.mx/~tesis/mpsc/rodriguez_s_jl/ capitulo1.html<br />
- 9k<br />
“2001: Una odisea <strong>de</strong>l espacio”<br />
14<br />
URBAITEL, PABLO. “Adolescencia, tribus urbanas y<br />
cultura joven”, algunas reflexiones acerca <strong>de</strong> las características<br />
<strong>de</strong> los alumnos <strong>de</strong> nivel medio. Urbaitel es investigador<br />
<strong>de</strong>l CECYT (Centro <strong>de</strong> estudios en cultura y tecnología)<br />
Facultad <strong>de</strong> ciencia política y relaciones internacionales<br />
U.N.R. Anuario <strong>de</strong>l Dpto. <strong>de</strong> ciencias <strong>de</strong> la comunicación.<br />
UNR Editora.1998.<br />
15<br />
MARTIN, MARCEL. “El lenguaje <strong>de</strong>l cine”. Iniciación<br />
a la estética <strong>de</strong> la expresión cinematográfica a través <strong>de</strong>l<br />
análisis sistemático <strong>de</strong> los procedimientos fílmicos. Editorial<br />
Gedisa 1995.<br />
Marcos Altamirano:<br />
Director <strong>de</strong> la Dirección <strong>de</strong> Comunicación y Cultura<br />
Facultad <strong>de</strong> Ciencias Económicas<br />
Responsable www.metropoliscine.com.ar
No le tengas<br />
miedo a la aguja.<br />
Temele a la indiferencia<br />
Registro <strong>de</strong> Potenciales<br />
Dadores <strong>de</strong> Sangre<br />
en la UNRC.<br />
35<br />
¿Qué es?<br />
El objetivo <strong>de</strong> esta iniciativa es generar un banco <strong>de</strong><br />
datos <strong>de</strong> potenciales dadores <strong>de</strong> sangre, organizado,<br />
eficaz y rápido para dar respuesta a la necesidad<br />
urgente <strong>de</strong> algún miembro <strong>de</strong> la comunidad universitaria.<br />
El banco <strong>de</strong> datos es implementado <strong>de</strong>s<strong>de</strong> la Dirección<br />
<strong>de</strong> Salud, contado para ello con un programa<br />
informático <strong>de</strong>sarrollado por el Centro <strong>de</strong> Cómputos<br />
<strong>de</strong> la UNRC, el cuál permite realizar búsquedas<br />
por grupo y factor compatibles.<br />
¿Para quiénes?<br />
Este registro está <strong>de</strong>stinado a cubrir las necesida<strong>de</strong>s<br />
<strong>de</strong> los miembros <strong>de</strong> la comunidad universitaria,<br />
(docentes, no docentes y estudiantes) y <strong>de</strong> sus familiares<br />
directos (padre, madre, hermanos e hijos).<br />
Si el potencial dador no conoce o no recuerda su<br />
grupo sanguíneo, el análisis se realizará en el Laboratorio<br />
<strong>de</strong> la Dirección <strong>de</strong> Salud.<br />
En todos los casos, la verificación <strong>de</strong> la sangre donada<br />
se realizará en la institución <strong>de</strong> salud don<strong>de</strong> se<br />
realice la transfusión <strong>de</strong> sangre.<br />
¿Cómo inscribirse?<br />
Para inscribirse, los interesados <strong>de</strong>berán ingresar<br />
al Sistema <strong>de</strong> Información <strong>de</strong> la universidad con<br />
su DNI y clave <strong>de</strong> acceso (PIN) en don<strong>de</strong> podrán<br />
seleccionar la opción “DADORES DE SANGRE”,<br />
a partir <strong>de</strong> lo cual se abrirá una pantalla conteniendo<br />
un cuestionario, que <strong>de</strong>berán completar,<br />
revisar, e imprimir, para finalmente firmarlo dando<br />
el consentimiento expreso <strong>de</strong> ser dador potencial <strong>de</strong><br />
sangre.<br />
Este cuestionario <strong>de</strong>berá ser entregado personalmente<br />
en la Dirección <strong>de</strong> Salud <strong>de</strong> esta <strong>Universidad</strong>.<br />
El registro <strong>de</strong> los datos cumplirá con todos los<br />
requisitos <strong>de</strong> la ley 25.392 <strong>de</strong> preservación <strong>de</strong> los<br />
datos <strong>de</strong>l potencial dador <strong>de</strong> sangre.<br />
<strong>Universidad</strong> <strong>Nacional</strong> <strong>de</strong> Río <strong>Cuarto</strong> - Secretaría <strong>de</strong> Bienestar<br />
Dirección <strong>de</strong> Salud -Tel: 0358-4676127