Como los diez mandamientos, decálogo de buenos propósitos

El primero, amarás a Dios sobre todas las cosas; el segundo,
no tomarás el nombre de Dios en vano; el tercero, santificarás
las fiestas; el cuarto, honrarás a tu padre y a tu madre; el quinto,
no matarás; el sexto, no cometerás actos impuros; el séptimo,
no robarás; el octavo, no dirás falso testimonio ni mentirás;
el noveno, no consentirás pensamientos ni deseos impuros; el
décimo, no codiciarás los bienes ajenos).
En síntesis, los diez mandamientos (perdón), el decálogo de
buenos propósitos de Calderón son (tomado de El Universal)
los siguientes:
.
Se le llaman ya a estas propuestas como el «decálogo de los
buenos deseos», porque, como ejemplo, ¿cómo frenar la pobreza
extrema en la que se desenvuelven millones de mexicanos
que han sido conducidos hacia esta situación en nueve años de
gobiernos panistas?
LO QUE VIENE
La respuesta está ya también en el Poder Legislativo, en el
paquete económico para el próximo año entregado por el doctor
en gripitas Agustín Carstens Carsten, que dicen que despacha
como secretario de Gobernación y juego al béisbol en donde
tampoco ve pasar las líneas rectas:
La propuesta de creación de un impuesto de 2 por ciento al
consumo, incluidos alimentos medicinas, «para combatir la pobreza,
y otro 4 por ciento a las telecomunicaciones, así como el
incremento del Impuesto Sobre la Renta, de 28 a 30 por ciento,
y un aumento en el gravamen a tabaco, cerveza y sorteos.
Es decir, que para frenar la pobreza extrema los pobres tendrán
que pagar más, porque si bien es cierto que los productos
alimenticios han aumentado hoy en día de manera exagerada,
con aquello de que cuesta mucho su transporte por aquello de
que el alza al precio del diesel es constante, ahora tendrá que
pagarse un impuesto por cada taco que el más humilde mexicano
se lleve a la boca. Y claro, el encarecimiento que cada taquero le
pondrá a su producto. Para esto, resultará también prohibitivo
enfermarse, porque si se es pobre ¿conoce algún funcionario
federal el trato que reciben en los hospitales los afiliados al Seguro
Popular? «Si quieren salir de la pobreza extrema, pobres,
paguen sus impuestos».
Y qué decir de las cervezas, ¿a poco nuestros sacrificados
cantineros campechanos (del Mexicanísimo, Nuevo Regis, La
Luna, Palacito Chino, El Chesmerito, El Rincón Colonial, entre
otros) se concretarán a cobrar solamente el nuevo gravamen
sin aumentar sus precios?
Y en internet, ¿cuántos jóvenes estudiantes tendrán que quedarse
sin el acceso a esta nueva herramienta para el estudio?
De su lado, el Gobierno Federal ya se propuso, además
de desaparecer tres dependencias, reducir altos mandos y el
congelamiento de sueldos (ya encontrarán éstos mandos otras
fórmulas para no caer en pobreza extrema), recortar recursos
a embajadas y delegaciones federales en los estados; y disminuir
los viáticos, los gastos de representación, consultorías y
asesorías…
De la aprobación de las propuestas se encargará la Cámara de
Diputados del Congreso de la Unión, en donde los legisladores
de los distintos partidos no estarán dispuestos, seguramente, a
jugarse la posición política para el 2012 a cambio de salvar a un
gobierno que ya desperdició tres años haciendo política.
No, definitivamente no se trata de un cambio de rumbo en
la conducción de México -el rumbo no se encuentra-, se trata
de hacer lo mismo, con lo que Felipe Calderón Hinojosa corre el
riesgo de hacer un peor papel del que hizo su antecesor, Vicente
Fox Quesada, y eso, eso es ya decir mucho.
Hop´ Ki´n •