informe tributario - AELE

INFORME TRIBUTARIO
Principales Aspectos Tributarios de la
nueva Ley Orgánica de Municipalidades
INTRODUCCIÓN
Buen tiempo duró el proceso de replantear el diseño legislativo
aplicable a las municipalidades en el Perú, especialmente difícil ha
sido la solución respecto a las competencias asignables a cada instancia
local, teniendo en cuenta la próxima implementación de las
Regiones.
Empero, finalmente el 27 de mayo pasado fue publicada la Ley
Nº 27972 que establece el nuevo marco normativo para la actividad
de las municipalidades de todo el país. La nueva Ley Orgánica
de Municipalidades (nueva LOM) ha sustituido el régimen legal establecido
por la Ley Nº 23853, norma que ha quedado derogada
a partir del 28 de mayo de 2003.
El primer párrafo del artículo 70° de la nueva LOM ha establecido
que el sistema tributario de las municipalidades se rige por la ley
especial (hasta hoy el Dec. Leg. Nº 776) y el Código Tributario en la
parte pertinente. De acuerdo a ello, de primera impresión, parecería
que la nueva LOM no ha querido abordar aspectos de índole tributario,
acción que ha derivado a una norma especial sobre la materia.
Sin embargo, a continuación queremos plantear algunas disposiciones
que tienen incidencia en el aspecto tributario.
I. SOBRE EL PODER TRIBUTARIO MUNICIPAL
Como sabemos, conforme a la Constitución de 1993, los Gobiernos
Locales tienen atribución para crear dentro de su jurisdicción
territorial tributos vinculados, esto es contribuciones y tasas
(que según la Norma II del Título Preliminar del Código Tributario
pueden ser, entre otras, arbitrios, derechos y licencias); es decir, las
municipalidades solo podrán ejercer el poder tributario si de por
medio hay una actividad estatal u obra pública con beneficio general
para un sector de la población, o se realice una prestación efectiva
de un servicio público individualizado en el contribuyente.
Ahora bien, conforme al artículo 74° de la Constitución, el Poder
Tributario de los Gobiernos Locales se ejerce con los límites que
señala la Ley. En nuestro caso, la Ley es la nueva LOM que –como
hemos visto– ha derivado a una norma especial el desarrollo de
esta temática. Empero, la norma bajo comentario ha incluido algunas
reglas que disciplinan el ejercicio del poder tributario.
1. Un problema terminológico
En primer lugar, debe señalarse que pese a que el artículo 68°
de la Ley de Tributación Municipal ha indicado los tipos de tasas
que pueden imponer las municipalidades (asimiladas al esquema
clásico señalado anteriormente), el numeral 12 del artículo 20°, el
artículo 40°, el artículo 69°, el artículo 70° y el numeral 4 del artículo
157° de la nueva LOM se refieren a “tasas, arbitrios, licencias
y derechos” como si se tratara de géneros distintos cuando en realidad
se refiere al genero y sus especies; este error debería repararse
a la brevedad posible.
2. Instrumento legal
El instrumento para la creación de dichos tributos es la Ordenanza,
criterio que se condice con lo señalado por el segundo párrafo
de la Norma IV del Título Preliminar del Código Tributario. En
ese sentido, debe ratificarse que, cuando en el artículo 60° de la
Ley de Tributación Municipal se hace referencia a “Edictos” debe
entenderse referido a “Ordenanzas”.
Ahora bien, el artículo 40° de la nueva LOM señala que las
Ordenanzas son las normas de carácter general de mayor jerarquía
en la estructura normativa municipal, por medio de las cuales
se aprueba la organización interna, la regulación, administración
y supervisión de los servicios públicos y las materias en las que la
municipalidad tiene competencia normativa.
En ese sentido, el tercer párrafo de dicho artículo ha indicado
que las Ordenanzas en materia tributaria expedidas por las municipalidades
distritales deben ser ratificadas por las municipalidades
provinciales de su circunscripción, para su vigencia. No se ha
establecido en la LOM cual es el procedimiento de ratificación.
Respecto a la aprobación de la Ordenanza, el numeral 9 del
artículo 9° de la nueva LOM ha señalado que es el Concejo Municipal
(1) el órgano facultado para crear, modificar, suprimir o exonerar
de contribuciones y tasas (arbitrios, licencias y derechos) (2) ,
empero en la Ley no se ha señalado si la Ordenanza vinculada a
aspectos tributarios debe ser aprobada por la mayoría calificada o
mayoría simple de los asistentes a la reunión válida del Concejo
Municipal, entendemos entonces que se aprobaría por mayoría simple.
El alcalde es quien en principio propone al Concejo Municipal
la creación, modificación, supresión o exoneración de tributos municipales,
conforme al numeral 12 del artículo 20° de la nueva
LOM. Adicionalmente, creemos que en virtud a lo señalado en el
numeral 1 del artículo 10° de la nueva LOM, los regidores tienen
también la atribución de proponer proyectos de Ordenanzas en
materia tributaria (3) . Igual criterio se aplica para el caso del vecino
que, conforme al inciso 2 del artículo 113° de la LOM, tiene “iniciativa
en la formación de dispositivos municipales”; a tal efecto, la
––––––
(1) Este órgano, conforme al artículo 5° esta conformado por el alcalde y el
número de regidores que establezca el JNE, conforme a la Ley de Elecciones
Municipales.
(2) Debe precisarse que la Municipalidad Metropolitana de Lima está sujeta a
un régimen especial. En tal sentido, para ella, el numeral 4 del artículo 157°
de la nueva LOM ha señalado que compete a su Concejo Metropolitano
crear, modificar y suprimir contribuciones y tasas.
(3) No consideramos válido el argumento en virtud del cual al haberse separado
entre las facultades del alcalde, la de proponer Ordenanzas por un lado
y la de proponer la creación, modificación o supresión de contribuciones y
tasas por el otro, se podría interpretar que al haberse dado en el artículo
10° a los regidores sólo la primera facultad les queda vedada la segunda.
La razón es que si el regidor tiene competencia de proponer proyectos de
Ordenanzas (general) tendrá con mayor razón la posibilidad de proponer
proyectos de Ordenanzas municipalidades (especial) pues esta última facultad
no se le ha negado expresamente.
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JUNIO 2003