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cuales afectan a una persona en su actividad dentro
de la organización. Si bien la aproximación es
muy cuestionada, representa un avance significativo
al explicar en un modelo cuantitativo la relación
directa y geométrica entre el número de relaciones
y la cantidad de personal a cargo.
Otro de los trabajos más importantes en la temática
fue propuesto por Stieglitz (1962) respecto
de la valorización de la cantidad óptima en la empresa
Lockheed donde se identifica a los factores
claves que inciden sobre la amplitud del tramo de
control. Como principal contribución se identifican
seis factores, similitud de las funciones, proximidad
geográfica, complejidad, grado de controles
requeridos para los subordinados, coordinación
necesaria y complejidad de la planeación. En ese
esquema el número de subordinados óptimo surge
de una función del grado establecido por los factores.
El modelo propuesto pondera los diferentes
factores y permite obtener un resultado en función
de los mismos calculando el número de subordinados
adecuados para ese conjunto de restricciones.
Otros estudios como por ejemplo, Mackenzie
(1974), asume que las personas utilizan tiempo
para resolver sus problemas y para interactuar con
otros, entre ellos, sus supervisores, colegas y subordinados
identificando los costos para encontrar
soluciones. Otro enfoque muy interesante fue relacionar
el tramo de control con los modelos de problemas
de agencia como se desarrolla por Brehm
y Gates (1997), en el cual el supervisor adquiere el
comportamiento del principal y los subordinados
el papel de los agentes.
A pesar de los escasos avances en determinar
una fórmula de cálculo, el interrogante sigue abierto
para describir un modelo que oriente las decisiones
sobre diseño organizacional, los trabajos no
son concluyentes en la cantidad optima teniendo
en cuenta que un modelo debería contemplar la
totalidad de los factores relevantes y que pudiera
ser aplicable a diferentes empresas. Sin embargo,
algunas conclusiones son contundente, entre ellas
que el tramo de control no es infinito y tiene una
limitación que estaría en un rango entre 5 a no
más de 30 subordinados.
En ese sentido la evidencia empírica aporta notables
conclusiones, entre los trabajos que pueden
destacarse se encuentra Hall (1988), quien muestra
evidencia de los resultados comparativos observados
entre las empresas japonesas y empresas
de Estados Unidos donde en Japón, se observa un
número de 15 subordinados por supervisor mientras
en las empresas americanas 30 subordinados
por supervisor. Woodward (1980) estudia firmas
industriales de Inglaterra y encuentra diferentes
niveles de amplitud, sin embargo encuentra coincidencia
entre empresas similares.
Lamentablemente en nuestro país la evidencia
descriptiva aun es escasa sobre los niveles jerárquicos
de todas maneras la evidencia internacional
podría ser adaptable a nuestro país como un principio
general a medida que puedan identificarse
sus causas o determinantes.
NUEVOS PARADIGMAS
Al principio los procesos del diseño organizacional
giraban en torno al funcionamiento interno
de una organización. Las cuatro piedras angulares
en el diseño de la organización fueron la división
del trabajo, la departamentalización, la jerarquía y
la coordinación. La globalización de la economía,
el crecimiento de las comunicaciones, las fusiones
y las actividades transnacionales de las empresas
presentan un escenario diferente donde los factores
exógenos tienen mayor relevancia en la definición
del diseño organizacional.
Las estructuras organizacionales fueron incorporando
nuevas formas para adaptarse a nuevos
desafíos empresariales. La clásica estructura piramidal
con niveles superiores fue reduciéndose con
el advenimiento de los grupos de trabajo haciendo
más horizontal sus formas. También se han incorporado
al diseño sistemas que involucran diferentes
organizaciones que a su vez forman parte de
un conglomerado multinacional, generando lugar
a la aparición de estructuras radiales o en redes.
Estos cambios han provocado que varios autores
ampliaran el marco conceptual con nuevas formas
o estructuras organizacionales y muchas organizaciones
han mostrado evidencia de su utilización.
Los mercados modernos, la profundización del
conocimiento en la gestión son factores desencadenantes
de nuevas formas. Por esa razón, los
estudios previos sobre tramo de control óptimo
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