Desarrollo - Comité Argentino de Presas

PresasyDesarrollo
Un nuevo Sistema
Nacional de Seguridad
de Presas
Publicación del Comité Argentino de Presas (CAP)
Año 1 - número 1 - Agosto 2010
50º
Aniversario
del CAP
Importancia de la
generación hidroeléctrica
Gestión ambiental
de hidroeléctricas.
Un antes y un después
El reasentamiento
poblacional,
un proceso participativo
Seguridad en terraplenes
de defensas
contra las inundaciones
Esta publicación cuenta con el apoyo
de las siguientes empresas e instituciones:
Avances en el tratamiento
de señales caóticas
de auscultación de presas

¡Bienvenidos!
En coincidencia con el Bicentenario de nuestra patria, el
Comité Argentino de Presas (CAP) celebra en 2010 sus
primeros 50 años. Con renovado entusiasmo, más que nunca,
seguimos en este aniversario cumpliendo los
objetivos trazados en la creación del CAP, fortificando los
lazos con nuestros colegas y con la comunidad. Esta revista
es parte de esa aspiración.
Nuestra organización nuclea a profesionales relacionados
específicamente con la ingeniería de presas e integra el Comité
Internacional de Grandes Presas (International Commission On
Large Dams – ICOLD), con el objeto de intercambiar y difundir
información técnica relevante que sirva para impulsar avances en
la planificación, el diseño, la construcción, la operación y el
mantenimiento de las presas y sus obras complementarias.
El futuro inmediato augura ser auspicioso para la construcción de
presas en nuestro país y, más que nunca, tenemos que prepararnos
para intervenir exitosamente.
Con esta publicación, el CAP aspira a construir un nuevo puente
que mantenga vinculados a todos los actores que integran la
industria de las presas, relacionándolos con los más actualizados
avances tecnológicos en la materia, las noticias del sector, las
investigaciones, las actividades profesionales, la capacitación y la
enseñanza, así como las relaciones entre la ciencia y la tecnología
específica con la sociedad.
Para alcanzar esta meta, hemos intentado siempre utilizar
herramientas de comunicación para generar espacios de relación
y vinculación entre quienes conocen algo y quienes lo necesitan.
Nuestros congresos iniciados sistemáticamente más de 10 años
atrás, las visitas técnicas, nuestro sitio web, las comunicaciones
electrónicas, nuestros esfuerzos para continuar perteneciendo al
ICOLD, entre otras acciones, buscan, en definitiva, acercarnos.
Durante varios años buscamos ese resultado con una modesta
publicación que denominamos “Noticias CAP”, ahora
discontinuada, cuya distribución alcanzaba a un ámbito restringido,
más como una forma de vinculación que de divulgación
formativa.
Hoy no existen disciplinas aisladas. Todas las actividades deben
contemplar aspectos tecnológicos, sociales y ambientales.
El espectro de temas a considerar es vasto y se enriquece
permanentemente con visiones complejas que, en definitiva,
tienden a mejorar la producción final de nuestro trabajo. Sabemos
que no será posible a través de una sola publicación cubrir tal
demanda de conocimientos, pero sí puede ser útil para
vincularnos, conocernos y generar espacios interdisciplinarios y
uniones transitorias que permitan enfrentar los desafíos que se nos
presenten en la vida profesional.
Con esta publicación apostamos a multiplicar los vínculos con
nuestros asociados, pero también con todos aquellos que, sin serlo,
desean conocer e integrarse a la industria de las presas, aportando
a la vez elementos de juicio para sus propias acciones.
Convocamos a nuestros asociados, amigos y allegados, vinculados
de una u otra manera al pequeño grupo de organismos, empresas,
consultoras, constructoras, proveedoras, técnicos y profesionales
que integran la industria de las presas, a que se aproximen a este
nuevo medio de comunicación, que lo hagan suyo tanto en el rol
de receptores como de productores de experiencias, investigaciones
y avances relacionados con el sector.
Por Enrique Blasco, Presidente del CAP.
presas y desarrollo editorial
Comité Argentino de Presas (CAP)
Comisión Directiva:
Presidente: Enrique Blasco
Vicepresidente: Claudio Fattor
Secretario: Ernesto Ortega
Prosecretario: Gustavo Mosquera
Tesorero: Alberto Larreguy
Protesorero: Benito Colque
Vocales: S. Heredia, M. Baylac, H. Barber y F. Restelli
Vocales Suplentes: J. Bonifazi y E. Liaudat
Comisión Fiscalizadora: A. Pujol, F. Giuliani y O. Vardé
9 de julio Nº 192
(R8324BHD) Cipolletti - Río Negro
0299 4773532 - 4775139/140
cadp@infovia.com.ar
www.cadp.org.ar
Foto de tapa: gentileza de Hidroeléctrica Piedra del Águila.
Esta publicación se distribuye
PRODUCCIÓN
con la edición Nº 30 de la
revista

Un nuevo Sistema Nacional de
Seguridad de Presas
Se encuentra en desarrollo en la Argentina
un proceso para alcanzar un
consenso mínimo que permita disponer
de un proyecto de Ley de Seguridad
de Presas. Este hecho hace propicia la
oportunidad para analizar las etapas
por las que tendrá que atravesar la organización
de un nuevo Sistema Nacional
de Seguridad de Presas.
Auscultación de la presa Río Hondo, en Santiago del Estero.
Para poner en funcionamiento el nuevo Sistema de Seguridad
de Presas podrían existir cuatro etapas:
• organización del sistema y la toma de conocimiento del estado
actual de seguridad de las presas, para saber cuáles de
ellas habría que mejorar, en qué orden de prioridad y cuáles
no requieren mejoras;
• análisis de las prioridades y asignación de los fondos para la
realización de las obras;
• ejecución de las obras correctivas o de remediación que correspondan
a cada caso, para poner a todas las presas en un pie
de igualdad con respecto a la seguridad;
• y, una vez que el sistema haya entrado en régimen, preservar
su funcionamiento correcto.
En la primera etapa deberían establecerse los estándares organizativos
y técnicos que servirán de base para asegurar un
funcionamiento homogéneo del sistema y la evaluación del
estado de seguridad de las presas. En esta etapa las administraciones
provinciales deberán decidir qué entes o reparticiones
provinciales serán los responsables de integrar el sistema y de
llevar adelante las normativas y las prácticas que se decidan
como estándares a cumplir. Esto implicará la designación formal
de los entes o reparticiones, con la correspondiente asignación
de responsabilidades y atribuciones para cumplir con
su cometido; constituir y organizar los cuadros de personal
dedicados específicamente a la Seguridad de Presas, entendida
ésta como una disciplina de la ingeniería que requiere determinados
conocimientos y competencia en la materia; e iniciar
la aplicación de las normativas y las prácticas que se hayan
decidido como estándares.
Entre las primeras cosas a realizar, estará la revisión del estado
actual de seguridad de las presas y la confección de un listado
con un orden de prioridad basado en el grado de peligro potencial
de rotura de cada presa, dado que las obras correctivas
o de remediación que deban realizarse implicarán el uso de
recursos económicos que, en general, serán escasos, por lo que
deberán aplicarse de modo tal que su aplicación sea lo más
eficiente y efectiva posible y contribuya a solucionar los casos
más urgentes y graves. Esto significará que el personal responsable
deberá adquirir los conocimientos y la experiencia
necesaria para llevar a cabo dicha tarea, requiriéndose a su vez
que exista un período de capacitación y entes u organismos
que puedan impartirla.
También en esta etapa y en la siguiente los responsables provinciales
implementarían los programas de seguridad en todas
las presas de sus respectivas jurisdicciones (vigilancia sistemática,
instalación de instrumentación para la auscultación de
las presas, iniciación de los procesos sistemáticos de análisis y
evaluación de los datos de la auscultación, realización de las
presas y desarrollo 3

presas y desarrollo 4
Presa Agua del Toro - Túnel de aliviadero.
tareas de mantenimiento civil y electromecánico,
etc.)
Para que las provincias puedan confiar
en que los estándares adoptados serán
razonables para el objeto que se pretende
(dar la máxima seguridad posible a
los habitantes ubicados aguas abajo de
las presas), deberán asegurarse que quienes
los elaboren tengan la idoneidad
suficiente para hacerlo y, seguidamente,
tener la posibilidad de revisarlos y proponer
modificaciones. En este sentido,
si el organismo regulador fuera el responsable
de elaborar los estándares, el
hecho de que las provincias puedan contar
con un representante en la estructura
organizativa (no uno por cada Provincia,
sino uno que represente a todas las provincias)
facilitaría el control del trabajo
que se realizaría y la comunicación entre
los elaboradores de los estándares y las
provincias para el intercambio de ideas
y necesidades.
Llegados a este punto debemos aclarar
que las consultas deben hacerse para
conseguir consensos básicos sobre conceptos,
normativas y prácticas a aplicar
para cada tema que corresponda. Una
vez asumidos los criterios, debe designarse
una organización para ejecutarlos
y otra para controlar si las decisiones
que se adopten y las acciones que se realicen
se encuentran dentro de ese marco
establecido.
En el caso que nos ocupa, el organismo
regulador podría ser el encargado de
proponer los estándares (internacionalmente
se acostumbra reunirlos en un
compendio denominado “Guías de Seguridad
de Presas”), y de asumir la responsabilidad
de llevar a cabo el proceso
de distribución entre las provincias para
su revisión y sugerencia de modificaciones
o mejoras, así como de reunirlas e
incorporarlas. Una vez que dicho proceso
se considere agotado y se consiga obtener
un conjunto de estándares o guías
aceptadas por todos los participantes,
se aprobaría. Las provincias serían las
encargadas de aplicarlos y el organismo
regulador el responsable de controlar su
aplicación.
La participación en el aporte de los recursos
entre las provincias y la Nación
para transitar esta etapa ya debe haber
sido discutida previamente y estar incorporados
en el texto de la ley, otorgando
el marco jurídico que obligue a
las partes a concretar aquello a lo que se
comprometieron.
En resumen, al término de esta etapa se
espera disponer de entes o reparticiones
provinciales en el pleno ejercicio de las
nuevas funciones asignadas, con personal
capacitado ejecutando las tareas de
revisión y control de las presas y con el
listado por orden de prioridad de las
presas que necesitarán atención.
Una vez alcanzado los objetivos de la
primera etapa, vendrá un período de
análisis del listado de todas las presas
del país que requieren la ejecución de
obras correctivas o de remediación y sus
costos correspondientes para decidir las
prioridades y la asignación de fondos de
acuerdo con las mismas. En esta etapa se
darán seguramente negociaciones entre
las provincias y la Nación para decidir
los porcentajes de participación en la
aplicación de los recursos económicos
necesarios. No sería conveniente que
estas negociaciones estuvieran entre las
atribuciones del organismo regulador ni
en las de los entes o reparticiones provinciales
responsables de la seguridad de las
presas, a los que habría que preservar de
intereses sectoriales para que se aboquen
a realizar su tarea de manera ecuánime,
sin tener que soportar el peso de presiones
políticas que los inciten a decidir en
uno u otro sentido. En esta etapa, los
entes o reparticiones provinciales continuarían
con la implementación de los
programas de seguridad de presas y el
organismo regulador continuaría con su
tarea de fiscalización y de asesoramiento
a los organismos provinciales.
Lo que marcaría un cambio de etapa
sería el comienzo de la ejecución de las
obras correctivas o de remediación en las
presas. En esta etapa los entes o reparticiones
provinciales, además estar completando
la organización y la aplicación
de los programas de seguridad de presas
en las presas a su cargo, serían los encargados
de hacer las especificaciones técnicas,
las contrataciones de los trabajos
y la inspección de los mismos, apoyados
Entre las primeras cosas a
realizar, estará la revisión
del estado actual de seguridad
de las presas y la
confección de un listado
con un orden de prioridad
basado en el grado de
peligro potencial de rotura
de cada presa.

por la acción fiscalizadora del organismo
regulador. Para esto, el personal que
intervenga deberá estar debidamente
capacitado para gestionar las actividades
y los trabajos a llevar a cabo, disponer
de los recursos suficientes para ello y
ser competente en las funciones que le
correspondan desempeñar. Es esta etapa
también es fundamental promover la
formación y capacitación del personal.
La última etapa sería aquella en la cual
todas las presas tienen en funcionamiento
sus programas de Seguridad de
Presas, los que serían aplicados y revisados
sistemáticamente por los entes o
reparticiones provinciales; estos estarían
organizados y contarían con la asignación
de recursos para asegurar su funcionamiento.
Se trata de un largo proceso, de muchos
años, que hay que comenzar cuanto antes.
Por Enrique Blasco, Presidente CAP.
Ingeniero civil de la UN de San Juan (1978).
Trabajó en Hidronor SA en diversos proyectos
hidroeléctricos. Se desempeñó en el ORSEP
como responsable del Área de Planificación y
como Coordinador General. Actualmente es
consultor privado y preside el Consejo Directivo
del CAP.
Información Institucional
Los congresos del CAP
El CAP fue creado en el año 1960, durante
un período de expansión de la
construcción de presas en todo el mundo
y en Argentina. Hasta fines de los
años ’80, la gran actividad de la industria
permitió la existencia y crecimiento
de organismos y empresas consultoras y
constructoras especializadas en la materia,
así como de un importante know
how, tanto empresario como profesional.
Ese contexto, facilitó la subsistencia
del CAP.
El cambio de paradigmas políticos, sociales
y económicos surgidos en la década
de 1990 desembocó en una notable
caída de la actividad. El reflejo inmediato
fue la drástica disminución de proyectos
de presas y, consecuentemente,
de profesionales y empresas dedicados a
ellos. La ingeniería de presas se refugió
en unas pocas empresas, organismos,
ingenieros y técnicos, significando también
la caída del padrón de afiliados del
CAP.
Para el Comité Argentino de Presas este
panorama devino en una marcada crisis
que, a fines de los años ’90, amenazó
con su completa desaparición.
Desde ese momento, la reacción de las
sucesivas gestiones del Consejo Directivo
fue la búsqueda de actividades que
permitieran a los asociados mantener un
contacto actualizado con la ingeniería
de presas. Entre ellas, se decidió la organización
sistemática de congresos con
periodicidad bianual, sólo interrumpida
por la crisis económica de fines de
2001. El primer Congreso Argentino
de Presas y Aprovechamientos Hidroeléctricos
se desarrolló en 1999 en la
ciudad de San Martín de los Andes,
Neuquén. Siguieron San Juan, 2002;
Córdoba, 2004; Posadas, 2006; Tucumán,
2008 y, próximamente, Neuquén
2010. Los sucesivos congresos han significado
un constante crecimiento en
asistentes, trabajos y apoyos. La actual
coyuntura augura un resurgimiento de
la hidroelectricidad y un fortalecimiento
y reconocimiento de la sociedad al papel
beneficioso que las presas cumplen.
En este contexto, y en coincidencia con
el 50º aniversario del CAP, impulsamos
a empresas, organismos y profesionales
ligados a la ingeniería de presas a participar
en el VI Congreso Argentino
de Presas y Aprovechamientos Hidroeléctricos
2010, que se desarrollará en
la ciudad de Neuquén entre el 3 y el 5
de noviembre de 2010.
Congreso San Juan, 2002.
Congreso Córdoba, 2004.
presas y desarrollo 5

Importancia de la generación
hidroeléctrica
presas y desarrollo 6
En materia energética nuestro país
tiene una alta dependencia hidrocarburífera,
siendo aconsejable su reversión
mediante un firme programa de diversificación
del uso de fuentes de energía.
Dentro de esta estrategia, la generación
hidroeléctrica aparece en este momento
como la principal fuente alternativa
para disminuir el uso de combustibles
fósiles.
Central hidroeléctrica Futaleufú.
Luego de la crisis de 2001, la economía argentina inició un
proceso continuo de crecimiento que se reflejó en el incremento
del consumo de energía eléctrica. Partiendo de un excedente
de capacidad instalada debido a la falta de actividad
a comienzos de este siglo, se alcanzaron y superaron niveles
de demanda anteriores a la crisis, a un ritmo que obliga a un
cuidadoso manejo de sistema de suministro eléctrico.
Si se analizan los valores de la demanda de energía eléctrica en
los últimos 20 años, se ve que se ha pasado de 47.000 GWh/
año en 1990 a 110.000 GWh/año actuales, con un incremento
absoluto de 134%. Mientras tanto la población argentina
creció de 32 millones de habitantes en 1990 a los actuales 40
millones, llevando el consumo per cápita de 1.470 kwh/hab a
2.750 kwh/hab lo que implica un aumento del orden de 87%.
Estos datos reflejan la existencia de un importante crecimiento
del consumo industrial y domiciliario.
Un plan energético debe tender a satisfacer dicha demanda
tratando de optimizar los recursos disponibles. Las premisas a
considerar no deben perder de vista la satisfacción de factores
ambientales, sociales, tecnológicos y estratégicos.
En materia energética nuestro país tiene una alta dependencia
hidrocarburífera, siendo aconsejable su reversión mediante
un firme programa de diversificación del uso de fuentes de
energía. Dentro de esta estrategia, la generación hidroeléctrica
aparece en este momento como la principal fuente alternativa
para disminuir el uso de combustibles fósiles.
Los combustibles fósiles producen un alto grado de contaminación
y dependen de un recurso no renovable cuyas reservas
en Argentina han disminuido prácticamente a la mitad en los
últimos 20 años. Un dato que puede servir de índice para evidenciar
la fuerte dependencia y debilidad del esquema energético
implantado a lo largo de varias décadas es la importación
de gas natural licuado (GNL) iniciada en el último lustro,
con precios que superan ampliamente la adquisición directa
de gas, aún cuando éste deba comprarse en Bolivia.
Por otro lado, no debe perderse de vista que la energía eléctrica
es un insumo indispensable si es que se pretende sostener el
ritmo de crecimiento de nuestra economía.
En atención a este panorama, el Estado Nacional emprendió
un programa energético tendiente a recuperar la brecha positiva
entre oferta y demanda. Con buen criterio, el plan oficial
incluye la construcción de centrales que utilizan distintos tipos
de fuentes de energía, con énfasis en la nuclear, la eólica y
la hidráulica. La incorporación de nuevas centrales de distinto
tipo está permitiendo incrementar la oferta eléctrica, con
un parque generador que ha sobrepasado recientemente los
27.000 MW de potencia instalada y alcanzado los 110.000
GWh/año de energía entregada.

Sin embargo, no solo se necesita incrementar
la generación, sino mantener
una matriz eléctrica equilibrada con una
participación razonable de las distintas
fuentes de energía, la disminución de la
dependencia de combustibles fósiles, la
creciente utilización de fuentes renovables
y, en lo posible basada en aprovechamientos
múltiples tal como son los
hidroeléctricos.
Salvo algunas excepciones (como la
Central Hidroeléctrica Los Caracoles,
120 MW), en los últimos años la mayor
parte de la oferta puesta en servicio ha
sido de tipo térmico, modificando lentamente
la matriz eléctrica alcanzada en
la década de 1990, y disminuyendo las
ventajas que ella ofrece.
Es interesante analizar en un horizonte
de mediano plazo y debatir cuál es la estructura
más conveniente para el sistema
eléctrico argentino. Dicho con otras palabras,
en qué proporción deben participar
las distintas fuentes de energía, en
particular la generación hidroeléctrica.
Evolución de la participación de la
generación hidroeléctrica
Tomando algunos años como testigos,
la evolución de la participación hidroeléctrica
en la oferta de generación durante
los últimos 80 años, ha sido la que
se muestra en la tabla.
Puede apreciarse de qué manera entre
fines de los ’60 y los ’90, gracias a un
agresivo plan de construcción de complejos
hidroeléctricos esa participación
pasó del 10 % a alrededor de 40 %.
Aproximadamente la mitad de la potencia
hidroeléctrica instalada cubre parte
de la oferta de base del Sistema Argentino
de Interconexión (SADI), fundamentalmente
a través del aporte de
los aprovechamientos Yacyretá y Salto
Grande. El resto de la oferta hidroeléctrica,
con preeminencia de las centrales
del Comahue, permite cubrir los picos
estacionales y diarios.
La variación del consumo no es un valor
constante que crece día a día. La demanda
fluctúa estacional y diariamente.
Mayores calores incentivan el uso de
equipos de refrigeración en verano y
fríos intensos y días más cortos producen
picos de demanda que ponen en
Generación total en un día típico.
Comportamiento diario típico entre la demanda y la oferta eléctrica.
Puede observarse la proporción de cada fuente en la generación de
electricidad en nuestro país. Fuente: CAMMESA.
Participación del sector hidro en la generación eléctrica.
AÑO POTENCIA HIDRO INSTALADA ENERGÍA HIDRO GENERADA
Cantidad (MW) % Cantidad (GWh/ año) %
1930 28 3,6 93 6,5
1950 43 3,2 153 3,5
1970 584 12,0 1.492 8,9
1990 6.477 42,4 18.060 38,4
2008 10.156 39,0 36.882 32,8
Evolución de la participación hidroeléctrica en la oferta de generación.
Fuente: Secretaría de Energía y CAMMESA.
jaque al SADI en invierno. Por tanto, es
necesario disponer de una oferta “base”
sostenida por algunas centrales y otras
capaces de adecuarse rápidamente a los
incrementos estacionales.
Los aprovechamientos hidroeléctricos
que disponen de embalses con capacidad
de almacenar el agua –y, por lo tanto,
energía potencial- pueden contener
crecidas protegiendo así a los valles ubicados
aguas abajo de ellos, pero además
disponen de aptitud para generar electricidad
cuando se requiere.
Una característica del SADI es su adaptabilidad
a las variaciones de la demanda.
Mientras que algunas centrales hidroeléctricas,
térmicas y nucleares cubren
de manera continua la demanda sostenida
durante todo un período, un grupo
de centrales hidroeléctricas puede absorber
los picos de demanda en el mismo
momento en que ésta se produce. Por lo
tanto, disponiendo de predicciones del
comportamiento esperado del mercado
eléctrico, es posible mantener en reserva
las centrales hidroeléctricas mediante
un manejo razonable de los embalses y
“despacharlas” en el momento en que la
demanda aumenta. En el gráfico puede
apreciarse un comportamiento diario típico
entre la demanda y la oferta.
Es interesante destacar que, mientras
el año 2009 cerró con un balance en el
cual la energía de origen térmico aportó
el 55,1% y la hidroeléctrica el 36,2%,
durante el mes de diciembre del mismo
año, la energía térmica cubrió el 42,7%
de los requerimientos y el aporte hidroeléctrico
lo superó, abasteciendo el
47,8% y demostrando las posibilidades
que este tipo de fuente de energía ofrece
al sistema.
Reflexión final
Si afortunadamente el país continúa
presentando elevados índices de crecimiento
económicos (en el primer semestre
de 2010 el crecimiento del PBI
presas y desarrollo 7

presas y desarrollo 8
fue de 8,1%), es necesario ofrecer un
sistema de generación capaz de asumir
la demanda eléctrica que dicho crecimiento
produce, con un parque eléctrico
eficiente y adecuado.
Argentina dispone un inventario de
proyectos hidroeléctricos para desarrollar
unos 10.000 MW. La instalación
de dicha potencia hidroeléctrica permitiría
abastecer alrededor de 40% de la
demanda eléctrica nacional durante los
próximos 20 años, asumiendo una tasa
de crecimiento anual sostenida del 4%.
Incorporar al SADI otros 10.000 MW
hidroeléctricos en los próximos 20 a 25
años requerirá de una importante planificación
que a través de un adecuado
marco jurídico–institucional permita
optimizar las inversiones como así también
incorporar los recursos humanos y
materiales necesarios para su implantación.
Hoy se encuentran avanzando proyectos
hidroeléctricos tan importantes como
Condor Cliff, La Barrancosa, Chuihuidos
I y II, y otros también emplazados
en cursos fluviales con régimen pluvio
nival en provincias cordilleranas como
Chubut y Mendoza.
Es oportuno recordar que su concreción
no sólo aportará al SADI su flexibilidad
para cubrir picos estacionales y horarios,
sino que su ubicación dentro de la
amplia porción del territorio argentino
árido o semiárido permitirá reeditar la
buena práctica soberana de ocupar esos
territorios, que en otros instantes de
nuestra historia lideraran Agua y Energía
Eléctrica SE e Hidronor SA.
Las presas, obras administradoras de recursos
hídricos por excelencia, aportan
al control del agua, evitan devastadoras
inundaciones, permiten la implantación
de sistemas de riego y el uso consuntivo
y, además, proveen energía con flexibilidad
a la generación del SADI.
Sin duda, la disposición de recursos hídricos
es limitada y no es posible imaginar
su aprovechamiento durante generaciones;
sin embargo en Argentina
Interior de la Central Hidroeléctrica Nihuil II, Mendoza.
solo están utilizados en un 20%. Queda
mucho por hacer: el país aún cuenta con
gas y petróleo, pero también con energía
hidroeléctrica factible, renovable y no
contaminante, con una potencialidad
para generar en grandes bloques superior
a la que presentan el resto de las
energías renovables. El uso racional de
los recursos que son hoy más accesibles
debe inscribirse en un plan estratégico
a largo plazo, en el que paralelamente
se desarrollen nuevas fuentes de energía
sostenible.
Un análisis estratégico, indicaría la conveniencia
de:
• Reemplazar energías no renovables,
contaminantes y necesarias para otros
usos, por energías renovables, incluyendo
la hidroeléctrica.
• Mantener la matriz eléctrica alcanzada
en los ’90 para disponer de cobertura
en los picos diarios y estacionales, con
eficiencia y rentabilidad suficiente. Esto
implica sostener la participación hidroeléctrica
alrededor del 40%.
• Continuar el desarrollo nuclear.
• Pensando en el futuro, desarrollar paralelamente
(20–30 años) otros tipos
de energías: eólica, solar, hidrógeno,
biomasa, etc., agregando investigación
aplicada y una política de utilización
racional.
En 2009 la energía de
origen térmico aportó el
55,1% y la hidroeléctrica
el 36,2%, Pero en el mes
de diciembre de ese año,
la energía térmica cubrió
el 42,7% mientras que el
aporte hidroeléctrico fue
del 47,8%, demostrando
las posibilidades que esta
fuente ofrece al sistema.
Eduardo Liaudat.
Ingeniero en Construcciones
(UNLP, 1973).
Socio Gerente de la
consultora Proa SRL,
desde su fundación en
1993. Miembro del CD
del CAP. Desarrolló su
principal actividad en
Ingeniería Estructural
y de obras hidráulicas
e hidroenergéticas en
grandes emprendimientos.
Ernesto Ortega.
Ingeniero Civil (UBA,
1973). Fue integrante
de los planteles de
Agua y Energía Eléctrica
SE, Hidronor SA.
Se especializó en Seguridad
de Presas, es
Secretario Técnico del
ORSEP. Fue Presidente
del CAP y actualmente
su Secretario.

Gestión ambiental de hidroeléctricas
un antes y un después
A partir del comienzo del siglo XXI se
produjo la necesidad de diversificar la
matriz energética y mitigar la emisión
de los gases de efecto invernadero, lo
que significó un estímulo de inversiones
en hidroelectricidad. Por lo tanto, hoy
es un momento clave para el desarrollo
de la hidroelectricidad sustentable.
Represa Río Hondo.
La presente nota es una síntesis del trabajo presentado
en el III Seminario Internacional organizado
por CACIER: Hidrología Operativa y Seguridad
de Presas, 21 al 24 de Abril. 2010, Concordia,
Entre Ríos, Argentina.
Presas y sustentabilidad, momento de transformación
Las presas han tenido un papel importante en la transformación
socioeconómica de diferentes países y regiones. Sin
embargo, los impactos ambientales negativos fueron elevados
y significativos y muchas veces los beneficios no cumplieron
con el principio de equidad del desarrollo sustentable. Esto
dio lugar al surgimiento de conflictos entre los defensores y
los detractores de las presas. Entonces, se produjo un debate
global y un cambio radical en relación con la percepción social
de las grandes presas, ya que pasaron de ser “símbolos de
modernización y de la capacidad humana de aprovechar la naturaleza”
(WCD, 2000) a convertirse en ejemplos de impactos
ambientales negativos y fuente de conflictos sociales.
Se tendió, en consecuencia, a negar la aprobación para la
construcción de grandes hidroeléctricas y a una creciente
oposición por parte de la sociedad. En esto jugaron un papel
importante algunas ONGs y publicaciones como la de Patrick
McCully: “Ríos silenciados: La Ecología y Política de las
Grandes Presas”, publicado con la colaboración de la Red de
Ríos Internacionales en 1996.
Insumos para el cambio
Hacia fines del siglo pasado se planteó la necesidad de mitigar
los impactos ambientales negativos y el conflicto entre los
defensores y los detractores de las presas. Por eso, en 1988 se
formó la Comisión Mundial de Represas (CMR), que publicó
un Informe Final en 2000 con el sugestivo título de “Represas
y desarrollo. Un nuevo marco para la toma de decisiones”.
Además del Informe de la CMR, diversos organismos produjeron
documentos que significaron un avance en la gestión
ambiental de las hidroeléctricas. A continuación se nombran
las principales:
• Comisión Internacional de Grandes Presas (ICOLD), recomendaciones
sobre presas y ambiente, 1997.
• Banco Mundial, asuntos de agua. Directivas operacionales
específicas, como por ejemplo: “Informe de trabajo sobre desarrollo
sustentable”, 2003, que identifica criterios ambientales
para la selección de sitios de los proyectos hidroeléctricos.
• Bancos regionales y organismos de fomento, como el Banco
Interamericano de Desarrollo y la Confederación Andina de
Fomento.
• Programa de Naciones Unidas para el Ambiente, Proyecto
represas y desarrollo.
• ONGs internacionales, como el Fondo Mundial para la Naturaleza
(WWF): Iniciativa sobre Presas, y otras.
• Agencia Internacional de Energía, entre 1995 y 2000 elaboró
un programa de energía hidroeléctrica: “Implementando
un acuerdo para los programas y tecnologías hidroeléctricas”,
cuyo Anexo III focalizó sobre “Hidroeléctricas y el ambiente”,
presas y desarrollo 9

Mural en presa Los Reyunos.
presas y desarrollo 10
2000.
• Consejo Mundial de Energía, pautas
básicas para alcanzar la sustentabilidad
en la industria energética, 2005.
• Asociación Internacional Hidroeléctrica
(IHA), publicó una “Guía para
la sustentabilidad” y el “Protocolo de
cumplimiento” para dicha guía.
• COFACE (organización relacionada
con la OCDE, que facilita el comercio,
seguros y manejo de crédito), desarrolló
en 2003 una guía ambiental para grandes
presas e hidroeléctricas.
• Naturemade estableció una especie de
certificación de calidad para la energía
producida ecológicamente para energía
de fuentes renovables.
• Cuenca del Plata: Recomendaciones
de los Talleres Internacionales sobre
enfoques regionales para el desarrollo y
Gestión de Embalses en la Cuenca del
Plata. IV Taller realizado en Salto Grande,
diciembre 2005.
• Manuales y normativas específicas a
escala nacional.
Lecciones aprendidas
A partir del comienzo del siglo XXI se
produjo la necesidad de diversificar la
matriz energética y mitigar la emisión
de los gases de efecto invernadero, lo
que significó un estímulo de inversiones
en hidroelectricidad. Por lo tanto,
el momento actual es clave para el desarrollo
de la hidroelectricidad; por ello,
es importante aplicar aquellas pautas
mínimas para el desarrollo de una hidroelectricidad
sustentable. El riesgo
de no considerar o considerar en forma
parcial, incompleta o inapropiada a las
cuestiones ambientales es elevado y puede
traducirse en demoras, oposición pública,
costos elevados no considerados,
entre otros.
A continuación, se identifican los principales
avances en la gestión ambiental
de las presas, surgidos como resultado
de las lecciones aprendidas:
• Evaluación integral de alternativas.
• Participación ciudadana y aceptación
pública, manejo de conflictos.
• Consideración de la cuenca como unidad
de análisis y de planeamiento ambiental.
• Consideración de los ríos en sus dimensiones
ecosistémica, social, económica
y cultural, y no solamente desde el
punto de vista económico.
• Comprensión de la importancia y significación
de los ecosistemas asociados
a los ríos.
• Comprensión de los servicios ambientales
que brindan los ríos y las cuencas.
• Mantenimiento de la sustentabilidad
del río y de los modos de vida.
• Búsqueda de equidad en la distribución
de los beneficios y de los costos
ambientales de la presa, tanto en las diversas
áreas como en los diversos grupos
sociales.
• Buenas políticas y prácticas de compensación
ambiental e implementación
de programas integrales de reasentamiento
de población y trabajo con grupos
vulnerables y/o minoritarios.
• Elaboración e implementación de un
plan de manejo o gestión ambiental detallado,
con un presupuesto apropiado
y un plan de monitoreo que permita
realizar los ajustes necesarios en forma
continua.
Recomendaciones
La primera recomendación es buscar
formas de diálogo constructivo entre los
diversos actores. Para lograr ese diálogo
se necesita tener voluntad de hacerlo,
generar ámbitos y disponer de tiempo.
No es mágico y, por lo tanto, se necesita
trabajar en ello.
Una segunda recomendación es fortalecer
el papel de la prensa para informar
en forma genuina a la comunidad y los
actores; de esta manera se podrá neutralizar
el uso de la prensa como herramienta
de distorsión, tanto de los promotores
como de los detractores. Es importante
tener claro que la información es el
primer escalón hacia la participación.
Luego, se recomienda promover e ins-
El riesgo de no considerar
o considerar en forma
parcial, incompleta o
inapropiada a las cuestiones
ambientales es elevado
y puede traducirse en
demoras, oposición pública,
costos elevados no
considerados, entre otros.

Declaración de
ICOLD sobre presas y
ambiente, 1997.
Tapa del libro de Mc
Cully, Rios silenciados,
1996.
Tapa del Informe de
la Comisión Mundial
de Represas: Represas
y Desarrollo,
2000.
titucionalizar una gestión participativa y generar mecanismos
genuinos y eficaces de manejo de conflictos.
Asimismo, se necesita realizar a nivel país un trabajo de evaluación
exhaustiva de los aciertos, errores y obstáculos para
poder analizar la situación actual y poder planificar un camino
posible hacia la sustentabilidad. Para ello se debe promover
la investigación y desarrollo en que trabajen en forma conjunta
organismos públicos, empresas del sector, universidades y
ONGs.
Finalmente, debe trabajar en la comprensión, por parte de los
diferentes actores, de la complejidad inherente a lo ambiental.
Lo ambiental es complejo y cada ambiente es único. La comprensión
de dicha realidad requiere una transformación del
sistema de conocimientos, opuesta al pensamiento unidimensional
(Leff, 1998) que ha prevalecido en la era hidroeléctrica
anterior.
Bibliografía citada:
• CMR, Comisión Mundial de Represas, (2000). Represas
y Desarrollo. El Reporte Final de la Comision Mundial de
Represas, Un Nuevo Marco para la Toma de Decisiones.
• Leff, Enrique, (1998) Saber ambiental: sustentabilidad,
racionalidad, complejidad, poder, Ed. Siglo XXI, PNUMA,
CIICH, México.
• Mc Cully, Patrick. (1996). Silenced Rivers. The ecology
and politics of large dams. Zed Books. London.
Por Albina L. Lara, EBISA.
Doctora en Geografía (UN Cuyo), Master of
Arts en Planeamiento Urbano de la Universidad
de California y Licenciada en Geografía (UBA).
Ha trabajado en temas ambientales en diversos
ámbitos en el país y en el extranjero. Posee
diversas publicaciones en dichas temáticas. Actualmente
coordina estudios ambientales en el
sector energía de EBISA.
Información Institucional
Asamblea anual del CAP
El 4 de noviembre, a las 19 hs, en coincidencia
con el VI Congreso Argentino
de Presas y Aprovechamientos Hidroeléctricos,
se llevará a cabo la Asamblea
Anual Ordinaria 2010 del Comité Argentino
de Presas.
Durante la misma se procederá a la elección
de 3 miembros titulares y un miembro
suplente del Consejo Directivo, en
reemplazo de los siguientes miembros
que cesan en sus mandatos:
Titulares: Hebe Barber, Alberto Larreguy
y Sergio Heredia
Suplente: Jorge Bonifazi
El artículo 31º del Estatuto del CAP establece:
“El CD por si o a instancias de
un número de 25 asociados con derecho
a voto propondrá una lista de precandidatos
que podrá contar con uno o más
miembros para cada cargo. Para esta nominación
el CD tendrá en cuenta que
estén representados proporcionalmente
los varios intereses del Comité. El CD
deberá incluir obligatoriamente en dicha
nominación toda propuesta, que
con sesenta (60) días de anticipación a
las elecciones se le someta por escrito,
firmada por no menos de cinco miembros
del Comité Argentino de Grandes
Presas tanto personales como colectivos.
La lista así formada no obliga a los
electores quienes pueden votar por los
miembros que estimen convenientes y
siempre que reúnan las condiciones estatutarias.”
A efectos de dar lugar al cumplimiento
de esta prescripción, instamos a nuestros
asociados a participar en la Asamblea.
De no ser posible, pueden participar en
el acto eleccionario enviando el sufragio
a nuestra Secretaría, siguiendo las instrucciones
contenidas en la convocatoria
a la Asamblea Anual Ordinaria 2010.
La participación de los asociados mejora
y engrandece la institución.
presas y desarrollo 11

El reasentamiento poblacional,
un proceso participativo
presas y desarrollo 12
La construcción de la represa Chihuido
I en Neuquén impulsará la actividad
económica de la región centro de la
provincia. Paralelamente, se llevarán
adelante procesos de compensación
ambiental, como el rescate y puesta en
valor del patrimonio cultural de la zona
a inundar, la creación de un área natural
protegida compensatoria, el desarrollo
de planes productivos y el reasentamiento
poblacional; este último es el
más complejo.
El actual pueblo de Quili Malal.
Capitalizar experiencias anteriores es, sin dudas, mérito de la
provincia del Neuquén que ha puesto énfasis en la contención
social de los habitantes mediante una modalidad de trabajo
participativa, concensuando con la población la manera que
le gustaría vivir en su nuevo espacio.
El Aprovechamiento Multipropósito Chihuido I se construirá
a 5,5 kilómetros aguas abajo de la confluencia del río Agrio
con el río Neuquén; generará un espejo de agua de 18.600
hectáreas que cubrirán a la localidad de Quili Malal, los parajes
rurales de Villa del Agrio, Bajada del Puente y Agrio
de Medio y parte de las tierras de la comunidad Mapuche
Cheuquel. Casa por casa, unas 300 personas serán trasladadas
desde su ubicación actual hacia nuevas áreas aptas para vivienda
y desarrollo productivo.
Este traslado de poblaciones es denominado Proceso Integral
de Reasentamiento (PIR) y tiene por objetivo mejorar la calidad
de vida de la población desplazada. Desde el inicio de
este proyecto se incluyó la participación de los pobladores en
todo lo que respecta a este proceso, a las nuevas modalidades
productivas e, incluso, en la definición del tipo de vivienda
que se construirá.
Hay escasos antecedentes en obras de este tipo de un plan de
reasentamiento que contemple abiertamente la opinión de los
pobladores. Normalmente, el traslado es forzoso y no concensuado,
lo que genera múltiples conflictos de difícil resolución.
En el caso de Chihuido I, la provincia del Neuquén ha hecho
hincapié en la contención social de los habitantes que serán
trasladados y ha diseñado un proceso basado en una escala de
valores inamovible: primero el hombre, luego la naturaleza y,
por último, las actividades productivas.
En este marco, durante meses se entrevistó a todos y cada
uno de los pobladores que serán reubicados para que pudieran
expresarse. El 24 de junio de 2010 se llevó a cabo una
audiencia pública en el salón comunitario de la localidad de
Quili Malal, por ser ésta la más implicada en el traslado, con
el objetivo de democratizar aún más todo el proceso. También
se formalizaron numerosas reuniones con la comunidad Mapuche
Cheuquel para concensuar con ella la compensación
por la inundación de una parte de su territorio.
Nuevos espacios, nuevas posibilidades
Este Plan Integral de Reasentamiento implica distintas acciones
simultáneas que se llevarán adelante junto con las obras de
la represa. Por un lado, los habitantes de la localidad de Quili
Malal serán trasladados a una zona denominada El Bolsico, a
4 kilómetros al sur de su ubicación actual; allí se construirá
una nueva estructura urbana y rural y se realizará un programa
de desarrollo productivo. La nueva infraestructura y los espacios
públicos incluirán la sede de la comisión de fomento y el

egistro civil, una escuela, un centro de
salud, un museo, una oficina de turismo,
un destacamento policial, templos
religiosos, un parador de colectivos, un
gimnasio y un campo de jineteada, entre
otros. En cuanto a los servicios, los
habitantes contarán con redes de agua,
luz y gas y también líneas telefónicas,
videocable e Internet, cuyos conductos
y cableados irán por debajo de la tierra
para evitar la contaminación visual.
Por otro lado, los habitantes de los parajes
rurales Bajada del Puente, Villa del
Agrio y Agrio del Medio serán reubicados
en la localidad de Bajada del Agrio,
cuyo ejido urbano será ampliado y remodelado.
Para ello se fijarán pautas
urbanísticas que reduzcan al mínimo el
impacto sobre la antigua población. La
remodelación consistirá en ampliar los
espacios públicos, los edificios educativos,
de salud, de seguridad, museos, la
comisaría, el parador de transporte público
y el cementerio, entre otros. También
se contempla la extensión de las redes
de agua, luz, gas y comunicaciones
con conexión subterránea.
Para poder integrarse al proyecto, los
pobladores participaron de talleres realizados
por profesionales del área de
Infraestructura Urbana de la provincia,
en los cuales pudieron decidir sobre el
diseño de las nuevas viviendas que habitarán.
De estos encuentros surgieron
algunos puntos en común; por ejemplo,
no desean que sus nuevas viviendas
sean iguales entre sí, sino que quieren
mantener las diferencias que tenían en
su ubicación original. Por eso, las casas
se implantarán en lotes de 1.200 metros
cuadrados buscando la alternancia y
distintas orientaciones. También expresaron
su intención de realizar jardines
al frente con retiros laterales para hacer
plantaciones de huertas. En menor
medida, algunos vecinos manifestaron
su interés en tener espacio para, en un
futuro, poner un local comercial.
En estos talleres se trabajó en dos tipologías
de viviendas: de una planta y de dos
(tipo dúplex). Ambas tendrán variantes
en las dimensiones de los ambientes en
función de la cantidad de personas que
las habitarán. Se calculó un promedio
de 28 metros cuadrados por persona
Planteo urbano del Nuevo Quili Malal
con la siguiente distribución: estar con
comedor, dormitorios, cocina, un baño
compartimentado grande y otro baño
más pequeño, despensa y lavadero, garage
con churrasquera y un porch o jardín
de invierno. En el caso de viviendas en
zona de chacras, además de la vivienda
misma se deberá construir un galpón,
un tinglado, un gallinero y corrales a
definir según las actividades productivas
a desarrollar.
Seguridad, abastecimiento y energía
para todos
La construcción de la presa originalmente
fue pensada con el fin de aprovechar
el tramo medio del río Neuquén para
generar energía hidroeléctrica, pero en
el año 2006 y 2008 este río experimentó
crecidas extraordinarias que pusieron en
riesgo la seguridad del complejo Cerros
Colorados. Ante la necesidad de regular
estas crecidas se ampliaron los objetivos
del proyecto y se convirtió en un “aprovechamiento
multipropósito”.
Chihuido I asegurará la integridad de
la presa Portezuelo Grande, ubicada
aguas abajo; brindará seguridad a más
de 700.000 habitantes del Alto Valle de
Neuquén y Río Negro y protegerá unas
200.000 hectáreas bajo riego, gasoductos,
oleoductos y electroductos de la región.
Además, este proyecto mejorará el
abastecimiento de agua para garantizar
el consumo humano, riego y uso industrial
en época de sequía; asimismo realizará
un significativo aporte de energía
eléctrica y potencia al Sistema Interconectado
Nacional.
Nuevas obras para la provincia
El proyecto de la represa Chihuido I
también involucra la construcción de
importantes obras complementarias
que acompañarán al proyecto central
y que traerán notables mejorías en el
acceso a la región centro de la provincia.
Rutas y caminos: se reubicará la Ruta
Provincial Nº 10; se harán los accesos
a El Bolsico, al embalse y a la presa;
se mejorará la Ruta Provincial Nº 14
desde el puente del arroyo Covunco
hasta el empalme con la Ruta Nacional
Nº 40; se hará la repavimentación
de la circunvalación de Zapala y la
Ruta Provincial Nº 14 hasta Mariano
Moreno.
Línea de energía eléctrica: se realizará
el tendido de líneas de energía eléctrica
para las localidades de Quili Malal,
Bajada del Agrio y paraje Los Chihuidos.
Puentes: se construirían nuevos puentes
sobre el río Agrio y el arroyo Covunco.
presas y desarrollo 13

Habiéndose realizado la Convocatoria
Pública a Inversores para la financiación,
construcción, operación, explotación
y mantenimiento del Aprovechamiento
Multipropósito Chihuido I por
un período de 19 años (4 de construcción
y 15 de operación, mantenimiento
y explotación), el 4 de junio de 2010
la empresa Emhidro SEP, responsable
de llevar adelante este proceso, resolvió
preadjudicar el Contrato de Concesión a
la UTE (Unión transitoria de empresas)
formada por las firmas Electroingeniería
SA, Constructora OAS LTD, CPC SA,
Hidrocuyo SA y Rovella Carranza SA.
Gracias al trabajo mancomunado entre
el Estado Nacional y la Provincia del
Neuquén, luego de los años de concesión,
las instalaciones de la presa pasarán
en su totalidad a manos de la provincia.
Características de la presa
Altura de la presa: 105 metros
Longitud de la presa: 1.035 metros
Ancho de coronamiento: 12 metros
Cota de coronamiento de la presa: 631 metros
Volumen total del embalse (cota 625 metros): 5.496 hm3
Superficie del embalse: 18.600 hectáreas.
Tipo de Presa: enrocado y gravas con pantalla de hormigón
Número de máquinas: 4 turbinas tipo Francis
Potencia: 637 megawatts
Energía Media Anual: 1.750 gigawatts/hora
Área de Comunicación y Prensa de
Emprendimientos Hidroeléctricos Sociedad
del Estado Provincial del Neuquén
(Emhidro SEP), una empresa dedicada a
generar desarrollo y progresos técnicos a partir
de obras de aprovechamientos hidráulicos
multipropósito.
Información Institucional
presas y desarrollo 14
78º Reunión anual de ICOLD
El 26 de mayo, en Hanoi, Vietnam,
se realizó la 78º Reunión Anual de
ICOLD. Como delegado del CAP asistió
el Ing. Alejandro Pujol. Los aspectos
salientes han sido los siguientes: Se
aprobó el ingreso de Ucrania y Mozambique,
llevando el total de países miembros
a 92. Se espera que dicho número
alcance a 100 en 2012.
Fueron electos Vicepresidentes Werner
Floegl de Austria, por Europa, y Pham
Hong Giang de Vietnam, por Asia. El
próximo año, en Lucerna se elegirán Vicepresidentes
por América y por el sexto
puesto.
Se aprobó la propuesta de Estados Unidos
para realizar en Seattle la Reunión
Ejecutiva 2013.
Se aprobó la presidencia del Ing. Alejandro
Pujol (Argentina) en el Comité
Técnico de Surveillance (Vigilancia de
Presas) en reemplazo de Bernard Goguel
(Francia).
Se aprobaron los nuevos boletines referentes
a: Sedimentación, Sismos, Rol de
las presas en el desarrollo, Muros colados,
Seguridad de presas y los sismos,
Suelos tropicales. Con el fin de lograr
su difusión más rápida, se acordó que,
una vez enviados por los Presidentes en
la lengua original ingles o francés, se suban
al sitio web de ICOLD. Los socios
con cuotas al día podrán solicitarlos a
través de los Comité Nacionales. Una
vez traducidos e impresos se les enviará
la copia papel a los Comité Nacionales.
Este nuevo mecanismo de distribución
libre y gratuita significa que miles de
profesionales accedan en forma inmediata
a la información generada por los
Comités Técnicos del ICOLD en todo
el mundo, aunque implicará un incremento
del 3% en las cuotas anuales de
los comités miembros para cubrir esos
costos, estimados en 40.000 Euros por
año. Se aprobaron los temas del Congreso
2012, en Kyoto, Japón, que serán:
Q 92 Manejo del medioambiente durante
la construcción, el llenado y la
operación de presas.
Q 93 Seguridad de presas.
Q 94 Evaluación de crecidas y adecuación
de órganos de descarga.
Q 95 Envejecimiento y rehabilitación
de presas.

Seguridad de terraplenes
de defensas contra las inundaciones
En nuestro país, a diferencia de los países
europeos, anglosajones y los EE UU,
no se cuenta con lineamientos, guías,
recomendaciones y/o normas para el
estudio, proyecto, construcción, monitoreo
y mantenimiento de terraplenes
Taller de seguridad de terraplenes
de defensa.
Vista de la defensa de Concepción del Uruguay, Entre Ríos.
Para debatir sobre los criterios básicos que deben guiar
estos proyectos, los días 10 y 11 de noviembre de 2009 se
reunió en Santa Fe un importante taller sobre “Seguridad
de terraplenes de defensas contra las inundaciones”, que
reunió a profesionales convocados por la Facultad de Ingeniería
y Ciencias Hídricas de la Universidad Nacional
del Litoral, arribando a las conclusiones y recomendaciones
que se describen en este artículo.
Si bien cada obra es única y diferente, por lo que desde el punto
de vista técnico no resulta lógico ni posible elaborar normas
específicas de cumplimiento obligatorio, al menos deberían
elaborarse lineamientos que deberían adaptarse a cada caso
particular, de modo que las instituciones responsables dispongan
de un marco de referencia para la seguridad de sus obras.
No existen organismos de regulación con competencia sobre
estas obras. Se evalúa que instituciones como la Subsecretaría
de Recursos Hídricos de la Nación, o bien el Consejo Hídrico
Federal (COHIFE), que reúne a las autoridades de la gestión
hídrica de todas las provincias argentinas, podrían ser el
ámbito natural para impulsar la elaboración de lineamientos
para la seguridad de los terraplenes de defensa. Otro ámbito
apropiado podría ser el Organismo Regulador de Seguridad
de Presas (ORSEP).
Los terraplenes de defensa son obras de suma importancia
por el riesgo que conlleva la posibilidad de su falla o rotura.
Por consiguiente resulta necesario el compromiso y fortalecimiento
de los organismos responsables para que este tema
sea abordado con la profundidad que merece, garantizando la
realización de los estudios pertinentes, el proyecto exhaustivo
y el control estricto de la ejecución, considerando en su diseño
el riesgo social aceptable y acciones no estructurales complementarias
para disminuir el riesgo remanente. Asimismo, debería
asegurarse una adecuada información pública sobre los
alcances de la seguridad de las obras y las previsiones frente a
emergencias por posibles fallas.
Para obras de significativo impacto, en caso de falla (riesgo de
muertes y/o elevados daños social, económico o ambiental)
resulta conveniente y hasta necesario implementar auditorías
técnicas periódicas por consultores independientes.
Se recomienda incorporar los terraplenes de defensa en la Ley
de Seguridad de Presas.
Existen serias deficiencias con respecto a la definición de roles
de los actores involucrados con el estudio, proyecto, ejecución
y mantenimiento de las obras (estatal–privado, direcciónejecución
de obra, etc.), así como conflictos de orden interjurisdiccional
(nación-provincia–municipios), lo que implica la
superposición o ausencia de normativas y la falta de articulación
y/o coherencia entre los pliegos de especificaciones que se
aplican, lo que atenta contra la seguridad de las obras.
Se debe promover la incorporación de los conceptos y metodologías
del Análisis Sistémico y la Evaluación del Riesgo
como complemento fundamental de los métodos tradicionales
para las decisiones que se toman en materia de la seguridad
de los terraplenes de defensa. Este concepto resulta una instancia
superadora con respecto a los métodos determinísticos
o la definición de coeficientes de seguridad que no contemplan
en profundidad todos los aspectos que definen el riego
presas y desarrollo 15

presas y desarrollo 16
de falla de la obra (como referencia se
hace mención a las prácticas de seguridad
de terraplenes en Holanda, la Federal
Emergency Management Agency de
EE.UU., entre otros).
Resulta muy negativo que las obras se
liciten -como ocurre a menudo- sin el
nivel de proyecto ejecutivo. La mayoría
son licitadas con nivel de anteproyecto,
recayendo en las empresas constructoras
la responsabilidad del desarrollo de niveles
más detallados del proyecto. Esta
situación debilita tanto al comitente
como a la inspección, porque no cuentan
con los elementos de juicio ni con
la información necesaria para evaluar la
pertinencia de las propuestas que la contratista
eleva, prácticamente de manera
simultánea, al inicio de la construcción
de la obra.
Para la etapa constructiva resulta imprescindible
contar con:
• Una correcta definición de las responsabilidades
y funciones del comitente,
de la inspección, de la contratista, etc.
• Empresas cuya calificación esté basada
en procesos de acreditación de la calidad
(Normas ISO).
• Especificaciones técnicas adecuadas,
basadas en estudios previos y proyecto
elaborado.
• Laboratorios calificados, disponibles
durante toda la etapa constructiva, para
que se puedan realizar todos los controles
de calidad necesarios.
Durante la construcción de la obra debe
desarrollarse un proyecto de detalle y
elaborarse la información conforme
a obra que permita disponer de documentación
y registro de los cambios
producidos durante la etapa de obra con
relación al proyecto original.
La responsabilidad del control y mantenimiento
de las obras deben ser claramente
establecidas, al mismo tiempo
que su construcción. Asimismo debe
preverse su instrumentación y plan de
monitoreo para poder realizar un adecuado
control de la seguridad.
En el Taller sobre “Seguridad de terraplenes
de defensas contra las inundaciones”,
realizado en Santa Fe en 2009, se
acordó en la necesidad de redactar un
documento para ser remitido a las autoridades
que enfoque la temática desde
Terraplén de protección de la ciudad de Neuquén sobre el río homónimo.
un punto de vista multidisciplinario,
incorporando la visión de todos los actores
y con participación de comunicadores
sociales especializados en temas de
comunicación de riesgo. De esta manera
será posible llegar con el mensaje a todos
los actores sociales.
Costanera en Santa Fe.
Cientos de miles de pobladores
ribereños en Argentina
viven pendientes
de la seguridad que les
brindan terraplenes construidos
para protegerlos
de inundaciones. Estas
estructuras presentan
características especiales,
tanto por los procesos de
cálculo y constructivos
como por la particular
relación que mantienen
con las poblaciones que
protegen.
Ing. María Elisabet Pardini.

Avances en el tratamiento de señales
caóticas de auscultación de presas
Concepto de microauscultación
En el control actual de algunas grandes presas es usual contar
con sistemas de auscultación con los que se registran en forma
automática mediciones del instrumental. Estos registros automáticos
suelen colectarse con frecuencias variables, que van
desde la diaria hasta una medición cada 10 minutos, dando
origen a bases de datos cuyo tamaño (cantidad de registros y
dimensionalidad) se incrementa en forma constante.
El concepto de microauscultación aplicado a las grandes presas
refleja el alto grado de sensibilidad implementado a partir
de la auscultación automática, con el que prácticamente se
monitorea las obras en tiempo real (Restelli, 2008).
Las series temporales de microauscultación
permiten observar fenómenos
ocultos para frecuencias tradicionales
(medición manual) y, a veces, permiten
observar señales particulares que presentan
características no estacionarias,
pulsantes, de comportamiento aleatorio
y caótico. La evaluación de este tipo de
señales exige un abordaje matemático
robusto, a fin de comprender los procesos
físicos que interactúan en el sistema
acoplado complejo roca-presa-embalse.
Señales caóticas y pulsantes
El nivel de detalle que aporta la información de microauscultación
permite distinguir fenómenos ocultos en los datos
provenientes de las frecuencias de lecturas tradicionales.
Cuando las señales a analizar presentan fuertes transitorios
(como es la característica morfológica de las señales pulsantes)
se tiene un comportamiento complejo y no estacionario, dado
que la señal presenta cambios bruscos en intervalos de tiempo
relativamente cortos. En estos casos no es factible la aplicación
de las técnicas tradicionales (Transforma de Fourier), dado
que no permite analizar las propiedades locales (pulsos), que
precisamente es lo que se trata de estudiar. En consecuencia,
se hace necesario aplicar métodos más desarrollados, como la
Transformada de Wavelet.
¿Qué es una Wavelet?
Es una función (en forma de onda pequeña) que tiene duración
limitada y cuyo valor medio es cero. Matemáticamente,
se expresa de la siguiente manera (Magalhaes de Oliveira,
2007):
Donde:
C(a,b) son los coeficientes de x(t) en el espacio definido por la
función wavelet madre w.
x(t): función de transformación integrada y centrada alrededor
de una frecuencia central.
a: factor de escala, con el que se estira o comprime la función
x(t) adaptándola a las necesidades del estudio.
b: factor de traslación, con el que se desplaza el estudio.
presas y desarrollo 17

Descripción del algoritmo de análisis
El análisis con la transformada de Wavelet se implementa utilizando
la estructura de un banco de filtros; método que recurre
a un algoritmo piramidal donde una matriz de coeficientes
se aplica jerárquicamente (Marin, 2009).
Los datos de auscultación (S) se descomponen en elementos
aplicándoles filtros pasa-bajo (A) y pasa-alto (D), que corresponden
a componentes de baja y alta frecuencia, respectivamente.
El proceso anterior puede repetirse sucesivamente, hasta alcanzar
el nivel de precisión que se desea, lo que conduce al
desmembrado de la señal conocida como descomposición
Wavelet.
De esta forma, la descomposición permite analizar los diferentes
niveles de energía que posee una señal en distintos rangos
de frecuencias.
Resultados obtenidos
La metodología fue aplicada a una selección de series temporales
de microauscultación de origen hidráulico y caracterización
caótica con tres patrones de respuesta temporal diferentes
en términos de frecuencia y amplitud de las perturbaciones.
Cada serie de microauscultación estuvo conformada por unos
52.000 registros por año y para su procesamiento fue utilizado
el programa Fiona® (Restelli, Perazzolli, 2007).
A modo de ejemplo se presentan los espectrogramas.
presas y desarrollo 18
Descomposición de la señal con pulsaciones (aproximación y detalles).
Escalograma de serie con perturbaciones diarias.
Conclusiones
Los patrones de variabilidad estudiados en las respuestas de
microauscultación pueden ser considerados como la resultante
de un conjunto de interacciones que ocurren en el interior
de un complejo sistema acoplado: roca-presa-embalse.
El estudio de este tipo de sistema conlleva a interpretarlo a
través de un conjunto de argumentos desde las perspectivas
de ruido y complejidad.
Desde la óptica del primer argumento, el comportamiento
complejo de niveles piezométricos pulsantes podría deberse a
la influencia de un conjunto de efectos externos que no son
necesariamente controlados (o conocidos), ya que estas perturbaciones
externas cambian de forma incontrolada y, por lo
tanto, aleatoria.
Desde la perspectiva de la complejidad, se debe reconocer
que la mayoría de los sistemas reales (físicos e ingenieriles)
se componen de un importante conjunto de elementos que
interactúan entre sí y del cual solamente puede observarse un
comportamiento promedio.
Para ser más precisos, los sistemas complejos tienen muchos
grados de libertad y, precisamente, su actividad es la que lo
conduce al comportamiento aparentemente aleatorio. Por
supuesto que, en muchos casos, ambos argumentos (ruido y
complejidad) también pueden ser factores que contribuyen en
gran medida a que el sistema contenga un número mayor de
grados de libertad.

En principio, y como queda demostrado con los resultados
obtenidos por los análisis desarrollados, puede asumirse que
las interacciones propias del sistema acoplado pueden generar
respuestas en distintas escalas de tiempo y ser registrados por
la microauscultación en forma de señales pulsantes y caóticas.
Obviamente, un análisis retrospectivo de las variabilidades registradas
también resultará complejo, dado que intervienen
muchas variables, de retroalimentación también compleja.
Con el objetivo de comprender el mejor el comportamiento
pulsante y analizar las eventuales variaciones en el transcurso
del tiempo, se hace imprescindible la aplicación de métodos
matemáticos especiales que contemplen la naturaleza fuertemente
no lineal de los mismos.
Los resultados obtenidos indican que la utilización de la
Transformada Wavelet hace posible:
a) Analizar las componentes energéticas de las series temporales
de niveles piezométricos.
b) Descomponer y analizar las características frecuenciales y
su evolución en el tiempo.
c) Analizar la distribución e interacción energética en diversas
escalas tempo/frecuenciales.
d) Detectar con precisión la localización temporal, duración e
intensidad de las perturbaciones.
Con todo, los resultados obtenidos nos alientan a seguir con
este tipo de investigaciones, dado que se ha logrado un elevado
grado de sistematización de los análisis y, desde la perspectiva
de la Seguridad de Presas, se dispone de una nueva herramienta
que permitirá realizar futuras evaluaciones en forma rápida,
sencilla y económica.
Referencias
Magalhaes de Oliveira, h. (2007) – Análise de sinais para
engenheiros – Uma abordagem via Wavelets, Sociedade
Brasileira de Telecomunicações. RJ (Brasil).
Marin, h. (2009) – Análisis de señales con las transformadas
de Fourier, Gabory Onditas - Instituto Tecnológico Metropolitano:
Bogotá, Colombia.
Restelli, F.; Perazzolli, R. (2007) – Fiona ® - Programa
computacional para la Gestión de Auscultación de Presas:
Neuquén, Argentina.
Restelli, F. (2008) – “Utilización de modelación conexionista
para la determinación de patrones en respuestas pulsantes
de sistemas automáticos”, en Congreso Argentino
de Presas: Tucumán, Argentina.
Dr. Ing. Fabián Restelli .
Jefe Area Ingeniería -
Hidroeléctrica El Chocón S.A.
Miembro del Consejo Directivo del Comité
Argentino de Presas
Investigador AIU - Universidad de Florida.
Información Institucional
Reunión Ejecutiva de INCA 2010
INCA es la Asociación de Comités Nacionales
de América (ICOLD National
Committes of America). La Presidencia
de INCA es rotativa, correspondiendo
actualmente al Comité Boliviano de
Presas (BOCOLD)
En coincidencia con las Reuniones Ejecutivas
de ICOLD, los delegados de los
comités participantes de INCA realizan
reuniones durante las cuales adoptan
decisiones referidas en especial a la organización
de talleres y seminarios sobre
temas técnicos.
Durante el Congreso ICOLD 2009,
realizado en Brasilia, se decidió concretar
un encuentro en 2010, en la ciudad
de Neuquén, en coincidencia con el VI
Congreso Argentino de Presas y Aprovechamientos
Hidroeléctricos. El evento
se desarrollará el día 3 de noviembre,
de 10 a 17 hs.
El BOCOLD ha enviado el siguiente temario
a los países miembros de INCA:
• Experiencias recientes en el diseño y
construcción de Presas de Enrocado
o Gravas con Pantalla de Hormigón,
CFRD.
• Presentación de proyectos nacionales.
• Participación de los Comités Nacionales
en los Comités Técnicos del
ICOLD.
El formato de presentación será el usado
por ICOLD (visitar la página web
http://www.icold-cigb.net.)
Los documentos deberán ser remitidos
hasta el 3 de octubre de 2010 a:
abustamante@abirh.org
con copia al Comité Organizador del VI
Congreso Argentino de Presas:
info@congresocomahue.com.ar
Durante la Reunión Ejecutiva de INCA
se prevé que la Canadian Dam Association
(CDA) asuma la presidencia de la
asociación.
Información Institucional 19

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