colabora-o especial festas-90 - Hemeroteca Virtual de Betanzos

EL "TOUR" DE BETANZOSporJOSE LUIS BUGALLALC/. RiberaTeléfono 77 03BETANZOS(La Coruña)Los señores de las grandes mansiones francesas -castillos, "manoirs",etc.- cuando reciben visita, dejan que las señoras sei reúnan en eljardin o en el salón para hablar de sus cosas, para cotillear, y le invitan aVd. a recorrer la finca, el parque, la granja y demasdependencias, afin deque el visitante compruebe el grado de atención que el propietario lepresta a sus dominios. A este recorrido es usual, en Francia, llamarle "letour du propietaire". Los señores de "manoir" o de "chateau", no créenhaber agasajado cumplidamente al visitante, si no cumplen este rito desu hospitalidad antes de haberle ofrecido á Vd. una copa de champaña oun vaso de whisky.Como yo carezco de pazo o de casa grande donde poder hacerles el"tour du propietaire", cuando en La Coruña recibo a amigos franceses,tengo por sana costumbre acompañarlos a visitar Betanzos. Para aprovecharel tiempo, reducir molestias y evitar cansancios, hace muchotiempo que me he trazado un itinerario esencial que me viene resultandoperfecto.Les hago pasar un poco de largo'el puente sobre el Mendo, prescindiendo de la visión del Peirao, antaño motivo de grabadores y pintores yhogaño lamento de espíritus sensibles, y, calle de Valdoncel arriba, loshago estacionaren la plaza del Campo, detenerse a la entrada de la callede las Monjas y volver la vista atras, para abarcar la visión de la g ran plazacon la mole neoclásica del que no llegó a ser Archivo del Reino de Galicia.Les señalo la torre de Santo Domingo, como punto de arranque delvuelo más folklórico de la aerostación galaica: el globo de San Roque, sinduda el más voluminoso y popular de cuantos son lanzados al airede las Españas.Luego bajamos por la calle de las Monjas, trazada en forma de "ele",e invito a mis amigos a que observen las viejas y bellas balconadas quecuelgan de las fachadas y la austeridad monacal del convento de lasmadres Agustinas, con su hermosa armería al frente, (toda Betanzos esun docto tratado antigo de genealogía y heráldica). Llegados al punto endonde la calle de las Monjas se prolonga hacia la Ribera, allí donde elpuente cruza sobre las aguas mansas del Mandeo, gusto de evocar lafamosa gira a los Caneiros. Allí mismo pasamos bajo una de las puertasde la Ciudad y extiendo la mano hacia las deliciosas casas góticas de lacalle de Pardiñas, por la que subimos despaciosamente para doblar por