12.07.2015 Views

feyerabend-tratado-contra-el-metodo1

feyerabend-tratado-contra-el-metodo1

feyerabend-tratado-contra-el-metodo1

SHOW MORE
SHOW LESS
  • No tags were found...

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

92 PAUL FEYERABENDllega <strong>el</strong> profesor E. Hoppe, quien resume la situación d<strong>el</strong> siguientemodo:'La afirmación de Galileo de que, habiendo tenido noticias d<strong>el</strong>t<strong>el</strong>escopio de Duque, reconstruyó <strong>el</strong> aparato mediante cálculomatemático, debe tomarse con mucha precaución; pues en susescritos no se encuentra cálculo alguno y <strong>el</strong> informe, por carta, quehace de su primer esfuerzo dice que no había disponibles lentesmejores; seis días después en<strong>contra</strong>mos a Galileo camino deVenecia con una pieza mejor para ofrecerla como regalo al DuceLeonardo Donati. Todo esto no se parece en nada a un cálculo; separece más a un procedimiento de ensayo y error. El cálculo pudohaber sido muy bien de una clase diferente, y en esto sí tuvo éxito,pues <strong>el</strong> 25 de agosto de 1609 su salario se había multiplicado portres 139como para la humanidad en general', Ronchi, Scieiilific change, ed. Crombie,Londres, 1968, 550."'* Die Geschichle der Optik, Leipzig, 1926, 32. Este juicio de Hoppe sobre lainvención d<strong>el</strong> t<strong>el</strong>escopio es compartido por Wolf, Zinner y otros. Huyghens señalaque habría sido necesaria una int<strong>el</strong>igencia sobrehumana para inventar <strong>el</strong> t<strong>el</strong>escopiobasándose en la física y geometría disponibles. Después de todo, dice Huyghens,todavía no comprendemos <strong>el</strong> funcionamiento d<strong>el</strong> t<strong>el</strong>escopio. ('Dioptrica', Huf;eniiOpuscula Postuma, Ludg. Bat., 1903, 163, parafraseada por A. G. Kástner,Geschichte der Mulhemalik, vol. IV, Gótingen, 180(), 60).Varios autores, cuya falta de imaginación y temperamento encaja perfectamentebien con sus <strong>el</strong>evados standards morales, quedaron desilusionados ante las numerosaspruebas de debilidad humana que ofrece Galileo, y han intentado por todos losmedios explicar sus acciones como un resultado de <strong>el</strong>evados (y estériles) motivos.Un episodio poco importante, como es <strong>el</strong> silencio de Galileo acerca de los descubrimientosde Copérnico en su Tratlalo d<strong>el</strong>ta Sfera {Opere, II, 211 ss. En est<strong>el</strong>ugar se menciona la idea d<strong>el</strong> movimiento de la Tierra, pero no <strong>el</strong> nombre deCopérnico), en un tiempo en que, según algunos, Galileo había aceptado ya <strong>el</strong>credo copernicano, ha provocado una investigación de altos vu<strong>el</strong>os y ha conducidoa alguna conveniente hipótesis ad hoc incluso en autores tan desenfadados como L.Geymonat (op. cit., 23). Sin embargo, no existe ninguna razón por la que unhombre, y un hombre extremadamente int<strong>el</strong>igente por cierto, debiera conformarsea los criterios de los cuadros académicos de hoy día, y por la que no debieraintentar seguir su propio camino para promover sus intereses. Ciertamente, no dejade ser un extraño principio moral aqu<strong>el</strong> que exige a un pensador ser un portavozque sólo 'exprese' lo que crea ser 'verdad' y que nunca mencione lo que crea queno lo es. (¿Es esto lo que exige la búsqueda contemporánea de la autenticidad?).Un punto de vista tan puritano como <strong>el</strong> que acabamos de mencionar constituye unabase demasiado ingenua para comprender a un hombre de finales d<strong>el</strong> Renacimientoy principios d<strong>el</strong> Barroco. Además, <strong>el</strong> charlatán Galileo tiene un carácter muchomás interesante que <strong>el</strong> estrecho 'investigador de la verdad' al que, normalmente, senos incita a reverenciar. Por último, y como hemos visto, sólo por medio de juegosde manos podía conseguirse progreso en esta época. Cf. también la nota 19 d<strong>el</strong>presente capítulo.Las maquinaciones propagandísticas de Galileo están influidas por <strong>el</strong> reconocí-

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!