Monográfico - Asociación de Jóvenes Empresarios

polarizada, por la política, por la territorialidad, por la memoriahistórica o por la identidad, algo que se ha extendidoa nuestros puestos de trabajo y no nos permite avanzarcomo deberíamos. Dejemos de mirar en el pasado lo quenos separa y centrémonos en el futuro que podemos compartir.Eso y la autoexigencia.Con la experiencia institucional que atesoras, ¿Creeque la empresa/emprendedores españoles poseé unosrasgos culturales identificativos?Creo que en España tenemos grandes emprendedoresque deslumbran más fuera, en el extranjero, que dentro.Por regla general la marca España se asocia con calidady eficiencia, con una larga tradición y también con una pujanzacasi juvenil. En los años ochenta se cimentó estaimagen con nuestra llegada a Europa. Pero el paisaje ennuestro país es más borroso, caemos en comportamientosnegativos, como la corrupción que hizo su aparición enlos 90, o radicalismos que han impugnado hasta nuestraConstitución como marco durante la última década. Estascosas desdibujan la marca. Potenciar una cultura empresarialdentro de esa marca de buen trabajo y calidad devida, de espontaneidad y optimismo, es algo que no puedesino favorecer a los emprendedores de aquí y los que seproyectan hacia otros países. Las instituciones deben concentrarseen promoverlo.¿Cuál cree usted que es la herramienta estratégicapara cambiar la cultura (empresarial) de una organización?El diálogo y la transparencia de los objetivos. El liderazgono puede ejercerse ya de modos monolíticos, sino apelandoa la complicidad de todos, los individuos y los equiposque forman, en los que a su vez se configuran cauces pararenovar la cultura. Cuando las cosas se hacen bajo la luz,de manera franca y abierta, ocurren siempre más cosasbuenas que malas. A pesar de que todo grupo humano generaconflictos, en la gestión de los mismos muchas vecesaparecen caminos limpios para avanzar. Y quien lidera elproceso, o la empresa, debe ser el mejor ciudadano deesta “ciudad” de diálogo y transparencia.EntrevistaconPersonalidad13¿Qué entiende usted por cultura empresarial?Es un marco teórico y un conjunto de modos de acción quepermiten la convivencia productiva, que marcan límites yestilo, y que por ello aportan el rostro a la empresa o laimagen de marca. Por otro lado, es el acervo logrado enel camino, en la vida dia a día de la empresa. Los logros,los objetivos y los éxitos y fracasos son parte del camino.La cultura empresarial bien entendida puede ser la másefectiva motivación, porque identifica al grupo con la ideade empresa, como organización y como proyecto. Habráobservado que hablo de política cuando hablaba de culturay también de cultura de empresa. Para mí todo está relacionadoy la cultura no está al margen de la vida pública,ni la empresa tampoco. Pienso en Pericles y su “discursofúnebre”, defendiendo la sociedad libre de Atenas, a pesarde su debilidad (porque pueden espiarla), frente a la disciplinade la cerrada Esparta. Motivó a los Atenienses hastala victoria. Pienso en el “Yes we can” que llevó a Obama ala Casa Blanca, y generó tanta esperanza. La “cultura empresarial”de la democracia anduvo ese camino, ese viaje.Para terminar, casos de éxito empresarial o personas/instituciones que a usted le parezca reseñable en España.No sigo la actualidad económica como para ser justo en mivaloración. Creo que todos recordamos modelos de éxitoque ascendieron como espuma y como espuma se los llevóel viento. Las empresas que han creado su estilo y se handiversificado e internacionalizado han hecho mucho pornuestro país. Pero los grandes ejemplos pueden eclipsara muchos jóvenes empresarios que han sabido poner susideas sobre la arena, aportando a la sociedad pistas parasu desarrollo. En España falta investigación, financiación,oportunidades y aun así tenemos empresarios capaces deregenerar el tejido económico. No sólo hay que lograr quela Administración confíe en ellos, hay que promover que lasociedad abandone el cliché de que hay algo sospechosoen quien quiere emprender un proyecto económico.