identidad 18 - Movimiento Bolivariano por la Nueva Colombia

IDENTIDADLPROBL EM ÁTICA S O CI A 28esperando, esperando mientras el Estado, elmismo que negocia y abre espacios en elparlamento a Narco Paramilitares y ha empotradoa la mafia en las altas esferas del poder, respondíacon toda su furia genocida contra una de lasconcentraciones apostadas sobre la víapanamericana.El 13 de octubre nuestros hermanos ubicados en elRosal, fueron atacados por las fuerzas militares yde policía, en su momento se informó que lasfuerzas de represión atacaron salvajemente congases lacrimógenos, granadas de esparcimiento,papas explosivas, ráfagas y disparos de arma defuego hechizas, el resultado de la respuesta delEstado esta vez fueron seis indígenas gravementeheridos.El día 14 de octubre, al decidir honrar a nuestrosancestros y la memoria de la patria queconstruimos, siguiendo el ejemplo dado por laconcentración de El Rosal, con la consigna“ningún espacio nos debe estar vedado” y aunqueera previsible el ataque sanguinario del cualíbamos a ser objeto, retomamos el control de la víapanamericana, fueron varios días de control yarremetida militar y policial del régimen quesoportamos. Finalmente un ejército y una policíaentrenados para aterrorizar y reprimir el pueblo,luego de habernos replegado de la vía, nos obligóa dejar atrás nuestro territorio para poder salvarnuestras vidas. Guerra de fusiles, machetes,granadas y armas con metralla, en contra depiedras y palos.Por su parte, el Estado colombiano asume la víapanamericana como un bien religioso, un biensuntuario, la nueva versión del amo Jesús deesta región del país, el cual no puede ser tocadoni apropiado por nadie, excepto los grandesmercaderes de la vida. Desplegó una guerra sincuartel y con todo tipo de armas convencionales(gases lacrimógenos, granadas de esparcimiento,fusiles y pistolas) y no convencionales (machetes,balas recalzadas, gases cargados con metralla),causó la muerte a varios hermanos y heridas a másde un centenar de concentrados.Vi caer, la mayoría heridos y otros asesinados, avarios niños, jóvenes y ancianos, mujeres yh o m b r e s , i n d í g e n a s , c a m p e s i n o s yafrodescendientes a lo largo y ancho de lasconcentraciones ubicadas entre el municipio dePiendamó y el de Villa Rica; entre el 14 y el 17 deoctubre luché, temí por mi vida e impotentepadecí al igual que muchos de los presentes unataque sin precedentes por parte de unas fuerzasmilitares y de policía que lejos de defender losintereses del pueblo y la soberanía nacional seencargan de apuntalar y apalancar un régimen deterror y miseria, masacrando y aterrorizando alpueblo y a los que nos resistimos a la tiranía.Con indignación vi cómo el Estado, a través delpresidente, el vicepresidente, los comandantes depolicía y los medios de comunicación, vendían ala opinión pública la idea de que los terroristaséramos los concentrados, que la jornada estabainfiltrada por las FARC, que los policías ymilitares eran las víctimas y que la movilizaciónno tenía razón de ser; estos maestros del engaño,la mentira y la desfachatez con aparente“ingenuidad” pretenden hacer creer que laRESISTENCIA DEL PUEBLO no nace de losconflictos políticos y sociales; niegan que lascarencias sociales y la exclusión conllevan a lasmás variadas expresiones de protesta y nutren lasorganizaciones del pueblo en sus múltiplesformas. Olvidan que los pueblos que combatenpor sus ideales jamás podrán ser acallados por unatiranía, sus cajas de resonancia o los áulicos delpoder.Muchos hermanos marcharon a Cali, hicieronpresencia en el territorio de convivencia y paz deLa María y en la marcha a Bogotá, otros tantos nosretiramos a nuestros territorios, pero todosestamos aferrados más que nunca a nuestrasconvicciones, con el convencimiento de que elactual gobierno demostró una vez más serilegítimo, que los aciertos de esta jornada hay queacentuarlos y los errores hay que superarlos. ConUribe y su mafia y su ala narco paramilitar no hayposibilidades de avanzar en un cambio, se hacenecesario que el pueblo construya paso a paso launidad, sin sectarismos, sin dogmatismos ovanguardismos, se hace necesario avanzar en unagran convergencia de colombianos, que transitenuevos caminos para construir una Colombiaincluyente, democrática de verdad, en la que ladiversidad cultural sea apreciada como una granriqueza que garantizaría la pujanza de nuestranación colombiana y la atención a los malessociales de todas las comunidades se convierta enprincipio rector para alcanzar la PAZ, porque es laúnica manera de encontrar solución definitiva alconflicto armado por el que todos los díasderraman sangre nuestros hermanos.Los resultados de la MINGA INDÍGENA deoctubre me han hecho pensar que lo que noshemos venido proponiendo no solo lascomunidades indígenas sino tambiéncampesinos, mestizos y afro descendientes, estámadurando, y debemos ofrecer cada uno todasnuestras capacidades, sin dispersarnos, firmes yentusiastas; el “desafío que nos convoca" planteacon toda claridad que "solos no podemos", que"nos necesitamos mutuamente". Hoy, hay quecaminar en la dirección que señalamos lospueblos, sin olvidar que el pueblo somos lamayoría.