PRIMERA EDICIÓN REVISTA CIUDAD LUNA

No ascender hay necesidad y descender mentir, la savia pues de los la árboles, magia está controla al caminar
fertilidad por en los la suelos mujer de y este ayuda lugar en los que procesos a pesar de haber
agricultura, sufrido los pues cambios bien por decían la urbanización nuestros antepasados
descontro-
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lada que Ella y las se malas convirtió administraciones, en mujer y vino este a la municipio tierra a enseñar
al por género tener humano calles la abundantes forma de alcanzar de arte, la cultura felici-
se
destaca
y dad personas y los placeres que aún de tienen la vida. sentido de propiedad con
este bello lugar lleno de hechizo.
“Chíos” es el nombre que se le da a sus habitantes
La que Chia ya superan de siempre los que 150 guía mil, el sus camino 11 veredas de sus habitantes
la más ha mística estado historia para todos de nuestros quienes la ancestros, habitamos, sus por ri-
abarcan
eso quezas estaremos y las montañas al tanto
de cubiertas los acontecimientos
de vegetación
que donde en el esta límite ocurran, entre
porque las veredas ella Fonquetá estará ahí y
para Cerca regalarnos de piedra el se tibio encuentra
de su el noche. Resguardo
calor
Bienven0idos indígena quienes sean aún todos
mantienen a la Ciudad la Luna! esencia
viva de nuestra historia
precolombina.
Allí encontramos el Cerro
de la Valvanera, el
Cerro de Lourdes y también
podemos apreciar
el paso del Rio Bogotá
y el Rio frío con sus
aguas andantes.
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En el casco Urbano está
la Zona histórica delimitada
por 8 portales fotografia por ana maria gordillo