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CISE | Centro de Investigacarvicios Educativos | ESPOL
REDES PEDAGÓGICAS | Agosto 2016 7
La inclusión: una obligación
moral en la época en que vivimos.
DISCAPACIDADES
INTELECTUALES
“
A las personas con
discapacidades no hay
que cerrarles las puertas,
pero hay que entregarles
los elementos para que la
inclusión sea exitosa”
Marcia Gilbert
de Babra
Educadora especializada.
Estudió en la
escuela de formación
Psicopedagógica de la
U. Católica y tomó los
cursos de Psicología Infantil
y Psicopedagogía
de la Sorbona de París.
Ha recibido premios
nacionales e internacionales,
entre estos
últimos destaca el
premio al voluntariado
otorgado por los
Compañeros de las
Américas en Washingon
D.C. y la designación
de una escuela
pública en Guayaquil
con su nombre.
Y
o creo que en general
la inclusión
es una obligación
moral en la época en que
vivimos. Todos los tipos de
inclusión. La intelectual quizá
es la más difícil en términos
de educación superior,
porque hay unas exigencias
intelectuales que a veces
no se pueden superar.
Ahora, hay que estar
abiertos, porque sí hay casos
de personas supuestamente
con limitaciones
intelectuales que pueden
llegar lejos, ya sea porque
se dio un mal diagnóstico,
por una evolución incomprensible
o porque sus
padres las han estimulado
mucho, por lo tanto hay
que estar alerta.
Estas circunstancias requieren
de un sistema de
educación especial, leyes,
reglamentos y las posibilidades
de soporte que
nos permitan ser flexibles
y ajustar muchas cosas,
tales como pénsum, horarios,
ritmos, calificaciones.
Si no se da ese ajuste,
si no existe flexibilidad, no
hay inclusión.
¿Cómo desarrollar la educación
inclusiva en este
ámbito desde la participación
de directivos, profesores
y estudiantes?
Es una obligación que sea
siempre a través de una
deliberación y decisión de
grupo. No se puede implantar
la inclusión de una
manera aislada ni vertical,
por decisión de un maestro,
de una autoridad o de
un director.
Tiene que ser una política
establecida por toda la
organización y de la cual
se conozcan todas sus implicaciones.
Por ejemplo,
actualmente no es posible
dar matrícula después de
la tercera materia que un
alumno pierde.
¿Qué hacemos con las
personas con discapacidad?
¿Se aplica o no se
aplica eso?
Las universidades estamos
severamente sancionadas
en términos de
puntos cuando los alumnos
siguen estudiando
más del tiempo que se
corresponde, cuatro o cinco
años. Pero, ¿qué hacemos
con las personas con
discapacidad y que quizá
puedan llegar a la meta si
se les da más tiempo?
Estos casos deberían ser
una excepción y no perjudicar
a la universidad. Por
lo tanto, si una institución
va a implantar políticas de
inclusión, debe imponer-
las, redactarlas y legalizarlas,
siempre considerando
qué hay detrás. Yo soy una
abogada de la inclusión,
yo he luchado por la inclusión
toda la vida.
Cuando fui directora de
FASINARM fuimos la primera
organización en el
país que hizo inclusión,
pero este proceso requiere
ajustes, recursos y una
serie de infraestructuras.
Sin estos elementos, la inclusión
no se da.
Recomendaciones prácticas
para comenzar a
potenciar la educación
inclusiva en este ámbito.
Lo más práctico quizás sería
una reunión para presentar
testimonios de casos de
inclusión a la universidad
de personas con diversos
tipos de discapacidades.
Testimonios buenos y malos,
como una especie de
casos especiales, casos de-
mostrativos, y entre todas
las instituciones conversar
y recomendar cambios en
los reglamentos y en las
disposiciones para poder ir
avanzando. Ver qué y cuándo
funciona o no.
Para formar una sociedad
más humana, a las personas
con discapacidades no
hay que cerrarles las puertas,
pero hay que entregarles
los elementos para
que la inclusión sea exitosa,
ya que esta requiere de
toda una infraestructura
ética, de un conocimiento
total de lo que este concepto
implica, así como de
recursos psicológicos, rehabilitativos,
materiales y
tecnológicos.
Cada tipo de discapacidad
presenta necesidades que
le son únicas, lo que supone
una individualización,
que a su vez exige una
serie de recursos específicos.
Si no, se convierte en
una burla.