La deserción no es una opción

compañeros que estaban viéndome, comencé a
sudar y se me olvidó por completo todo, no
sabía qué decir y quería salir corriendo del salón
llorando, no sabía lo que me pasaba, ¿por qué
me tuvo que pasar eso a mí?, ni idea, después de
ese día comencé a ir donde la psicóloga del
SENA y me ayudó mucho, poco a poco fui
venciendo mis miedos, también con la
colaboración de mis amigos, familia, etc.
Bueno, tampoco puedo mentir, aun siento
miedo, salgo al frente y pienso siempre en ese
día, una amiga también tenía ese mismo
problema que yo, entonces entre las dos nos
ayudábamos, sabíamos que debíamos vencer
nuestros miedos y seguir adelante.
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