Ananda Noviembre 2017

KAROSHI ¿ DE QUÉ VA?
María Gil
Bruja Violeta
Karoshi es una palabra japonesa que
significa algo así como “muerte por exceso de
trabajo”, es un fenómeno que ocurre en todas
partes del mundo pero bueno, Japón lo tiene
clasificado legalmente desde hace algunos
ayeres y, no es por asustarte pero mueren por
Karoshi alrededor de 10,000 personas al
año... sólo en Japón... saca las cuentas del
promedio mundial...
Decía, el Karoshi en Japón (siguiendo con el
ejemplo) se define como tal ante una muerte
súbita de personas jóvenes (veintitantos
hasta la cincuentena más o menos) sin
enfermedad diagnosticada claro claro y que,
ojo, hayan trabajado 100 horas extras en el
mes inmediato anterior a su muerte o bien,
que hayan trabajado 80 horas extra al mes en
los tres meses que precedieron su súbita
muerte. Increíble ¿no?, bueno, Japón obliga a
empleadores a pagar cuantiosas sumas de
dinero si se determina legalmente que el/la
empleado ha muerto por, exceso de trabajo....
sí... por Karoshi.
Allá va que te estarás preguntando el porqué
me he puesto a hablar de muerte por exceso
de trabajo en un espacio literario que va de la
buena vida, desapego y equilibrio en general
¿a qué si?, bueno, es simple de explicar pero
complejo de comprender. Empecemos, en
nuestros entornos “alternativos”
consideramos que un trabajo que
puede matarte es aquel que te
exige largas
jornadas con horarios fijos y que te mantiene
estresado/a todo el tiempo, ¿cierto?.... bueno,
pero también sabemos que todo exceso es
perjudicial, tanto como sabemos que toda
fuente de placer es fuente también de dolor
(no, no me estoy poniendo budista o zen,
digamos que, son dichos populares aquí y en
China)... ahora bien... allá vamos.
Imagina que eres un duende, un hermoso
leprechaun o cualquier otro ser feérico de los
que tienen por misión en la vida jugarle bromas
a la humanidad y esconder los grandes
misterios de la vida en lo profundo de los
bosques.
Bien, todas las mañanas sales veloz a comenzar
tus travesuras, amas tanto lo qué haces que
nunca te fijas en cuanto tiempo dedicas a esto,
viajas a tierras lejanas no solo para impresionar
a los humanos con tu audacia sino que también
das conferencias sobre tus mejores bromas y
tus mejores métodos para alargar el arcoíris y
esconder la olla del tesoro... amas tanto lo qué
haces y amas tanto compartirlo que,
periódicamente te reúnes con amigas y amigos
feéricos a beber... algún aguardiente mágico .....
y compartir las mejores hazañas de cada uno, es
impresionante que puedas dedicar tu vida a hacer
lo que más te gusta, vives en la risa constante y
eres simplemente fabuloso en ello, tanto, que
un día alguien te
propone armar un
grupo formal que
siga tu método,
pequeñines que
aprendan de los
mejores, los
mejores tú los
reclutarás desde
los confines del
mundo y crearás la