Experiencia de Reforestación en México, Reforestaciones Sociales, el caso de Naturalia A.C.

1.- INTRODUCCIÓN
En la actualidad la disminución de ecosistemas forestal, ya sea por el
crecimiento de la mancha urbana, la ampliación de tierras agrícola y ganadera, la
tala sin planeación y los incendios, han disminuido en gran medida, las áreas
forestales, las cuales cumplen un papel muy importante en los ciclos naturales del
planeta (Merino, 2004). Los bosques se encargan de absorber y regular los “gases
de efecto invernadero” por medio de la fotosíntesis (equilibrio dinámico) e
intervienen en los ciclos hídricos, regulando diversos factores climáticos que a su
vez intervienen en los procesos biológicos de los ecosistemas. Por lo que se
estima que solo la deforestación tropical en el mundo suma 13 millones de
hectáreas al año, esto hace, por consecuencia, que no se capturen 6,500 millones
de toneladas de bióxido de carbono de la atmósfera (Flavin, en Strake, 2009).
Tan solo en México, antes del año 1500, se calcula que existían 98 millones
de hectáreas arboladas, para el año 1950 ya había disminuido a 78 (Ruge y
González, 2003). Para el 2010, se contabilizó una extensión boscosa total
aproximada de entre 50 a 64 millones de hectáreas, 50% de la superficie original
(Varela, 1999; FAO, 2010). Según estudios realizados por la Organización de las
Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO por sus siglas en
inglés), en la actualidad el índice de deforestación ha disminuido un 35%, en
comparación con los índices de deforestación de hace 20 años (FAO, 2011),
además, se estima que año con año se restauran superficies deterioradas por
medio de las reforestaciones y forestaciones, sin embargo las cifras existentes son
muy variables y en ocasiones contradictorias; aunado a la problemática de la
deforestación se encuentra la emisión excesiva de gases contaminantes de la
atmosfera, incrementando la problemática relacionada con el equilibrio entre y
emisión-absorción de gases contaminantes. Por otro lado la deforestación
contribuye a la perdida de suelos fértiles por erosión, degradación de la calidad de
agua y azolves de río, presas y lagos, disminución de acuíferos, disminución de la
precipitación en algunos casos locales, deterioro de la calidad del clima a nivel
5